Las aulas de las escuelas tienen que sonar a música, muchas ya lo llevan haciendo desde hace años. Montse Sanuy ha sido una pionera en este quehacer, dando clases a niños y a maestros, transmitiendo su experiencia y estableciendo un puente directo con Carl Orff, uno de los grandes renovadores de la pedagogía musical. Este libro es un buen compendio de las ideas y reflexiones que Montse ha ido acumulando a lo largo de su trayectoria. Su fundamento en la experiencia directa se nota en su manera directa, sencilla y sugerente de expresarse, que huye de cualquier pedantería o disquisición bizantina, con un cierto tono popular y oral. ( ) la música no se aprende a través de la teoría sino de la práctica. Por eso, esta obra está llana de juegos, ejemplos y canciones cuya eficacia ha sido contrastada con muchos grupos de niños. Este libro no solo tiene textos, sino músicas para cantar, bailar, jugar, tocar y escuchar.