





Se calcula que millones de personas descubren que, incluso después depensar que se han recuperado de su enfermedad, siguen sintiéndose deprimidos, fatigados, apáticos, ansiosos o emocionalmente inestables. En un estudio del sistema sanitario del Departamento de Asutos de los Veteranos de EE.UU., "nos dimos cuenta de que teníamos una nación angustiada, debido al caos de la pandemia y el cierre", reflexiona Ziyad Al-Aly, director del centro de epidemiología clínica de la Universidad de Washington en San Luis (Misuri) y coautor del informe.
El vínculo entre las enfermedades virales y la depresión no es nuevo, pero se ha reconocido y comprendido más ampliamente en las últimas décadas. Un estudio publicado en un número de 2016 de la revista Brain, Behavior, and Immunity, por ejemplo, descubrió que las personas que habían estado enfermas de gripe en los 30 a 180 días anteriores tenían un riesgo 57% mayor de sufrir una nueva depresión, en comparación con las que esquivaron el virus. Los expertos afirman que la depresión posviral también puede producirse con el virus de Epstein-Barr, que causa mononucleosis, y otros virus no específicos. El estudio de Al-Aly, publicado en febrero de 2022 en la revista BMJ, descubrió que las personas que habían estado enfermas de COVID tenían un 35% más de riesgo de desarrollar un trastorno de ansiedad y un 39% más de riesgo de experimentar un ataque de depresión un mes después de su enfermedad; estos aumentos iban acompañados de un mayor uso de antidepresivos y benzodiacepinas.
No se sabe exactamente cómo la COVID-19 desencadena la depresión, pero hay varias hipótesis. El virus del SARS-CoV-2 puede causar más inflamación en el cerebro y activar las células microgliales, que son unas células inmunitarias del sistema nervioso central que producen moléculas inflamatorias, explica Al-Aly. "La inflamación puede afectar a las regiones del cerebro que regulan el afecto y las emociones: puede activarlas o desactivarlas".
No se sabe exactamente cómo la COVID-19 desencadena la depresión, pero hay varias hipótesis. El virus del SARS-CoV-2 puede causar más inflamación en el cerebro y activar las células microgliales, que son unas células inmunitarias del sistema nervioso
central que producen moléculas inflamatorias, explica Al-Aly. "La inflamación puede afectar a las regiones del cerebro que regulan el afecto y las emociones: puede activarlas o desactivarlas".
-Manténgase informado. Escuche los consejos y recomendaciones de las autoridades nacionales y locales. Recurra a fuentes informativas fiables, como la televisión y la radio locales y nacionales, y manténgase al día de las últimas noticias de la Organización Mundial de la Salud
-Siga una rutina. Conserve sus rutinas diarias en la medida de lo posible o establezca nuevas rutinas.
- Reduzca la exposición a noticias. Intente limitar la frecuencia con la que ve, lee o escucha noticias que le causen preocupación o tensión.
- El contacto social es importante. Si sus movi-
- Evite el alcohol y las drogas. Limite el consumo de bebidas alcohólicas o evítelas por completo. No empiece a consumir alcohol si nunca lo había hecho.
- Controle el tiempo de pantalla. Sea consciente del tiempo que pasa cada día delante de una pantalla. Asegúrese de descansar cada cierto tiempo de las actividades de pantalla.
-No abuse de los videojuegos. Aunque los videojuegos pueden ser una forma de relajarse, cuando se está en casa mucho tiempo se puede caer en la tentación dedicarles mucho más tiempo del habitual.
Si usted es Padre o Madre de Familia
- Le dejamos las siguientes Recomendaciones: -Mantenga las rutinas familiares siempre que sea posible o cree nuevas rutinas -Ayúdeles a encontrar formas positivas de expresar sentimientos como el miedo y la tristeza. A veces puede ser útil hacerlo mediante una actividad creativa como jugar o pintar.
los jóvenes están expuestos a cambios biológicos, cognitivos y emocionales que resultan desa antes, y que, si no se abordan de la manera correcta, pueden generar problemas a largo plazo.
Según el Departamento de Salud y Servicios
Humanos de Estados Unidos, al menos el 49,5% de los adolescentes ha sufrido de problemas mentales en algún punto de su vida.
