ESTRATEGIAS EJECUTIVAS
Volvamos a los niños. Usan ambos hemisferios y son creativos. Sin embargo, cuando entran a la primaria, es como si les cortaran el cerebro a la mitad. ¡Sí! Dejan de hacer tantas actividades dinámicas y ahora les ponen a escribir, vienen las matemáticas, se les pide memorización, etc., dejando el juego solamente para el descanso y el arte para la hora correspondiente. Se ejercita más el hemisferio izquierdo o racional. Luego, el alumno llega a la secundaria, donde tiene de seis a siete profesores, con una materia de actividades artísticas, la cual es opcional en la preparatoria. Se privilegia el pensamiento racional por encima del intuitivo. ¿Y qué pasa cuando llegan a la universidad? Les pedimos que hagan ensayos y que den su punto de vista crítico sobre algún asunto, pero tienen la tendencia a hacer resúmenes. No es que carezcan de capacidad… simplemente no están acostumbrados a establecer su juicio crítico. En este caso, puede decirse que el sistema educativo no se enfoca en la creatividad, pues no fomenta el pensamiento crítico y la creatividad. Se orienta más a la medición y no al aprendizaje, pues se basa en exámenes y a la acreditación, pero no hay que olvidar que enseñar al estudiante a aprender es lo más importante. Finalmente,
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DESARROLLO EMPRESARIAL
No. 182 ABRIL 2014
Networking
educar al ser humano es ayudarle a ser aquello para lo que fue creado… aquello para que vino al mundo, y no un ejercicio industrial de producción en serie que necesite ser medido para cumplir con estadísticas de aprobación y reprobación. En fin…
De la escuela a la empresa
¿Y qué sucede en la empresa? Pues la diferencia no es mucha con respecto a las aulas. Llegan los nuevos trabajadores, se les enseñan los procedimientos…¡y a trabajar! Solo en cerca del 10% de las empresas peninsulares hay un curso como parte del proceso de inducción, y éste es generalmente teórico. Lo demás se enseña en el lugar de trabajo. ¿Y la creatividad?¿Cómo puede ser innovador el personal si no se fomenta la creatividad? Allí está el detalle. En otros países (Japón, por ejemplo), existen cursos de capacitación constantes para los trabajadores, además de la exposición a retos y problemas a resolver utilizando círculos de calidad u otras técnicas relacionadas. No se trata de enseñar al trabajador a usar las máquinas, sino que él también descubra por qué se hace y que dé ideas para mejorar su trabajo. Muchas veces los cambios vienen desde