En la sala de espera con

Diplomada en Trabajo Social por la Universidad de Castilla La Mancha, Ana lleva en Recoletas, y en concreto en el Hospital Recoletas de Cuenca desde hace aproximadamente 12 años, donde vienen desarrollando su labor como trabajadora social. Durante estos años ha trabajado con diferentes colectivos: desde personas mayores que han sufrido un ictus o con enfermedades crónicas, hasta personas sin techo ingresadas en el hospital para buscar un recurso social adecuado, pasando por inmigrantes o pacientes con trastornos alimenticios. Se define como una persona tremendamente optimista, a la que le apasiona su trabajo porque le ayuda a ser persona y a cambiar el concepto de la vida.

1.¿Por qué decidiste ser trabajadora social?

Desde siempre he procurado revelarme ante lo que me parecía injusto, intentar ayudar a mejorar la situación de los demás de algún modo. Creo que eso nos hace sentir bien. Lo más parecido a esta circunstancia es la carrera de Trabajo Social. Es muy amplia y abarca todos los ámbitos de la sociedad: situación de salud, discapacitados, infancia, situaciones familiares que se modifican de repente y los miembros no saben cómo abordarlo, etc. Es la profesión que mejor encaja con mi forma de ser.

2.¿Qué labor desempeñáis en los hospitales?

El trabajador social es un profesional de la acción social que se ocupa de fomentar el bienestar de la persona, así como de prevenir dificultades o carencias sociales de las personas, familias o un grupo de individuos desfavorecidos. Trabajo Social abarca muchos ámbitos, y más en una sociedad tan cambiante como la actual en la que ante una situación repentina, como un cáncer o un ictus en un miembro de la familia, hace que deba reestructurarse la situación de forma urgente. Se trata de gestionar los recursos sociales existentes, así como las ayudas técnicas que se proporcionan. Ayudar a elegir el contexto más adecuado también es fundamental. Ante una situación tan variable como una enfermedad, es muy común que la persona que lo padece crea que lo conveniente es solicitar una cosa en concreto, que nada tiene que ver con lo que desea la familia y en ocasiones lo que nosotros, como profesionales, vemos que sea lo más adecuado. Es fundamental tener en cuenta los factores psicosociales que inciden en el proceso de salud y enfermedad, así como el tratamiento de problemas surgidos, para conseguir el bienestar del paciente, que es el objetivo final.

3.¿Cuáles son las gestiones más frecuentes en tu día a día?

Entre mis tareas diarias destacan la intervención individual o de los miembros de la familia a la hora de seleccionar un recurso social adecuado, así como intentar abordar de forma natural la situación sanitaria repentina en la que se encuentran; dar soporte e información en la gestión de servicios sanitarios en cuanto a planificación de prestaciones (prótesis, material ortopédico, ayudas para lentes, sillas de ruedas), acceso y utilización de los mismos; seguimiento, orientación y apoyo a la familia y al paciente, así como del funcionamiento del recurso social del que se beneficia, y abordar la proyección de futuras necesidades, planteándoselo al paciente y familiar. También potenciar los recursos personales del paciente y de sus familias, y fomentar la autorresponsabilidad para abordar el problema actual en el que se encuentran; asimismo, se realiza una función educativa, con el fin de que aprendan y conozcan los recursos y asociaciones de su zona, vinculadas a la enfermedad de la que se trate en cada uno de los casos; y realizar las gestiones adecuadas y promover la organización de eventos en los que se puedan implicar, con el fin de normalizar la situación que atraviesan y aprender a convivir con la misma en el día a día.

“El trabajo coordinado y multidisciplinar es fundamental para un diagnóstico social adecuado y abordar correctamente las necesidades del paciente. Conseguir su bienestar es nuestro objetivo final”

ENTREVISTA a ANA VILLALVILLA MARTÍNEZ, TRABAJADORA SOCIAL DEL HOSPITAL RECOLETAS DE CUENCA

4.¿Cuál es el procedimiento para que los pacientes contacten con vosotros?

El modo de entrada es variado. Hay pacientes que preguntan en el servicio de Admisión del hospital, y en otras ocasiones es el propio facultativo quien les orienta y aconseja que se dirijan a la Unidad de Trabajo Social. Los Servicios Sociales básicos del ayuntamiento son fundamentales, ya que ahí llegan la mayor parte de solicitudes, y tener una coordinación adecuada con ellos es primordial. De igual modo, es fundamental estar en contacto con los trabajadores sociales del hospital público y de los centros de salud. Las compañías médicas, en ocasiones, contactan directamente explicando el caso del paciente en concreto y proporcionan la primera toma de contacto para poder trabajar con la familia.

5.¿Con qué perfil de pacientes trabajáis?

Mayoritariamente se trata de personas mayores que, ante un deterioro en sus habilidades, se ven abocados a solicitar un recurso social. Antes de ello, se trabaja para la adaptación del domicilio a las nuevas necesidades del miembro de la familia, así como de su entorno para que se vean cubiertas.

Los pacientes que desean recuperarse tras una operación o una larga enfermedad y desean o es necesario un tratamiento más especializado, también son demandantes de recursos sanitarios.

6.¿Trabajáis coordinadamente con otros profesionales /departamentos del hospital?

Sería imposible trabajar de forma correcta si no se cuenta con un equipo multidisciplinar. La labor del facultativo, del equipo de enfermería, así como de auxiliares, es fundamental para poder llevar a cabo un correcto diagnóstico social, y por tanto, abordar de forma correcta las necesidades del paciente.