Este es un dato que se debe tomar en cuenta, ya que indica que los problemas de salud mental en los adolescentes son más comunes de lo que piensa la mayoría de las personas. Abordar los temas de salud mental en la adolescencia puede ser útil para prevenir la aparición de trastornos mentales crónicos, dotar a los adolescentes de herramientas para enfrentar las di cultades y contrarrestar el estigma que suele rodear a las enfermedades mentales. De esta manera, los adolescentes pueden sentirse más seguros al momento de buscar ayuda en caso de que la necesiten.
Los factores de riesgo para la salud mental de los adolescentes son muy variados, y pueden desa rrollarse dentro de su entorno familiar o social. Reconocerlos ayuda a comprender con mayor pro fundidad qué es lo que hay detrás de trastornos como la depresión y la ansiedad, y puede ser útil para tomar medidas preventivas y de apoyo.Intervenir a tiempo puede hacer que estos factores de riesgo se mantengan bajo control, y mitigar el impacto que pueden tener sobre la salud mental de los adolescentes. Es importante desestigmatizar los trastornos de salud mental, familiarizarse con ellos, y obtener herramientas para ayudar a las personas que puedan estar experimentando uno o más de estos trastornos.
familiar puede ser un desencadenante de problemas de salud mental, sobre todo cuando no hay su ciente comunicación y los jóvenes no se sienten en un entorno seguro. Pero esto no solo aplica para las relaciones familiares, sino que se extiende de forma general a las relaciones sociales. La presión social negativa también puede derivar en conductas perjudiciales y afecta
Los adolescentes que tienen problemas de aislamiento social pueden desarrollar sentimientos de soledad, depresión y ansiedad. Un artículo titulado Social isolation and its impact on child and adolescent development: a systematic review destaca que el aislamiento genera mayores niveles de cortisol, afecta el desarrollo cognitivo, e impacta negativamente sobre la salud mental de los adolescentes. Estos problemas, además, se agravan cuando los adolescentes tienen di cultades para comunicarse dentro de su entorno familiar y social, ya que pueden sentir que nadie los entiende o los comprende. Cuando no cuentan con un espacio seguro para compartir sus problemas o aquello que los desafía a nivel emocional, el ciclo de aislamientos se puede
¿Cómo identificar problemas de salud mental en los jóvenes?
Estos son algunas de las señales de alerta que el National Institute of Mental Health recomienda tener en cuenta:
- La persona está irritable la mayor parte del tiempo.
- Habla de sus miedos y preocupaciones de manera constante.
- Duerme demasiado o muy poco, y parece tener una sensación de sueño constante durante el día.
- Tiene problemas académicos o ha empezado a disminuir sus cali caciones.
- Depresión: La depresión es uno de los principales problemas de salud mental en adolescentes de todo el mundo.
- Ansiedad: El estudio de la CDC que recién mencionamos, también destaca que los problemas de salud mental en los adolescentes han visto un aumento signi cativo durante los últimos años.
- Trastornos alimentarios: Los trastornos mentales en la adolescencia son muy variados, y se maniestan de diferentes formas. Sin embargo, cuando se trata de trastornos alimentarios, resulta más sencillo identi car ciertos patrones que pueden alertar a los familiares y amigos sobre la presencia de un problema.
Programa de alfabetización en salud mental “EspaiJove.net”
El Departamento de Salud de la Generalitat ha creado el “Programa “Salut i Escola” con la nalidad de mejorar la salud de los adolescentes mediante acciones de promoción de la salud, de prevención de las situaciones de riesgo y de atención precoz para los problemas relacionados con la salud mental, la salud afectiva y sexual, el consumo de drogas, alcohol y tabaco, en colaboracióncon los centros educativos y los servicios de salud comunitaria presentes en el territorio. Partiendo de los modelos y recomendaciones de promoción y prevención para la salud mental que nos ofrecen las diferentes instituciones internacionales y nacionales.
El objetivo general del programa es la promoción de la salud mental y la prevención de los trastornos mentales en la población juvenil:
- Mejorar los conocimientos de salud mental.
- Conocer y promover conductas saludables para la salud mental.
- Conocer y disminuir las conductas de riesgo para la salud mental.
- Aumentar los conocimientos de los problemas mentales y de las manifestaciones de los trastornos en sus fases incipientes.
