Guía Turística


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COMARCA SIERRA DE ALCARAZ Y CAMPO DE MONTIEL ..............PÁG. 5
ALCADOZO ..............................PÁG. 9
ALCARAZ ................................PÁG. 10
BALAZOTE ..............................PÁG. 12
BIENSERVIDA .........................PÁG. 13
CASA DE LÁZARO ...................PÁG. 14
COTILLAS ................................PÁG. 15
EL BALLESTERO ......................PÁG. 16
EL BONILLO ............................PÁG. 18
LA HERRERA ...........................PÁG. 19
LEZUZA ...................................PÁG. 20
MASEGOSO ............................PÁG. 21
MUNERA ................................PÁG. 22
OSSA DE MONTIEL ................PÁG. 25
PEÑAS DE SAN PEDRO ...........PÁG. 26
PEÑASCOSA ...........................PÁG. 27
POVEDILLA .............................PÁG. 28
POZOHONDO .........................PÁG. 29
POZUELO ...............................PÁG. 30
ROBLEDO ...............................PÁG. 31
SALOBRE ................................PÁG. 32
SAN PEDRO ............................PÁG. 33
VIANOS ..................................PÁG. 34
VILLAPALACIOS ......................PÁG. 37
VILLAVERDE ...........................PÁG. 38
VIVEROS .................................PÁG. 40




Localizada en el suroeste de la provincia de Albacete, la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel ha constituido a través de los siglos la “tierra de encuentros” de Andalucía, Levante y La Mancha.
El territorio aparece como un mosaico de contrastes en el que se combinan llanuras y montañas. Intrincados valles y abruptas sierras se funden con vastas planicies. Es ésta una comarca regada por ríos alegres y accidentados en su juventud, que se transforman en serenos y apacibles cauces en una madurez en la que, con frecuencia, llegan a conformar tranquilos humedales.
Tierras cuya riqueza natural se extiende desde el Calar del río Mundo hasta las Lagunas de Ruidera. Su carácter de encrucijada de las regiones colindantes ha hecho que, a través de los tiempos, diferentes civilizaciones se asentaran en estos parajes. Toda una historia de diversidad que se prolonga desde sus gentes a su
cultura, pasando por una artesanía y un arte culinario inigualables.
Los paisajes que disfrutaremos en el recorrido por la comarca nos adelantan los productos que ésta nos ofrecerá. Si en las zonas más llanas vemos un claro dominio del cereal y el monte bajo, con huertas y viñedos intercalados en las vegas de los ríos, en las partes altas podremos observar densos olivares junto a impresionantes masas arbóreas de pino y encina.

La viña de dispares altitudes confiere claras diferencias a los vinos obtenidos en Pozohondo y en El Bonillo, con la Denominación de Origen Pago. Los grandes olivares de Bienservida, Villapalacios, Alcaraz, Villaverde o Povedilla nos obsequian con un aceite virgen de especiales sabores. La gran riqueza cinegética de la comarca ha configurado platos únicos, sabrosísimos.
El queso y el cordero manchegos transmiten la complejidad de aromas de los ricos y variados pastos de Munera, Ossa, La Herrera o El Bonillo. La miel es otro ingrediente autóctono de la cocina tradicional con el que se elaboran sabrosos dulces en la zona de Casas de Lázaro. La reina del agua es la trucha, perfectamente aclimatada en el río Jardín. Por todas partes abundan finísimas hortalizas y frutas. Y los embutidos de Peñas de San Pedro, El Ballestero, Lezuza, Povedilla o Pozohondo aprovechan desde sus orígenes los aires de la sierra para una perfecta curación.
Otra de las agradables sorpresas que encontrará el visitante en su recorrido es la elaboración de productos artesanos, resaltando la carpintería, objetos de forja, los telares, el mimbre, los muñecos de trapo, entre otros.

Dos parques naturales comprenden nuestra comarca. Al norte, en Ossa de Montiel, el de Ruidera, un espacio en el que se suceden quince lagunas a lo largo del curso del alto Guadiana. Al sur, los Calares del Mundo y la Sima, incluyendo términos de Villaverde, Cotillas y Vianos.
El agua es un elemento omnipresente en la región. La laguna del Arquillo, entre Robledo, Masegoso y Peñascosa, está declarada monumento natural. A escasos kilómetros queda la microrreserva de las Salinas de Pinilla, en Viveros, y en Alcaraz, la Molata y los Batanes. Zonas de especial protección son la propia Sierra de Alcaraz y la estepa del Bonillo, con bandadas de avutardas que son un milagro de conservación. La reserva natural de los Ojos de Villaverde, entre Robledo y El Ballestero, está rodeada por uno de los mejores sabinares de la provincia.

Otros lugares de interés comunitario que hallará el visitante en su recorrido son la Sierra de Relumbrar, en Villapalacios, el Cambrón, en Villaverde de Guadalimar, o el Estrecho del Hocino, en Salobre. Todo un patrimonio natural que da vida a esta comarca.



Alcadozo está situado a los pies de la Sierra de Alcaraz a 44 km de la capital, contando con 800 alcadoceños. Está rodeado de parajes naturales donde la liebre, el conejo y la perdiz dan de sobra para preparar sus tradicionales gazpachos manchegos. Alcadozo festeja en procesión a San Isidro. Durante las fiestas en su honor el 15 de Mayo son tradicionales sus encierros, de los más antiguos de la provincia y que mayor número de corredores congrega. Desde el campo los astados se conducen hacia la localidad.

Alcadozo destaca por su patrimonio natural, con árboles singulares como la inmensa “Carrasca de la Vaca”, que cuenta con más de mil años, y el majestuoso “Pino del Guapero”,
que supera los quinientos. Si amas el senderismo imprescindible realizar la Ruta Abraza los árboles.
También destaca su conjunto de fuentes y manantiales que nacen en el término, así como sus cuevas, pues resulta particularmente llamativo que se localicen más de diez cuevas en un abanico de menos de cuatro kilómetros.
Ruta de senderismo de unos 10 km (apta para niños) en la que visitamos varios árboles singulares del término de Alcadozo. El Pino del Guapero, un majestuoso pino doncel de más de 500 años. La Carrasca de la Vaca, una inmensa encina con casi 30 metros de diámetro, un impresionante monumento natural que ha visto pasar más de 1000 años. También veremos el Almendro de El Molinar, La Viga Gorda, La Carrasca de la Era, El Pino de la Era en Casasola y un curioso pino en forma de “S”.
Entre todos estos árboles destaca la Carrasca de la Vaca, una inmensa encina milenaria con una altura de unos 15 m y un diámetro de copa de 30 m (como el ruedo de la plaza de toros de Alcadozo). El nombre de Carrasca de la Vaca viene

porque se utilizó para colgar y desollar alguna vaca que murió durante uno de los traslados.
El entorno de Alcadozo, rodeado por los municipios de Peñas de San Pedro, Ayna y Pozohondo, ofrece hermosos parajes naturales donde el turista podrá observar la transición entre la llanura manchega y los inicios de la Sierra de Alcaraz. Resulta imprescindible la visita de Peñas de San Pedro, donde podrá subir a su castillo y observar estos paisajes en todo su esplendor.
Alcaraz ha tenido un papel muy destacado en la historia. Los musulmanes dejaron su nombre, el Castillo, y el arte de confeccionar las alfombras, que prosigue en la actualidad. Durante los siglos XV y XVI vivió un desarrollo arquitectónico de estilo renacentista de gran importancia. Si visitas Alcaraz no olvides pasarte por el Santuario de Cortes, uno de los Centros de Peregrinación más importantes de la península, localizado a 7 km cuya Romería es de interés turístico regional
Alcaraz destaca por lo abundante de su patrimonio. La localidad fue declarada en 1979 Conjunto Histórico por la amplitud de sus valores patrimoniales, entre los que destacan la Plaza Mayor, la Torre del Tardón y la Iglesia de la Trinidad y su Torre. Hoy es uno de los municipios con mayores recursos turísticos de la provincia. También ofrece rutas de senderismo en plena naturaleza como la Microrreserva La Molata y Los Batanes o la Vía Verde con 106 km.
Declarada Bien de Interés Cultural en 1982, la Iglesia de la Trinidad del siglo XV está considerada la joya gótica de la provincia, siendo la más homogénea de este estilo. Cuenta con tres naves y cuatro tramos, decoración crucería ojival y tres capillas renacentistas de influencia vandelviresca. Anexa a la iglesia está la torre de Trinidad, con el primer


cuerpo con ventanales góticos y el resto renacentista. En frente de ella está la Torre del Tardón, constituyendo una de las estampas más conocidas en la provincia.
Recientemente ha sido noticia Juan de Borgoña, uno de los grandes artistas de nuestro país en el tránsito del siglo XV al XVI, que realizó trabajos para la diócesis toledana a la que pertenecía Alcaraz en aquel momento. El hallazgo de la presencia de Juan de Borgoña como maestro en esta pequeña ciudad, en un territorio tan alejado de la influencia de la Catedral Primada, ha sido uno de los acontecimientos artísticos más relevante de la última década. Tras la realización de unos trabajos de restauración en el retablo de la iglesia han podido recuperarse ocho de sus pinturas. Las temáticas de las tablas son: “La Anunciación”, “El Nacimiento de Jesús”, “La Epifanía (Día de Reyes)”, “La Presentación en el Templo”, “La Huida a Egipto”, “Jesús entre los doctores de la iglesia”, “El Llanto sobre el Cristo Muerto.
Andrés de Vandelvira fue uno de los mayores arquitectos del renacimiento en la España del siglo XVI. Nació en Alcaraz en 1505 y con apenas 18 años comenzó a trabajar y a formarse en la cantera de su propia ciudad, seguramente influido en sus primeros años por la elevada actividad constructiva de Alcaraz a inicios del siglo XVI.

Vandelvira está considerado como uno de los mayores exponentes del Manierismo, un estilo artístico derivado del renacimiento. Sus increíbles obras no dejan indiferente a nadie, encontrándose la mayoría de estas construcciones monumentales en las ciudades de Úbeda y Baeza. En su obra realizada en Alcaraz, aparte de los trabajos realizados en sus años juveniles, hay que señalar su intervención en la “Capilla de San Francisco”, en reparaciones
efectuadas en el acueducto, la “Torre del Reloj” llamada coloquialmente de “El Tardón” en la Plaza Mayor, y la “Puerta del Alhorí”, o de la Aduana, la obra más importante de estilo plateresco en toda la provincia de Albacete.
El Santuario de la Virgen de Cortes es uno de los Centros de Peregrinación más importantes de España, uno de los recursos turísticos de la localidad más demandados por los turistas y el centro religioso por excelencia de la comarca.
Se inauguró en septiembre de 1222 siendo una pequeña ermita. En 1265, Alfonso X el Sabio se reúne con su suegro Jaime I de Aragón en unas cortes para delimitar terrenos de conquista. Ambos son informados de
la aparición de la Virgen y deciden dar una aportación para la ampliación de la Iglesia que con los años realizó otras ampliaciones.
La Virgen de Cortes es muy venerada por lo milagrosa que ha sido a lo largo de los tiempos. Su iglesia, museo y relicario son un sitio de visita obligada en Alcaraz para creyentes y turistas.
Súmate a la Ruta de Vandelvira y recorre caminos llenos de arte, pero también de historia, de naturaleza y tradición. Además de lo que tiene que ofrecer Alcaraz, las localidades de El Ballestero, El Bonillo, Vianos y Viveros también poseen legado de un patrimonio valdelviresco que te acercará a la obra monumental de este arquitecto y a conocer el territorio que lo vio nacer y formarse.

Balazote es un lugar de antiguo origen como demuestra su famosa “bicha”, una escultura ibérica. Actualmente, su población es de unos 2.400 habitantes y con una economía basada en la agricultura y cultivo del ajo. Sus fiestas más importantes son las San Blas en febrero en las que se realiza la corrida de la bandera, que consiste en demostrar habilidades como la fuerza y la destreza en el manejo de esta y la Romería en honor Santa Mónica en mayo, en la que se realiza una subida a la ermita.

Destaca en Balazote su Iglesia de Nuestra Señora del Rosario del siglo XVI, edificio monumental que conforma una de las imágenes más icónicas de la localidad. Imprescindible la Ruta Circular del Cerro San Cristóbal,

un paseo de unos 11 km que recorre puntos de interés, como la ermita de Santa Mónica, el cerro de San Cristóbal –el punto más alto de la ruta, desde el que se puede disfrutar de una vista privilegiada de la sierra de Alcaraz– o los cerros del Tesoro.

La bicha de Balazote es una de las figuras más insólitas, misteriosas y atrayentes de la estatuaria ibérica, se data su origen en el siglo V a. C. Los arqueólogos franceses fueron quienes primero la estudiaron identificándola como una cierva; de ahí que “biche” fuera su primera denominación, que luego se castellanizaría en “bicha”.
Desde 1.910 se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid. Recientes excavaciones en la vega de Balazote descubrieron un túmulo ibérico que permite situar tan singular pieza en el contexto de una necrópolis tumular a la que probablemente perteneció. Está esculpida en caliza grisácea. En Balazote puede contemplarse expuesta una réplica de la Bicha.
Balazote es una de las primeras poblaciones que el turista se encuentra a su paso por la Vía Verde. Con un recorrido de 94 kilómetros, la Vía parte de Albacete y conecta ininterrumpidamente con Alcaraz para terminar, ya con tramos discontinuos, uniéndose con la Vía Verde de Jaén.


Al sureste de la provincia de Albacete y a 110 kilómetros de la capital se encuentra la localidad de Bienservida, en la comarca de la Sierra de Alcaraz. Con sus poco más de 700 habitantes, es un municipio eminentemente agrícola especializado en el cultivo de olivar. Cada ocho de septiembre celebra fiestas patronales en honor a la Virgen de Turruchel en la que destaca la procesión de la virgen, los encierros y verbenas. También destacan las fiestas en honor a San Bartlomé el 24 de agosto.
Además de su impresionante Iglesia de San Bartolomé, Bienservida muestra parajes y espacios naturales inigualables como La Pileta, un valle rodeado por una formación rocosa, o El Padrón, que en su cima nace una fuente cuya agua se une al río “La Mesta”. La Subida al Tejo Milenario es un lugar idóneo para excursiones y acampadas. Se puede contemplar lo mejor de la montaña gracias a los Circuitos Provinciales de Carreras Populares y de Trail “Diputación de Albacete”.
El retablo mayor de la Iglesia de San Bartolomé es una gran joya del Renacimiento que ocupa toda cabecera del altar. Destaca por su majestuosidad y grandes dimensiones. De catorce metros de alto por nueve de ancho, lo preside el titular, San Bartolomé, y se distinguen en él dos partes separadas por un entablamento: la inferior del siglo XVI y la superior del siglo XVII. Se combina con

gran maestría, escultura y pintura logrando que el conjunto consiga una gran unidad estética.
Su financiación se atribuye a la condesa de Paredes, que en el siglo XVI quiso reconocer a esta pequeña villa el trato fiel y sincero que le profirió toda su vida, mandando levantar este bello conjunto que en 1991 fue declarado un Bien de Interés Cultural.

Bienservida formó parte de lo que se conoce como “Señorío de las 5 villas”. Estuvo formado por Villaverde de Guadalimar, Bienservida, Riópar, Cotillas y Villapalacios. Ya sea mediante el senderismo o disfrutando de sus carreteras paisajísticas en coche, merece la pena aprovechar tu paso por Bienservida y visitar estas localidades.
Casas de Lázaro es un municipio situado a 41 Km de Albacete ubicado en la parte oriental de la comarca de la Sierra de Alcaraz que cuenta con 330 habitantes. Se sitúa a partir de los valles creados por los ríos Montemayor y Masegoso, que vierten sus aguas al río Jardín. Entre las fiestas que se realizan en la localidad destacan la festividad de San José, patrón del municipio, que se celebra ese mismo día, 19 de marzo. El tercer sábado del mes de mayo se celebra la Romería de la Inmaculada en la aldea de El Cucharal.
Casas de Lázaro es el lugar donde se inician las primeras estribaciones de la Sierra de Alcaraz. Conserva vestigios de molinos de agua y batanes y se presenta al viajero rodeada de una agradable vegetación, ofreciéndonos parajes para disfrutar de la naturaleza. Todo ello podremos contemplarlo en la Ruta Alto de los Molinos. En las afueras de la localidad se pueden ver obras de arquitectura popular que han sobrevivido al paso del tiempo como un cuco, es decir, una especie de refugio para labradores.
Uno de los elementos más característicos de la población de Casas de Lázaro han sido históricamente sus telares. Una tradición que se remonta al siglo XIV, dado que, en el escudo oficial de Casas de Lázaro, que data de ese período, ya aparece una lanzadera, uno de los utensilios que se utilizan en el telar. Hasta mediados del siglo XX era una actividad económica de gran pujanza, vendiéndose en su mayoría en Hellín y Albacete.
En la actualidad, tal actividad artesanal se conserva por la familia Rosa, que continúan la tradición que empezó en el siglo XIX José Antonio Rosa. Aquí se conserva el único taller de artesanía textil que ha resistido al paso del tiempo y a la industrialización en Castilla-La Mancha.

Las Carreteras Paisajísticas de Albacete de la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel están pensados para que los turistas puedan disfrutar tanto de los destinos como del camino. Recorriendo estas Carreteras Paisajísticas encontrarán numerosos entornos mágicos como Salobre, Casas de Lázaro, Pozuelo y Povedilla en los que contemplar paisajes de forma tranquila y diferente con cualquier tipo de vehículo.



Cotillas es una pequeña población rodeada por una balconada desde donde se contempla una de las panorámicas más llamativas de la Sierra, observando las cumbres de las Almenaras, el Cambrón, el Padrón y el Pico de las Aguilas.
Su término, en el que se encuentran las pedanías de Arroyofrio de Arriba y la Resinera, está rodeado por el río Guadalimar y el Arroyo de la Puerta, surcándolo, además pequeñas corrientes como La Zapatera y Arroyofrío. Orografía, botánica e historia se funden para darnos aquí uno de los paisajes más extraordinarios de la comarca.
Los tesoros de Cotillas son las ruinas del castillo de Yedra y una iglesia rústica del siglo XVI. Además, cuenta con
numerosos lugares pintorescos, como la Fuente Cavera, la Majada del Soto o el Pantano de Arroyo frío. También dispone de piscina municipal con el típico chiringuito, cuyo recinto se usa para las verbenas de las fiestas patronales.
Parte del término de Cotillas se integra en el Parque Natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima, que forma un paraje idóneo para hacer excursiones, senderismo o montañismo.
El Pantano de Arroyo Frío se encuentra a 3 km del pueblo de Cotillas. Se trata de un lugar creado artificialmente en el nacimiento del río Frío. Se ha construido una presa que ha dado lugar a esta pequeña laguna de aguas turquesas, de aspecto casi irreal. La verdad es que parece que hubiera sido pintada con acuarela.

Arroyo Frío nace en pleno corazón de la sierra albaceteña. Una laguna artificial con aguas cristalinas, rodeado de vegetación, se convierte en un lugar refrescante para los días más calurosos. Se puede visitar en todas las épocas del año, ya que en cada una de ellas podremos realizar diferentes actividades todas ellas relacionadas con la naturaleza.
En primavera y otoño disfrutaremos con bonitas rutas de senderismo, disfrutando de los colores de las hojas del bosque. En verano, podremos darnos un refrescante chapuzón e, incluso pescar truchas. Y en invierno, el paisaje helado, rodeado de escarcha nos trasladará al frío intenso de la Mancha.
Cotillas formó parte de lo que se conoce como “Señorío de las 5 villas”. Estuvo formado por Villaverde de Guadalimar, Bienservida, Riópar, Cotillas y Villapalacios. Ya sea mediante el senderismo o disfrutando de sus carreteras paisajísticas en coche, merece la pena aprovechar tu paso por Cotillas y visitar estas localidades.

El municipio de El Ballestero se sitúa en la parte oriental de la provincia contando con una población de unos 400 habitantes. Sus principales fiestas son el 10 de agosto en honor al patrón del municipio, San Lorenzo, y el 29 de septiembre en honor a San Miguel. En El Ballestero todos los 28 de diciembre sale por las calles El Blanco, una tradición del siglo XVI tradición que consiste en que un habitante del pueblo se viste con una túnica y caperuza blancas y va casa por casa recaudando donativos para una obra benéfica.
El Ballestero ofrece al visitante tanto recursos patrimoniales como naturales. Del lado patrimonial destaca la Ermita de Villalgordo y la Iglesia de San Lorenzo, construcciones del siglo XIII y del siglo XVI respectivamente. Importante también el Museo Etnográfico y Aula
de la Naturaleza de El Ballestero, donde hay una sección dedicada al Museo del Pastor. Dada la riqueza natural de que dispone el término municipal, existe la posibilidad de recorrer toda su extensión en diferentes rutas de senderismo o de bici.
Villalgordo es una de las primeras parroquias que se fundan en la zona tras la conquista de Alcaraz por Alfonso VIII en 1213. Actualmente constituye uno de los restos arquitectónicos más antiguos de la provincia de Albacete. Desde el domingo de Pentecostés hasta el último sábado del mes de septiembre, la imagen de la Virgen de la Encarnación permanece en ella hasta que es llevada a la Iglesia de San Lorenzo Mártir, en El Ballestero.


La Ermita de Villalgordo está constituida por una nave única dividida en cuatro tramos mediante arcos apuntados. Tres de los arcos apuntado sostienen la cubierta de madera a dos aguas, siendo la última de ellas el presbiterio con una bóveda de crucería. De esta se dice que es la bóveda en pie más antigua de las que se conservan en la provincia.
La Ruta de Vandelvira propone un acercamiento a la obra monumental del arquitecto alcaraceño para que el turista descubra a través de él la realidad del territorio que lo vio nacer y conozca el arte, la historia y la cultura de las localidades de la comarca en las que Vandelvira tuvo un papel destacado: Alcaraz, El Ballestero, El Bonillo, Vianos y Viveros.


El Bonillo es un municipio situado a 69 km de Albacete que cuenta con una población de en torno a 2.700 habitantes. Las principales fiestas que El Bonillo realiza a lo largo del año son la Semana Santa, con sus reconocidas siete bandas de tambores y cornetas, que fue declarada de Interés Turístico Regional en 2011, La Feria de Tradiciones y Artesanía Villa de El Bonillo, que se celebra durante el fin de semana más próximo a la festividad de San Juan y la Feria anual, que se prolonga desde el 10 al 15 de agosto.

El Bonillo ofrece a sus visitantes una Ruta sobre su Casco Antiguo, declarado conjunto histórico/artístico, donde podrán observar la Plaza Mayor, el Ayuntamiento, la Iglesia de Santa Catalina (donde podrá visitar una importante pinacoteca) y el Rollo o Picota, símbolo de independencia
del municipio, así como un molino de viento de reciente construcción como sala de exposiciones temporales. A nivel cultural, es especialmente importante su Semana Santa y su Feria de Tradiciones y Artesanía. A nivel deportivo destacan la piscina cubierta y el único Campo de Golf público de la Región “La Lagunilla”. Otro de los alicientes es el senderismo por la Zona Esteparia del Bonillo, declarada zona ZEPA de avutardas. También está incluido en las Ruta del Renacimiento y Ruta de El Quijote.
La Semana Santa de El Bonillo es una fiesta de interés turístico regional destacada por la riqueza de sus pasos y por su antigüedad. La primera cofradía data del s. XV llamada de La Vera Cruz, a ella siguió la de Jesús el Nazareno en el siglo XVI. Destaca
De especial atractivo es la imagen de La Dolorosa, que conserva el rostro y manos tallados por el maestro Salzillo. En su procesión, la mañana del Viernes Santo, puede vérsela en todo su esplendor.
“El Cristo abrazado a la Cruz” DE EL GRECO

también la importancia de la música de El Bonillo. Esta tiene antecedentes en los ministriles del siglo XVI, entre ellos la banda de cornetas de los “Armaos” con más de 100 años de antigüedad y que con su inusual indumentaria, que recuerda a la de los tercios de Flandes, con el pantalón tipo bombacho y con casco que se diseñó por libre en el propio pueblo.
En el museo parroquial de la iglesia de Santa Catalina de El Bonillo se encuentra una de las obras más importantes de la provincia de Albacete, “El Cristo abrazado a la Cruz” de Domenico Theotocopuli, “El Greco” (1541-1614). El lienzo representa a Cristo en pie, con gran templanza, sobre un fondo atormentado, con túnica roja y manto azul, con marcados plegados en juegos de claroscuro, quien abraza la Cruz con manos alargadas de gran belleza, que parecen acariciarla. En la cabeza lleva una dura corona de grandes espinas, mientras la mirada se pierde hacia los cielos. La obra presenta las características propias de las obras del artista, figuras alargadas, pinceladas ligeras, colores contrastados, expresiones profundas, la aureola cuadrada, un ligero amaneramiento en las figuras, y si no fuera suficiente para su atribución, encontramos la doble firma del autor, una en latín y otra en griego. Según los autores que lo han estudiado, la obra corresponde a la etapa más brillante del artista entre 1590 a 1596. En este museo también podremos deleitarnos con las
cinco pinturas de Juan de Borgoña, recientemente encontradas.
El Bonillo forma parte de la famosa Ruta de Don Quijote junto a otros dos localidades de la comarca, Munera y Ossa de Montiel. Las tres comparten una profunda conexión con la segunda parte de la obra de Cervantes.

FÉRTILES TIERRAS
Por las tierras de este término, donde se asentaron los íberos de Oncebreros, todo se encuentra labrado. Fue aldea de Alcaraz hasta el s. XIX, de 1845 aproximadamente data el primer censo. Pasan por su término el río Don Juan y el acueducto del trasvase Tajo-Segura. Conforman la población las pedanías de El Cuartico y Casa de la Hita.
Las Fiestas Patronales del Municipio se celebran el 12 de octubre en honor a su Patrona la Virgen del Pilar (fiestas mayores) y el 15 de mayo en honor a su Patrón San Isidro Labrador (fiestas menores). El día 12 de Octubre, día de La Patrona, se celebran misas y procesiones y se procede a la entrega de las roscas de la caridad. Otra fiesta que se celebra la noche del 30 de abril son Los Mayos, manifestación que consiste en realizar cantos a la Virgen y después ir a cantar a las chicas solteras del municipio y regalarles flores. Como en varios municipios de
la Comarca, se celebran también cada 15 de Mayo fiestas en honor a San Isidro Labrador. Éste día podemos asistir a una bella procesión y compartir la misa dedicada al Santo. Para celebrarlo, los herrereños disfrutan también de varias actividades y juegos festivos como concursos de arada y remolque.
En La Herrera destaca la Iglesia del Pilar, construida a finales del siglo XIX. De esta Iglesia destaca su fachada, pulidísima y con estrechas ventanas, que ofrece reminiscencias lejanas de edificaciones de estilo mudéjar y conocida por su bella Cruz procesional de plata, pieza de orfebrería góticorenacentista del siglo XVI. Esta obra de orfebrería toledana preside las procesiones de Semana Santa, las fiestas del Corpus y las fiestas del pueblo.
Llama poderosamente la atención la presencia de su iglesia parroquial,
dedicada a la virgen del Pilar, patrona de la localidad, construida en el siglo XIX coincidiendo con su independencia, gracias a los donativos de los herrereños. Un edificio de notable belleza, que cobija una cruz procesional de plata de estilo góticorenacentista, elaborada por el orfebre toledano Pedro de San Román en el siglo XVI, en ella se mantienen las formas góticas con los brazos flordelisados, lóbulos interiores y crucero cuadrado junto a una decoración de tipo renaciente.
En la Iglesia del Pilar también destaca el Cuadro de la Dolorosa, posiblemente de finales del siglo XVII.
El término municipal de La Herrera está surcado por el río Don Juan y, de Norte a Este, por el trasvase TajoSegura. El entorno del municipio son fértiles tierras de labor. La abundante fauna de los campos es la propia de las zonas de estepas cerealistas, perdiz, conejo y, sobrevolando, majestuosos aguiluchos pálidos que anidan entre las espesas siembras. En verano abundan los oportunistas milanos negros que pasan el buen tiempo en estos llanos.

LA LOCALIDAD
Lezuza es un municipio situado a 50 km de Albacete que tiene una población de unas 850 personas. Durante todo el siglo XVI resurgió la localidad de Lezuza, afirmándose el asentamiento en el llano y el definitivo abandono del Cerro del Castillo como lugar de hábitat. Este fenómeno queda confirmado con dos acontecimientos claros: la concesión de la categoría de villa a Lezuza y el desarrollo arquitectónico del municipio. A día de hoy el Parque Arqueológico de Libisosa y su Colección Museográfica son un referente del patrimonio arqueológico en la comunidad.
El municipio de Lezuza es un referente en el cuidado y difusión de la cultura tradicional, tanto material como inmaterial. Por el lado material tenemos el Parque Arqueológico de Libisosa y su colección museográfica, referentes científicos y de difusión del Patrimonio Arqueológico. También destaca la Iglesia Parroquial de la Asunción del siglo XVI, y a día de hoy edificio religioso más importante de la localidad. Este cuidado también se refleja en sus dos museos, el “Ecomuseo Etnográfico de Tiriez” y la “Colección Museográfica de Libisosa”.
Nos encontramos ante un enclave que goza de una ubicación privilegiada, ya que se encuentra en el centro de un territorio surcado por un entramado viario que fue fundamental en la península ibérica. Encontramos en la Colección Museográfica de Libisosa una selección de materiales pertenecientes a la fase ibérica del yacimiento ibero romano de Libisosa. Las estructuras y materiales hallados hacen hincapié en la relevancia de este enclave como eje vertebrador y centro neurálgico de época antigua en la actual provincia de Albacete.
La cantidad, calidad y variedad del registro material ibérico de Lezuza, fruto de unas circunstancias y condiciones de conservación notables, nos permiten disfrutar de un campo inagotable de acercamiento a nuestro pasado más remoto. En el recorrido
por el Centro Sociocultural Agripina se ofrecen una serie de flashes de Historia viva sobre la artesanía, las actividades agropecuarias y el comercio de los antiguos libisosanos, así como los recursos de autoexaltación empleados por sus clases dirigentes para conservar el poder, y las huellas de su dramático final.
Libisosa no es el único yacimiento arqueológico que el turista se encontrará en la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel. El Castillo de Peñas de San Pedro, el Castillo de Alcaraz, el Castillo de Munera o La Quéjola en San Pedro son algunos de los más importantes y bien merecen una visita.


Masegoso, el pueblo con menos habitantes de la comarca, destaca por su privilegiado entorno natural a tan solo 60 Km. de Albacete. Está situado en un entorno de encinares y campos de cereales y de fauna ibérica como ciervos y cabras montesas. Por el municipio transcurre el río Masegoso. Sus fiestas populares se centran en mayo para San Isidro y en octubre para la festividad de la Virgen del Rosario.
Destaca la Laguna del Arquillo, monumento natural de CastillaLa Mancha ideal para visitar en cualquier época del año. La aislada situación de la Laguna le proporciona singularidad, encuadrada dentro de la Ruta de Don Quijote. Desde Masegoso podemos seguir la Vía Verde, que está perfectamente acondicionada y nos permite llegar a la laguna a pie o en bicicleta.
El Arquillo es una laguna de origen es kárstico-fluvial y uno de los pocos ecosistemas palustres de la Península de este origen (como las Lagunas de Ruidera). Apenas ha sido alterado por el hombre. Su singularidad ecológica hizo que fuera declarada “Monumento Natural” en diciembre del 2000.
La laguna domina el paisaje, desde donde se puede disfrutar de sus apacibles aguas, cuyo color va cambiando de blanquecino a azul conforme transcurre el día. La vegetación que coloniza la laguna posee un elevado interés botánico. Las espigas de agua y los nenúfares flotando en la lámina de agua añaden belleza al complejo natural de la laguna, y a su vez, dan alojamiento a la Ranita de San Antonio y al Galápago leproso. Todo esto hace que sea ideal para echar la tarde y degustar una merienda.
La Laguna del Arquillo sirve de límite de los términos municipales de El Robledo, Masegoso y Peñascosa. Aprovecha su visita para descubrir lo que estos pueblos tienen que ofrecer.
Munera es un municipio de la comarca del Campo de Montiel en La Mancha a 59 km de la capital con una población de unos 3.500 habitantes. Sus principales fiestas son el carnaval, uno de los más antiguos de la provincia, la Romería de San Isidro el 15 de mayo, la representación de “La Encantá” el sábado más próximo a la noche de San Juan, las Fiestas de la Juventud la tercera semana de julio, la fiesta de “El Emigrante” el 15 de agosto y la Feria de Munera del 20 al 25 de septiembre, declarada en 2022 Fiesta de Interés Turístico Regional.

Aquí tuvieron lugar las famosas “Bodas de Camacho” según relatan los capítulos XIX, XX, XXI de la 2º parte de Don Quijote de La Mancha, por ello Munera se vuelca en el “Centro de Interpretación de las Bodas de Camacho”, donde también da a conocer la artesanía, gastronomía y folklore local. También es importante el Museo Etnográfico “La Molineta”, su Castillo, y la Iglesia de San Sebastián. También puede resultar interesante para el visitante la realización de la Ruta del Renacimiento y la Ruta de El Quijote, que conecta a Munera con otras localidades.

Construido en 1861, este es uno de los dos molinos de viento que existieron en la localidad, siendo el único visitable en la actualidad. Fue inaugurado como Museo Foto etnográfico gracias a las donaciones de los munereños. A lo largo de sus tres plantas se puede recorrer la historia, tradiciones y cultura de Munera. Su exterior destaca por su forma cónica y no cilíndrica como la mayoría de los molinos de viento manchegos. Su interior está distribuido en tres plantas. La primera dedicada al tradicional proceso de la molienda, la segunda escenifica
otras tareas agrícolas y ganaderas presentes en la localidad, y la última destaca por las secciones de fiestas, quintos, indumentaria, telares, y por ofrecer al visitante la oportunidad de ver una máquina de cine antigua y una maqueta en 3D de un molino de viento.

Munera forma parte de la famosa Ruta de Don Quijote por la importancia que las Bodas de Camacho tienen en la obra cervantina. Continúa esta ruta por El Bonillo y Ossa de Montiel, las otras dos localidades de la comarca que comparten una profunda conexión con la obra por el pasaje de la Cueva de Montesinos.




Ossa de Montiel se sitúa en el propio corazón de la Mancha, dentro del histórico Campo de Montiel y en plena Ruta del Quijote. Situada al oeste de la provincia de Albacete a 901 metros de altitud, cuenta con unos 2.250 habitantes. El cereal, la vid, la abundante caza menor y su infraestructura turística son sus principales recursos económicos. Sus principales fiestas son la Romería de San Pedro Mártir de Verona, las fiestas patronales en agosto y las Fiestas de San Miguel Arcángel el 29 de septiembre.
Su patrimonio más importante son la Iglesia de Santa María Magdalena, el Castillo de Rochafrida el Rollo o Picota (único en la comarca junto con el de El Bonillo), y la Ermita de San Pedro, muy visitado durante su romería. La riqueza natural que ofrece al turista es enorme y a la vez variada. Destacan por encima de todo las Lagunas de Ruidera, una visita imprescindible que además cuenta con su propio centro de interpretación. También es importante la Cueva de Montesinos, cueva mundialmente conocida por aparecer en la obra de Don Quijote.
En el límite de las provincias de Albacete y Ciudad Real, y en medio del extenso Campo de Montiel, nos encontramos, casi sin previo aviso, con un oasis de agua y vegetación;
recibe a un innumerable número de aves acuáticas. El agua alcanza en esta época su máximo caudal y fluye de una laguna a otra formando en algunos casos pequeñas cascadas. Las barreras tobáceas constituyen sin lugar a dudas el principal valor de este

el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera, en cuyo punto más alto, la Cabeza de San Pedro, se encuentran el Castillo de Rochafrida y la Cueva de Montesinos.
En una superficie de 4.000 hectáreas se reparten dieciséis lagunas que escalonadamente forman cascadas y torrentes que van desde los primeros manantiales que emanan en la laguna Blanca, hasta llegar a las lagunas bajas y el Pantano de Peñarroya. En primavera, el exuberante colorido de una abundante y variada vegetación,
espacio natural, pues únicamente en Europa en la región de karst en Croacia existen formaciones similares.
Ossa de Montiel forma parte de la famosa Ruta de Don Quijote por la importancia que la Cueva de Montesinos tiene en la obra cervantina. Continúa esta ruta por El Bonillo y Munera, las otras dos localidades de la comarca que comparten una profunda conexión con la obra por el pasaje de las Bodas de Camacho.

Peñas de San Pedro es un municipio que se encuentra a 32 km de la capital provincial que cuenta con unos 1.400 habitantes. Junto a su castillo, Peñas de San Pedro es conocido por el Traslado de la imagen del Cristo del Sahúco desde Peñas de San Pedro hasta su santuario en la aldea del Sahúco, reconocido como Fiesta de Interés Turística Regional. Sus fiestas principales son las patronales del 27 al 31 de agosto.
Imprescindible la visita de su Castillo. Actualmente se encuentra actualmente en fase de restauración, pero el visitante puede acceder a la meseta donde se encuentra la fortaleza y disfrutar de las impresionantes vistas panorámicas y de los restos amurallados. También es importante su Ayuntamiento, declarado Bien de Interés Cultural, la
Iglesia de la Esperanza, de inicios del siglo XVIII y la visita al Santuario de la Aldea del Sahúco.
Considerado uno de los enclaves defensivos más importantes de la provincia, el Castillo de Peñas de San Pedro presume de una larga historia desde su inclusión como una de las posiciones fuertes del reino taifa murciano para defender sus límites occidentales frente a las intromisiones de los reinos árabes de Andalucía.
Aún más que el propio castillo, es impresionante la rotunda base de roca en que se asienta. Inaccesible por cualquiera de sus caras, encontramos en su altura restos de muros posiblemente islámicos, un torreón de planta semicircular, y algunas almenas defensivas. Interesantes son los restos de viviendas y cuarteles para los soldados que habitaban el castillo.
Existen restos de varios hornos, una balsa para la recogida de aguas de lluvia, conductos para su canalización, y aljibes para su almacenamiento. Su muralla, de origen islámico, de longitud superior a mil metros, rodeaba todo el castillo, aunque hoy encontramos sus restos.

