JUS Abril 2015
CR/SIS Editorial Mercedes Mayol Fotografía: Hernán Piñera
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JUS Abril 2015
“El hombre se descubre cuando se mide contra un obstáculo.” Antoine de Saint-Exupery Crisis, crisis y más crisis. Vivimos y sobrevivimos en un mundo en continua crisis. De índole moral, económica, existencial, literaria, artística. Las crisis, como dicen los chinos, generan en la psique humana dos palabras: peligro y oportunidad; miedo y rebeldía. Pueden sacar lo mejor y lo peor de nosotros. Un ejemplo es lo sucedido al término de la Primera Guerra Mundial, periodo en el cual la intelectualidad europea sintió la imperiosa necesidad de fijar nuevos conceptos para la convivencia, por lo que se fue construyendo una identidad que tomó como uno de sus principales pilares al pensamiento de Nietzsche. También destaca la publicación del libro La decadencia de Occidente de Oswald Spengler. Muchos fueron los escritores que se aferraron a las ideas de reconstrucción a partir de la ruptura: Hesse, Proust, Mann, Eliot, Pirandello, Kafka, entre otros, tejieron desde sus obras publicadas entre 1920 y 1930 un ambiente desolado del cual nacerían las bases de ese nuevo mundo, en medio de una realidad
de incertidumbre económica y moral que, de no haberse replanteado, hubiéramos terminado matándonos unos a otros (un momento… no hemos modificado esto aún, ¿verdad?). Otro ejemplo válido es la crisis violenta que padeció Victor Frankl, quien en 1942 fue, junto a su esposa y sus padres, deportado a un campo de concentración. Sus familiares fueron asesinados, sin embargo Frankl se ocupó, en medio del dolor, a reconfortar a los prisioneros como él para prevenir los suicidios. Frankl fue liberado en 1945, luego de tres años en el infierno, terror que fue la base para escribir el maravilloso libro El hombre en busca de sentido, obra que resume más o menos este pensamiento: incluso en las condiciones más extremas de deshumanización y sufrimiento el hombre puede encontrar una razón para vivir basada en su dimensión espiritual, y en esto mismo se apoyó posteriormente para confirmar y desarrollar la Logoterapia, considerada como una de las mejores escuelas de psicoterapia del mundo.
Las crisis generan cambios, eso es un hecho. Suelo decirles a mis hijos “sin crisis no hay crecimiento”; sin crisis no buscaríamos salidas, no existirían los héroes; sin crisis no sobreviviríamos porque la mediocridad acecha a la espera de devorarnos. Podría seguir y seguir dando ejemplos sobre la modificación, no sólo mental y física sino espiritual que produce en los humanos una crisis, desde el escritor aterrado frente a una página en blanco -en medio de una crisis de creatividad-, hasta recurrir incluso a los mitos griegos en los cuales abundan estos casos. Por eso, en este número de Jus, revista digital, los invitamos a leer estos escritos (Ensayos, narrativa, poesía y opinión), sobre las visiónes de este tema que nos mantiene en vilo desde que el hombre es hombre… si no, pregúntenle a Adán y Eva. t
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JUS Abril 2015 JUS es una publicación mensual de JUS, Libreros y Editores, S.A. de C.V., especializada en asuntos de conocimiento literario. Conforma una tribuna para el pensamiento en general. Nuestro objetivo principal es generar conversaciones, por lo que el material que publicamos es representativo de múltiples sectores de opinión. La proyección de nuestra revista es hacia los lectores hispanohablantes y hacia una nueva experiencia mas allá del libro y de nuestros libros. JUS es una revista basada en una temática especialmente escogida por nuestro equipo de redacción, donde desarrollamos una visión crítica, apoyándonos en las opiniones y letras de escritores y cronistas contemporáneos. En ella encontrarás cada mes un motivo más para sumergirte no sólo en la literatura, sino en todas las artes. JUS es una revista con entrevistas, reportajes, artículos de información, opinión, análisis y testimonios sobre realidades y personalidades de actualidad.
DIRECTORIO DIRECTOR EDITORIAL Bernardo Domínguez JEFE DE REDACCIÓN Mercedes Mayol REDACCIÓN Diabolgrot Valentina Sanjuan (Asistente de redacción) Aarón Cervantes (Redactor) Nuria Bartrina (Community manager) DISEÑO Victoria Aguiar (Diseño y visuales) Mario Patronelli (Webmaster) INFORMACIÓN LEGAL. JUS
REVISTA
DIGITAL,
Año
VI,
Nueva
Época
–No.
22–
Abril
de
2015.
JUS REVISTA DIGITAL, es una publicación mensual editada por JUS, LIBREROS Y EDITORES, S.A. DE C.V., calle Donceles # 66, Colonia Centro, Delegación Cuauhtémoc, C.P. 06010, Tel. (55) 1203-3770, http://jus.com.mx/revista
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Editor
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Mercedes
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México - Barcelona - Buenos Aires 4
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SUMARIO OPINIÓN 10 RESISTENCIA Y RESILIENCIA EN LA OBRA DE KÄTHE KOLLWITZ Por MARIA VICTORIA FABRE
14 EL VERDADERO REFLEJO Por JOSÉ ANTONIO OLMEDO LÓPEZ-AMOR
16 ¿Y QUÉ HARÍAMOS SIN CRISIS? Por RAFAEL JIMÉNEZ CATAÑO
TERCER ESTANTE 20 DIETA LITERARIA Por REDACCIÓN JUS
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REFUGIO POÉTICO 24 UN HOY CRÍTICO Por SUSANNA TISLER
INTERVALO NARRATIVO 26 RELATOS DEL PRESENTE-FUTURO EN ESPAÑA Por JOAN CARLES GUISADO
30 LA CRISIS DE JAVIER Por MARTA MAÑES
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34 VENECIA A MEDIDA Por MARTA KAPUSTIN
38 FICCIÓN A LA MEXICANA II Por FILEMÓN ZACARÍAS GARCÍA
42 CRISIS CREATIVA Por SINHUÉ MENDIETA
44 MINÚSCULA Por GABRIELA FONSECA
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Los textos de la presente edición pueden verse junto al resto de las colaboraciones en nuestra página web:
www.jus.com.mx/revista o en nuestro blog:
www.jus.com.mx/colabora Los colaboradores seleccionados para la edición digital de la revista del mes de Abril de 2015 son:
Maria Victoria Fabre José Antonio Olmedo López-Amor Rafael Jiménez Cataño Susanna Tisler Joan Carles Guisado Marta Mañes Marta Kapustin Filemón Zacarías García Sinhué Mendieta Gabriela Fonseca
¡¡¡Gracias siempre!!!
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OPINIÓN
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Resistencia y resiliencia en la obra de Käthe Kollwitz
Maria Victoria Fabre Fotografía: Andreas Levers
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La palabra resiliencia proviene del
conocer de cerca; viviendo en uno
su fallecido hijo Peter, plasma la trage-
latín, remite al término resilio que
de los más pobres barrios de Berlín,
dia a través de la representación de
significa volver atrás, volver de un salto,
tomó de allí las temáticas iniciales
dos padres desolados ante esa terrible
resaltar, rebotar. El término tomado
para su obra. Todo su trabajo proyecta
pérdida.
por las ciencias sociales se utiliza al
una vivencia personal, marcada por
describir la capacidad que poseen
el dolor al perder a uno de sus hijos,
En 1936 la Gestapo la arrestó junto a
algunas personas para sobreponerse
Peter, y más tarde a su nieto en el
su esposo y, apremiados por la ame-
a la adversidad, dar un paso hacia
frente de batalla. Pero este registro
naza de enviarlos a un campo de
adelante y a pesar de vivir situaciones
de algo íntimo y personal se redimen-
concentración, llegaron a pensar en
verdaderamente
un
siona en la referencia a su tiempo y
suicidarse. Finalmente se les permitió
desarrollo sano, superarse e inclusive
críticas,
lograr
las opciones políticas con las que se
salir de Berlín. En 1840 murió su
ayudar a los demás.
involucra.
esposo y perdió a su nieto en combate. Con su casa arrasada, desaparecieron
La experiencia de Käthe Kollwitz es
Peter, su hijo menor, fue llamado al
numerosas obras e importantes docu-
un ejemplo de ello. Nacida en Ale-
ejército al estallar la Primera Guerra
mentos. Käthe Kollwitz murió el 22
mania en 1867 su vida atraviesa dos
Mundial, falleciendo en combate en
de abril de 1945, sólo unos días
guerras
un
Flandes el 23 de octubre de 1914.
antes del suicidio de Hitler y el final
legado donde el arte es compromiso
Esta tragedia, junto con las convic-
de
social
ciones pacifistas compartidas con su
amparada en la protección del Prín-
elaboración y resistencia frente a lo
esposo,
cipe Ernesto Enrique de Sajonia.
traumático de su tiempo.
activamente en contra del conflicto
mundiales, y
constituye
dejándonos una
forma
de
armado.
la
manifestarse
El mensaje de Käthe Kollwitz sigue vigente: “Guardad los niños” expre-
grabados, escultura, litografías, esca-
más la guerra” de 1924 fue el lema
sado en palabras y en imágenes.
yolas, xilografías o carteles, denuncia
de
Un mensaje que aún no alcanza.
el
horror
ante
la
violencia
y
las
concentraciones
de
con
Mundial,
la
lenguajes:
cartel
Guerra
leyenda Nie Wieder Krieg, “Nunca
distintos
famoso
a
Segunda
dibujos,
Con
El
llevaron
la
masas,
el
que cada año a principios de agosto
sufrimiento que trae la guerra en una
celebraron las organizaciones pacifis-
En
1968
de las más desgarradoras muestras
tas
un
poema
del expresionismo alemán.
notable conocimiento de los medios de
con él recorre su obra señalando
impresión y del grabado.
la
y
donde
además
muestra
su
Su matrimonio con el Dr. Karl Köllwitz,
fuerte
rosos
Muriel
Rukeyser
para
marca
Käthe
escribe Kollwitz,
proyectiva.
autorretratos
revelan
Numesu
comprometido militante socialista, la
En 1932 realizó una primera escultura
carácter, su extraordinaria habilidad
vinculó con el registro de las mise-
monumental, Monumento a los muertos
técnica
rables condiciones de vida de la
en el Cementerio de Essen, Bélgica;
al drama de su tiempo.
clase obrera, una realidad que pudo
esta obra realizada en homenaje a
y
la
constante
referencia
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V Autorretrato.
Boca mirándote directamente Ojos mirándote directamente desde adentro mitad luz mitad sombra mujer, fuerte, alemana, joven artista fluye en ancha boca sensual que medita mirándote rectamente ojos ensombrecidos con valiente mano mirándote profundamente fluye en valiente boca herida dolidos ojos encapuchados viva, alemana, en su primera guerra fluye en la cara gastada una madeja de línea que cavila, fluye en madres entre tumbas de guerra encorvadas sobre la muerte cara al padre empecinado sobre el campo
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fluye en las huellas de su conocimiento “Nie Wieder Krieg” repetido en los ojos Fluye en “La semilla de maíz no debe ser molida” y la mejilla surcada labios trazados finos el profundo trazo de la pena cara de nuestro tiempo Fluye en Pietá, madre, y entre sus rodillas la vida como su hijo a la muerte derramándose desde el cielo de una guerra mas fluye en la cara casi borrada mano sobre la boca para siempre mano sobre su ojo ahora el gran ojo cerrado.