- Facilitar la detección temprana de los trastornos mentales.
- Orientar sobre los recursos disponibles para la promoción de la salud mental, la prevención de los trastornos y para su valoración y tratamiento.
- Disminuir el estigma asociado a los trastornos mentales.
- Favorecer la inclusión social de quienes los padecen.
mentales relacionados con esta di cultad muestra incluso más la importancia de cuidar nuestra mente. Por lo tanto, cada vez es más indispensable la implementación de un enfocarnos en la prevención de tales trastor nos puede ayudar a que en un futuro disminuyan notablemente los casos y consecuencias, mejorando la calidad de vida de todos.
Las señales de alerta psicopatológicas son factores indicadores de riesgo. Ante la presencia de uno o varios de ellos, hay que monitorizar el desarrollo de un trastorno de conducta. Los principales son:
Factores dependientes de los padres especícos para la adolescencia: padres con importantes problemas de tolerancia por las crisis de la adolescencia, padres que no aceptan la autonomía progresiva de sus hijos, que necesitan separarse del niño o que le hacen una demanda excesiva de autonomía.
-Circunstancias socioeconómicas adversas de la familia: familias aisladas socialmente, cambios de residencia repetidos,
paro sin subsidio de varios miembros de la familia. También in uyen las variables culturales.
-Problemas con la justicia: adolescentes con protección judicial, problemas con la justicia repetitivos o sometidos a medidas judiciales. Antecedentes de conductas agresivas en grupo o aislada.
El TDAH se caracteriza por la existencia de 3 síntomas: dé cit de atención, hiperactividad e impulsividad. Existen 3 subtipos según predomine el dé cit de atención (TDAH inatento), la hiperactividad e impulsividad (TDAH hiperac-tivo-impulsivo) o los 3 síntomas (TDAH combinado).
La clínica del TND se expresa con un patrón de comportamiento desa ante, hostil y negativista hacia las guras de autoridad, junto con discusiones, negativa a cumplir sus responsabilidades y enfados con otros niños o con los adultos. A diferencia del TD, no existen agresiones físicas y transgresiones serias de las normas (son entidades independientes).
El TD es el trastorno de conducta más grave. Se puede de nir como situaciones en las que aparece un patrón de comportamiento antisocial que vulnera derechos de las otras personas, así como normas de convivencia o reglas socialmente aceptadas para su edad, siendo estos comportamientos inmanejables por personas cercanas, lo que provoca un deterioro progresivo y signi cativo en el ámbito interpersonal, relacional y laboral. Además, se pueden producir agresiones a personas y animales, destrucción de la propiedad, robos y transgresiones graves de las normas sociales. Su frecuencia estimada se encuentra entre el 1 y el 3%10,11. Y la edad de aparición se sitúa en la preadolescencia y adolescencia.
terapéutica en los trastornos del comportamiento en jóvenes
Las terapias o intervenciones basadas en soluciones se basan en los siguientes aspec tos: establecer la demanda, postular los cam bios preintervención, establecer las líneas de motivación y empatía, análisis de las excep ciones (explicitar lo que «va bien» o lo que «hace bien» el joven), escalar la problemática presente, establecer las tareas entre sesión y sesión, y las preguntas que permitan mejorar el afrontamiento del problema. Estos pasos se llevan a cabo en un entorno narrativo, en el cual el chico tiene mucho protagonismo a través de la empatía, los diálogos, los contextos de con anza y de aceptación. La compliance therapy se desarrolla en 3 fases:
Exploración de sentimientos y pensamientos sobre la intervención, manejando la ambivalencia. Para ello hay que considerar las ventajas y desventajas de la intervención, centrarse en los síntomas o problemas sobre los que la intervención actúa, identi car posibles benecios indirectos y ver las consecuencias negativas de la no intervención. Lo importante en esta fase es que el adolescente se convenza de la necesidad de acudir a la terapia, y no que le convenzamos nosotros a él, ya que las personas se convencen más por las razones que descubren ellas mismas que por las que les explicamos los demás. Aclaración del concepto del problema y opiniones sobre la intervención. Para su realización, se comienza repasando la historia clínica anterior. A continuación, se formula la postura del paciente y por último se empatiza sin juzgar la negación de la intervención. Se pueden utilizar frases como «¿qué sientes?, lo has tenido que pasar mal, comprendo que ha sido duro…».
