SÉPTIMO PASO. NUESTRA EVOLUCIÓN.
Colegio San bartolomé
Lo que hizo para alejarse de ellos por una noche, sin que ellos se enteren, fue agarrar una de las naves interdimensional que era muy avanzada y como no sabía tanto de naves tocó cualquier cosa y llegó hasta la Tierra. Cuando aterrizó se encontró conmigo y allí empezamos a luchar porque quería ver quién era el más fuerte. Yo me tiré ante él, pero antes de que yo caiga, me pegó con su súper fuerza y me mandó a volar hasta que no aguanté más, pero él vino muy amigablemente y sabía que yo no le podía hacer nada porque también usó su paralización y bueno me curó al instante y de poco en poco nos hicimos mejores amigos y la verdad es que yo agradezco esta oportunidad porque lo venía pidiendo hace mucho tiempo atrás pero todo no termina aquí. Hasta que después de diez años cuando ya habíamos descubierto un montón de cosas juntos, vinieron monos mutados y desgraciadamente lo querían a Tupacpai, pero él no quería ir así que luchó y luchó hasta no poder más y desgraciadamente perdió, le tiraron mucho fuego porque recordemos que el fuego era la mayor debilidad de Tupacpai y él se había dejado algunas armas de repuesto en una chocita. Pero todo cambió cuando me di cuenta que Tupacpai había sido brutalmente quemado. Pero la regeneración se la dejó en la chocita, y ahora que me doy cuenta de todo esto voy a ir a vengarme por mi mejor amigo, así que agarré tres superpoderes, la fuerza, la regeneración y por último la teletransportación. Y también me equipé con las armas más avanzadas que obviamente eran de Tupacpai y era lo único que le quedaba a Tupacpai. Yo salí más furioso que nunca a matar a los monos mutados que casi dominaban el mundo y me arriesgué a luchar. Llegué al lugar de combate muy rápido porque me equipé la teletransportación y aparecí en frente de sus caras. Pero tal parece que les hice un poco de daño los monos reaccionaron al instante y ellos también me golpearon y más fuerte, me tiraron a varios metros de ellos, pero cuando caí algo me impactó y es que al lado mío estaba el cadáver de Tupacpai y lloré un montón por dentro. Ellos ya estaban festejando, pero mi plan era dejar que ellos sigan festejando y mientras yo me regeneraba pasó un rato. Me terminé de regenerar así que ahora sí estaba más furioso que nunca y empecé a pegarles mucho a los monos mutados que terminaron en