S K O L È






























































Comunidad ALAS



Ben era un niño de 11 años que tenía una vida normal y el sueño de convertirse en plomero, además de unos padres aficionados al baile que lo llevaban a casa de la abuela cada viernes por la noche. Ben odiaba ir a casa de la abuela ya que creía que la abuela era aburrida y anticuada, que siempre jugaba al Scrabble y olía a col hervida, hasta que un día descubre joyas en la casa de la abuela y ella le cuenta la verdad, que en su juventud era una criminal buscada internacionalmente. Después de eso, la perspectiva de Ben hacia la abuela cambia y juntos hacen un plan para robar las joyas de la corona.
La abuela gánster es un libro creado por David Walliams : actor, comediante, presentador británico, juez de concursos de talentos y escritor. La editorial es Random Pingüin House , es la undécima reimpresión en México de la primera edición en 2013 y es del género infantil, aunque yo pienso que es del género familiar.
El libro en sí es muy bueno; tiene una comedia muy graciosa , una trama muy buena , tiene giros inesperados en la historia y a los personajes no les hizo falta nada. Lo único que no me gustó es que los padres de Ben no se interesen nada por su hijo, solo les importa el baile y bailar. También, en vez de apoyarlo en su sueño de ser plomero le decían y lo “presionaban”, por así decirlo, a ser bailarín popular para que los sacara de su pobreza. También agrego que el libro a veces contiene humor que a un niño le podría parecer gracioso pero que a un adulto no. Por ejemplo, contiene humor de flatulencias.
El lado bueno de la vida Por Lía Zophia Gómez Reséndiz
hacia el cielo
De la tierra salí y allí regresaré Por Val Zhari
Guillermo Paulucci es un pianista, compositor y arreglador argentino, nacido el 29 de octubre de 1982 en Morón, provincia de Bs. As. Comenzó sus estudios a los 9 años en el Conservatorio Provincial "Juan Pérez Cruz" de la ciudad de Junín, en la misma provincia.
En el año 2001 comienza a cursar la carrera de "Intérprete de Música Popular" en la escuela del SADEM (Sindicato Argentino de Músicos) recibiéndose en el año 2004. Paralelamente tomó clases de armonía y composición con el pianista Diego Schissi.
Desde el año 2004 a la actualidad ha formado numerosos proyectos musicales donde interviene como compositor y arreglador, así como también integrando grupos de otros artistas nacionales y compartiendo escenario junto a grandes figuras de la música argentina como: Rubén Juárez, Juanjo Domínguez, José Ángel Trelles, Lorena Astudillo, Cesar Isella entre otros.
Buenos Aires, estudiamos en la misma escuela, él varios años después, ya que yo soy más grande... mi hermana que es la que me sigue a mí, Gaby, ella también estudió la misma carrera, no se dedica tampoco a la música pero hizo la misma carrera, o sea, somos varios los músicos en mi familia, una familia musical.
L: Yo vi que en Spotify tenés canciones con colaboraciones, ¿quién es Pablo Paulucci?
L: ¿Dónde naciste, y cuántos años tenés?
G: Bueno, yo nací en la ciudad de Morón, que es una ciudad que queda en el oeste de Buenos aires, y tengo 39 años, a punto de cumplir 40.
L: ¿Dónde y cuándo comenzaste a estudiar música?
G: Yo comencé a estudiar música a los 6 años o 7, primero en Junín, que es otra ciudad distinta a la de Morón; mi familia es de Junín que es donde estoy actualmente, y comencé primero tomando clases de guitarra... tendría no 6 pero tal vez 7 u 8 años. Comencé tomando clases de guitarra y después me pasé a clases de piano a los 9, guitarra tomaba clases con un profesor particular, del barrio, y piano ya estudiaba en el conservatorio de la ciudad de Junín. Así arranqué.
G: Hay mas músicos en mi familia, sí: mi papá es músico, él toca contrabajo, bajo eléctrico, toca también guitarra, toca un poco de piano, pero está más dedicado al contrabajo. También, mi hermano, ahora actualmente no se dedica a la música, pero es músico también; estudió guitarra de chico, estudió en el mismo lugar e hizo la misma carrera que hice yo. Después me mudé a
G: Pablo Paulucci es mi hermano, él toca la guitarra; mi papá es Raúl, el también participó en algunas colaboraciones, tocando el bajo, pero Pablo es mi hermano. Él toca en un disco llamado Colibrí, el cual en su tapa tiene un colibrí sentado en el piano, una canción llamada El 71, que es una milonga porteña, es un ritmo argentino. Alejandro Presta, que también participó en “Contando las nuestras”, es un amigo mío que además es cantante, es muy buen cantante.