Con rmar la necesidad de continuidad de la intervención. Para ello, hay que encontrar un razonamiento que acepte el paciente, según el cual la intervención puede ser parte de la estrategia para afrontar los problemas que ha tenido. Se puede, por ejemplo, construir una lista con las preocupaciones y los miedos que pueda tener el adolescente, señalar los argumentos a favor y en contra que otros han tenido, etc.
-Estar insensible o sentir que ya nada importa
-Tener dolores o malestares inexplicables
-Sentirse desesperanzado o indefenso
-Fumar, beber o consumir drogas en mayor medida que lo habitual
-Sentirse inusualmente confundido, olvidadizo, nervioso, enojado, molesto, preocupado o temeroso
-Gritar o pelearse con familiares y amigos
-Tener cambios de estado de ánimo signi cativos que causan problemas en las relaciones
-Tener pensamientos y recuerdos persistentes que no puede sacar de la cabeza
-Escuchar voces o creer cosas que no son ciertas
Consejos para vivir bien con una condición de salud mental
Primeras señales de advertencia
¿No estás seguro si alguien que conoces tiene problemas de salud mental? Uno o más de los siguientes sentimientos o comportamientos pueden ser la primera señal de advertencia sobre un problema:
-Comer o dormir mucho o poco
-Alejarse de las personas y las actividades habituales
-Tener poca energía o nada en absoluto
-Pensar en lastimarse o lastimar a otros
-No tener capacidad de realizar las tareas diarias, como cuidar a los hijos o ir al trabajo o la escuela
sientes mejor, no dejes de ir a terapia o de tomar medicamentos sin la guía de un médico. Trabaja con un médico para ajustar de manera segura las dosis o los medicamentos si es necesario continuar con un plan de tratamiento.
Mantener actualizado al médico de atención primaria. Los médicos de atención primaria son una parte importante del tratamiento a largo plazo, incluso si también consultas a un psiquiatra.
Aprender sobre la condición. Saber más puede ayudarte a cumplir con tu plan de tratamiento. La información también puede ayudar a tus seres queridos a ser más solidarios y compasivos. Practicar el autocuidado. Controla el estrés con actividades como la meditación o el
Comunicarse con familiares y amigos. Mantener las relaciones con los demás es importante. En tiempos de crisis o momentos difíciles, comunícate con ellos para obtener apoyo y ayuda.
Desarrollar habilidades de afrontamiento.Esto puede ayudar a las personas a lidiar con el estrés más fácilmente.
Dormir lo su ciente. Dormir bien mejora el rendimiento del cerebro, el estado de ánimo y la salud en general. La falta constante de sueño se asocia con ansiedad, depresión y otras afecciones de salud mental.
Consejos para una buena salud mental
1. Convivencia familiar
Padres y madres deben permitir que ejerzan su libertad y sean ellos mismos/as quienes descubran y exploren. Aunque sin bajar la guardia, para detectar cualquier cambio de conducta, que pueda indicar algún problema.
2. Límites y libertad
En el camino hacia su propia identidad como adultos, es frecuente que los adolescentes se opongan a los padres, a los profesores, así como a otras guras que ejercen autoridad. En este sentido, establecer limitaciones les va a ayudar a aprender cuáles son los límites.
3. El respeto
El respeto por sí mismos, hacia los demás y por el medio ambiente es algo que se debe
4. Horarios y rutinas
Mantener horarios y rutinas en la adolescencia, como horarios para las comidas, las tareas domésticas, la higiene, el tiempo de ocio o el dedicado al estudio, les ayudará a organizarse, plani carse y aprender donde están los límites.
5. Las amistades en la adolescencia
Las amistades juegan un papel clave en la adolescencia. Es habitual que pre eran pasar más rato con sus amigos que con la familia.
Es importante mostrar interés por las amistades, así se aporta seguridad a los menores y se evitan situaciones de riesgo.
También lo es promover el respeto, la honestidad y la amistad, que son hábitos sociales
6. Alimentación saludable y variada
Seguir una alimentación saludable y variada es siempre bene cioso para la salud. Adquirir buenos hábitos en la adolescencia ayuda a prevenir problemas a largo plazo y facilita la adopción de un estilo de vida saludable.
