
1 minute read
OPINIÓN
Tirada de esta edición
156,980 ejemplares
Advertisement
Miembro de la Sociedad Dominicana de Diarios
Miembro de la Sociedad Interamericana de Prensa
Editorial
Generosa donación
Apartir de enero del 2017 tuvimos la valentía de movilizarnos contra la impunidad y la corrupción. Los excesos eran evidentes y la ciudadanía actuó con responsabilidad. Pero conjuntamente con este movimiento se hizo visible la superioridad moral como forma de desconocer toda legitimidad del contrario. El mundo empezó a dividirse entre los buenos (nosotros) y los malos (los otros).
Desde aquel entonces venimos diciendo, toda “revolución moral” puede derivar en fascismo, de derecha o de izquierda. Lo valioso es fortalecer el sistema de justicia y profundizar los cambios legales que generen más institucionalidad, transparencia y régimen de consecuencias. Y por supuesto, profundizar las políticas públicas que generen más inclusión, educación y responsabilidad ciudadana.
Entendiendo que no todo lo que sucede en otras parcelas políticas es pecaminoso, sucio e inmoral.
La anti política – todo extremismo lo es – reduce la complejidad social a la lucha de los buenos versus los malos.

La historia nos enseña que los procesos sociales y políticos son complejos y dialécticos. Llenos de contradicciones, matices, posibilidades. Ni los buenos son tan buenos. Ni los malos son tan malos. En el fondo, detrás de esta superioridad moral hay una profunda necesidad de protagonismo – hubris –, demostrando que necesitábamos afirmarnos mediante demostraciones manifiestas de poder.
Vinieron los torneos de honestidad: “yo soy más serio que tú y nadie es más serio que yo.” De esta forma, marcamos territorio, nos preocupamos excesivamen-
Hoy miércoles 14 de junio se conmemora en todo el mundo el Día del Donante de Sangre. Es una fecha dedicada a agradecer el gesto del donante voluntario no remunerado y a recordar la necesidad de donar con regularidad para garantizar la disponibilidad de la sangre y sus derivados en la calidad y cantidad suficiente para los requerimientos de la sociedad.
Editora de Diseño: Ximena Lecona
La cultura de la donación de sangre avanza lentamente en el país, pero avanza. Tabúes religiosos, supersticiones, miedos infundados por motivos de salud... son muchas las razones por las que hay una parte de la sociedad que no termina de convencerse de que unos minutos de su tiempo, una donación de una pinta de sangre salva vidas.
No es un tema menor en un país con