La carta robada

Page 24

Los crímenes de la calle Morgue

juego, en lo que tiene de espiritual, es mal apreciado. No trato de escribir un tratado de análisis, sino sencillamente de poner al frente de un relato bastante singular algunas observaciones pasajeras, que le sirvan de presentación. Aprovecho, pues, esta ocasión para proclamar que la alta potencia de la reflexión es más activamente y más provechosamente explotada en el modesto juego de damas que en toda la laboriosa futilidad del ajedrez. En este último juego, cuyas piezas tienen movimientos diversos y embrollados y cuyo valor es distinto, se toma su complejidad, error muy común, por profundidad. La atención entra mucho en juego. Una distracción, un descuido, significa la pérdida, la derrota. Como los movimientos posibles no son solamente variados, sino desiguales en potencia, las probabilidades de semejantes errores son múltiples, y en nueve de cada diez casos es el jugador más atento y no el más hábil el que gana. En las damas, el movimiento es sencillo y sufre pocas variaciones; las probabilidades de descuido son menores, y, 23


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.