7. El descanso en la adolescencia
La adolescencia es una etapa de gran desgaste físico y mental. Dormir entre 9 y 10 horas diarias es importante para un buen rendimiento académico y un mejor humor.
8. Practicar actividad física
Practicar actividad física una hora diaria, aporta a los adolescentes bene cios físicos, ya que se previene la obesidad y el sedenta
arismo, y se toma conciencia corporal; Psicológicos, ya que se aumenta la autoestima y se disminuyen efectos como la ansiedad y la depresión, y sociales, como trabajo en equipo o responsabilidad.
9. Uso responsable de las nuevas tecnologías
Educar a niños y adolescentes en un buen uso de internet, de las redes sociales y los videojuegos es clave para hallar un equilibrio y usarlos de forma saludable.
¿Qué aspectos trata la psicología de la adolescencia?
La psicología de la adolescencia trata diversos aspectos relacionados con el desarrollo y el bienestar de los adolescentes, tales como:
-La iformación de la identidad y la personalidad: los adolescentes buscan de nir quiénes son, qué les gusta, qué valores tienen y cómo se diferencian de los demás. Para ello, experimentan con distintos roles, estilos y comportamientos, y se identi can con sus referentes.
-La autoestima y la imagen corporal: en esta etapa se preocupan por su apariencia física y por cómo son percibidos por los demás. El cambio corporal que implica la pubertad puede generar insatisfacción, vergüenza o
-Lasexualidad y las relaciones afectivas: en la adolescencia descubren y exploran su sexualidad, sus preferencias y sus sentimientos. Tienen sus primeras experiencias amorosas y sexuales, que pueden ser fuente de placer, pero también de riesgos, como el embarazo no deseado o las enfermedades de transmisión sexual. La educación sexual es fundamental para prevenir estos problemas y
independencia frente a sus padres, lo que puede generar con ictos y tensiones. Al mismo tiempo, necesitan el apoyo y la orientación de sus padres para afrontar los retos y las di cultades de esta fase. La comunicación, el respeto y el afecto son claves para mantener una buena relación familiar.
-La relación con los amigos y el grupo: sienten una gran necesidad de pertenecer a un grupo de iguales con los que comparten intereses, gustos y actividades. Los amigos les ofrecen apoyo emocional, diversión y aprendizaje social. Sin embargo, también pueden ejercer presión o in uencia negativa sobre ellos, como incitarles a consumir alcohol o drogas.
-El rendimiento académico y la orientación vocacional: los adolescentes deben afrontar las exigencias del sistema educativo y tomar decisiones sobre su futuro profesional. Esto implica un esfuerzo cognitivo, una motivación y una plani cación que pueden verse afectados por factores internos o externos. La orientación vocacional les ayuda a conocer sus aptitudes, intereses y opciones laborales.
-Si bien no se puede prevenir completamente la aparición de problemas de salud mental, se pueden tomar medidas para reducir el riesgo y promover la salud mental en los adolescentes. Algunas estrategias preventivas son:
-Educación sobre salud mental: proporcionar información sobre los trastornos mentales
comunes, los factores de riesgo y las estrategias de afrontamiento puede ayudar a los adolescentes a comprender y cuidar su propia salud mental.
-Promoción de entornos de apoyo: crear entornos seguros y de apoyo en el hogar, la escuela y la comunidad, fomentando la inclusión, el respeto y la empatía.
-Enseñanza de habilidades de afrontamiento: ayudar a los adolescentes a desarrollar habilidades de afrontamiento saludables, como la resolución de problemas, la gestión del estrés y la comunicación efectiva.
-Detección temprana e intervención: estar atentos a los signos de problemas de salud mental y buscar ayuda profesional de manera temprana puede prevenir la exacerbación de los síntomas y permitir una intervención más efectiva.
¿Cómo conseguir un bienestar
Existen diferentes estrategias para lograrlo, por ejemplo: fomentar la autoestima y autoaceptación para desarrollar una imagen positiva, estimular habilidades sociales para fomentar la empatía y comunicación efectiva, promover actividades de ocio y pasatiempos y enseñar habilidades de autorregulación emocional para que los adolescentes pueden comprender y gestionar sus emociones de forma saludable.
