tiempo en tomar decisiones, hay proyectos en cartera, proyectos importantes que de ser desarrollados generarían actividad en zonas necesitadas de estas inversiones. La inversión involucró a 22 regiones. Cajamarca (US$ 523 millones 959,406), Cusco (US$ 430 millones 763,807), Apurímac (US$ 411 millones 306,108), Áncash( US$ 347 millones 528,299), Junín (US$ 315 millones 229,852) y Arequipa (179 millones 714,230). Entre los inversionistas figuran Xstrata Tintaya (US$ 418 millones 173,838), Xstrata Las Bambas (US$ 330 millones 112,174) Yanacocha (US$ 248 millones 676,227) Antamina (US$ 197 millones 430,621). “Del 100% de las inversiones, el 80% es inversión nacional, mientras que el 20% es inversión extranjera; somos los mismos peruanos los que creemos en nuestro país. Es evidente que se debe respe-
tar la estabilidad jurídica, ya que esta es la palabra empeñada; no puede haber cambios abruptos que generan inestabilidad tanto en inversionistas nacionales como extranjeros”, afirmó Roque Benavides, presidente de la Compañía de Minas Buenaventura. Finalmente sostuvo que en 2010 la producción de todos los metales han ido cayendo generando que la tendencia no sea positiva. “La minería peruana está desacelerando, las cifras nacionales demuestran que la producción en cobre, oro, zinc y plata han caído el año pasado y lamentablemente la tendencia es esa y debemos hacer lo necesario para revertirla, no se puede vivir solamente con que los precios suban, el volumen tiene que seguir creciendo, esto significaría más operaciones, más puestos de trabajo, y a su vez significa haber renovado las reservas, ya que si bien es una actividad no renovable, la única forma de renovarla es explorando y encontrando nuevos yacimiento”, puntualizó.