“En tiempo de crisis el pueblo de Dios camina en prosperidad” Introducción Los pronósticos para el primer semestre del año 2009 son malos, muy malos. El paro sube, la morosidad aumenta, los trabajadores se reducen en las empresas y el estado no tiene fondos suficientes para levantar el país. ¿Cómo le afecta esto al pueblo de Dios? En nada. ¿Por qué? Porque la prosperidad de un país radica en el dinero, empleo y la bolsa; mientras que para los hijos de Dios la prosperidad y la estabilidad económica depende de nuestro Señor. La iglesia no debe tener miedo a la crisis, porque su fundamento es Jesús. No hablamos de la asistencia de la iglesia, hablamos de los hijos de Dios. El pronóstico de la sociedad ya lo hemos mencionado, ahora bien, ¿cuál es el pronóstico que nos da Dios? Desarrollo V.12 El Señor nos pide que le TEMAMOS, es decir, que antes de actuar y hablar valoremos y sojuzguemos lo que Dios nos exige. Respetemos a Dios con nuestras conversaciones, nuestros pensamientos, nuestras actitudes. ANDEMOS EN TODOS SUS CAMINOS: Dios en los suyos y no en los nuestros. No dice en unos cuantos, dice en TODOS. “El que permanece en mí debe andar como yo anduve”, dice el Señor. AMEMOS: El amor es más que palabras, es una actitud, que brota desde un corazón agradecido. SIRVAMOS: Con todo el corazón y con todo el alma. Él que quiere servir a Dios con todo el corazón y el alma tienen que entender que va a sacrificar su voluntad, su carácter, su dinero, su tiempo, su cansancio, su familia y toda su vida, ya que Dios no quiere buenas intenciones, el quiere realidades. V.13 GUARDAR SUS MANDAMIENTOS No podemos decir que le amamos y hacemos lo que nos da la gana, esto es falso y manchamos el testimonio de Jesús. Debemos guardar sus mandamientos porque le amamos y no guardar los mandamientos para conseguir su amor, ¡esto es falso! Él ya nos ama, lo demuestra y quiere que nosotros podamos corresponderle con obediencia y sujeción.