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La definitiva salida del Rector

580. CSU 21-81, 6/ de 10 de junio.

Las crecientes amenazas e intimidaciones habían llevado a que en abril de 1980 el Rector Lic. Saúl Osorio Paz abandonara el país y se exiliara en México. Había solicitado al Decano más antiguo que asumiera el cargo interinamente. Pero a seis meses de su salida y en medio de los sucesos que se estaban dando, se llegaría finalmente a admitir que el Rector no regresaría.

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Dos meses después de la salida inicial de Osorio, el CSU había evaluado si el Rector estaba en posibilidades de reasumir sus responsabilidades. Pero ya se planteaba que, al vencer el plazo legal de los permisos, lo que procedía sería convocar a nuevas elecciones. Pero el CSU, en ese momento, había considerado que lo más conveniente era ampliar el permiso inicial de Osorio.

El Rector en funciones, Lic. Carrillo Reeves, no estuvo de acuerdo con la decisión del Consejo, por lo que declinó al cargo y fue relevado por el Decano que le seguía en antigüedad, el Ing. Raúl Molina quien tomaría posesión el 14 de julio, el mismo día de la masacre frente al edificio de rectoría. Quince días después, el 1 de agosto al vencer su período como Decano de ingeniería, Molina haría entrega del cargo al Lic. Romeo Alvarado, Decano de Ciencias Sociales y Jurídicas.

La presión a la que estaba sometida la Universidad era intensa y había forzado a abrir un diálogo con el gobierno. El sector progresista consideró que Alvarado había ablandado el enfrentamiento en su búsqueda por normalizar las actividades y orientarse a la academia. Alvarado debía entregar el cargo de Decano el 5 de mayo de 1981, pero se vería obligado a salir exiliado en noviembre de 1980.580

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581. USAC 44-80, 4.1/1980 de 24 de septiembre. El 12 septiembre el Lic. Osorio solicitó licencia con goce de sueldo por el término de tres meses más. Esta vez el CSU, por unanimidad resolvió denegar la solicitud.581 Saúl Osorio, luego de seis meses de ausencia en medio de diferentes confrontaciones al interior de la Universidad y ante la negativa de un nuevo permiso, renunciaría al cargo. Unas semanas después de la salida del Decano de Arquitectura, concretamente el 22 de octubre el CSU aprobó la solicitud de retiro presentada por Osorio y declaró vacante la rectoría de la Universidad.

Sería Leonel Carrillo quien, nuevamente, ocuparía interinamente el cargo desde el 1 de noviembre, hasta que un nuevo Rector electo tomara posesión en junio de 1981. Carrillo había mostrado una visión muy diferente a la de Osorio, consideraba que la Universidad debería distanciarse de la confrontación que había generado muerte y pérdida de importantes cuadros académicos.

La reducción del apoyo institucional a la lucha social se hacía notoria. Esta postura marcaría el accionar de la Universidad de San Carlos e influiría en los hechos que se desencadenaron dentro del movimiento social guatemalteco. Pero también incrementó el enfrentamiento a lo interno de la Universidad y llevaría a cambios en la estructura del poder universitario. La vinculación entre estudiantes y autoridades afines al movimiento social que se había mantenido por más de una década llegaría a su fin.

El movimiento revolucionario seguiría expandiéndose y mantendría el apoyo de grupos universitarios que, de manera independiente, participarían en nuevas estrategias sociales o de lucha guerrillera a nivel urbano y rural.

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