MARTA TIENE UN MARCAPASOS: éxito de comedia musical en Madrid
Marta tiene un marcapasos, Venecia, Sufre mamón, Visite nuestro bar, Suéltate el pelo, Nassau, El ataque de las chicas cocodrilo, Temblando, Te quiero... Sea cual sea nuestra edad, todos hemos bailado y cantado estas canciones que los Hombres G han conseguido, como no lo ha hecho ningún otro grupo de pop/ rock español, que padres e hijos compartan gustos musicales e incluso himnos generacionales. Desde los años 80 hasta hoy han permanecido ininterrumpidamente en los primeros puestos de las listas de éxitos nacionales e internacionales. Ya sea en España, México, Venezuela, Perú, Colombia, Ecuador, Chile, Estados Unidos..., en fin, logran cosechar éxito tras éxito, pues muchas de sus canciones han quedado grabadas en la memoria de chicos y grandes. Pero los Hombres G no se limitan a poner su música, también se han involucrado con el proyecto cien por cien. David, Dani, Javi y Rafa, son los supervisores artísticos y creativos de Marta tiene un marcapasos.
Talento mexicano dentro del reparto de Marta tiene un marcapasos
Se trata del musical que se presenta en Madrid en el Teatro Compact en la Gran Vía, donde se narra la historia de Marta, una adolescente que decide viajar junto a su mejor amiga Belén desde México, para encontrar a su padre al que no conoce. Pero Marta no sólo localiza a su padre, un ex hippie que montó un pequeño chiringuito en la playa, también se encuentra a sí misma y a su media naranja, Nico, un camarero con aspecto adolescente que decide cambiar completamente su mundo para acercarse un poco más al de ella. El musical es altamente recomendable tanto para asistir en pareja o en familia. El teatro está muy bien ubicado, el aforo es cómodo y desde cualquier sitio se tiene un plano visible del escenario. Dura tres horas e incluye un intermedio, Conviene comprar las entradas con anticipación y es una opción para las vacaciones decembrinas. Visita el sitio https://www.martatieneunmarcapasos.com/, donde podrán encontrar los tickets disponibles. CH 25