Junto al castillo de Peñas de San Pedro, en la comarca podemos encontrar los castillos de Munera y Alcaraz. Todos ellos poseen una rica historia que es interesante conocer para comprender la envergadura e importancia que estas construcciones supusieron en su momento.
Peñascosa se encuentra situado en la Sierra de Alcaraz, a 85 km de Albacete. Peñascosa presenta una gran riqueza natural y paisajística con más de 12.000 hectáreas de montes de utilidad pública y áreas de protección especial. Para Peñascosa es muy valioso el Pino del Roble cuya importancia es tal que desde hace décadas es el símbolo del pueblo. Sus fiestas mayores son el 15 de agosto y el 29 de septiembre en honor a San Miguel Arcángel.
que turista pueda disfrutar plenamente de esta riqueza natural es ideal pasar unos días en los Campamentos de Peñascosa.

Peñascosa destaca por su riqueza natural. La mayor parte de los árboles del término municipal son pinos, encinas y robles. Hay algunos ejemplares de abetos y olmos. Existen varios árboles singulares, para ello existe la Ruta Árboles Singulares, que dejará fascinado al visitante. Para
Hará unos cuarenta años, un pájaro o el viento, arrastró una semilla de pino carrasco hasta la cruz del roble, ya centenario. Allí encontró protección para germinar, y germinó. Unos pastores, que aún viven, observaron el curioso fenómeno y, desde el primer momento, se cuidaron de que el pinito recién nacido no fuera destruido por nadie de los que circulaban por el paraje en que se encuentra. Y el pino, en aquel ambiente, se desarrolló.
En la actualidad esa convivencia ya no es tan «perfecta». El pino hace ya años que, al ser más joven y vigoroso que el roble, desgajó el tronco del roble. La altura del pino dobla a la del roble. Fue declarado “Árbol Europeo” en 2019.

El entorno de Peñascosa ofrece varias rutas de senderismo entre las que destacamos la Ruta de los Árboles Singulares, una ruta circular con un recorrido de unos 12 Km. También resulta imprescindible la visita de la Laguna del Arquillo, un monumento natural que Peñascosa comparte junto a Robledo y Masegoso.a
Povedilla se encuentre en el suroeste de la provincia de Albacete contando con unos 400 habitantes. Su economía es eminentemente agrícola destacando los cultivos de cereal, olivo, girasol y leguminosas, y también la ganadería lanar. Sus fiestas principales son la Romería de San Marcos el 25 de abril, con la gastronomía como principal actividad, y las Fiestas en honor a la Virgen del Rosario el primer domingo de octubre, en la que destacan los festivales taurinos.
Una de las principales actividades turísticas que ofrece el municipio son rutas de senderismo y la práctica de la caza, tanto menor (perdiz, conejo, liebre, paloma, etc.), como la
caza mayor (jabalí, ciervo, etc.). Esta actividad atrae a gran cantidad de visitantes durante buena parte del año. Povedilla también posee una gastronomía tradicional con productos de la zona, que no por su sencillez resulta menos atractiva, que hace las delicias del visitante.
El senderismo es una atractiva actividad para el turista que visite Povedilla. Existen una serie de rutas de senderismo con cantidad de caminos y senderos que conducen y atraviesan zonas y paisajes de gran interés, con abundantes fuentes que hacen más atractivo el camino. Una de estas es la “Ruta de las fuentes”, compuesta por itinerarios diferentes para pasear por las pozas, fuentes, cañoletes y estanques de Povedilla. Estas rutas nos llevarán por zonas muy diferentes, y es que los paisajes de Povedilla son tan variados que cada itinerario nos llevará por un paisaje distinto; carrascas, olivos, campos de cultivo y la vega del río Povedilla.


Las Carreteras Paisajísticas de Albacete de la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel están pensados para que los turistas puedan disfrutar tanto de los destinos como del camino. Recorriendo estas Carreteras Paisajísticas encontrarán numerosos entornos mágicos como Salobre, Casas de Lázaro, Pozuelo y Povedilla en los que contemplar paisajes de forma tranquila y diferente con cualquier tipo de vehículo.


Pozohondo está ubicado a 33 km de la capital con unos 1.600 habitantes. Sus principales fiestas se celebran el 24 y el 25 de junio en honor a San Juan Bautista, donde se corren los tradicionales encierros de toros y el primer domingo de octubre, en honor a su patrona, la Virgen del Rosario. Otras fiestas a resaltar son: el Prendimiento de Jesús, en Semana Santa, representación que data de finales del s. XVII, San Blas, el día 3 de febrero y Santa Lucía, la noche del 12 de diciembre, cuando se comen “criyas asas” en las lumbres
Pozohondo es pueblo de varias plazas y cuatro pedanías: las Nava de Arriba, y la de Abajo, El Campillo de la Virgen y los Pocicos.
Destacamos en el municipio la bonita Iglesia de San Juan Bautista, construida en el siglo XVII, ésta ha precisado de diferentes reformas a lo largo de los años, conservando actualmente la cúpula y la bóveda. El retablo del altar mayor y los laterales eran de estilo barroco de gran valor artístico. Una verja de hierro separaba el altar del resto de la iglesia. En las paredes había varios nichos donde descansaban tallas de gran valor, destacando una Purísima de Salzillo
Son varios los restos de molinos de
viento que encontramos en esta localidad, uno de ellos, el molino de Pablo, debió de ser de los más grandes de la provincia de Albacete por las proporciones que presentan sus ruinas.
Los íberos también dejaron su huella por esta localidad, a poca distancia del pueblo, junto al cementerio nuevo, se encontraron restos de un poblado íbero-romano y restos de bronce.
Los primeros resquicios de historia de Pozohondo se encuentran en los yacimientos íberos y romanos en el paraje Las Peñicas, donde han aparecido partes de cerámica y un fragmento de escultura íbera, más concretamente la talla tosca en piedra que representa una cabeza femenina, donada al Museo Arqueológico Provincial de Albacete.
Lo que más caracteriza, sin duda, a Pozohondo es su Banda Municipal de Música, fundada en 1805, siendo así la más antigua de Castilla-La Mancha. Esta banda alcanzó, tiempo atrás, gran prestigio, y lo mantiene en la actualidad.
El carácter festivo, da fama al lugar, destacando la popular danza del Zángano, que todos los años se celebra el 24 de junio en las fiestas de San Juan y se repite el 7 de octubre con motivo de la Virgen del Rosario.
La fiesta que más apasiona a los pozohonderos, es la representación del Prendimiento de Jesús, en Semana Santa, data de finales del s. XVII principios del s. XVIII y es representado por habitantes del pueblo.
Pozohondo se encuentra en plena llanura manchega, asentado en un hondo. En contraste con esta llanura se alza la Sierra de San Juan, un lugar estupendo donde pasar un día de campo, y poder observar los cambios existentes en el terreno, el cambio de color y de forma. Podemos hablar también de los dos pequeños cerros que rodean a este municipio, llamados Cerro Gordo y Cerro de la Sabina.

