
7 minute read
GerArdo ruiz g
al oído
IMPACIENCIA
Advertisement
Tras dar a conocer la ampliación del decreto y la adición de medidas restrictivas para contener los contagios y decesos de la COVID-19 hasta el próximo 8 de marzo, el gobernador Miguel Barbosa llamó a la sociedad poblana para hacer un esfuerzo máximo y ser ejemplo nacional para resolver la crisis sanitaria.
De manera previa, la coordinadora de Protección Civil, Ana Lucía Hill Mayoral, explicó que el indebido comportamiento social ha impedido el freno de contagios y obedece a una reacción de apatía, hartazgo y cansancio, padecimientos naturales y justificativos de una “fatiga compasiva”. …
INAI
La poblana Blanca Lilia Ibarra Cadena tendrá este martes los reflectores al presentar ante el Senado, en sesión virtual, el Informe Anual de Labores del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, que preside desde finales de 2020 y del que seguramente hará una firme defensa.
Ello tras las insinuaciones del presidente Andrés Manuel López Obrador, respecto a la posible desaparición del INAI, del que dijo simulaba combatir la corrupción y la transparencia, además que es muy costoso, por lo que buscaría sustituirlo por alguna dependencia, como la Secretaría de la Función Pública. …
OPORTUNIDAD
La Secretaría de Economía alista la participación de Puebla en la edición 16 de la Feria Internacional de Artesanías “Las manos del mundo”, que con más de 250 expositores de 20 estados y siete países tendrá lugar el mes próximo en el World Trade Center de Ciudad de México, que será parcialmente presencial.
Al momento han mostrado su interés artesanos de diversos municipios poblanos, para exponer y comercializar productos como salsas, amaranto, moles, especias y condimentos, sidra, mezcal, dulces típicos, miel de abeja, tejidos, joyería en talavera y plata, entre otros. …
EN CURSO
No con la celeridad deseada, por la pandemia, pero avanza la consulta pública para declarar a Flor de Bosque como área natural protegida, para lo cual se están recibiendo opiniones y propuestas en el correo oficial de la Secretaría de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial.
La convocatoria, que concluirá el próximo 11 de marzo, se especifica que el objetivo es proteger mil 507 hectáreas, de las cuales 800 son el núcleo del bosque en donde prevalece una amplia diversidad de flora y fauna, que se han visto amenazadas por algunos desarrollos inmobiliarios.
Historias de un joven reportero
Gerardo Ruiz
@GerardoRuizInc
Pulverizar el voto azul
En la elección de 2018 fue la primera vez que se utilizó la estrategia del voto diluido. El morenovallismo, ante el tsunami lopezobradorista, intentó fallidamente dividir el voto pro Morena para rescatar la gubernatura, aunque en el camino se tuvieran que sacrificar la mayoría en el Congreso del Estado, la alcaldía de la capital y los ayuntamientos de la zona metropolitana y otros municipios importantes, como el de Tehuacán, Zacatlán e Izúcar de Matamoros.
La maquinaria electoral del siniestro Rafael Moreno Valle, que hasta ese entonces era invencible, diseñó un plan en el que cuatro partidos se disputaran el voto de oposición y no se concentrara únicamente en el Movimiento Regeneración Nacional.
Además de repetir la megacoalición de tres partidos “grandes”, PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, más dos satélites como el PSI y Compromiso Por Puebla, el morenovallismo integró a su plan electoral al PRI, al Partido Verde Ecologista y a Nueva Alianza, para que estos tres partidos funcionaran como esquiroles del bloque aliancista Por Puebla al Frente con el objetivo de restarle votos a Morena y a su entonces abanderado Miguel Barbosa.
Los infames Enrique Doger, Michel Chaín y Alejandro Romero Carreto, quien más tarde declinaría por la esposa de Rafael, se convirtieron en aliados de facto de Alonso Hidalgo, a quien criticaban de manera laxa para mostrarse como una alternativa frente al electorado de oposición, pero enfocaban todas sus energías en arremeter contra Barbosa Huerta.
La lógica y los cálculos de la estrategia morenovallista no encontraban fallos, pero el fenómeno electoral que representaba Andrés Manuel López Obrador era una empresa imposible de vencer en las urnas. El arrastre del hoy presidente de la República provocó que su partido arrasara a nivel local y nacional en 2018.
La historia la conocemos: la estrategia morenovallista de triturar el voto de oposición fracasó por el factor AMLO y tuvieron que recurrir al Plan B, el cual consistió el reventar las elecciones con el uso de la fuerza pública y de grupos armados de choque, para fraguar un fraude electoral evidente con la complicidad del Instituto y del Tribunal Electoral de Puebla.
Este 2021, el modelo de pulverizar el voto de oposición será empleado otra vez, pero ahora en contra del PAN.