Muriel Rukeyser, traducción de Diana Bellesi.t
Bibliografía. Bellesi, Diana. Selección, traducción y notas “Seis Poetas Norteamericanas” Contesta. Baila mi danza. Ediciones Último Reino. Núñez Rodríguez, Manuel. La mujer-artista y sus circunstancias: Käthe Kollwitz. Universidad de Santiago de Compostela SEMATA, Ciencias Sociais e Humanidades, ISSN 1137-9669, 2008, vol. 20: 389-407 Porqueres, Bea. Historia, antibelicismo y protesta social en la obra de Käthe Kollwitz. Texto de la conferencia pronunciada por la autora en las V Jornadas de Pensamiento Crítico. Madrid, diciembre de 2003. Página Abierta, 145, febrero de 2004.
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El verdadero reflejo José Antonio Olmedo López-Amor
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Dicen que lo mejor de «tocar fondo»
seres resilientes por naturaleza, algo
Tocar fondo siempre es algo doloroso,
es que puedes hacer pie para subir.
que siempre ha favorecido nuestra
pero también una escuela. Las cica-
Cuando todo va bien, los amigos flo-
supervivencia como individuos, y como
trices endurecen la piel que dañan,
recen, la gente se te acerca y quiere
especie.
las experiencias curten, el dolor nos
compartir tu éxito contigo. Las «vacas
invita a reinventarnos.
gordas», esos tiempos de bonanza
Es preferible soportar el trance de
o buena suerte en que creemos que
los tiempos convulsos y conocerse a
La actualidad es un escenario perfecto
somos felices, envuelven nuestra vida
sí mismo, o por lo menos, conocerse
para poner en práctica nuestras dotes
bajo una frágil capa de optimismo
más, además de desenmascarar a
deconstructoras,
que enmascara a nuestro entorno pero
los supuestos amigos, supuestos fami-
de
también a los que nos rodean.
liares o personas de confianza que me-
realidad líquida de la que hablaba
nuestra
improvisación
y
capacidad
creatividad,
la
rodean a nuestro alrededor, que vivir
Chomsky, es un medio maleable, plás-
«crisis»
siempre en el interior de una burbuja
tico
trae mal fario, es algo que tratan de
de apariencia estable que en verdad
adaptación dinámica.
evitar pronunciar, es como la palabra
resulta ser una mentira.
Para
muchos,
la
palaba
«bomba» en un avión; sin embargo,
y
flexible
que
requiere
una
Una crisis, en cualquiera de sus grados,
qué duda cabe, es en las situacio-
Es muy probable que después de
siempre debería suponer la antesala
nes límite cuando somos conscientes
soportar
económica,
de un cambio, el prolegómeno a
de cuánto podemos aguantar, hasta
afrontemos
renovadas
una mudanza necesaria que debería
dónde podemos llegar, y lo más impor-
el
tante, sabemos quiénes han estado
nuestras
siempre a nuestro lado y quienes nunca
raremos mucho más cuanto tenemos,
esta crisis de valores mundial que
han estado y jamás lo estarán.
seremos
más
sufrimos? Quizá a un escenario em-
nuestra
peorado por la procacidad de los
una
futuro,
eficientes,
crisis
con y
fuerzas
no
sólo
energías, menos y
renovaremos
sino
que
valo-
derrochadores,
potenciaremos
trascendernos,
desequilibrarnos
equilibrarnos.
¿Dónde
austeridad, nuestra sensibilidad como
mandatarios
que
personas
también a un escalón más —en el
dañino,
puede
comprensivas
y
solidarias
en
la
quizá
tratarse de un proceso necesario en
con los demás, buscaremos nuevos
sentido
el trayecto evolutivo de cualquier ser
depositarios de nuestra confianza.
evolutiva de nuestra conciencia; por lo
vivo. La duda, la incertidumbre, el
positivo—
pero
para llevará
Entrar en crisis, a pesar de ser algo consideramos
políticos,
nos
escalera
menos, esa debería ser la aspiración.
bloqueo, sentirse atrapado y desbor-
Una crisis matrimonial puede ense-
dado por las circunstancias, activa
ñarnos el camino de la autocrítica,
Tropezaremos
en nuestra mente resortes que desco-
el camino de la ternura, de la refle-
durante nuestra vida, pero sólo el
nocíamos poseer, y es que el ser
xión, del perdón. Hay típicas frases
espejo del sufrimiento nos devolverá
humano atesora en sus genes un im-
a este efecto que, aun convertidas
un
perioso
lo
en clichés, no dejan de ser de lo más
El verdadero reflejo del dolor nos hace
empuja a la épica, a la gesta, a
verdaderas, como: “cuando la pobreza
más humanos, más íntegros, menos
crecerse ante la adversidad, hechos
entra por la puerta, el amor salta
vulnerables. t
que, misteriosamente, le hacen olvidar
por la ventana” o “no sabemos lo
su condición frágil y mortal. Somos
que tenemos hasta que lo perdemos”.
afán
superviviente
que
reflejo
con
muchos
verdaderamente
espejos
cierto.
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¿Y qué haríamos sin crisis?
Rafael Jiménez Cataño Imagen: www.flickr.com/glaf
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No me refiero a la crisis actual (cada
y aún le quedaba salir del agujero,
caciones difícilmente objetables que
quien la que tenga encima) sino a las
cosa que se resolverá de manera
parecen haber caído en el mundo
crisis como parte de la vida humana,
inesperada.
equivocado. “Es mi derecho vestirme
personal o colectiva. Las crisis trazan
como quiera y nadie tiene el derecho
los perfiles que definen una biografía
Don Quijote expone la misión del
de tocarme ni mirarme ni pensar mal
o la historia de un pueblo. En una
caballero andante con tan sublimes
de mí”. Tampoco tiene nadie el derecho
de sus cartas de Copilco, Guillermo
tintas que siente la necesidad de
de molestar ni secuestrar niños, pero
Sheridan se imaginaba una oficina
distinguirla
monástica:
por mucho derecho que éstos tengan
de traducción de títulos de películas.
“No quiero yo decir, ni me pasa por
de jugar en la calle es razonable aca-
Ignoro si alguna vez se ha traducido
pensamiento, que es tan buen estado
tar la sugerencia de no dejarlos solos.
Hamlet como “Un príncipe en apuros”
el de caballero andante como el del
o es pura fantasía, pero Sheridan
encerrado religioso: sólo quiero inferir,
El Quijote y casi cualquier novela
observa que “este concepto puede
por lo que yo padezco, que sin duda
nos recuerdan que la vida humana
abarcarlo materialmente todo porque
es más trabajoso y más aporreado,
se desarrolla en un espacio de libre
en realidad es una versión de lo que
y más hambriento y sediento, misera-
albedrío y de contingencia. El arte
en teoría literaria se llama la trama.
ble, roto y piojoso” (Q 1,13). Aquí
de la conversación es también una
Como las películas (a menos que sean
se aplica lo que en teoría de la
escuela de vida. Si es pura lógica,
francesas) suelen contener una situación
argumentación se llama tópico del
pierde sentido. Un diálogo de Sancho
dramática que debe resolverse, lo de
esfuerzo, que don Quijote formulará ex-
en casa de los condes es un buen
los apuros funciona muy bien. También
presamente en otro lugar: “es razón
ejemplo: “—Recibió tanto enojo la reina
al espectador le funciona: “apuros
averiguada
más
doña Maguncia, madre de la infanta
garantiza
cuesta se estima y debe de estimar en
Antonomasia, que dentro de tres días
más” (Q 1,38). Este argumento no
la enterramos. —Debió de morir, sin
que
hay
trama”
(Vuelta,
n.177, 1991).
de
que
la
vida
aquello
que
siempre es válido. A nadie le pagan
duda —dijo Sancho. —¡Claro está! —
La trama exige crisis. En el léxico de
más por desempeñar un trabajo sin
respondió Trifaldín—, que en Candaya
la narratología se suelen usar otros
contar con experiencia, aunque ser
no se entierran las personas vivas, sino
términos, como nudo, complicación,
un novato implique mayor dificultad.
las muertas” (Q 2,39). Luego Sancho
momento que será seguido de un
Que el principio se formule explíci-
aclara por qué decía eso, que no
desenlace. El Quijote, como toda na-
tamente no significa que la novela se
era pura redundancia. Él tomaba en
rración,
ciña a él. La vida entera del Quijote
cuenta el posible error de enterrar a
no está regida por este principio.
una persona viva creyéndola muerta,
tiene
sus
tensiones
y
sus
resoluciones, a lo cual se añade la
y cuestionaba que fuera razonable
particularidad de que sus protagonisdos
Ni por éste ni, en general, por lógicas
morir de un coraje en lugar de simple-
por tres. “Quedó molido Sancho, es-
de paridad de entradas y salidas,
mente desmayarse. Es este tipo de
pantado don Quijote, aporreado el
de recursos y exigencias. Cada vez
detalles lo que suele dar vida a una
rucio y no muy católico Rocinante”
más
conversación.
(Q 2,58). Más allá del idealismo de
vivir a golpe de derechos y deberes,
acometer batallas perdidas, la novela
nos
una
El diálogo no puede tener como meta
ilumina
no
sociedad en la que todo cuadre. Si
suprema ser lógico. El filósofo Fabrice
tas
sean
terminan
apaleados
nuestras
quijotescas.
vidas
cada
aunque
Sancho,
todo
acostumbrados parece
razonable
a
pretender desear
lo
no nos sentimos nunca satisfechos, no
Hadjadj afirmaba en una entrevista
contrario de ese idealismo, al caer
es porque el acercamiento a la meta
de 2011 que “la moral es como la
con su burro en un agujero, “tentose
sea asintótico y seamos cada vez más
gramática: es importante tenerla para
todo el cuerpo y recogió el aliento, por
exigentes. De acercamiento hay poco,
hablar, pero no se habla para hacer
ver si estaba sano o agujereado por
por un desequilibrio congénito: los de-
gramática”. Esta analogía se puede
alguna parte; y viéndose bueno, ente-
rechos son sobre todos los míos, y los
extender al diálogo: la moral sirve
ro y católico de salud, no se hartaba
deberes, sobre todo los de los demás.
para vivir y lo que nos interesa es la
de dar gracias a Dios Nuestro Señor
Ya el Ippolit de El idiota empezaba
vida; la lógica sirve para dialogar,
de la merced que le había hecho” (Q
casi todas sus protestas con un “no
pero no conversamos para ejercer
2,55). La merced fue seguir con vida
tenéis ningún derecho”. Hay reinvindi-
“actos lógicos”. Cuando uno aprende
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OPINIÓN
a debatir, a dialogar, a escuchar para
Los nudos narrativos que requieren de
entiende por memoria); o bien “nunca
entender y luego responder a lo que
un desenlace son esenciales también en
me he muerto en todos los días de mi
entendió, compartir lo que uno piensa
el mundo de la música, en la forma de
vida” (Q 2,55); o una obviedad que
y tal vez cambiar postura o estrategia,
tensiones armónicas que se resuelven.
esconde una verdad que habríamos de
adquiere una visión de la realidad
No hay disonancia de la música con-
recordar con mayor frecuencia: “con
que no se puede resumir en el simplis-
temporánea que no se encuentre en
la vida muchas cosas se remedian” (Q
mo de la alternativa “de acuerdo /
Bach, sólo que él les da otra función:
2,39).
contrario”.
son estridencias que piden un reposo. La tensión se puede prolongar y radica-
Libre albedrío significa que no estamos
Algo parecido se puede decir de la in-
lizar, pero en vistas a una resolución.
determinados. Significa también que
teracción entre músicos cuando tocan
Hay dos obras del siglo XX que
no basta saber para vivir según lo que
con una cierta igualdad de iniciativa.
admiro por la capacidad de mantener
se sabe. De los que se han titulado en
Me parece iluminadora la película A
una tensión por un largo tiempo sin
Salamanca, Sancho dice que “los tales
Late Quartet (Yaron Zilberman, 2012),
resolverla, convirtiendo ese lapso en
no pueden mentir, si no es cuando se les
en la que se conjugan los perfiles
una especie de tiempo detenido, una
antoja o les viene muy a cuento” (2,33).
propios de la interacción musical y
promesa de eternidad. En el Concierto
Las
los de la interacción humana. “Una
para órgano, timbales y orquesta de
muchos amores obstaculizados que él
frágil armonía” se tradujo en algunos
cuerdas de Francis Poulenc (1938), en
defiende, lo cual no lo lleva a basar
idiomas el título, que expresaba así
el segundo movimiento hay un pasaje
un matrimonio en la pura atracción (Q
la crisis musical en que caía un cuar-
que por casi tres minutos se convierte
2,18). Una hegemonía de la belleza en
teto de fama internacional por el
en un océano de serenidad1. Algo pare-
la construcción de la propia vida haría
diagnóstico de Parkinson que recibía
cido percibo en el Octeto Malandro de
imposible la vida social, como advierte la
el violonchelista, el mayor de los cuatro
Arturo Márquez (1996), esa tensión sos-
pastora Marcela: “no todas hermosuras
y fundador del cuarteto, autoridad
tenida que la actual condición humana
enamoran: que algunas alegran la vista
moral indiscutida, y la crisis humana
no puede prolongar indefinidamente.
y no rinden la voluntad; que si todas
2
debida a conflictos personales entre
aventuras
del
Quijote
incluyen
las bellezas enamorasen y rindiesen,
ellos. Al primer violín, que da la pauta
Parte esencial de esta condición es,
sería un andar las voluntades confusas
interpretativa y no suelta un modo de
decíamos, el libre albedrío que se
y descaminadas, sin saber en cuál
tocar muy experimentado, que carac-
mueve en un mundo contingente. Contin-
habían de parar, porque, siendo infinitos
teriza al cuarteto pero al mismo tiempo
gencia es lo contrario de necesidad.
los sujetos hermosos, infinitos habían
lo petrifica, el segundo le reclama una
Los ámbitos de necesidad de la vida
de ser los deseos. Y, según yo he oído
mayor espontaneidad. La doble crisis
ordinaria son limitados, los menos
decir, el verdadero amor no se divide,
(que comprende la crisis del matri-
discutibles están en relaciones concep-
y ha de ser voluntario, y no forzoso” (Q
monio entre el segundo violín y la viola)
tuales. Y no obstante esa escasez
1,14).
está a punto de acabar con el cuarteto
existe la obviedad, que nos parece
y con la amistad, cuando el desenlace
ridículo o poco razonable formular, por
Es curioso que, con todos los encan-
conjuga motivos humanos y motivos
la misma razón por la que decíamos
tadores que don Quijote siente que lo
musicales. El concierto jubilar con el
que la lógica no es la meta de la
asedian,
que la película se abre y se cierra tiene
conversación. De ahí la comicidad de
sobre la libertad no tienen poder:
lugar en una nueva sensibilidad interpre-
Sancho cuando dice que “él tenía tan
“no hay hechizos en el mundo que pue-
tativa, conquistada con la cooperación
gran memoria, que a no olvidársele todo
dan mover y forzar la voluntad, como
de cada uno, incluida alguna renuncia,
aquello de que quería acordarse, no
algunos simples piensan, que es libre
pequeña o grande, por parte de cada
hubiera tal memoria en toda la ínsula”
nuestro albedrío y no hay yerba ni
uno.
(Q 2,45; aquí hace falta ver qué se
encanto que le fuerce” (Q 1,22).
1
nítidamente
que
En la versión de Simon Preston y Seiji Ozawa, 2:45-5:38. 2
18
afirme
En la versión de Onix, 2:54-5:38.
JUS Abril 2015
Sin pararnos en la cita obligada de
Malala Youzafsai, en su notable libro
ellas. Parece una historia inverosímil
El tercer hombre –las obras de Miguel
autobiográfico, habla de la vida como
y se dice que mi recuperación ha sido
Ángel y Leonardo que nacieron en
lucha por sobrevivir, pero la presencia
milagrosa. A mi amiga Shazia, que
medio de una sociedad agitada por
del misterio en su narración la lleva
recibió dos impactos de bala, se le
guerras y asesinatos, comparadas con
más allá de este minimalismo (que
ha concedido una beca en el Atlantic
las escasas creaciones de Suiza en 500
sería además redundante, si el sentido
College de Gales y también ha venido
años de paz–, pensemos en la sorpresa
de la vida fuera sobrevivir): “Doy las
a estudiar en el Reino Unido, y espero
que nos puede causar la visión de lo
gracias a Alá por el esfuerzo de los
que Kainat también venga. Sé que Dios
que en México se creaba (literatura,
médicos, por mi recuperación y por
impidió que aquello fuera mi tumba.
música, arte, filosofía…) en las primeras
enviarnos a este mundo en el que po-
Para mí esta vida es una segunda vida.
décadas del siglo XX, cuando al mismo
demos luchar por nuestra supervivencia.
La gente rezó a Dios para que me sal-
tiempo las imágenes dominantes son
Algunas personas eligen caminos bue-
vara, y me salvé por una razón: dedicar
las de la Revolución.
nos y otras caminos malos. La bala de
mi vida a ayudar a los demás”.
una persona me alcanzó. Me hinchó En julio de 2004, hablando en Cuer-
el cerebro, me privó del oído y cortó
¿Qué haríamos sin crisis? No diré que
navaca con Javier Sicilia, le quería
el nervio del lado izquierdo de mi cara
no se me ocurre qué haría. Tampoco
mencionar a Harry Potter, en plena
en un segundo. Después de ese se-
diré que lo haría, pues basta ver a los
explosión en ese tiempo. Tanteando cau-
gundo
tamente el terreno, pues mis colegas
rezando
de
personas
que viven peores crisis, cómo hacen
y
médicos
lo que yo podría hacer con una sola
se escandalizaban de que yo lo leye-
competentes que me devolvieron mi
mano y no lo hago. Pienso en todo lo
ra, aludí al milagro de muchachos
cuerpo. Yo era una buena chica. En
que consigue tomar cuerpo en esta
que leían libros, y aprendían a leer
mi corazón sólo había deseado ayudar
situación, que en condiciones de mayor
libros
sorpresa,
a la gente. No me interesaban los
comodidad no habría tenido lugar. t
Javier me replicó: “Deja tú la lectura,
premios ni el dinero. Siempre rogaba
¡el misterio!”. Para él la maravilla
a Dios: ‘Quiero ayudar a las personas,
estribaba en que alguien nos hubiera
ayúdame a hacerlo’. Un talibán dispa-
recordado que tener todo bajo control
ra tres veces a quemarropa a tres niñas
no sólo no es posible: no es siquiera
en un autobús y no mata a ninguna de
gordos.
Para
mi
hubo por
millones mi
vida
deseable.
19
JUS Abril 2015
DIETA LITERARIA
El hombre en busca de sentido (1946) // Viktor Frankl “Una vez que has caído en lo más profundo, tienes dos
por momentos la cordura, es justamente que existe una
opciones: levantarte y reconstruirte, o morir, literalmente”
posibilidad de renacer, de existir, aunque ello implica existir
Esta frase que hace unos días me dijo un buen amigo, viene
de otra manera, ya ni siquiera como tradicionalmente nos
a mi mente con el libro El hombre en busca de sentido,
conocíamos.
TERCER ESTANTE
de Viktor Frankl, el vienés que estuvo tres años cautivo en los campos de concentración nazis. Es completamente
Así es, El hombre en busca de sentido refuerza la tesis del
cierto, tocar fondo es estar en medio de una grave crisis
párrafo anterior. Víktor Frankl tuvo la virtuosa oportunidad
existencial, de las peores, que nos dan cuenta de que todo
de ver en medio de su crisis personal no sólo la ocasión
nuestro alrededor está derruido, que todo ha terminado y
para salir de su tormento psicológico luego de ser liberado
que esa marea de destrucción nos está llevando a nosotros
de los campos de concentración, sino que además tuvo el
mismos, y por tanto, en nosotros está levantarnos, o morir.
suficiente coraje como para transmitir esa enseñanza al resto de la humanidad, de quien él supo a la perfección, está en
Tras una experiencia de esta magnitud, es decir, altamente
constantes crisis.
traumática, como la de Viktor Frankl, quien perdió a toda
20
su familia y además quedó a expensas de la extrema
De esta manera, el principal postulado de Frankl y por
crueldad nazi, no es difícil imaginar el suicidio, la forma
el que se funda la escuela psicoterapéutica llamada
digamos “más fácil” para unos, impensable para otros,
Logoterapia, sostiene que el hombre –con ello se refiere a
dejando fuera los juicios de valor, claro. Pero lo que pocas
todo ser humano- puede construir un sentido de vida, pase
personas nos dicen a quienes de pronto perdemos todo,
lo que pase, suframos lo que suframos, porque el sentido
JUS Abril 2015
Siddhartha (1922) // Herman Hesse Aunque frecuentemente se asocia a Herman Hesse como un autor para que los jóvenes entiendan aspectos filosóficos, no es inapropiado que los adultos de vez en cuando releamos las obras que nos iniciaron en esta indagatoria perenne que implica la vida. Siddartha, escrita por Hesse después de la Primera Guerra Mundial, es la historia de un joven hindú que emprende la búsqueda hacia la sabiduría. Empresa nada fácil, aunque el muchacho haya tenido el respaldo de su pueblo y de su padre, un sabio brahmán. Este libro viene a colación por el tipo de crisis que padece Siddhartha, que es esencialmente de índole espiritual,
Viktor Frankl
pues a pesar de que lleva al pie de la letra los preceptos y enseñanzas del interior por medio de la meditación, se encuentra con que no desea ser la persona que su padre y
no viene del exterior, sino de nuestro interior, de un objetivo
su alrededor espera, o al menos no tiene en ese momento
al que nos encaminemos, lo cual desde luego, hará tanto
tal convicción.
soportables como provechosas las crisis, los episodios de ruptura.