L: ¿Cómo hacés los distintos tipos de instrumentos en tus canciones?
G: Cuando armo una canción, imaginá: yo primero compongo la canción desde el piano, me siento en el piano, busco las notas y los acordes que a mí me gustan, y compongo la canción toda con piano. Después a lo mejor esa canción queda solo para el piano, y la grabo así, o digo después, “a esta canción le vendría mejor una batería, o un bajo”, depende qué canción sea, el estilo o sus instrumentos, y en base a eso puedo armar un arreglo escrito con partituras o en grabado con los instrumentos que suenen para hacer una representación de cómo quedarían los instrumentos en esa canción.
L: En tus discos hay mucha música variada, pero si tuvieras que elegir un estilo, ¿cuál sería tu favorito?
G: Y, difícil la pregunta porque me gustan varios. Mi estilo favorito es un estilo de música que tiene que ver con la música argentina: el tango, el folklore; es música instrumental, o cantada que incluye la improvisación y no es específicamente una de esas, si no que es como una mezcla.
L:
G: En mi casa, cuando yo era chico, tenía un piano que me llamaba mucho la atención (más allá de que haya empezado con la guitarra me llamaba la atención el piano) y siempre iba a jugar un poco con el piano. Me llamaba la atención que era un instrumento, así como muy grande que no se veía por dentro, pero vos tocabas unas teclas y hacían sonido, como que podías tocar y combinar muchas teclas juntas y creo que arranqué un poco jugando con la música, como arrancan muchos. No arrancás así como “quiero componer una canción” o algo así, no, arrancás jugando con la música...
L: Cuando empecé a tener conciencia, que fue más o menos por los 4 o 5 años, también arranqué jugando con la música, hasta que tuve clases con una profesora particular.
G: Claro, arrancás jugando con la música, cuando te llaman la atención los sonidos, las teclas, como es que se bajan las teclas, cómo será adentro, qué habrá. Uno cuando ya lo abre ya sabe como es, pero antes, es como una cosa mágica.
L: Manualidades, por ejemplo.
G: Claro, pero no todas, algunas. Como tejer, no me llama la atención
L: ¿Hay alguna canción que pensabas subir pero nunca lo hiciste?
G: Sí, una donde canto, pensaba subirla, la grabé y todo, pero me dio vergüenza y no la subí... Es una canción que tiene una letra y una base de piano que compuse yo, pero no, me dio como vergüenza y no la subí.
L: ¿Cuándo comenzaste a subir tus canciones?
G: Yo creo que comencé en el 2012, subí un disco, pero no existía Spotify (N. de R.: en este país no, pero sí en Suecia). Creo que lo subí a una plataforma llamada My Space, o que se llamaba, no sé si existe, después subí a Bandcamp y cuando llegó lo subí a Spotify, pero el primero fue en 2012.
L: ¿Cómo comenzaste a subir a Spotify? Porque está el Spotify for artists, que ahí te podes registrar también como publicadora.
L:
piano?
G: Sí, hay muchas cosas, me gusta dibujar, pintar con acuarelas, hacer encuadernaciones de libros, me gusta todo lo que sea trabajar con las manos, me gusta amasar pan por ejemplo, me gusta cocinar.
G: Claro, pero en realidad en Spotify for artists, no subís desde ahí, si no que tenés que buscar una, lo que se llaman “agregadoras digitales” a ellos vos les mandás tus canciones y ellos te las publican, yo subí mis canciones con un sello discográfico de un amigo mío. Se llama El circo sello digital, y después yo armé mi propio sello discográfico para subir mi propia música, y a través de esos sellos es que voy subiendo mis discos.
L: ¿Cómo es que comenzaste a formar tu estudio? (N. de R.: la pregunta refiere al estudio de grabación)
G: Yo tengo un estudio donde trabajo y doy las clases, es muy simple, porque bueno, por un lado tengo los pianos (o bueno, teclados), los tengo conectados a la compu, a través de una placa de audio y MIDI para hacer grabaciones en señal MIDI y ahí voy a un programa de grabación. Cuando quiero grabar un piano real, por ejemplo, de cola, voy a un estudio de grabación más grande, donde tengan un buen piano.
L: Digamos que donde haces las grabaciones básicas, las canciones comunes, es ahí.
G: Claro, y si no, mi papá tiene un estudio de grabación más grande, donde hay más cosas, elementos para hacer la canción, por si tengo que grabar voces u otros instrumentos voy al estudio de mi papá, que está cerca de mi casa.
L: Bueno Guille, gracias por permitirme esta entrevista. G: Nos vemos.
Guillermo Paulucci es un músico de múltiples estilos, pianista, compositor y arreglador, nacido en Morón, con una historia musical en su familia, que ha participado con grandes ídolos de la música argentina, quizás no es muy conocido fuera de ese espacio musical, pero es un gran músico.