Pozuelo está ubicado a 32 km de la capital con 460 habitantes. La base de su economía es la agricultura, especialmente el trigo y la cebada. Tiene una gastronomía muy variada y arraigada a la tradición como son las migas, el ajo de matadero o el arroz con conejo. Sus principales fiestas se celebran el 14 de mayo en honor a San Bonifacio, en la que se saca en romería y se lleva a su ermita, y el 24 de agosto en honor a San Bartolomé, patrón del pueblo. Sus principales actos son las verbenas populares y el desfile de carrozas.
Patrimonialmente Pozuelo destaca por su Iglesia Parroquial de San Bartolomé del siglo XVIII, la Casa Palacio de los Coroneles con dos plantas, gran torre, portada labrada y buena rejería, y la Ermita de San Bonifacio, que es visitada en romería por todos los lugareños durante el mes de mayo. Un recurso natural que puede interesar al turista se encuentra a 5 kilómetros. Se trata de un paraje conocido como La Torca, consistente en una depresión circular en el terreno con bordes escarpados.
Apenas a 5 kilómetros de Pozuelo está situado el paraje de “La Torca”, una depresión circular en el terreno con bordes escarpados. La ruta para acceder a este paraje comienza en la calle de la Torca, situada frente a la Plaza de la Iglesia, en línea recta, dejando el Cementerio Municipal a la izquierda y continuando por el camino. A lo largo de la travesía el turista se encontrará con un extraordinario cuco hecho con piedra, de forma semiesférica que se mantiene al paso del tiempo como muestra de la arquitectura agrícola tradicional. Su función originaria era la de servir como refugio de pastores.

Las Carreteras Paisajísticas de Albacete de la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel están pensadas para que los turistas puedan disfrutar tanto de los destinos como del camino. Recorriendo estas Carreteras Paisajísticas encontrarán numerosos entornos mágicos como Salobre, Casas de Lázaro, Pozuelo y Povedilla en los que contemplar paisajes de forma tranquila y diferente con cualquier tipo de vehículo.



Robledo es un municipio situado a 70 km de Albacete con una población de en torno a 370 habitantes. El entorno natural de Robledo es un centro de localización natural rico en flora y fauna. La vegetación es muy intensa y colorida y los pastos se mezclan con campos amarillentos de cereales para crear un paisaje extraordinario. Sus fiestas mayores se celebran el 12 de octubre en honor a la Virgen del Pilar.
QUÉ VER
El entorno natural de Robledo es un centro de localización natural extremadamente rico en flora y fauna. Es imprescindible que el turista visite tanto la Laguna de los Ojos de Villaverde como la Laguna del Arquillo. El entorno ofrece una serie de contrastes geográficos que, unido al potencial
ecológico-faunístico y a la buena infraestructura de comunicaciones, hacen de este lugar un sitio digno de visitar y del que disfrutar.
La Laguna de los Ojos de Villaverde es una laguna agreste y rodeada de sabinares lo que la convierte en un espacio natural único. Aunque la gran abundancia de vegetación de las orillas dificulta el paso, asomarse a sus aguas es hacerlo a una de las áreas de mayor riqueza biológica de Albacete.
Un gran número de aves la habitan, entre ellas la Garza Real, el águila perdicera, el águila real, el aguilucho lagunero, el aguilucho pálido, el azor,
el halcón peregrino y el milano real. Además, en sus aguas crece la planta carnívora Dentribularia (urticaria vulgaris), y es habitada por la rana de San Antonio, además de otros batracios, nutrias y mamíferos. Toda esta riqueza natural hace de la Laguna de los Ojos de Villaverde uno de los espacios naturales más valiosos de la provincia.
Próximo a Robledo también es imprescindible visitar la Laguna del Arquillo, que comparte con Peñascosa y Masegoso, así como la Ermita de Villalgordo, que comparte con El Ballestero.

Salobre es un municipio situado a 95 km de Albacete. Actualmente cuenta con una población de en torno a 470 habitantes, repartidos entre Salobre y la aldea del Reolid. Un río atraviesa el pueblo, cuyo nombre es río de Salobre, afluente del río Guadalmena. Las principales fiestas de Salobre son del 16 al 18 de agosto, mientras que Reolid las celebra del 23 al 25 de ese mismo mes. En ambas predominan la música, comidas populares, y tradición.


Salobre se encuentro en un entorno natural privilegiado. Posee una flora única y animales vulnerables como el sapo partero bético o la nutria, junto con una mezcla de bosque de roble coscojar y enebro. Salobre tiene rincones únicos que convierte a la localidad en un lugar idóneo para rutas de senderismo. Entre todas ellas destaca la ruta de la Microrreserva Estrecho del Hocino, una de las Áreas
Protegidas de Castilla-La Mancha de más riqueza natural.
La Microrreserva Estrecho del Hocino es un pequeño espacio natural recorrido por la carretera que unía Salobre con Reolid y que ahora está cortado proporcionando un agradable paseo paralelos al río Salobre.
El turista debe estar atento a ambos lados del desfiladero formado por el río Salobre a su paso entre los cerros
del Hocino o de la Navaza, pues podrá observar la presencia de la esquiva nutria y sobre todo de la cabra montés, especie que prolifera en el espacio siendo uno de los atractivos del lugar por su facilidad para ver y fotografiar. En cuanto a aves, la collalba negra, el roquero solitario, el avión roquero y el águila real, entre otros amenizarán nuestros paseos a lo largo del recorrido.
Las Carreteras Paisajísticas de Albacete de la Sierra de Alcaraz y Campo de Montiel están pensadas para que los turistas puedan disfrutar tanto de los destinos como del camino. Recorriendo estas Carreteras Paisajísticas encontrarán numerosos entornos mágicos como Salobre, Casas de Lázaro, Pozuelo y Povedilla en los que contemplar paisajes de forma tranquila y diferente con cualquier tipo de vehículo.

San Pedro es un municipio localizado en Sierra de Alcaraz, a 35 km de la capital provincial. En él encontramos una actividad ligada a la agricultura y la ganadería, a la que se han ido sumando sectores como servicios, construcción y turismo. Para San Pedro es importante la caza, donde la perdiz roja, el conejo, la liebre encuentran sitio en la gastronomía tradicional. Sus fiestas más importantes son en honor a San Pedro del 26 al 30 de junio.
San Pedro es una localidad de gran atractivo natural en el que predomina un paisaje de vega y monte bajo. Una cañada atraviesa el paisaje, y sobre
esta se quiso construir una línea férrea que uniría Baeza con Utiel, que hoy es conocida como la Vía Verde. Este itinerario nos lleva a conocer los múltiples y diferentes territorios que este inconcluso ferrocarril en su origen estaba llamado a recorrer.
Las Vías Verdes son antiguos trazados ferroviarios en desuso acondicionados para la práctica del cicloturismo y el senderismo. Son itinerarios accesibles y fáciles, sin apenas pendientes, y alejados del tráfico motorizado, ideales para recorrerlos con personas de movilidad reducida, ancianos y niños.
La construcción de esta vía, la línea Baeza-Utiel, se inició en 1927 quedando en 1954 abandonada sin que el tren hubiese circulado nunca. Hoy su recorrido nos lleva a surcar primero la llanura albaceteña, donde se localiza San Pedro, que es un
terreno homogéneo y agrícola, para luego sumergirnos en la cuenca del río Jardín, un espacio de tránsito hacia un terreno abrupto y montaraz como es el del Santuario de Cortes. Por último, un nuevo tramo (discontinuo a partir de Alcaraz) continúa entre Reolid y el límite provincial con Jaén.