De este modo, Siddhartha se encuentra en medio de una crisis, aunque su exterior parece sereno y sosegado, lo
La frase que el mismo Frankl adoptó de Nietzsche resume
cierto es que su interior le exige constantemente saber
lo anterior: “Quien tiene un ‘porqué’ para vivir, encontrará
quién es él. Una pregunta constante y recurrente en la
casi siempre el ‘cómo’”, y quien aún no tiene o no encuentra
vida.
ese sentido de vida, puede, o bien echarse un clavado en su interior y encontrarlo, o bien, puede perfectamente
Por ello, el joven emprende el viaje en una primera
construirlo.
instancia hacia la sabiduría, pero cuando se da cuenta que no ha aprendido nada que no sea dominar sus sensaciones y templar su carácter, empieza una nueva búsqueda: hacia su Yo. Así, reconoce que a pesar de que la meditación, el ayuno y la reflexión le han ayudado a entender y a compenetrarse con la naturaleza, esto no le explica quién es él, por lo que decide abandonar ese camino para ahora vivir lo que, además de la naturaleza, los placeres y la vida misma le ofrecen y claro, sin dejar de lado su conocimiento espiritual. Se dice que esta obra tiene tintes de la vida de Buda, y que fue escrita por Hesse debido a la inspiración que le valió haber vivido en la India en 1910.
Herman Hesse
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Cartas desde el dolor Emmanuel Mounier
(Jus,
2005)
//
La sociedad en la que vivimos es hedonista a más no
viene a este mundo a ser única y exclusivamente feliz.
poder, intenta por todos los medios anestesiar el posible
Hay episodios críticos y dolorosos, para unos más que
dolor que puedan causarnos desde pequeños hechos
para otros, pero el sufrimiento difícilmente puede ser
rutinarios, hasta crisis severas. Anestesiar el dolor es una
librado por el ser humano. Incluso la felicidad misma
premisa de nuestro contexto. De esto ya se venía dando
sería irreconocible si no existiera el parámetro del dolor
cuenta el filósofo Emmanuel Mounier, pensador francés
para percatarnos cuando aquélla se hace presente. “La
que desde muy joven padeció los embates de la vida,
felicidad no basta para ser felices”, dice Mounier.
muchos de los cuales le permitieron abrir su pensamiento hacia las necesidades del espíritu.
Cartas desde el dolor, de Emmanuel Mounier, es la compilación de cartas que el filósofo enviaba
Una de estas necesidades, nos dice el filósofo, es
principalmente a su esposa Paulette, que versaban tanto
precisamente la del dolor. Contrario a lo que se pregona
de aspectos políticos como del dolor que padeció cuando
y se instruye actualmente, el manejo del dolor es, dice
una encefalitis paralizó a una de sus hijas, Francisca.
Mounier, el elemento que develará nuestra verdadera
Mounier expone el crecimiento y la iluminación que
personalidad: estar frente al dolor dirá quién es quién,
genera el dolor en el ser humano.
el cómo lo toma mostrará la verdadera capacidad física y espiritual que poseemos. La actitud que tenemos hacia
Con lo anterior nos damos cuenta de la práctica
la vida.
constante y evasiva por parte de nuestra sociedad hacia el dolor y, por ende, de la pequeña o precaria
Lo que es una gran verdad, y que nos la han dicho
espiritualidad y entereza de la misma. t
TERCER ESTANTE
muchas doctrinas religiosas y filosóficas, es que nadie
Emmanuel Mounier
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AUTOR PATRICIA DE SOUZA TÍTULO ELLOS DOS NÚM. DE PÁGINAS 128 FORMATO 13,5 X 23 CM ISBN 978-607-412-052-3
“¿Qué sucede cuando el experimento humano lo realiza una mujer consciente de su condición? Cualquiera pensaría que no es una cuestión de género sino el esfuerzo humano por descubrirse, darse un lugar y un sentido en el mundo. Sin embargo, ser mujer es además enfrentar los miedos más arraigados, desnudarse en completa vulnerabilidad, desarticular los mitos, autodefinirse, reescribirse. No es sólo el hecho de redescubrirse, también es necesario describirse como una forma de entenderse. ¿Cuando se termina una relación es para siempre? Ellos dos es la novela del duelo de la relación con O, y de otras relaciones, pero más que nada, de la pérdida de un hombre que es siempre aquel que nunca conoceremos del todo, del que nunca sabremos, como decía Proust, si no es sólo el producto de nuestra imaginación, y son siempre fugitivos, resistentes e indiferentes al desamparo que generan. La protagonista evoca ese pasado y lo hace rito, evocación obsesiva. No es solamente la búsqueda de O sino también la de cualquiera de nosotros: Yo no sabía adónde ir con mi relación con O, que parecía lejos de acabarse y avanzar delante de mí sin que pudiese alcanzarla. Y sin embargo no desesperaba, latía dentro de la propia desesperación formando una misma y sola cosa. Esta novela discurre con un lento dramatismo digno de las mejores novelas contemporáneas. «El estilo doloroso y lúcido de la autora, así como su intencional reconstrucción de un pasado, nos remite al de Marguerite Duras en El amante, pues en ambas obras las autoras contribuyen a crearse un mito, basado en tres elementos principales: deseo, desarraigo, literatura.» Elena Méndez, Escribo sobre libros
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REFUGIO
POÉTICO
Un hoy crítico Susanna Tisler
Hoy experimento una crisis crítica: hoy tengo crisis de mí. Es la metacrisis. No soy yo quien está en dificultad. Yo –persona- soy quien me podría poner en un brete, quien causa un trance a todo aquel que busca la paz de lo invariable, lo inamovible. Los tranquilos, los oxidados, absteneos. Es el apuro, el aprieto, de lo auténtico.
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Hoy decidí, impúdicamente, desnudarme de disfraces y de corrección política, de la educación mala y superflua. Hoy he sacado a la luz el ajuar verdadero, aquel que me vino dado hace mucho… para comenzar a caminar. Hoy no necesito soportarme, hoy no me preocupa ni me preocupo. Hoy vivo la crisis, el cambio, la transformación, que por mi culpa sacude, el mundo que frecuento, hoy. Hoy soy una vez más de verdad. Hoy soy más verdadera que nunca. Hoy os llega por fin la crisis esperada –por mí, claro, no por vosotros¡Viva la crisis! La que nunca tendrá vuelta atrás.
ab
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INTERVALO
NARRATIVO
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Fotografía: Alun McDonald/Oxfam
JUS Abril 2015
Relatos del presente-futuro en España
Joan Carles Guisado El frío empujaba a la niña a enroscarse
La chiquilla estaba en una edad en
dos son los culpables! Mi amor, te has
como un ovillo de lana. Oía caer
donde las niñas de familias “normales”
quitado la vida y eso era lo único que
la lluvia y el ruido de las gotas al
ya empezaban a ir a la escuela. Ella
no podían quitarte. Me dejas sola con
estrellarse con el zinc que techaba la
no había conocido ninguna, su madre
la niña y sin ti, sin el piso, sin dinero
casita, se le hacía ensordecedor. No
le hablaba de que pronto podría ir,
y sin tu amor. ¡Antoniooooooo!
sabía qué hacer, el miedo la para-
pero que primero tenían que estabilizar
lizaba. Pensaba que pronto dejaría
su situación. La pequeña recordaba
Todo se precipitó poco después. Ahora
de llover y al salir la luz de la mañana
su
la niña tenía miedo de que su madre
iría a buscar a su madre. Tenía
agarrar las cosas de la nevera sin
hambre y frío y hacía días que no
ningún impedimento y su padre to-
veía a su progenitora. Ella le había
davía no había muerto.
anterior
hogar:
cuando
podía
también hubiera desaparecido. Ana, la madre, estaba desesperada,
dado la instrucción de que se que-
sin fuerzas para seguir luchando, aver-
dara dentro de la casita de madera.
Los recuerdos del hallazgo de su padre
gonzada por la vida que le estaba
Estaba
dema-
se le hacían recurrentes, no podía
dando a su hija. La hambruna había
siado tiempo para que su madre
inquieta,
le
parecía
evitarlos: la llegada alegre a su casa,
llegado demasiado lejos, muchas per-
la dejara sola. En la casa ya no
esperando
papaíto
sonas estaban en una situación similar,
había nada, hacía tiempo que ya
sentado en el sillón, cuando de pronto
en los campos circundantes a las
no usaban la nevera y el estante
la trunca el grito ensordecedor de su
ciudades había crecido una infinidad
de la cocina donde guardaban los
madre al abrir la puerta. La peque-
de pequeñas chabolas hechas con
alimentos
estaba
la
escurrían
su
de
ña no pudo ver casi nada, sólo
cualquier tipo de desechos. Buscar
alcanzó a ver la sombra que proyec-
entre
que poco a poco encharcaban las
taba el cuerpo de su padre colgado
acomodados se había puesto muy
improvisadas
conglo-
en el salón. Su madre la llevó direc-
peligroso, había mucha competencia
merado. No sabía dónde ir, hacía
tamente a la cocina y le dijo que no
y se llegaba a matar por unos men-
poco
llegado
se moviera. Quiso llorar y no pudo,
drugos de pan y, por si fuera poco,
a ese lugar entre los escasos pinos
estaba con-fundida, pero alcanzó a
la policía de las ciudades encarce-
que
escuchar las palabras de su madre
laba a las personas que rebuscaban
entre gritos y llantos.
en ellas, la mendicidad estaba total-
tiempo quedaban
hilos
paredes que
Dentro
a
agua
casa
vacío.
encontrar
de
de
habían
junto
a
las
naves
industriales. Eran tiempos de penuria y muchas familias se habían refugiado
en
esa
especie
de
las
basuras
de
los
barrios
mente prohibida y el último gobierno
bosque
—¡Antonio¡ ¡Mi amor! Ya te había
de coalición la había tipificado de
convertido en campo de refugiados de
dicho que saldríamos de ésta. Tú no
delito.
la llamada democracia española.
tenías ninguna culpa. ¡Esos desgracia-
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JUS Abril 2015
INTERVALO
NARRATIVO Ana
Todo había cambiado mucho en los
De los medios de comunicación muy
comisaría. La habían detenido rebus-
últimos
poca
cando en unos contenedores de la
electorales partidarias de acabar con
públicos
plaza Mayor. No había encontrado
el sistema nacido de la transición
solamente
nada entre los desperdicios. Estaba
habían alcanzado el cuarenta por
privados, dependientes de las grandes
limpia en el momento de la deten-
ciento de los escaños y el Partido
corporaciones y de las subvenciones
ción. Sabía que la iban a soltar, pero
Popular y el Partido Español (nombre
públicas. También quedaron algunos
la espera se le hacía interminable,
que había adoptado el antiguo PSOE)
medios independientes, pero no pudie-
su hija estaba sola en la casa. La
habían
ron contrarrestar la influencia de los
policía acostumbraba a retener a las
Salvación Nacional. Ambos partidos
medios
personas un mínimo de cinco días
habían llegado a la conclusión de
todos los poderosos. En Europa habían
con el propósito de amedrentar a los
que no se podían subvencionar las
decidido hacer lo mismo, pero con
rebuscadores de comida.
necesidades de toda la población.
los países. Los países del norte que
Los
necesitaran ayudas puntuales de la
A
llevaba
pesar
mendigos,
de
cuatro
la
las
días
lucha
ciudades
en
la
tiempos.
formado
más
pobres
Las
un
se
agrupaciones
gobierno
quedarían
de
al
gente
se
fiaba,
los
desaparecieron sobrevivieron
tradicionales
contra
los
margen de las ayudas. Las escasas
comunidad
cada
europea
medios
totalmente, los
medios
apoyados
las
por
seguirían
vez
prerrogativas sólo irían a las clases
recibiendo. Los países del sur estaban
se hacían menos apetecibles para
medias que tuvieran un mínimo de
en quiebra técnica y se les cortaban
los turistas. Las agencias de viaje
renta asegurada, los escasos recur-
todo tipo de subsidio. Era el mismo
habían creado, hacía muy poco, una
sos del estado no podían repartirse
planteamiento que para las personas
nueva modalidad turística enfocada
entre
habían
en España: mejor salvar a los países
a los jóvenes de las familias de altos
decidido que era mejor salvar a unos
viables y dejar a la buena de dios a
recursos. Los anunciaban como “Safaris
pocos.
los países totalmente endeudados.