Mi canción favorita es “Pura música”, gracias a que es de un estilo de música argentina, una instrumental con piano, con notas y acordes que me agradan mucho. Les dejo el link para que puedan conocerla: https://open.spotify.com/track/14J7xO0s3SWpOik8EPHiow? si=7ac5cd953d8b4206
Una pequeña niña está durmiendo en una tarde de un viernes completamente normal. Sus cortinas blancas ondean suavemente con la brisa. Se despierta de repente para escuchar un silbido afuera, y luego aparece un conejo enorme en su ventana... así comienza la aventura de ensueño que Jimmy Liao cuenta en su primer libro ilustrado Secrets in the Woods (Secretos en los bosques).
Jimmy Liao (chino: 廖廖廖; pinyin: Liào Fúbīn) nacido el 15 de noviembre de 1958, es uno de los autores e ilustradores de libros infantiles más reconocidos del mundo. Nació en Taiwán, su lengua materna es la china, sin embargo, a través de su arte pareciera que habla en todos los idiomas del mundo. Estudió arte en la Universidad de Cultura China, trabajó como ilustrador editorial y armó una exitosa carrera como publicista. En 1995 se le diagnosticó una enfermedad terrible, como es la Leucemia, de la que se recuperó.
Como lo cuenta en varias entrevistas, decidió dedicarse de tiempo completo a su arte, al considerar que había cosas que quería decirle al mundo. Al poco tiempo (1998), publica su primer cuento ilustrado y en seguida A Fish that Smiles at Me (Un pez que me sonríe. Ahora, más de 20 años después de aquél lejano 1998, Liao nos ha dado más de 60 obras diferentes.
No está demás decir que ha sido reconocido con prestigiosos premios en varios países como su natal Taiwán; en Hong Kong, Bélgica, España, Suecia y Portugal. En el año de 2020, recibió una Mención Especial en la Categoría Especial Cine del Premio Bolonia Ragazzi organizado por la Feria del Libro Infantil de Bolonia. Su trabajo ha llegado a mucha gente, y ha sido traducido a más de 180 idiomas en todo el mundo. De hecho, estuvo en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, en el año de 2013. Ahí fue que mis papás me compraron el primer libro que tuve de él.
Cuando leí mi primer cuento de Jimmy Liao titulado “No soy perfecta”, sentí que por fin alguien pensaba como yo genuinamente; los adultos, fuera de mi círculo familiar, no tenían la más mínima intención de preguntarle a una niña de 6 años como pensaba, sentía o veía el mundo; y no era extraño que entre adultos me sintiera ignorada o subestimada.
De pequeña siempre tuve esta necesidad de ser perfecta en todo, letra perfecta, horarios perfectos, notas perfectas... cabe aclarar que mis padres solo me decían que hiciera mi mayor esfuerzo y que con eso era suficiente, pero el hecho de ver un “ocho” en mi boleta era a mí a quien enojaba. Así que después de leer su obra, y sí, ya sé, con mis apenas 6 años, me puse a reflexionar: ¿Por qué tenía que ser perfecta? Realmente lo quería o era algo que creía que me haría feliz, ¿o a los demás? después de todo hay una diferencia entre hacer tu mejor esfuerzo y obsesionarse con el resultado.
Puedo decir que, en gran medida, después de tener ese libro en mis manos, dejé de enojarme conmigo misma, por no entender un tema que recién empezaba a estudiar, o no ser la mejor en todo, ya que al final tenía la satisfacción de haberme esforzado.
Años después leí “Soy feliz, no me preocupo” y me di cuenta cómo nos preocupamos por cosas tan insignificantes que realmente nos hacen NO ser felices. Nos preocupamos por el cómo vestimos, cómo
hablamos, dónde estudiamos, las notas, el tiempo, los amigos, el qué dirán, en un sinfín de cosas; en resumen, nos preocupamos en encajar o no encajar, vaya usted a saber, pero aquí una pregunta preocupante ¿es necesario preocuparnos tanto?
Parece necesidad humana el tener algo por lo cual estar preocupados. Tan es así, que si nosotros dejamos de preocuparnos es el mundo, nuestro mundo, el que se preocupa por nosotros. ¿Lo has observado? Se preguntan por qué no estamos preocupados, el mundo se seguirá preocupado, aunque tú dejes de hacerlo, así que sería mejor el dejar de preocuparse por lo que viene, por lo que fue y por lo que es.
Más allá de los textos, sus ilustraciones son algo que admirar, su atención al detalle, su variedad de formas y sus atrevidos colores. Su obra plástica nos permite descubrir su paciencia y determinación, y al observar sus trazos, uno llega a intuir que cada uno de ellos están ahí por un motivo, que tiene un significado, una metáfora, una razón. De pronto es como si no supiéramos si estamos por las letras, porque sin darnos cuenta, nos quedamos contemplando las ilustraciones de sus libros por un largo rato y son ellas quienes nos cuentan las historias; y al terminar uno cree que finalmente los descifró, sin sospechar, por lo pronto, que siempre quedará algo nuevo por descubrir.
