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LA SALUD
Secretarjo de la A lcaldfa y del d e· la Jun ta aux1lia r, h a bi e n~o surti.do de ropas, platos y cuch aras a todos los presos d el patw que carecian de tan in dispensa bles obj etos - ..... .. . : .. • . . .. .. y procurando en c u&.nto cab e, dotar de 6rden, rn orah dad y buena organi zacion a dicho establecimient o penal . .. . . ·. " , Como se v e, el Sr. Caparr6s de rnu es tra algun m~e re s . por qu e las malas co ndiciones de Ia dtrcel disminuyan; y, bte n vtsto, es todo lo qu e puede, hacer, pu e~ por ~ e.s~raci a, tod?- SLt bu ena voluntad 'se extrellara contra la 1mpos1bthdad maten al de corregu· tanto como es menester en aq uel E stablecimiento. L a necesidacl de construir uno nuevo se impone. Comenzancto por qne es un snpino disparate ten er una careel enclavad a en el centro de la poblacion, e inca paz pa ra alojar el n6mero de presos _hoy aglomer ados ; sig uiendo por que si los presos politicos, si lm~ criminales, si los detenid os, .si los que sufren condena, si 1os niiios, si los hombres en callecidos e n el cdmen, esta n todos juntos, nadie gan a en ello, perdiendo todo el mundo en C;ambio ; d e m o.~ tra nd ose, con s6lo sab er que csto sucede actualmente, la necesidad en qu e esta el ed ificio de depart.amentos de qu e hoy cm·ece ; y te rminando porq ue aqu ellos presos, unos sufi:iendo co nde na, otros esperando q uc sc los castig ue 6 t~l vez qu e sc lc rcco nozca su inoce ncia, pero t odos faltos de a1rc, y de luz, y de aseo,- p·orquc no hay: banos, porque n o !'lay c~ puciuaJ, -to d os gastando sin prod ucir, porque no h ay obhga(·IOn de trabaj ar, ni ho.y donde h acerlo tampoco ; y sabiendo que los qu e entran allf sin educacion de ning un genero, des pues de h aber adquirido h abitos peores, salen sin que n adie se haya ocupado de elevar su nivel m ond ; si todo es to se tie ne en c uent a! confese mos en qu e no basta que, cum pliend o con su d eber un Vrce-presidente de la Junta aux iliar, y anim ado del m ej or d eseo1 v aya vari as vcces a la carcel antes de la v1sita general y provea de -ropas .Y de platos fL los que nun ca debieron carecer d e aquellas prendas. , ~i loables son los cleseos del Sr. Capan:6s ·r eferentes a la morahdad del E sta bleciruiento, deseos que nos confirman en las buena:; condiciones de iluEtracio n q ue distin g uen al ca b~ lle ro que nos oc upa ; loa ble es tambie n, q ~l e 'haya qnien d e a tiempo l.a voz de-alarm a, c uando pe1ig ra la !moral dentro de un establemmiento qu e, como la circel, clebedt ser el luaa r des tin ado a la educacion del extravi ado; porquc es n eces~·io h acerce cargo de es to. El preso, por el hccho de esta"r 'sufrie ndo una con-'