álbum”, se trataba de cazar a los
Eso de salvar a unos pocos dejando
Las iglesias de todas las confesiones se
marginados mientras buscaban entre
a unos muchos al pairo, esperando su
alinean con el pensamiento dominante,
los desechos. Estos “safaris” muchas
suerte, no era sólo en España, bueno,
proclaman que esa es la voluntad
veces desembocaban en razias indis-
eso remarcaban día a día todos los
de Dios, argumentan que en la tierra
criminadas
toda
la
población,
fotográficos. Pon un marginado en tu
que
medios de comunicación. Decían que
hay demasiadas personas y que es
deambulaban por las calles de las
contra
era un problema global, que ya no
necesario concentrar las ayudas en
grandes ciudades. Los policías ha-
había trabajo para todos. La pobla-
lugar de ayudar a todas las personas.
cían la vista gorda, tenían órdenes
ción estaba dividida en dos: la mitad
estrictas de limpiar la ciudad. Los
de pobres y la mitad de personas con
—Son momentos de resignación a los
políticos
sus
cubiertas;
designios del Señor, Dios salvará a los
Nacional gobernaban en el noventa
la mitad de la población apoyando
escogidos en la otra vida, es momento
por ciento de los ayuntamientos y
a los partidos del gobierno y la otra
de oración y esperanza. t
uno de los acuerdos era mantener
mitad apoyando a los partidos que
limpia las ciudades de indeseables.
querían
El turismo de las grandes ciudades
antisistema, los llamaban los otros.
había sufrido un enorme retroceso en
No necesariamente eran los pobres
las estadísticas y los grandes conglo-
los que apoyaban a los antisistema,
merados
exigido
ni los pudientes los que apoyaran a
mano dura contra todos aquellos que
los partidos del gobierno, la cosa era
entorpecieran
mucho más complicada, había para
del
los
pacto
turísticos el
pobres
de
habían desarrollo
de las grandes metrópolis.
28
Salvación
turístico
necesidades
cambiar
todos los gustos.
básicas
el
sistema,
los
JUS Abril 2015
AUTOR: MARXITANIA ORTEGA TÍTULO: GUERRA DE GUERRILLAS NÚM. DE PÁGINAS: 277 FORMATO: 13,5X23CM PRE-VENTA EN LA WEB DE JUS
¿Qué sucedió con los partidarios de la guerrilla en América Latina de los años setenta?, ¿qué rumbo tomaron los ideales impregnados de marxismo de aquellos jóvenes, quienes se organizaron y lucharon por construir un mundo que consideraron mejor? Esta extraordinaria novela escrita por Marxitania Ortega ofrece entre sus líneas las respuestas, o por lo menos intuye lo que muchos de los protagonistas y simpatizantes de las guerrillas gestadas en América Latina vivieron, antes y después del desencanto que flotó en el aire luego del acabose del mundo bipolar. Los hechos que aquejan al México de hoy, las matanzas contra los protestantes, las masacres cometidas en el estado de Guerrero a causa del narcotráfico, traen a colación una reflexión obligada sobre los conflictos y protestas en la historia de aquel estado. Invitación que lleva a cabo esta novela. El tiempo transcurre en esta historia entre dos vidas: Sara, la hija de aquel apasionado guerrillero, una joven que vive en pleno “desencanto” y cuya generación incluso pareciera estar perdida en una vorágine sinsentido; las becas institucionales, los viajes y el conocimiento académico no son el suficiente soporte de su existencia. Y Antonio, una vida que se describe en pasado, en un tiempo de nostalgia y hasta de melancolía que posiblemente devenga en el recuento de los días que muchos de aquellos guerrilleros tuvieron en común. Las posibles conexiones de la vida son a veces los lugares visitados; en este caso, los lugares en los que padre e hija, Antonio y Sara vivieron en tiempos distantes: París, México y Cuba, ciudades que quedan como el único resquicio capaz de unir ambas vidas en el transcurrir de esta fantástica historia.
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INTERVALO
NARRATIVO
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La crisis de Javier Marta Mañes Fotografía: Adriano Agulló
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INTERVALO
NARRATIVO Al final, tantas órdenes y poder no le ayudaron en
superiores de lo acontecido, no supo qué responder.
nada. Al principio, Javier pensaba que sí, que era
Ninguna palabra coherente, aún menos honesta, acudía
poderoso y que a él nunca le sucedería ni le llegaría a
al ‘rescate’ de su alma.
afectar; se sentía al margen de los demás. Pero al día de hoy, la realidad es que había caído tan bajo que el
En la lista figuraban más de treinta mil humildes familias,
suelo estaba por encima de su propia autoestima.
trabajadoras, de las cuales, la mitad se encontraba en proceso de desahucio por confiar en esas personas de
Ahora era un gusano que a duras penas sacaba su
cara amable que les habían hecho firmar. Perdieron los
viscosa cabeza del subsuelo para respirar o buscar un
ahorros de todas sus vidas; no les quedaba nada con lo
rayo de sol con el cual calentar su diminuta cabeza de
cual sobrevivir; ni siquiera las esperanzas de empezar
larva. Menuda pieza.
a luchar, ¿a su edad?; otras tantas ya estaban en la mismísima calle abandonadas con sus retoños o, si eran
Javier siempre se
había creído importante y fuerte
cuando vestía traje azul de marca y corbata de seda.
afortunados, resguardadas en algún hogar de algún familiar benévolo.
Disponía a su merced de un grupo de subordinados a los que mandar: <<¡Venga, vamos! No tenéis excusas.
A pesar de aquellos resultados brutales, Javier tuvo la
O estáis u os vais. Quiero que este mes me cerréis,
sangre fría de mofarse de la situación cuando su jefe,
como mínimo, treinta hipotecas cada uno, ¿entendido?,
cubriéndose las espaldas como si fuese un niño inocente,
luego tenéis que colocar los trecientos millones que
le preguntó ante el presidente de la entidad: <<¿Por qué
tenemos en objetivos, los de los fondos que os pasé
lo has hecho, Javier?>>,
en la reunión la semana pasada, ¡espero resultados!
ha obligado>>, omitiendo el mensaje que se respiraba
Acordaros del gráfico y los beneficios. Pensad en la
dentro de la compañía, ni el engaño ni la traición con el
curva… esa es la verdad para la casa; el camino
que trabajaban cada día al no explicar con claridad la
a seguir. No existe nada más. Mirad el ejemplo de
letra pequeña de los contratos a los clientes firmantes de
Roberto. Preguntadle a él cómo lo ha hecho>>.
dichas hipotecas y fondos.
Javier se sentía como “El Señor”, coetáneo a “Nuestro
Forzado, tras la respuesta de Javier, el jefe de la
Señor”, ese hombre poderoso que cada día se nombra
oficina fue consecuente con el teatro en el que estaban
en misa de siete, incluidos los domingos festivos,
acostumbrados a vivir desde hacía más de quince años
aunque no eran primos hermanos; nada les unía a nivel
y lo invitó a irse de inmediato por la puerta pequeña
familiar.
sin recibir el millonario bonus pactado en el contrato,
él respondió: <<Nadie les
alegando falta de ética y moral empresarial. <<¡Ja!>> El trabajo de sus comerciales le aportaba un plus muy
Expresó su jefe: <<Este tipo de escoria no cabe en
goloso a final de mes, un extra
nuestra entidad. ¡Vamos a dar ejemplo!>>.
al que no estaba
dispuesto a renunciar. Era un avaricioso compulsivo: <<En enero, si las cuentas me salen redondas y todos
Cuando la esposa de Javier supo la realidad de los
cumplen los objetivos, me iré a unos veintiséis mil euros,
hechos de su marido, harta de aguantar sus desprecios,
¡no está mal!, pero puedo mejorar estos resultados si
malos tratos por su carácter egocentrista y egoísta, su
les aprieto… me ascenderán>>.
prepotencia, control, descortesías y sus inacabables cuernos con cualquier jovencita que se le cruzaba en
32
Y así, mes a mes, la pelota o burbuja en la que vivía
el camino, decidió no esperar más para seguir siendo
se fue hinchando como una esfera de dimensiones
apisonada por aquel buldócer. Afortunadamente, entró
galácticas. Su ego mucho más. Tanto fue así que
en crisis (en este caso racional y comprensiva), y le dio
cuando todo se fue al traste dentro de la estructura
menos de veinticuatro horas para desaparecer de su
económica del país y tuvo que rendir cuentas con sus
hogar.