Siento también que los temas que acompañan sus ilustraciones, parecen contradecir su paleta de colores. Los colores, vivos, resplandeciente, alegres, sacados de ambientes optimistas y de fantasía, nos llevan sutilmente, a encontramos inmersos en sus trazos gentiles, suaves y redondeados, llenos de melancolía, que se atreven a nombrar la soledad, la pérdida, los temores más intrínsecos de ser humano en las muchas formas de no sentirse amado.
Sus amplios planos, y figuras pequeñas sugieren el punto de vista de un niño en un amplio mundo, a
veces demasiado. Sus finales suelen no ser “los felices” de los cuentos de hadas, pero todos ellos, a pesar de su sencillez, están cargados de poesía y cierto entendimiento, que abraza la complejidad de la vida, la misma que refleja en su arte.
Alguna vez, en una entrevista que le hicieron con motivo de su primera exposición en Europa, Jimmy Liao aseguró: «cuando comencé, mis dibujos eran para adultos, pero, como tienen colorido, había cosas que un niño también podía apreciar y entender. Pueden comprender otra capa de lo que hago. He hablado con muchos que han leído mis libros de pequeños y que los han vuelto a leer de nuevo cuando se han hecho mayores y han sentido cosas muy diferentes a las de cuando eran niños». Esa es parte de la magia de Liao.
Ese es Jimmy Liao para mí, un mar de preguntas, y apenas unos barquitos (o unos peces con sonrisa) de respuestas, lo cual lo vuelve en verdad un sujeto muy interesante que está en contacto con su niño interior, discute de asuntos de “adultos” a través de los ojos de un niño, sus obras no se limitan a un público específico, ya que se pueden disfrutarse a cualquier edad; sus libros nos invitan a visitar a ese lugar donde todo es posible.
Jimmy Liao un artista muy interesante, que a través de su arte nos invita a la reflexión y al cuestionamiento, en preguntas sencillas y a la vez enormes, a ponernos en el lugar de un niño y dejar que nuestros ojos y nuestro corazón se llenen de maravilla desde los mundos fantásticos que él tiene para ofrecernos en cada una de sus obras.
https://www.jimmyspa.com/tw#2 https://www.abc.es/cultura/arte/abci-jimmy-liaodespliega-arcoiris-emociones-museoabc-201910090059_noticia.html https://relatosenconstruccion.com/resenas/jimmy-liao/ www.barbarafioreeditora.com https://blog.picturebookmakers.com/post/ 134783021716/jimmy-liao-part-1 Ilustraciones © Jimmy Liao.
Esta pintura está hecha en acrílico y está basada en la obra popular de Van Gogh llamada La Noche Estrellada. Decidí hacer una parodia al estilo postimpresionista de esta obra y el nombre de mi obra es irónico con la de Van Gogh, ya que son Huevos Estrellados, esto en un “típico” desayuno de huevos, tocino y pancakes.
Esta pintura está basada en las muchas pinturas del arte llamado cubismo. Aquí podemos ver cómo Pikachu se fragmentó en un montón de piezas, la pintura está pintada en madera y se usó pintura acrílica.
El Centro cultural de España en México o, por sus siglas CCEMx es un recinto para la convivencia, aprendizaje y cultura.
Éste se encuentra en el Centro Histórico de la CDMX detrás de la Catedral Metropolitana. El CCEMx tiene dos accesos: uno en Guatemala 18 y el otro en Se puede llegar caminando desde Metro Zócalo o desde el Metrobús República de Argentina en la línea 4 ruta norte.
público de forma gratuita, estas ruinas que se encuentran adentro son una pequeña parte de el Calmécac (una escuela para nobles mexicas).
Este año el CCEMx cumple 20 años desde su inauguración en 2002 y, habrá muchas actividades súper interesantes y gratuitas tales como conciertos en vivo, un ciclo de cine y más, así que, si pueden, ¡visítenlo!
Fuentes:
https://ccemx.org https://www.ccemx20.org/ https://ccemx.org/museo-del-sitio/ y experiencia propia.
La revista de los chicos de la Secu de ALAS Derechos reservados 2022 Publicado por la Comunidad Educativa ALAS www.aprendeconalas.com
FUNDADORES:
Matías Castellaro Paola Rocha Carmona
EDICIÓN GENERAL: Matías Castellaro
STAFF DE LA REVISTA SKOLÈ - NOVIEMBRE 2022
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Camille Martínez Mc Lane
Fernando Espinosa San Juan
Leonardo Román Castro Flores
Lía Zophia Gómez Reséndiz
Lisandro Matías Ayala Rojt
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Patricio Galvan Camarillo
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Valeria Sánchez de la Torre
Valeria Zharaí Gómez Reséndiz