¿Qué es la terapia emocional?
La terapia emocional es un tipo de terapia focalizada y centrada en las emociones. En este sentido, el trabajo se centra en procesar emocionalmente las situaciones, mediante la observación de la emoción como una reacción adaptativa que hace posible la supervivencia y la reacción al medio.
¿Por qué se realiza?
La terapia emocional se realiza porque tiene una serie de ventajas o bene cios en el estado emocional de las personas, especialmente en aquellas personas que tienen problemas relacionales. Sin embargo, es aplicable a muchos otros problemas. Entre los bene cios más destacados se encuentran los siguientes:
-Mejora del estado de ánimo: la terapia emocional mejora el estado de ánimo, porque permite a la persona enfrentar los problemas que le generan malestar. Además, permite hablar con con anza y libertad, liberando las emociones negativas sobre las experiencias y sentimientos de uno mismo. de uno mismo, algo que también resulta fundamental para las relaciones con los demás.
-Ofrece herramientas para tratar los con ictos o problemas que puedan surgir: en las sesiones de terapia emocional, se ofrecen nuevas herramientas y pautas para solventar problemas, algo que también puede ayudar a visualizar los con ictos de manera distinta para que tengan menor afectación en la persona.
-Supone un aprendizaje para vivir en armonía: la terapia supone un ejercicio de introspección que permite un mejor conocimiento de uno mismo, algo que también resulta fundamental para las relaciones con los demás.
¿En qué consiste?
La terapia emocional tiene el objetivo de cambiar los esquemas emocionales de las personas, centrándose en la manera de captar, procesar y expresar las propias emo ciones. En este sentido, para llevar a cabo este tipo de terapia se siguen una serie de fases.
La primera fase consiste en tomar conciencia para identi car las propias emociones. A continuación, se afronta la emoción median te el conocimiento y la expresión de la emo ción, generalmente negativa.
A partir de este ejercicio, se empieza a regular la emoción, un hecho que no implica reprimirla o no sentirla, sino de adaptarla a cada situación, dando sentido a la experiencia.
Es necesario tener en cuenta que somos seres emocionales y que la vida no es lineal, por lo que en muchas ocasiones tendremos que afrontar situaciones que nos producirán malestar. No debemos patologizar la vida, es decir, no todo malestar está relacionado con un trastorno, de manera que el estar tristes, tener sentimientos encontrados, pasar momentos de debilidad NO implican tener un problema de Salud Mental. Es muy conveniente y saludable pedir ayuda profesional si lo crees necesario. Esto no tiene que implicar ningún diagnóstico.
¿Cómo sé si tengo un problema de Salud Mental?
Es fundamental que sepamos que la solución a esta pregunta no se encuentra en internet. Las únicas personas que pueden determinar si tu Salud Mental está siendo afectada por algún motivo son los/as profesionales dedicados a ello.
Muchas personas evitan el tratamiento por vergüenza o miedo. Si te preocupa tu Salud Mental, no dudes en pedir consejo. Consulta a tu médico/a de atención primaria o pide una cita con un/a psiquiatra, psicólogo/a u otro/a profesional de la Salud Mental.
Sin embargo, existen algunos tips que te pueden ayudar a la hora de determinar si no vas en la dirección correcta en lo que a tu Salud Mental se re ere. Aquí te ofrecemos algunos de ellos:
• Cansancio importante, baja energía, cam bios en la alimentación y en los horarios de sueño.
• Gran di cultad para afrontar los problemas o las actividades de la vida diaria.
• Sensación de desconexión o retiro de las actividades normales.
• Pensamientos inusuales o distorsionados.
• Ansiedad excesiva.
• Tristeza, depresión o apatía prolongadas.
¿Qué debo hacer si noto que mi Salud Mental ha empeorado?
Comentarlo con tu entorno es fundamental para que puedan ayudarte. Acude al médico de cabecera para que pueda hacer una primera valoración y derivarte al Equipo de Salud Mental si fuera necesario. La mejor solución siempre es acudir a un/a profesional que te guíe para conseguir la estabilidad que sientes que has perdido en tu vida.