JUS Abril 2015
De repente, Javier percibió un sentimiento nuevo en su cuerpo de bicho alargado y pegajoso. Ya no era nadie importante ni especial en su entorno laboral y familiar. Se lo habían confirmado por activa y por pasiva, todos los ámbitos de su vida. Su exitosa existencia se había cuarteado y roto de un plumazo como un puzle de diez mil piezas al caer al suelo. Ni “Nuestro Señor”, si era verdad que existía, lo hubiese conseguido recomponer con uno de sus milagros. Y ahora, allí estaba. Sentado en un banco que no dentro de un ‘Banco’ de la Avenida Diagonal; con una maleta a su lado, mirando hacia el suelo, pensando: <<¿Cómo he podido llegar a esto? tan sólo tengo cuarenta y ocho años. No tengo trabajo ni casa ni familia. No lo entiendo. ¿Cómo voy a levantarme de ésta? Hice lo que se esperaba de mí. ¿No?>>. Puede que estuviese en ¿crisis existencial?... Casi nada. Toda aquella situación la había logrado él solito. Un flecha el “super-señorito” con carrera y máster de pago; como tantos otros repartidos por doquier. Lo consiguió todo en doce años, siendo un producto sabandija y ruin, fruto de la educación y valores transmitidos durante los últimos treinta años. Pero un pequeño detalle cambiaba la situación de Javier. Ahora, también era la crisis de Javier. Él formaba parte de la crisis del siglo XXI, la que estamos viviendo y pagando: todos juntos. t
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INTERVALO
NARRATIVO
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Venecia Marta Kapustin a medida FotografĂa: Leo Prieto
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JUS Abril 2015
INTERVALO
NARRATIVO
Acabo de cumplir, hoy mismo, cincuenta años. Ya
Cuando mengua la efervescencia, cuando de la cima
me previnieron sobre la crisis de los cincuenta.
del tobogán sólo queda el vahído, te das cuenta
He cruzado las supuestas crisis de los treinta y
de que no debiste juzgar a tu Olivia por detalles
los cuarenta sin notar cambios, de modo que no
intrascendentes y vas corriendo a manifestarle que
espero nada. Canas en la barba, quizá. Mantengo
cometiste una tontería, a pedir perdón poniéndote
la tripa a raya con pilates y los bíceps con pesas.
literalmente
Comer discreto, desistí
contigo, que serás su lacayo y benefactor y tantas
de fumar. Trabajo aburrido
pero estable.
de
rodillas
implorando
que
vuelva
otras cosas que ella repele sin repeler porque no responde a tus llamados ni mensajes y ni sueñes con
Mi analista dice que no hay prototipos de crisis,
aproximarte a su domicilio.
que cada cual tiene una a su medida, aunque qué sabe sobre el asunto un acicalado apoltronado
Olivia se casó en una boda rimbombante –doble
como él.
página en revista de corazón– con un actorcito en ascenso, tuvo dos niñas, transita de rubia y usa lentes
Una crisis personal es el tobogán de tu vida. Vas
de sol en espacios cerrados. La seguí sin ser visto
ascendiendo, atrevido, escalón tras escalón, creyén-
mucho tiempo, quinquenios para ser exactos, hasta
dote colonizador de cumbres; en la cima misma,
que no pude más. Hasta que pasé los treinta y los
olvidando que el volar es para los pájaros, mareado
cuarenta sin crisis a la vista.
de gloria te arrojas y derrapas a gran velocidad, apenas sostenido por tus jamones entumecidos.
Las crisis, dice mi analista, derivan de que el mundo
Apenas te detiene la tierra bajo tus pies.
es complejo y por tanto las respuestas han de ser complejas y por tanto han de serlo las preguntas.
Tuve una personal –crisis, digo– a qué negarlo.
También dice mi analista que la crisis es el aviso de
Antes de conocerlo –al analista–, apenas cumplidos
que algo funciona mal y que gracias al conocimiento
los veintiséis. Comenzó la crisis
de
el segundo día
los
antecedentes,
las
crisis
constituyen
una
de luna de miel con Olivia. Tras una boda rim-
oportunidad felicitante y facilitante para el cambio.
bombante
En suma: a perpetuarme en tratamiento pagándole los
que
sufragaron
sus
padres,
partimos
a Venecia; ese maligno segundo día, en un ridículo
honorarios de infarto que le pago.
y previsible viaje en góndola, me di cuenta que Olivia era una cabeza hueca, desinteresada de la
Hoy cumplo cincuenta, ya lo mencioné.
historia y los avatares de una Venecia sojuzgada al imperio Bizantino o rebelde ante los austríacos.
Festejo con la familia. Mamá está fuera de este
Nada. Lo suyo era sacarse fotos y shopping intenso.
mundo pero de pastel de chocolate no se priva, papá
Así, a bordo mismo de la góndola, pedí el divorcio.
nunca sonríe. Una reunión pequeña, sin aspavientos. Regalos que me hice a mí mismo y convidé caramelos
Regresamos. Olivia dejó de registrarme desde el
en la oficina. No me estoy quejando, si es lo que
aeropuerto. Su hermano mayor amenazó con matar-
piensan. t
me. Mi madre lloró por semanas pero al fin se puso de mi lado. Y yo entré en una crisis a mi medida.
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JUS Abril 2015
AUTOR: MANUEL ESQUIVEL TÍTULO: JESÚS MALVERDE NÚM. DE PÁGINAS: 150 FORMATO: 13,5X23CM PRE-VENTA EN LA WEB DE JUS
Para unos es bendición, para otros ícono del cáncer más grave y enraizado de nuestro agonizante país; si su existencia fue real o no, es cuestión debatida hasta hoy, a más de 100 años de su muerte. Jesús Malverde es uno de los héroes que están presentes en el imaginario colectivo del pueblo porque, de una manera u otra, fueron modelos a seguir aunque vivieran fuera de la ley. Basado en una investigación histórica y con datos no revelados hasta ahora, Esquivel nos cuenta la vida y obra de este personaje, desde su origen humilde hasta las circunstancias misteriosas que rodearon su muerte, sin olvidar los milagros que la gente le adjudica. Malverde nos acerca al enigma de la figura popular y religiosa más controvertida del momento a más de cien años de su ejecución. « Es como un dios. Las cosas que recibe son impresionantes: dinero, alhajas, dólares. Para pasar cargamentos, todo el tiempo se le pide. Es el dios de Sinaloa, un chingón». El Universal, México
« …nadie puede negar la trascendencia cultural que esta historia ha dejado en las poblaciones del norte de nuestro país. Así que, real o no, ésta es la historia del ladrón que se hizo santo, la del santo al que hoy se encomiendan «los malos»… la historia del «Robin Hood» mexicano.». Algarabía, México
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INTERVALO
NARRATIVO
Ficción a la mexicana Filemón Zacarías García
II
Fotografía: vladimix
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<<“Íbamooooos
a
la
moliendaaaaa,
de
pronto
veo venir muy cerquita de mí, yo vi a una culebra
–Una manifestación. – Dijo uno, mientras un sordo rumor de batalla irrumpía en escena.
mirando hacia mí, yo gritéeeeee ¡Ay la culebra, yo griteeeeeeeeeé ¡Ay la culebra!>>
A lo lejos, podían distinguirse los cláxones desesperados y los silbatazos de los agentes de tránsito
– ¿Recuerdas Pedro?
–Dijo José, mientras ponía
que aumentaban la ya insoportable suma de deci-
guacamole a su taco. Esa canción estaba sonando
beles de ese marzo inacabado. Uno de los amigos
cuando mataron a Colosio.
sacó un cigarrillo y empezó a fumar, el otro se acodó en el barandal del puente y empezó a hablar en un
–Puuuu, sí, ya llovió de eso. – Contestó el otro con
monólogo interrumpido de vez en cuando por el
el rostro encendido por la salsa y el refresco que
fumador:
apuraba a grandes sorbos. – Se acaban de cumplir veinte años de la muerte de Comían con avidez, mientras la música a todo
Colosio y algunos creen que este pedazo de historia
volumen inundaba la avenida mezclándose con los
sería diferente para todos si no hubiera ocurrido.
gritos de los que ofrecían sus mercancías a todo
Que la gran crisis de los noventa y el “error de
pulmón:
diciembre”, tampoco.
¡Órale joven bara, baraaaaaa! ¡De a diez, de a
–Es el mismo pinche PRI, no mames, hubiera sido lo
diez! ¡Lléveloooo lléveloooo!
mismo con él o sin él, ahora ese cabrón ya está bien enterrado y todos seguimos igual de jodidos, el
Y la mañana se llenaba de olores y colores que le
hubiera no existe.
daban sabor a la urbe, sumida en sus historias de crisis y dolor, disfrazadas con la parafernalia
–Pero, cabrón, piensa en la aparición del EZLN, el
cotidiana de conseguir el pan de cada día.
FOBAPROA, lo de Ruiz Massieu, lo de Aguas Blancas y Acteal, esos años estuvieron muy cabrones.
Pagaron
su
consumo
y
empezaron
a
caminar
inundando sus ojos de informaciones diversas, en
Los dos parecieron entristecerse un poco, pero el
cada estanquillo de la esquina: “Cuarenta y tres
fumador concluyó con una simple frase:
desaparecidos,
una
casa
blanca
construida
al
amparo de maquinaciones gubernamentales, avio-
–Igual que ahora.
nes ultramodernos para uso del mandatario de turno, América 1-Cruz Azul 0… los grafitis y los
La muchedumbre estaba ya muy cerca, en la avan-
posters de luchadores, mezclados con propaganda
zada venían algunas patrullas y unos danzantes
política, hacían surgir nebulosas multicolores en su
“concheros”, el humo del copal y el smog otorgaban
perspectiva citadina.
a la estampa urbana una rara mezcla de misticismo y asfalto hirviendo bajo el sol de la una. El desfile
Mientras cruzaban la avenida en el puente peatonal,
multicolor tardó casi media hora en pasar bajo el
miraron a lo lejos una gran mancha humana que
puente, donde dos amigos asomaban sin asombro
se acercaba como un monstruo amorfo en medio
al fervor religioso de su pueblo. Uno de ellos sacó
del polvo y smog del medio día. Se detuvieron y
de su mochila su cámara y acumuló todo un archivo
empezaron a adivinar:
para su tesis de Sociología, el otro fumaba su enésimo
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AUTOR: FELIPE CUEVAS RUIZ TÍTULO: LA PIEL ACERBA NÚM. DE PÁGINAS 368 FORMATO 13,5X23CM PRE-VENTA EN LA WEB DE JUS
Alfredo Galván, un exitoso abogado fiscalista, se encuentra en su lujoso despacho sufriendo la muerte de su esposa a causa del nacimiento de su hija. En la hondonada de la embriaguez y la intención de suicidarse, urde un plan para arruinar a su padre (un prominente político) y a sus cómplices. Harto de lavar el dinero relacionado con los negocios sucios de la política, crea un monstruo institucional con las mismas herramientas de los poderosos, alimentado por la corrupción y que actúa como una espiral virtuosa e imparable. Su propósito, aliviar una porción del tejido social enfermo. En el ínterin, Alfredo supera el luto y se enamora de una famosa actriz, con quien comparte las vivencias más sorprendentes junto con sus amigos, entre ellos, Susana Dracoulis, una mujer encendida por la noche vampiresca de su apellido. La situación se complica cuando su padre y los políticos contraatacan. Deben invertir en la refinería Milenio y no cuentan con el dinero para ello porque está en manos de Galván. Por consiguiente, se apoyan en una femme fatale que lo espía y seduce. Personajes turbios y astutillos de la vida pública contribuyen a dar marco a esta novela, donde la putrefacción de la clase política se hace presente a diario en los encabezados. El suspenso envuelve el hábitat de los personajes y la pasión los desborda y dirige hacia un desenlace seductor. «De intriga en intriga y de complicación en complicación, Felipe Cuevas captura a los lectores. Su novela —no exenta de humor negro, ironía y, sobre todo, denuncia contra una situación, al parecer, insuperable— se sostiene de principio a fin». Juan Antonio Rosado Z.
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INTERVALO
NARRATIVO cigarrillo y miraba absorto cómo se desvanecían las
–¡Que no oyen, cabrones! ¡Órale, saquen todo, rápido
volutas de humo en el cielo gris del Anáhuac, cuando
o se los carga la chingada!
pasaron corriendo junto a ellos dos mozalbetes y le arrebataron la cámara huyendo como exhalación
Para entonces José se había quedado viendo en la
entre
quisieron
playera del que encañonaba al chofer y a todos
reaccionar estaban lejos de su alcance, le avisaron
los
autos
allá
abajo.