Algo que los panistas no han sabido leer.
Las circunstancias de hoy juegan a favor del voto establishment, es decir al partido en el poder, en este caso Morena. La pandemia y las características de una elección intermedia, las cuales se definen a través de las estructuras y del famoso “voto duro”, dejan al partido lopezobradorita con amplias posibilidades de retener la alcaldía poblana y la mayoría en el Legislativo local.
En la capital, Acción Nacional es el único partido que conserva un voto base que ronda los 220 mil votos, de acuerdo con los resultados en los últimos comicios. En 2013, obtuvieron 254 mil; para 2016, 228 mil; en 2018, los 253 mil; y en 2019, 228 mil otra vez.
En cuanto al Movimiento de Regeneración Nacional aún no se puede medir si cuenta con una base de votos estable en la ciudad de Puebla, pues en las elecciones intermedias federales, proceso en el que debutó a nivel nacional como partido político, alcanzaron apenas los 68 mil votos en la capital, para 2016 lograron 72 mil, en 2018 –gracias al tsunami de López Obrador– rebasaron los 343 mil votos y en la extraordinaria de 2019 disminuyeron a 161 mil votos.
Morena aún no se mide en una elección local, por lo que su “voto duro” aún es difícil de calcular, pero podría rondar entre los 180 mil a los 200 mil votos.
Al decir de diferentes analistas y encuestadores, la participación ciudadana en las elecciones de este año en la capital difícilmente superará 40%, un escenario similar a los comicios de 2016, cuando sólo estuvo en juego la minigubernatura de 20 meses.
En esa ocasión, la votación en la capital del estado fue de poco más de 433 mil sufragios.
El número mágico para los partidos es llegar a los 225 mil votos, cifra que en automático lleva a ganar el ayuntamiento de Puebla.
Al reventar la alianza con el PRI y con el PRD, la obnubilada presidenta de Acción Nacional en Puebla, Genoveva Huerta, no midió que el voto duro del partido azul difícilmente alcanzará los 220 mil sufragios, como en las elecciones anteriores en las que se aliaron con el sol azteca, MC y la chiquillada de partido locales.
El PAN tendrá que pelearse con Morena cerca de 20 mil votos, pues los otros 30 mil, el famoso voto switcher, estarán en disputa entre los partidos que postularán candidatos en solitario, como Movimiento Ciudadano, Verde Ecologista, Fuerza Social por México, Redes Sociales Progresistas y Encuentro Solidario.
No resulta fortuito, ni mucho menos poco calculado que en los bunkers de FSM y del PVEM ya hayan elegido a perfiles “panistas” para buscar el voto en la capital, en las figuras de Rafael Moreno Valle Buitrón, quien podría confundir al electorado al llamarse igual que el fallecido exgobernador; y a Roberto Ruiz Esparza “El Capi”, quien siempre ha estado más ligado a la derecha que a la izquierda.
Como es previsible, MC también postulará un perfil con tinte empresarial para dividir aún más el voto panista y RSP hará la propio al ya haberse alineado a los intereses del barbosisimo.
La operación de pulverizar el voto azul está en marcha.
Tampoco hay que perder de vista la excelente relación que el gobernador Barbosa mantiene con el líder nacional del PRI, Alejandro Moreno “Alito”, pues esto podría ser un factor determinante para que la dispersión del voto termine por hundir al PAN en la Angelópolis.
Aunque el tricolor ya perdió su base electoral en la capital desde 2016, aún aporta cerca de 60 mil votos, los cuales podrían ser decisivos en una elección de tercios.
Mientras, el abanderado panista Eduardo Rivera le apuesta todo a que el Revolucionario Institucional lo postule como candidato común; en el CEN priísta ya se prepara a un cuadro para que el tricolor compita en solitario en las elecciones del 6 de junio.
Con esto, el fiel de la balanza se inclinaría, invariablemente, a favor de Morena.
En el war room barbosista ya se tiene todo diseñado para poner en marcha la maquinaria electoral, desde un tejido fino, mano dura en el equipo compacto para evitar conspiraciones en contra de la carta marcada, hasta un plan ganador a la espera de que el disparate, que impulsa desde CDMX el grupo de Bertha Luján y Alfonso Ramírez Cuéllar, para que Claudia Rivera repita como la abanderada de Morena en la capital se desvanezca, ante el riesgo latente de la catástrofe.
La idea de la reelección de Rivera Vivanco pone en riesgo la ruta de 2024, pues la deprimente alcaldesa hundiera a Morena en la entidad poblana y con ello el cuarto padrón más importante del país.
Las cartas ya están abajo y sobre la mesa. El tiempo de definiciones en la esquina morenista está pronto a llegar.
Ganar o perderlo todo en Puebla.
El dedo de oro de Palacio Nacional la tiene sencilla. ¿O no?