Si visitas San Pedro pásate también por las localidades vecinas de Pozuelo y Peñas de San Pedro. En la primera de ellas encontrarás un genuino pueblo manchego y en Peñas de San Pedro podrás visitar su imponente castillo.
Vianos es un magnífico emplazamiento localizado en pleno corazón de la Sierra de Alcaraz, a más de 1.120 m y al pie del Pico Almenara. El camino de subida a Vianos es espectacular así que hágalo con tranquilidad para poder disfrutar sus bellísimas vistas, dominadas por un cañón muy escarpado. Sus fiestas más importantes son en honor a la Virgen de la Asunción, que se celebran cada 15 de agosto, destacando sus encierros, festivales taurinos y verbenas.
Inmerso en plena naturaleza, en Vianos se puede disfrutar de unos estupendos paisajes. Desde su casco urbano el turista podrá realizar diferentes rutas y excursiones bien por lo más alto de la sierra, bien en el Parque natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima. Esta parte de la sierra albaceteña es quizás la que mejor conserva su arquitectura popular, que contrasta con la espléndida Iglesia de San Sebastián del siglo XVI cuya torre es obra de Andrés de Vandelvira.
La fiesta más emblemática de Vianos es la representación del Auto Sacramental de los Reyes Magos en la tarde del 5 de enero. Se trata de una joya del teatro popular


única en Castilla-La Mancha que viene realizándose por actores del pueblo desde la Edad Media. Esta representación es participativa, ya que todo el pueblo colabora, muchos como actores y otros acompañando el trayecto de la obra teatral, pues se trata de una representación itinerante que se escenifica por las calles de Vianos finalizando en la Iglesia de San Sebastián con la Adoración de los Reyes.
El texto cuenta con más de 400 versos y su valor cultural es incalculable, manteniendo el castellano antiguo del texto original. Por todo ello ha sido declarado Fiesta de Interés Turístico Regional.
La Ruta de Vandelvira propone un acercamiento a la obra monumental del arquitecto alcaraceño para que el turista descubra a través de él la realidad del territorio que lo vio nacer y conozca el arte, la historia y la cultura de las localidades de la comarca en las que Vandelvira tuvo un papel destacado: Alcaraz, El Ballestero, El Bonillo, Vianos y Viveros




que rodean el municipio destacan los Picos de Guadalmena, la Sima de la Campaña y la Cueva Negra, cuya abertura mira hacia Villapalacios. Tampoco puede faltar la visita a la Ermita de San Cristóbal.
Desde cualquier rincón de Villapalacios se puede disfrutar de unas excelentes vistas en las que se puede contemplar la amplitud de sus valles y montes, por ello se la conoce con el sobrenombre de “Balcón de la Mancha y puerta de Andalucía”. La riqueza del paisaje, en esta localidad, viene dada por su accidentada orografía y los contrastes impuestos por su hidrografía. Sus fiestas más importantes son las patronales en torno al 14 de septiembre, y la Romería de San Cristóbal el sábado de Pentecostés.
La joya de Villapalacios es su iglesia, la Iglesia de San Sebastián del siglo XVI. Dentro del mismo pueblo encontramos el mirador de la Glorieta que nos sirve de balcón desde donde se ve los inicios de la Sierra de Segura en Andalucía. De los parajes naturales
La Iglesia de San Sebastián de Villapalacios es una construcción de los siglos XV y XVI de estilo gótico final. Destaca por su turbulenta historia, la ausencia de retablo y el coro, la parte más artística de la Iglesia. Este está compuesto por largas vigas de madera horizontalmente y una columna
también de madera, que sirve para sostenerlo. En las vigas horizontales sobresalen unas ménsulas talladas en forma de cabezas.
Sobre este coro se alza una singular tribuna renacentista de valiosas maderas donde resaltan doce cabezas de personajes casi todos ellos representados como monstruosos, con puntiagudas orejas, ojos saltones, dientes enormes o cuernos. Bajo el coro pueden apreciarse decoraciones polícromas de motivos mudéjares, muestras vegetales y motivos geométricos. En 1978 la iglesia fue declarada Monumento Histórico Artístico Nacional.
Villapalacios forma parte de lo que se conoce como “Señorío de las 5 villas”, que fue capital del Señorío. Estuvo formado por Villaverde de Guadalimar, Bienservida, Riópar, Cotillas y Villapalacios. Ya sea mediante el senderismo o disfrutando de sus carreteras paisajísticas en coche, merece la pena aprovechar tu paso por Villapalacios y visitar estas localidades.



Villaverde de Guadalimar se encuentra a unos 125 km al suroeste de la capital provincial. Su economía se basa en las actividades primarias destacando el cultivo del olivo y la producción de aceite. Desde hace unos años ha cobrado importancia el turismo rural impulsado por la declaración del Parque Natural de los Calares del Río Mundo y de la Sima. Sus fiestas más importantes son las patronales, en las que destacan sus tradicionales encierros de toros a pie y a caballo.
Villaverde de Guadalimar destaca por situarse en un entorno natural privilegiado. El turista podrá disfrutar de varias rutas de senderismo entre las que destacan la Ruta de El Pernales y la Ruta Piedra del Cambrón, donde podrá visitar donde murió el bandolero en 1907, y disfrutar de la zona de recreo del arroyo del tejo y las vistas panorámicas del valle del Guadalimar desde las formaciones rocosas de Los Picarazos. También podemos visitar el Parque Natural Los Calares del Mundo.
A unos 5 km. del pueblo, en el paraje conocido como Prado de la Rosinda, hay una cruz de madera y una esquela, sobre un montículo de piedras, recordando el lugar en que fue abatido el último bandolero de Andalucía, El Pernales, junto a su compañero El Niño del Arahal.
El Pernales está unido a Villaverde de Guadalimar solamente por las circunstancias de su muerte. Ante el acoso de la Guardia Civil, él junto a su compañero intentaron huir a

Valencia y embarcarse con destino a América, para lo cual, decide salir de Andalucía por las sierras de Cazorla, Segura y Alcaraz. En agosto de 1907, en las inmediaciones de la localidad de Villaverde de Guadalimar, el Pernales es reconocido y denunciado a la Guardia Civil. El 31 de agosto de 1907 en el Paraje del Arroyo del Tejo, ambos bandoleros fueron sorprendidos y tras un tiroteo cayeron los dos bandidos muertos.
Villaverde de Guadalimar formó parte de lo que se conoce como “Señorío de las 5 villas”. Estuvo formado por Villaverde de Guadalimar, Bienservida, Riópar, Cotillas y Villapalacios. Ya sea mediante el senderismo o disfrutando de sus carreteras paisajísticas en coche, merece la pena aprovechar tu paso por Villaverde de Guadalimar y visitar estas localidades.


Viveros es un municipio que se encuentra a 77 km de la capital provincial que cuenta con aproximadamente 330 habitantes que durante los meses de verano llega a superar los 1.000. Es conocido por las Salinas de Pinilla, un espacio declarado microrreserva por su singular flora y fauna. Las fiestas más populares de Viveros son la romería de la Virgen de las Guas en mayo, los festejos de San Isidro y las fiestas patronales en honor a San Bartolomé del 23 al 26 de agosto.
De las construcciones más interesantes que ofrece Viveros destaca la Ermita de Pinilla, una ermita construida en los siglos XVII y XVIII que cuenta con un interesante artesonado mudéjar del siglo XVI. También es importante la Iglesia de San Bartolomé. Viveros también dispone de un entorno natural muy interesante en el que además de las Salinas de Pinilla destaca una Zona Esteparia que constituye un hábitat de gran importancia para las aves esteparias.
Las Salinas de Pinilla, espacio declarado Microrreserva por su singular flora y fauna, se trata de un conjunto de salinas formadas alrededor de un pozo que extrae las aguas de una corriente subterránea que atraviesa un filón de sal útil para uso doméstico. El agua salada de este enclave da a la zona unas características peculiares donde habita una fauna y flora halófila (adaptada a la salinidad) rara o muy rara. Además, las lagunas que forma el río más adelante son un importante punto en donde se congregan multitud de aves acuáticas.
De esta explotación salina, ya en uso en la Edad Media, no solo es interesante la fauna y flora crecidas en un entorno salino, sino las propias instalaciones tradicionales. Recientemente se ha descubierto una nueva especie de planta halófila.

Las Salinas de Pinilla no es el único espacio declarado como microrreserva en la zona. Junto con La Molata y los Batanes, en Alcaraz, y El Estrecho del Hocino en El Salobre, forman los tres espacios protegidos declarados como microrreservas de la comarca.



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