Cuando
alternadamente, en sus pantalones raídos y en los
a una patrulla que pasaba y echaron a caminar en
tatuajes en su cuello, sí, era el mismo que tenía su
la calle cubierta de basura y de sudor proveniente
cámara y el destino lo había puesto de nuevo en su
de muchas partes de México, donde cada vestuario
camino, pensó.
tenía una historia tras de sí, donde cada “huehue” y cada “tocotín”, había tenido que hacer un esfuerzo
Eran solo dos y ellos eran tantos, – pensó – así que
grande para acudir ese día a rendirle pleitesía a su
cuando el primero intentó esculcarlo para quitarle su
obligación heredada siglos atrás.
cartera, lo enfrentó, lo tomó con fuerza de la mano armada y empezó a forcejear con él, gritando con
“Sí, México puede debatirse en su crisis eterna, pero
todas sus fuerzas:
la fe pervivirá, mientras haya alma en los pueblos originales y mientras la nobleza de la raza transite
–¡A ellos! ¡Ayúdenme! – ¡A ellos!
los caminos dictados por los ancestros” – pensó el estudiante de Sociología – mientras aceptaba fumarse
Estaba venciendo a su atacante, pero nadie se movió,
uno de los cigarrillos que su contertulio le ofrecía.
lo tiró al piso del pasillo, pero nadie intervino, empezó a golpearlo y nadie le ayudó, cuando quiso sujetarlo
Eran casi las dos de la tarde, –en el nuevo horario
con algo para poder moverse sintió algo caliente junto
de verano– cuando iba en el camión rumbo a su
a su hombro, intentó moverse rápidamente y entonces
ciudad perdida y en el estéreo la melodía pegajosa
la vio, era una mancha espesa que inundaba su
le devolvía el recuerdo de Colosio, y de su cámara:
pecho, un líquido caliente por donde escapaban sus sueños, volteó hacia donde escuchó el estampido y el
“<<Huye José, huye José, ven pá cá, cuidao con la
otro asaltante bajaba a toda prisa del camión, donde
culebra te muerde los pies, ay si me muerde los pies
nadie se movía, excepto el reloj del nuevo horario.
ya no puedo yo bailar, si me muerde los pies, ya no
Cayó encima de carteras y celulares que el atracador
vó a poder gozar>>”
había tirado en su presurosa huida, se tapó la herida con sus manos trémulas y volteó a ver a todos los
–¡Cáiganse con todo hijos de la chingada! ¡Órale
demás pasajeros inmóviles queriendo preguntarles
cabrones, saquen las carteras y celulares!
¿Por qué? Pero su voz ya no salió… sus ojos quedaron fijos en su savia roja que escapaba, como las ansias
Gritaba uno de los dos adolescentes que con pistola
de estudiar a su pueblo, de entenderlo… aún tuvo
en mano, les apuntaban a los pasajeros. Todo había
tiempo para un último recuerdo mientras la música
ocurrido tan rápido que sólo el chofer y los pasajeros
seguía su letanía de sepulcro: “El hubiera no existe”
del frente eran los únicos que se estaban dando cuenta que eran asaltados, el camión venía con
<<“Íbamooooos
pasajeros parados de la mitad hacia el fondo. Los
veo venir muy cerquita de mí, yo vi a una culebra
gritos subieron de tono mientras uno de ellos pasaba
mirando hacia mí, yo gritéeeeee ¡ay la culebra, yo
entre los asientos para recoger su botín:
griteeeeeeeeeé ¡ay la culebra!>> t
a
la
moliendaaaaa,
de
pronto
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INTERVALO
NARRATIVO
Crisis creativa
Sinhué Mendieta Fotografía: Giannis Angelakis
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Miraba la hoja en blanco esperando que llegara un
Pensaba que a veces era necesario morir para ser
momento de inspiración, pero todo parecía inútil, ya
reconocido, lo cierto es que valoraba su vida y prefe-
había intentado beber alcohol en grandes cantidades,
ría seguir siendo un escritor de medio pelo, que sólo
pero siempre terminaba vencido en algún sillón, una
había tenido la fortuna de haber ganado un premio
cama y a veces hasta en la calle, tapado de borracho,
literario de prestigio.
sin ser capaz de poner una línea. Pasó el tiempo e hizo varios intentos por redactar algo Llevaba siempre una libreta para un momento de
con cierta calidad, pero no consiguió hacerlo. Escribió
lucidez, aunque sólo había logrado alguna que otra
una historia de amor y desamor, pero resultó más cursi
oración decente, pero todas inconexas. Posiblemente
que una telenovela. Hasta su editor le dijo socarrón
con el tiempo esa libreta podría convertirse en un
“pues si ya no la haces en la literatura, ya tienes dónde
libro de aforismos, publicado como alguna rareza del
buscar trabajo, nomás te faltó que tu libro terminara en
autor, sólo para verdaderos seguidores, lástima que
boda”.
para ese momento requería tener mayor habilidad, porque debía entregar una novela.
Alguna vez un colega le comentó que para ser un buen escritor es necesario inventar personajes e historias de
Tanta era su desesperación que llamó a su editor y le
la nada, si lo tomas todo de la realidad, ésta puede
propuso publicar un libro de cuentos, sin embargo, la
apabullar tus textos, pero ni dejando la realidad de
respuesta fue negativa debido a que la editorial con
lado logró un buen resultado.
la que tenía su contrato sólo se dedicaba a publicar novelas.
Después de ser rechazado varias veces, las opciones se estaban acabando y su prestigio estaba en juego.
Estaba hundido en una crisis de creatividad. Refle-
Veía la sección de bestsellers en las librerías y pensa-
xionaba y sabía que necesitaba nuevas experiencias,
ba “cómo esos pendejos pueden vender tanto y yo no
omitiendo el alcohol que ya muy malos resultados le
soy capaz de hacer otra novela”.
había dado. Intentó convertirse en un beatnik y se metió mota, cocaína, LSD y, si hubiera conseguido
Fue hasta su casa con las naves quemadas, a punto
heroína, también lo hubiera hecho, iba a tomar la ca-
de hablarle al editor sobre cómo rescindir el contrato
rretera como hubiera hecho Kerouac y Cassady, para
y dedicarse a otra cosa, cuando de pronto sonó el
después narrar sus experiencias, pero recordó que
teléfono, era justamente su editor para informarle que
no era la misma época ni el mismo país, supuso que
se acababa la relación entre la editorial y él, porque
podría encontrarse con narcos que lo decapitarían o
la casa estaba en una situación económica crítica, por
lo dejarían colgado en algún puente, o con algún poli-
lo que se veían obligados a declararse en quiebra. Si
cía que lo desapareciera y ya nadie más volviera a
bien la noticia no fue del todo buena, al menos respiró
saber de él, aunque eso sería una buena salida para
aliviado por no tener que entregar una nueva novela.
no entregar la novela y luego convertirse en leyenda
Con los ahorros de las regalías de su libro tomó rumbo
con su escasa obra literaria.
al viejo continente, para ver si, ahora sí, encontraba alguna historia que contar. t
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INTERVALO
NARRATIVO
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MinĂşscula
Gabriela Fonseca
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INTERVALO
NARRATIVO Las manos de Ulises tienen dedos largos, pulgares
como cuando un perro te gruñe, te enseña la dentadura
estrechos. Su piel es fina y seca en el dorso, pero tibia
y pierde esa sonrisa tristona que los perros parecen tener
y acolchonada en la palma. Le gusta pintar paredes,
siempre. Prefieres no gritar para que no muerda, porque
cocinar, arreglar motores y a veces se hace pequeñas
al fin y al cabo no es que te lastimara, ni que te dejara
heridas que me gustaba lavar con agua oxigenada, aún
un ojo morado. Sólo te empujó, como lo hacían los niños
antes de que me empezara a encoger.
en el colegio, cuando eras pequeña de edad, y te sentías muy sola.
Por las noches, estira el brazo y deja la palma de una de sus manos hacia arriba para que yo pueda usarla
Yo era inteligente en la universidad, él era mi profesor
como una cama, y acurrucarme entre las líneas de su
y se fijó en mí. Y yo creía que ningún otro me vería, y
vida, su corazón y su mente. Esto duró cerca de un año
pensé que si había visto algo en mí fue porque yo era
y nunca fui más feliz. A veces, mientras dormía, Ulises
inteligente. Me casé con él y creí que era lo mejor.
cambiaba de posición. Su movimiento me alertaba y yo
Me enamoré porque quería estar con alguien como él,
brincaba de su mano hacia la sábana para que no me
porque me di cuenta de que para otros podía yo ser
aplastara.
no muy bonita, demasiado parlanchina o demasiado callada, demasiado rara a veces, muy insegura, o
Por la mañana me buscaba en su mano vacía, con
simplemente no les caía muy bien.
terror de haberme matado sin darse cuenta. Para que Ulises no se asustara, tomé la costumbre de escalar la
Él siempre hacía chistes sobre mí, sobre los demás.
almohada y sentarme cerca de su cabeza, y esperaba
Nunca supo reírse de sí mismo. Criticaba mis cosas,
a que se despertara. Cuando veía que los párpados
a mis amigos, todo lo que yo hacía, los libros que me
le temblaban y empezaba a mover la nariz y la boca,
gustaban. Cuando él le daba las gracias a alguien no
me acercaba a su oído lo más posible para darle los
le salía natural, como esas personas que cuando dicen
buenos días y avisarle así que yo seguía viva y junto a
groserías suenan estudiados. Muy a menudo me decía
él. Él se quedaba acostado hasta que yo me movía por
que me quería, pero su mirada no decía nada.
entre sus cabellos y los pliegues de las sábanas hasta llegar a un lugar que él pudiera verme y tomarme en su
Una vez tuvimos una gotera en el techo de la recámara,
mano sin temor.
justo en la ventana, y llamamos a un impermeabilizador profesional. El hombre, un gangoso pelirrojo que venía
Casi no dormí todo ese tiempo que pudimos seguir
muy bien recomendado, examinó el agujero trepándose
compartiendo la cama, pese a que mi tamaño era el del
por la ventana, sin ningún cinturón de seguridad,
corcho de una botella de vino. Pero tenía a Ulises y no
encaramado entre el tejado y parado en el pretil,
importaba.
confiando plenamente en sus manos, a seis pisos de altura de la calle. Mientras él y yo lo veíamos aterrados,
Las manos del otro, en cambio, eran como las de la
el impermeabilizador nos dijo que había una grieta en el
Mole de piedra de los dibujos animados. Cuadradas,
tejado y que la repararía para que dejara de meterse el
con dedos cortos y gordos, y siempre impregnadas
agua a la habitación.
con olor a cigarro. Las usaba para taparme la boca,
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aplastarme la cara. Una vez me apretó el cuello con
Unos días más tarde, mientras él cambiaba los canales
ellas y me empujó la cabeza contra la pared. No
de la televisión, llegó a una película pornográfica de las
grité. No me dolió. En realidad no me estranguló ni
llamadas “blandas”, donde el sexo es simulado. Una
me golpeó. Sólo me inmovilizó unos segundos con su
mujer desnuda y con una peluca rubia tres veces más
cara pegada a la mía. Pensé que me iba a arrojar
grande que su cabeza se sujetaba de un cortinero y
un espumarajo, pero sólo me llamó “puta inútil” y me
estaba parada en el pretil de una ventana mientras un
bañó la cara con su aliento de reflujo y tabaco. Fue
tipo, vestido sólo con botas de trabajador, la penetraba
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por detrás, sujetándose sólo de las tetas de ella. Al
mal. Además de mi empleo en una oficina, me puse a
fondo podía verse un paisaje tirolés.
trabajar escribiendo y corrigiendo desde casa,
para
llenar las horas y no salir. “Mira, así coge el impermeabilizador del otro día”, le dije a él.
