Comunista 065 Por la respuesta de la mayoría aTribuna las contraIdeas y debate revolucionario reformas neoliberales
MOVIMIENTO COMUNISTA MEXICANO Diciembre, 20 de 2013
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Consejo Editorial: Daniel Carlos García, Marcos Leonel Posadas, Juan Pablo Jardón, Federico Piña, Eder Ángeles Vite, Saúl Torres Maya y José Luis Alonso Vargas. Director: Marcos Leonel Posadas Subdirector: Eder Ángeles Vite Jefe de Redacción: Juan Carlos Alemán Diseño Original: Paloma Robles Colaboradores: Federico Piña, Rosalba Mendieta, Arturo Martínez Nateras, Fernando Alcocer, Xavier Robles, Marcos Leonel Posadas, Daniel Carlos García, Edgar Avilés, Juan Pablo Jardón, Saúl Torres Maya, Juan Carlos Alemán, Gerardo Peláez Ramos, Teresa Gurza, Gustavo Rubén Rivera, Uuc-kib Espadas Ancona. Tribuna Comunista, Ideas y Debate Revolucionario es un órgano de análisis y difusión semanal distribuido por correo electrónico y las diferentes redes sociales en Internet. Los contenidos no necesaria-mente forman parte de la línea editorial del Movimiento, al menos que se exprese lo contrario. La publicación busca abonar al debate de los grandes problemas de nuestro país; su permanencia depende de sus lectores y de quienes con él contribuyen; es un órgano abierto a las diferentes posiciones políticas que fomenten la discusión. Síguenos en Facebook y Twitter como Movimiento Comunista Mexicano y @MovComunistaMex
La movilización para oponerse al asalto en el poder legislativo contra el patrimonio energético nacional fue reducida e ineficaz; fallas que deben superarse. Los esfuerzos dentro y fuera de las Cámaras fueron insuficientes frente a legisladores vándalos del pri-pan-verde-panal, bajo las órdenes del gobierno de Peña Nieto. El asalto legislativo se hizo para romper la Constitución de la República al liquidar el sentido original a los artículos 25, 27, 28 y para, con 21 transitorios añadidos, dar dimensión constitucional al entreguismo de los recursos energéticos en favor del capitalismo privado, de las transnacionales y el imperialismo de EU. Además el manejo de ese inmenso patrimonio se concentró en el Ejecutivo, a fin de que Peña conduzca el despojo y la gran corrupción que viene con la reforma aprobada. Los asaltantes ganaron este episodio aciago y la ofensiva contra la nación no ha terminado. Siguen la imposición de las leyes derivadas, su aplicación, sus efectos negativos, así como los de otras reformas aprobadas -laboral, “educativa”, de telecomunicaciones, fiscal, electoral-; lo que se sumaran a los impactos de las políticas económicas, que con las alzas de precios e impuestos disminuyen más aún los salarios e ingresos de los trabajadores; la economía no crece y está muy concentrada en monopolios que devastan miles y miles de empresas; la juventud tiene cerrados los caminos de una vida buena, etc. Ni el gobierno de Peña ni las cámaras legislativas responden a los intereses y el sentir de la mayoría de la sociedad (por eso negaron la necesaria consulta popular acerca de la reforma energética). No tienen confianza ni representatividad de la población, el régimen político mexicano está en crisis, lo sostienen mafias que suplantan a los partidos, la desinformación y engaño de los medios de difusión, las elecciones fraudulentas; con tales instrumentos de falsificación de la democracia se imponen gobiernos y mayorías legislativas. Para echar abajo esos obstáculos a la democratización política es indispensable cambiar las relaciones de fuerza; esto sólo es posible si la mayoría se expresa en defensa de sus intereses. La lucha política y social se vuelve necesidad ineludible para la mayoría del pueblo mexicano, este ya lo siente y lo va comprendiendo; el espacio para la lucha es extenso aun con las limitantes y la represión. Cada uno tiene temas urgentes pero los problemas nos abarcan a todos, nos son comunes. Pese a la falsificación que hacen los medios de incomunicación y la propaganda oficial, lo que es real es la identidad de intereses de la mayoría y también que es posible construir propuestas de soluciones que pueden impulsarse por la mayoría. La reducida e ineficaz acción contra la reforma energética también puso a la vista defectos propios que traban el desarrollo de las fuerzas que luchan por cambios importantes en el país; estas fuerzas tienen una amplia base que puede llegar a ser una nueva mayoría política; no se olviden los 15 millones de votos a favor de López Obrador en el 2012; téngase en cuenta las luchas muy diversas, aunque dispersas, que a lo largo y ancho del país se producen día con día. El ya próximo año 2014 debe ser el tiempo para construir la respuesta de la mayoría, de prepararse para detener la ofensiva de la oligarquía capitalista, de hacer camino hacia la conquista de la soberanía popular para conducir el Estado y dar otro rumbo a la sociedad mexicana; tiempo de argumentar, explicar, organizar, de luchar por urgencias como frenar la carestía y el aumento de salarios. Preparar la respuesta de la mayoría obliga a todos los agrupamientos populares y a sus dirigentes a resolver los defectos y vicios de su actividad. Construir la nueva mayoría políticosocial obliga a la unidad de acción, al entendimiento entre los movimientos, a enriquecer formas de lucha reiterativas y pobres de contenido, son ineficaces. Combatir enfermedades de los movimientos como el clientelismo, el sectarismo, la falta de democracia interna.
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