92 un siglo de veterinarios en asturias
censyra:
para las reinas de nuestra cabaña En esta década pujante evoluciona también la actividad
t «El pequeño tamaño
y la finura de esqueleto, son caracteres que forman parte del aspecto de conjunto de una vaca asturiana de montaña». U Manuel Cima García: Estudio biotipológico de las razas bovinas autóctonas del Principado de Asturias, Oviedo, Principado de Asturias. Consejería de Agricultura y Pesca, 1986, p. 34.
t Series de animales
en proceso de «valoración genética individual». U Manuel Cima García: El ganado vacuno de la raza asturiana de los valles. Pasado, presente y futuro, Luarca: Aseava, 1996, p. 327.
de la Estación Pecuaria Regional de Asturias, bajo la dirección de Manuel Cima García. Había llegado a Somió este ilustre veterinario en 1972, procedente de Pontevedra, donde fue jefe provincial de Ganadería. Natural de la parroquia ovetense de Limanes, nacido en el seno de una familia ganadera, se licenció en Veterinaria en León y en Derecho en Oviedo. Cuando accede a la Pecuaria asturiana tiene 41 años y una amplia experiencia profesional como veterinario del Estado, que incluye la dirección del Programa de Expansión Agraria de La Coruña y la del Laboratorio Pecuario Manchego-Extremeño, entre otros destinos. Prolífico autor de ensayos y artículos técnicos, firma esclarecedoras monografías sobre las razas bovinas autóctonas de Asturias. Éstos y otros méritos le hicieron acreedor de la Encomienda de la Orden Civil del Mérito Agrícola. Se trataba, pues, del hombre adecuado para llevar las riendas del cambio que encaraba la Pecuaria de Somió. En realidad, tal cambio afecta a todas las estaciones pecuarias de España, ya que se produce una modificación en su
regulación administrativa que les impone la dedicación exclusiva al tipo de ganadería hegemónica en la zona en que están ubicadas. En el caso de la de Somió la cosa venía rodada: reforzará su papel en la selección y reproducción de ganado vacuno, que tenía desde hace tiempo el protagonismo principal en la dedicación tecnológica de la Pecuaria por las prioridades derivadas de las demandas de los ganaderos. Así que el nuevo criterio de funcionamiento no hace más que añadir fuerza a la corriente. La Estación pierde su nombre original y