Conocí a Ulises unos años después, no importa cómo, y comenzamos a vivir juntos después de un tiempo
Fue la única vez que le escuché una carcajada franca
prudente. Creí que nunca me volvería a gustar un
y real a un chiste. Entrecerró los ojos, se agarró el
hombre, pero yo fui quien lo atacó. No sólo lo besé en la
abdomen y se dejó llevar por la risa por unos cuantos
primera cita, le brinqué encima y me lo llevé a la cama
segundos. Tan grande fue su carcajada que se dejó
porque quería sentirme como una “puta inútil”. Apenas
caer de lado en el sofá en el que estábamos, sin
nos desnudamos me preguntó que si él era un buen
tocarnos.
amante y le dije que sí, aunque todavía no tenía idea de si nos acoplaríamos o no. No quería más que sentir algo.
Por años atesoré ese momento. Cada vez que me decía que mi ropa era una mierda, que odiaba el color del
Fue bello besarle los ojos, el cuello, el centro cardiaco
que me pinté los labios, que lo que leía era una basura,
de su pecho, lamer sus ingles y recorrer su pene con
que mis amigas eran imbéciles, cuando estaba en
los labios y la lengua antes de invitarlo a mi garganta,
contra de todo lo que yo decía, me acordaba de ese
mientras lo escuchaba respirar lleno de contento. Tiene
momento en que miré cómo se volvía un niño por un
un hermoso miembro grande, de punta gorda con cara
rato.
de melocotón, siempre húmedo y atento. Al principio, hacía algunas cosas que no me gustan, pero a medida
Esa única risa venía a mi mente también cuando
en que fui haciéndome pequeña, el sexo se volvió
insistía en no hacerme el amor. Un día dijo que él no
perfecto.
me satisfacía a mí. Yo insistí en buscar el contacto con él, en primer lugar porque lo deseaba y en segundo
Su pecho lleno de vellitos claros se expandió hasta
lugar porque no quería que su autoestima sufriera.
volverse un cielo cálido que me cubría del todo. Sus
Una vez, cuando yo lo montaba y creí que él estaba
labios delgados empezaron a crecer hasta que se
disfrutando, me puso las manos sobre la cabeza y me
convirtieron en una barca en que navegué su boca
empujó hacia abajo como si fuera yo un émbolo de
entera. La lengua de Ulises fue ocupando cada vez más
maquinaria. Luego dejó de tener erecciones y entonces
de mis labios vaginales, y acariciaba delicadamente
se tendía encima de mí, en posición de 69 y me lamía
mis pezones como si éstos fueran la frágil cabeza de un
la vagina y el clítoris con rabia y aspereza durante lo
colibrí.
que parecían horas, sin hacer caso cuando yo le decía que no me dejaba respirar. Luego dejó de tocarme y yo
Su miembro, de por sí grande y hermoso, un día me llenó
a él.
por completo, cuando mi tamaño era el de una figura decorativa en un parque de Disneylandia, no tuvimos
Después conoció a otra. Cuando lo descubrí dijo que
que movernos ni esforzarnos de ninguna manera. Para
era mi culpa porque yo dejé de quererlo. Tenía razón
cuando tuvimos orgasmos simultáneos, esa engarzadura
de alguna forma, y cada quien salió de la vida que
de carne y deseo nos convirtió en un solo ser humano
tuvimos, supongo que arrepentidos por no haberlo
por un momento en el que fuimos plenamente felices.
hecho antes. Llegó el momento en que a su pene ya no le fue Nunca dejo que Ulises me vea llorar. No es que le
posible penetrarme, pero no importaba, pues yo podía
tenga miedo ni que desconfíe de él. Sólo es que no lo
acariciarlo y lamerlo con todo mi cuerpo, frotarme
creo necesario. Después de separarme del otro estuve
contra él, dejarme empapar por él hasta que sólo me
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INTERVALO
NARRATIVO fue posible estimular su punta y su frenillo con todo
seguía en mi vida y la infelicidad me quitaba el apetito y
mi ser para demostrarle a Ulises cuánto lo amaba por
el gusto por el pastel.
protegerme. Él dijo que gozaba y que era como si una mujer fantasma lo hiciera venirse mientras le devoraba
Bajé de medidas en todo, incluidos anillos y zapatos. Me
el alma.
sentía cansada, así que fui a ver al médico. Al subirme a la báscula mi peso se había reducido considerablemente,
“Me voy a poner a dieta, no me hagas comer nada que
pero también mi estatura; seis centímetros menos de la
engorde”, le dije a Ulises cuando empezamos a vivir
talla registrada en mi historia médica. Cuando le llamé la
juntos.
atención al médico sobre esto, me envió a hacerme una batería de análisis, pues la pérdida de calcio prematura
“Yo creo que le hará bien a tu salud. No quiero que
era la única explicación, pero no se encontró ningún
tengas problemas”, me respondió él.
indicio de ella.
Y lo hice, como lo hacen tantas mujeres. Me dediqué a
Me di cuenta de que mi cansancio se incrementaba
comer carne blanca, verduras, y muy poca fruta. Quería
porque mis pasos eran más cortos y mis horarios eran
sentirme bien. Me daba miedo que Ulises cambiara.
los mismos; todas las distancias se habían hecho más
Me daba miedo que un día dejara de tocarme, que
grandes. Sin que se encontrara nada anormal en mis
criticara primero mi cuerpo y luego todo lo demás,
análisis, se me recomendó trabajar desde el hogar para
como el otro.
evitar una fatiga extrema.
Tenía miedo de que un día dejara de reírse y de que
Suspendí la dieta, pero seguí disminuyéndome, quizá
me obligara a enterrar en la isla de mi memoria las
porque me era imposible comer más que unas cuantas
carcajadas que un día me había regalado y que podía
cucharadas de alimento al día. Dejé de ir al médico, ni él
arrebatarme tarde o temprano.
ni ningún otro entendía lo que me estaba pasando.
Tuve miedo de perder a Ulises. De no saber cuánto
Para la casa, Ulises compró banquitos de madera y
tiempo de él me quedaba ni idea de cuánto duraría mi
plástico que me ayudaran a
paz. Todo empezó bien con el otro, y se volvió nada.
lavabo y las sillas; pero esto no fue mayor problema,
No se me ocurrió otra cosa más que ponerme a dieta.
porque, como dije antes, Ulises y yo jamás fuimos más
Yo creo que ya no soy inteligente como antes.
felices al hacer el amor mientras yo me volvía cada vez
alcanzar el escritorio, el
más pequeña. Una semana después de comenzar, la báscula marcó medio kilo menos. En todas las páginas de Internet
Y no era sólo el sexo lo que me hacía sentir feliz a pesar
dedicadas al combate de la obesidad recomiendan
de lo que me ocurría. Era feliz porque Ulises me cuidaba.
llevar un diario de alimentación, así que el cuaderno en que solía escribir mis notas e ideas para poemas
“Eres hermosa. Como uno de esos perritos que caben en
y cuentos se convirtió en dicho diario. Las páginas en
una taza de té, pero hablas y eres tan tierna”, me decía
blanco que habían sido destinadas a escribir lo que me
Ulises mientras me peinaba con un cepillo de Barbie,
venía a la mente y que a veces tomaba la forma de un
después de sacarme me dio un baño en el lavabo
relato se fueron llenando de menús, listas de platos de
lleno de burbujas. Me compró mucha ropa nueva de
verduras al vapor, porciones de proteína, fruta y litros
muñeca hecha a mano por una mujer que se anuncia
de agua ingeridos.
en Facebook, así que por un tiempo me vestí con puras prendas únicas hechas a mano. Desde luego, dejé de
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La ropa comenzó a quedarme floja y pude volver a
trabajar, pero cuesto tan poco que mi aportación no
ponerme prendas que no usaba desde que el otro
hace falta para el mantenimiento de nuestro hogar.
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Para protegerme del frío, Ulises compró una pecera
El reproductor de audiolibros se quedó sin batería hace
en una tienda de animales y le instaló una lámpara
tiempo. Le agradezco que no olvide darme agua y alga.
diseñada para mantener calientes a los reptiles, incluso
Ahora me llena de agua dos botellas de refresco, de una
de noche, cuando deja de emitir luz. Ahí colocó
bebo y en la otra me baño.
muebles de muñeca y un pequeño reproductor de sonido digital MP3 que llenó de audiolibros. La ropa
El rincón de polvo y pelusa de mi habitación se ha
sigue quedándome cada vez más grande y Ulises ya no
llenado de animalejos repugnantes. Eso es lo que
encuentra nada más pequeño.
me pareció al despertarme esta mañana. Entonces recuerdo que son los famosos ácaros microscópicos
Todos los días ponía en mi pecera tapas de refresco
que se alimentan de las partículas de piel muerta que
llenas de migajas que preparaba él mismo: pan
se desprende de los humanos. Ya me es posible verlos.
desmoronado, queso y frutas ralladas muy finamente,
Para mí son del tamaño de una mosca. Un día serán
agua purificada. Recientemente Ulises leyó que la
gigantescos y podrán devorarme.
espirulina es el alimento más completo sobre la tierra, así que compró un bote de escamas de esta alga en un acuario y empezó a alimentarme con él. Sabe a eso: comida de pescado, pero creo que es lo mejor para
Ulises busca y busca por la pecera. No ha querido
que él no se moleste tanto en rallar comida cada vez
remover ninguno de los muebles, ni el montón de polvo
más pequeña.
ni el reproductor ni la bola de algodón que me sirve de cama y cobijo. Usa primero una linterna y luego
De hecho, ya no me sirve la espirulina en tapitas de
una lupa. Yo no entiendo lo que dice, pero alcanzo a
refresco, últimamente la desmorona sobre mi hábitat,
escuchar el latido agitado de su corazón como un trueno
como se hace cuando se alimenta a los peces.
que se repite sin parar.
Ulises siguió llevándome a la cama con él para
“¡Aquí estoy, aquí”, le grito y agito los brazos como si
colocarme sobre su miembro durante un tiempo, pero
fuera yo un náufrago flotando en una balsa lastimera en
ya estoy tan pequeña que apenas me siente. Antes
medio del mar infinito, y tratara de llamar la atención de
platicaba
Dios.
conmigo
mientras
limpiaba
mi
pecera,
pero ahora se le olvida, así que paso el día desnuda, recogiendo polvo y pelusa que amontono en un rincón.
Él ya no me ve ni me escucha. t
revistatexturas.blogspot.com.ar
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