Revista ACCION ESPAÑOLA

Page 319

LOPE, ECUICÉNICO

315

No lloréis, mis ojos. Niño Dios, callad, que si llora el Cielo, ¿quién podrá cantar? Lope, niño eterno, juega y llora y se hechiza con el eterno Niño. Siente y vive el poeta, con espontaneidad madrugadora, la infancia espiritual que en nuestros días trae fragancias del cielo en las rosas de Teresita de Lisieux. Zagalejo de perlas. Hijo del Alba: ¿dónde vais, que hace frió, tan de mañana? Como sois lucero del alma mía, a traer el día nacéis primero. ¡Pastor y cordero sin choza y lana I ¿Dónde vais, que hace frío, tan de mañana? ... Que tenéis que hacer, Pastorcico santo, madrugando tanto, lo dais a entender; aunque vais a ver, disfrazado, el alma, ¿dónde vais, que hace frío, tan de mañana? ¡Dulzura que trasciende toda palabra! ¡Hondura con engaño de levedad! Salta y retoza el Infantil poeta, y el alma le repica de albo-rozo, y pide a las campanltas de Belén que toquen el Alba, qu» es María, de donde nace el Sol, que es Cristo:


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.