Tener en cuenta las valoraciones e información de otros profesionales en sus ámbitos es fundamental, puesto que nosotros desconocemos si son enfermos crónicos, si se padece alguna enfermedad mental, problemas de adicción, si reciben visitas durante las 24h de sus familiares, si tienen una red de apoyo real o no, etc. Toda esta información es posible adquirirla por los profesionales que trabajan en el hospital.

“Aunque en muchas ocasiones es un trabajo muy duro por los distintos casos con los que te encuentras, a la vez es muy gratificante porque has podido ayudar a quien lo necesitaba”

ENTREVISTA a BEATRIZ BERNAL FUENTES, TRABAJADORA SOCIAL DEL HOSPITAL RECOLETAS CAMPO GRANDE

Beatriz es Diplomada en Trabajo Social por la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Salamanca; posee el título de Monitora Ocupacional y varios cursos de formación, enfocados principalmente al ámbito gerontológico y sanitario (los principales campos donde ha desarrollado su carrera). Entre sus cualidades destaca su facilidad para empatizar con el paciente e implicarse en su historia.

1. ¿Por qué decidiste ser trabajadora social?

Lo que más me atrajo de esta profesión fue poder trabajar en contacto directo con la gente, en este caso, personas que demandan algún tipo de recurso o ayuda y que, a pesar de que en muchas ocasiones es un trabajo muy duro por los distintos casos con los que te encuentras en el día a día, a la vez es muy gratificante porque has podido ayudar a quien lo necesitaba. Para mí, personalmente, es un trabajo muy reconfortante.

2. ¿Qué labor desempeñáis en los hospitales?

Mi labor está dirigida, principalmente, al paciente del Instituto Oncológico del Hospital Recoletas Campo Grande, colectivo que demanda gran necesidad de apoyo e información, ya que existen numerosas opciones que pueden suponer una mejora en el día a día de los pacientes y sus familiares y que, muchas veces, por desconocimiento, pasan inadvertidas. Mi función consiste en poner a su alcance una serie de opciones para que puedan disponer de ellas en función de sus necesidades concretas con el fin de mejorar su calidad de vida. Para ello, el Hospital trabaja estrechamente con la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), a través de la cual podemos informarles sobre los servicios que ésta ofrece: atención psicológica a pacientes y familiares sobre las diferentes etapas de la enfermedad, terapias individuales y grupales, etc…; atención social, información y asesoramiento sobre gestión de prestaciones y ayudas, préstamo de material ortoprotésico, banco de pelucas, cursos formativos…, así como orientarles sobre otras cuestiones que el paciente pueda necesitar o, incluso, derivarle según proceda a otros servicios u organismos. También ofrecen orientación sanitaria, talleres de prevención de linfedema, programas de deshabituación tabáquica, etc…Y por último, voluntariado con pacientes, tanto hospitalario, como a domicilio, en unidades de cuidados paliativos, en pisos de acogida, etc…

En algunas ocasiones, también me derivan pacientes desde planta y/o urgencias que demandan algún tipo de ayuda o información a los que siempre es un placer ayudar igualmente.

3. ¿Cuáles son las gestiones más frecuentes en tu día a día?

Mi día a día es muy variable, nada monótono: suelo llamar a pacientes nuevos para presentarme, a algunos los cito para conocerlos personalmente y entregarle documentación o cojín corazón, por ejemplo, a otros, aprovechando que tienen consulta o tratamiento, voy a verlos; visito a los ingresados en planta, ayudo a los pacientes que lo requieran a gestionar ayudas, contacto con compañías aseguradoras para aclarar dudas o solicitar ambulancias, sillas de ruedas, les doy información sobre residencias, centros de día, empresas de ayuda a domicilio, hablo con las trabajadoras sociales de la AECC para saber la disponibilidad de sus recursos y realizar las gestiones necesarias para acceder a los mismos. También contacto con otros profesionales de servicios públicos, como trabajadores sociales de CEAS u hospitales públicos, profesionales de PROCOMAR, hablo con los oncólogos para que me redacten algún informe médico que necesite, organizo talleres, redacto historias sociales y memorias de actividad, etc…

4. ¿Cuál es el procedimiento para que los pacientes contacten con vosotros?

Lo habitual es que yo me ponga en contacto con los pacientes nuevos o sus familiares por vía telefónica para presentarme e intentar detectar si demandan algún tipo de ayuda: conocer si la enfermedad les ha generado alguna necesidad a nivel económico, laboral o social, saber si su nivel de malestar emocional afecta a su día a día, si necesitan ayuda para hacer frente a estas situaciones, detectar si cuentan con el apoyo de familiares o amigos, etc… En resumen, realizar una especie de triaje para ofrecerles el recurso necesario. Otras veces son los profesionales sanitarios (médicos, enfermeras, auxiliares de enfermería, administrativos) los que me comentan que han detectado que algún paciente demanda algún tipo de ayuda y me pongo en contacto con ellos o bien es el propio paciente o su familiar el que me llama directamente al hospital.

5. ¿Con qué perfil de pacientes trabajáis?

La mayoría son pacientes oncológicos de mediana edad con necesidad de apoyo psicológico, o bien, demandantes de transporte o alojamiento para poder venir a los tratamientos.

6. ¿Trabajáis coordinadamente con otros profesionales/departamentos del hospital?

En mi día a día estoy en contacto permanente con la supervisora de Oncología, auxiliares de Enfermería, oncólogos, técnicos, administrativos, con la responsable de Atención al Paciente, responsable de archivo, etc…a los que aprovecho para agradecer toda la ayuda e información que me prestan.