Es aconsejable que aprendamos a distinguir aquellos aspectos de nuestra vida que nos generan este desajuste. Determinar qué es lo que queremos cambiar y qué estamos dispuestos a hacer para conseguir estos cambios.
¿Qué situaciones pueden llevar a una persona a pensar en el suicidio?
En ocasiones, las personas atraviesan por momentos en su vida en los que la carga emocional a la que están sometidas es tan grande que consideran imposible poder abordarla generándoles gran sufrimiento. No son llamadas de atención ni signo de debilidad, egoísmo, cobardía o valentía.
El suicidio es una conducta compleja que puede darse por múltiples factores que aumentan la vulnerabilidad, algunos son:
• Factores de personalidad (impulsividad, desesperanza, etc.).
• Problemas de Salud Mental (trastornos afectivos, esquizofrenia, trastornos de personalidad, etc.) y trastornos por abuso de sustancias.
• Factores biológicos (hormonales, enfermedades, dolor, etc.).
• Factores familiares (la historia familiar de conducta suicida es un factor de riesgo).
• Factores psicosociales de riesgo suicida (situación económica, laboral, inmigración, crisis económica y social, etc.).
¿Cómo podemos ayudar a una persona que se autolesiona o lucha contra pensamientos suicidas?
Lo más importante es que asumamos nuestro papel en esta ayuda que consiste en el acompañamiento y el apoyo de la persona puesto que solo un profesional podrá atender de forma adecuada este tipo de situaciones. Así, durante este proceso es importante que nos mantengamos atentos ante cualquier señal de alerta que podamos observar, hablar con el/ella y hacerle sentir acompañado/a en todo momento.
¿Cómo puedo ayudar a algún/a amigo/a que tiene un problema de Salud Mental?
La ayuda más valiosa consistirá en practicar la escucha activa, demostrando nuestra comprensión y empatía. Esto hará que esa persona confíe más en nosotros y facilitaremos su comunicación con la familia y que pida ayuda a profesionales.
¿Cómo puedo pedir ayuda?
Un paso importante es entender que cuidar nuestra Salud Mental es importante y debemos hacerlo sin prejuicios, tabús ni miedos.
Pedir ayuda es un acto de valentía. Casi siempre callamos y ocultamos por miedo y vergüenza, signos poderosos del estigma en Salud Mental.
El primer paso a la hora de solicitar ayuda profesional es acudir al Centro de salud de referencia y será el/la médico de atención primaria (médico de cabecera) quien determine el proceso a seguir y dará las pautas necesarias, igual que ocurre con cualquier otra especialidad de la salud.
De todas formas, es necesario conocer que la urgencia en Salud Mental también existe y que, ante cualquier malestar desmedido que no podamos controlar podremos acudir a los servicios de Urgencias o llamar al 112.
¿Cómo sé si necesito ayuda?
En primer lugar, es necesario aclarar que no se necesita un motivo especí co para pedir ayuda a un profesional, siempre es buen momento para cuidar de nuestra Salud Mental.
Sin embargo, es cierto que consideramos que un malestar es signi cativo cuando interere de forma notable en nuestra vida diaria.
Hay una certeza que no se puede discutir y es que “Si estás pensando en pedir ayuda, es señal de que la necesitas”.
¿Cómo influyen la sociedad y las Redes Sociales en nuestra Salud Mental?
Más de 1/3 de los jóvenes en España presenta un uso problemático de internet y otro tercio estaría en riesgo de desarrollarlo. Un 43% de los adolescentes presenta una conducta problemática en el uso del WhatsApp. El 5% de los adolescentes declaran jugar con mucha frecuencia en webs de apuestas deportivas, y casi un 12% lo ha hecho en alguna ocasión. A mayor grado de uso problemático de las TIC y redes sociales la puntuación en riesgo de mala Salud Mental es mayor.
¿Cómo influye mi Salud Mental en mis relaciones sociales?
Nuestras emociones guían nuestra vida. Nuestros estados emocionales guían nuestras relaciones. Nuestros/as amigos/as y entorno más cercano nos conoce, saben cómo somos y suelen responder a nuestras necesidades sociales. Si tienes buena comunicación, si hablas de lo que sientes y de cómo te sientes no tiene por qué afectar a tus relaciones. Si ves que se resienten por tu malestar sabes que será bueno pedir ayuda.