La hora del milagro edición 2

Page 9

LA HORA DEL MILAGRO

9

PROMESAS CUMPLIDAS “Guardaré mis juguetes cuando termine de jugar con ellos, limpiaré mi cuarto todos los días, haré mi tarea, miraré menos televisión, ya no pelearé, no lo volveré a hacer, haré más ejercicio, no comeré mas panecitos, me portaré bien, llegaré temprano, no me vuelve a pasar, seré igual de exitoso…

Confirmé una vez más esa noche cuanto Dios nos ama. El tiene ángeles para ayudar a sus hijos y usa a quien El quiere. Mi vida la encomiendo cada día en sus manos y sé que El tiene cuidado de mí.

¿Podrías enumerar las promesas hechas desde que eras niño? ¿Cuál es la más reciente? Hasta el día de hoy ¿Cuántas has incumplido? Durante el transcurso de nuestra existencia hemos prometido tantas cosas que, con toda seguridad, muchas de ellas las hemos olvidado o lo que es peor, infringimos lo prometido. No tomamos conciencia de la importancia de la credibilidad de la palabra dada. Soy una anciana de 84 años de edad y he visto la mano ponderosa de Dios manifestarse en mi vida de diferentes formas. La última experiencia la comparto aquí con ustedes. El día 23 de Diciembre del 2012, estando yo en mi recámara, en la planta baja de mi casa y siendo la 1:00 am de la madrugada, me levanté un poco desorientada. Di uno o dos pasos y caí al suelo. No recuerdo nada ni sé cómo pero, me levanté, alcancé a llegar a mi silla y pude sentarme. Prendí la lámpara al lado de mi cama, sin pensarlo mucho y como pude, me puse una venda en mi cabeza, pues estaba sangrando. Recuerdo que al tiempo que sostenía mi cabeza dije “Señor, tú estás aquí

Hna. Conchita conmigo”. Al momento, la luz del cuarto se encendió, oí la puerta de mi cuarto abrirse suavemente y, asomando su cabeza mi nieto Abraham, quien estaba visitándonos en esos días; me preguntó en voz baja “¿abuelita, todavía no te duermes?” Al entrar se asombró, pues mi cara estaba llena de sangre, gracias a Dios yo no sentía dolor. Llamó a sus padres y me llevaron de inmediato al hospital donde me atendieron. En menos de una hora regresamos a casa dando gracias a Dios porque El cumple sus promesas cuando dice “en tu vejez y en las canas no te dejaré, estaré contigo”

El mejor ejemplo de cumplimiento de promesas, aun y cuando éstas hayan sido hechas hace miles de años es el Creador de nuestras vidas, el Todopoderoso, Jesús, quien murió por ti y por mí. Permítete tener el mejor amigo, el único que no te fallará. No le falles tú ahora; acéptalo hoy y El tomará cuidado de tu vida y la de tu familia. Dale la oportunidad de ser tu amigo; te aseguro yo, una anciana de 84 años que aun sigue disfrutando de las promesas de Dios – porque – yo he sido joven y he envejecido, me sigue amando aun en mi vejez y no me ha desamparado aun cuando mi fuerza ha menguado. ¡Haz hoy un pacto con EL! ¡EL no te fallará!...tu parte es obedecerlo para disfrutar de sus promesas.

EL MEJOR EJEMPLO DE CUMPLIMIENTO DE PROMESAS, AUN Y CUANDO ÉSTAS HAYAN SIDO HECHAS HACE MILES DE AÑOS ES EL CREADOR DE NUESTRAS VIDAS, EL TODOPODEROSO, JESÚS, QUIEN MURIÓ POR TI Y POR MÍ.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.