1 minute read

 Creación

Quién inventó la cama

En la historia de la humanidad han existido una serie de inventos muy importantes que nos han hecho progresar, ya sea en el sentido de la tecnología o de la salud. El invento de la cama es uno de estos casos sin duda alguna. Pero al igual que en muchos otros casos, lamentablemente, no se puede atribuir la invención de la cama a una sola persona o a una sola civilización. Más bien ha sido la evolución y mejora de un sistema que sirve al hombre para descansar y dormir. Desde una simple piel de animal estirada en el suelo que empleaba el hombre primitivo hasta la más sofisticada cama que podemos encontrar en la actualidad. El descubrimiento de nuevos materiales y de nuevas técnicas, han hecho que este mueble se fuera perfeccionando con el paso de los siglos.

Advertisement

Por tanto, a la pregunta ¿Quién inventó la cama? Debemos decir que no existe una respuesta específica. Tampoco se sabe cuándo se inventó la cama ni dónde. Se puede afirmar que es un inventó de la humanidad que nos ha hecho ganar en salud y en descanso del cuerpo y la mente. Pero afortunadamente, sí que conocemos sus orígenes. Vamos a verlo a continuación:

Origen de la cama

Como es sabido, la geografía condiciona la vida, que no transcurre igual en un clima frío que uno templado. En los lugares nórdicos el hombre antiguo abría en el suelo zanjas que llenaba con cenizas calientes para que una vez echado en ellas procurarse calor. Allí dormía: era su cama, con una piel sobre el cuerpo.

También se conoce gracias a los historiadores, que los pueblos germánicos se echaban sobre una especie de camastro improvisado dentro de una especie de caja (a modo de ataúd) que llenaban de musgo seco y hojas o heno.

La primera cama de la historia es el suelo con un lecho de hierbas. Egipcios, asirios y babilonios son los primeros en usar camas elevadas y, desde el principio, quienes tienen medios usan baldaquinos para cubren las camas y poderlas encerrar entre cortinas que mantengan el calor si el clima es frío. Los egipcios tenían dioses protectores, como el genio enano Bes, cuyos amuletos se colgaban de la cabecera de la cama para proteger los sueños de los niños.

Los griegos fabricaban camas con tiras de cuero atravesadas como somier. Los romanos tenían varios tipos de camas Uno se usaba para dormir (lectus cubicularis), con cobertores de lino si su propietario es rico, o de lana o fieltro si es del pueblo.

Otro tipo de lecho se usaba para comer (lectus discubitonus), pues hasta la caída del Imperio Romano era costumbre comer echado. También tenían una cama especial para el estudio (lectus lucubratorius) y una para los muertos (lectus funebris), sobre el cual eran llevados a la pira funeraria.

This article is from: