ENTREVISTA
POR DENISE TEMPONE - FOTOS: EUGENIA KAIS Y FAMILIA CARLOTTO
ESTELA DE CARLOTTO
LA LUCHA DE UNA MADRE EN EL DÍA DE LA MADRE, LA PRESIDENTA DE ABUELAS DE PLAZA DE MAYO HABLA DE SU FAMILIA Y DEL VÍNCULO CON SU HIJA LAURA, ASESINADA DURANTE LA DICTADURA : “YO ERA SU MAMÁ, PERO ELLA TAMBIÉN ME MOSTRÓ EL MUNDO A MÍ Y ME EDUCÓ”.
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icen que ser madre es emprender un camino absolutamente desconocido. Es obtener un ticket de ida hacia un lugar inesperado, desconcertante. En ese lugar, cuentan, yacen las más grandiosas beleidades, pero también las espinas más crueles e incurables. Cuando Estela de Carlotto conoció a Laura, su primera y celebradísima hija, supo que su mayor sueño se había hecho realidad. No sabía entonces, ningún padre quiere saberlo, que todo sueño tiene una probable contracara, una posibilidad de que todo eso que no se quiere ni soñar suceda. No sabía, entonces, que el vía crucis al que la arrojaría el destino de Laura, terminaría por transmutarla a ella misma, por convertirla en otra persona, por darle un nuevo sentido aún más profundo a su vida. Porque Estela no sólo tuvo el valor de sostener a su hija durante sus primeras bocanadas de aire, también tuvo el valor de aceptar la finitud de su descendencia mirando sus restos en un cajón, varios años después de su muerte. Y, sobre todo, tuvo el valor de hacer algo con todo eso: con la alegría, con el dolor, con la muerte y con la vida. Madre e hija se enseñaron mutuamente, todo el tiempo, aun
en la actualidad