II el esqueleto del ala no cabía en el libro de los humanos. asiremos una corona de plumas, comeremos su carnecarne blanca como la luna. como sienes de invierno. el orden de unos huesos tan leves como el vacío duele en nuestros dedos torpes.
el hombre inventó a los ángeles al intentar las alas sin el pájaro. Almudena Vega (halcón)
3