Día 1 - lunes
¡Hola!SoyMateo,unangelitodelcielo.
Estos días ha habido mucho revuelo en el cielo porque hay unas personasenlaTierraque están haciendo muchas cosas buenas. He oído de unatalTeresaenCalcuta que cuida de los pobres, un hombre que enseña a los niños y cuida de ellos, que… ¿cómo se llamaba?
¡Ah, sí! San José de Calasanz. Y uno de mis favoritos, le llamansanJuandeDios.
¿Queréisconocersuhistoria?
Había una vez, en un pequeño pueblo de Portugal,unniñollamado Juan. Juan era un niño muy especial, siempre dispuesto a ayudar a los demás. Desde muy pequeño, soñaba con hacer delmundounlugarmejor.
Undía,cuandoJuanya era un joven adulto, decidió viajar a España en busca de aventuras. Llegó a la ciudad de Granada, donde vio a muchas personas enfermas y necesitadas.Sucorazón bondadoso no pudo ignorarsusufrimiento, asíquedecidióquedarse yayudarlas.
Día 2 - martes
Juan comenzó a cuidar a los enfermos y a los pobres, dándoles comida, ropa y un lugar donde descansar. Pronto,lagenteempezó allamarlo“JuandeDios” porsu granbondadydedicación.
Durante un tiempo, Juan estuvo en un hospital y allí tuvo una idea brillante. Decidió abrir un hospital donde todos los enfermos pudieran recibir atención, cariño y ser cuidados con la miradadeJesús.
Con la ayuda de muchas personas generosas, construyó un hospital que se convirtió en un refugio para los necesitados.
Juan de Dios trabajó incansablemente, siempre con una sonrisa en el rostro y movido por el amor de Jesús. Su hospital se llenó de personas agradecidas y felices, y su fama de hombre bondadoso se extendió por toda la región.
Y así, Juan de Dios dedicó su vida a cuidar a los demás, enseñándonos que, sirviendo a los demás con amor, podemos hacer del mundo un lugar mejor, siempre con Jesúsennuestrocorazón.
Día 3 – miércoles
¿Queréis saber qué nos dejó sanJuandeDiosenMurcia?
Su labor la lleva a cabo Jesús Abandonado, que se dedican a ayudar a las personas que no tienen hogar ni comida para alimentarse.
Pues ya sabéis pequeñines…
¡A servir siempre a los demás! Pronto nos vemos.
Un abrazo, el angelito Mateo.
