El Decano Nº39. Julio 2016.

El Decano Nº 39 - Julio 2016

#GloriaEternaVíctorBarrio

Conchi Ríos hace Historia

Los carteles de la Feria de Murcia 2016 ya están en la calle

SUMARIO Editorial ......................................................................................................................... 4 Sí a la Fiesta de los Toros. (Por Ramón Sánchez-Parra Servet) ............................... 6 XXII Festival del Cáncer de Murcia .............................................................................. 7 Juan Belmonte, de lo pintado a lo escrito. (Por Jesús Cuesta Arana) ................. 10 Personas antes que toreros. (Por El Monosabio) ................................................... 13 La fotografía taurina. (Por Juanchi López) .............................................................. 14 Convenio de formación entre la UCAM y la Escuela de Tauromaquia ................... 15 El Vito, torería en la calle y en la plaza. (Por Alfonso Avilés) ................................. 17 Relevo generacional. (Por Juan Belmonte) .............................................................. 19 Presentación de la Feria Taurina de Murcia 2016 ................................................... 21 Fiestas de toros en Jumilla. (Por Alfonso Gálvez Pérez) ....................................... 23 Víctor Barrio y su huella en Murcia .......................................................................... 25 Martes Taurinos .......................................................................................................... 27 Viaje a ganaderías ...................................................................................................... 30 La suerte de varas. (Por José Ríos Moreno) ........................................................... 31 Conchi Ríos hace Historia ......................................................................................... 33 Conciertos para burros y perros (Por Antonio Lorca) ............................................ 36 Más actualidad del Club ............................................................................................ 38 Rosita “La Moulinex”. (Por José Luis Valdés) ......................................................... 40 Los Tesoros del Museo .............................................................................................. 42 El Apunte. (Por Emilio Iglesias) ................................................................................ 43

EDITORIAL

Alfonso Avilés Sánchez Presidente del Club Taurino de Murcia

Los del pensamiento único.

Está muy de moda eso de imponer el pensamiento único entre los animalistas, los antitaurinos y los partidos radicales y totalitaristas, pero lo que nunca podía imaginar es que también los teníamos entre nosotros, los aficionados, informadores y taurinos murcianos.

No es mi estilo, ni está en mi ánimo, fomentar las polémicas, pero es que lo que un pequeño grupo de esos aficionados y taurinos más cercanos al pensamiento único que a reivindicar los valores y las virtudes de la tauromaquia han hecho con la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia se merece, cuanto menos, este editorial.

Hace ya algún tiempo que un pequeño grupo de, repito, “aficionados”, “taurinos” e “informadores”, han puesto en tela de juicio las decisiones adoptadas por quien puede hacerlo en el Club Taurino de Murcia y en la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia.

Y son ya numerosas las ocasiones en las que se han venido refiriendo a ambas entidades insistiendo, no sin cierta cobardía, en que “apoyan su labor y trabajo”; pero mientras tanto siguen realizando afirmaciones que, una vez más, no se explican si no es desde un ánimo distinto, unido a una absoluta ignorancia de lo que ocurre y de un mínimo interés por saberlo.

Pero permítanme que me centre en la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia.

Dado que no se pudo o, lo que es peor, no se quiso entender la decisión disciplinaria sobre un alumno de la misma, y aunque con cierta pereza, me veo en la necesidad, ya por última vez, de puntualizar unos cuantos extremos.

Seré breve o, como se dice en el argot taurino, iré “de frente, en corto y por derecho”. Algo que, a los mencionados señores, evidentemente sonará raro.

A la Junta Directiva de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, de la cual tengo el honor de formar parte, le niegan capacidad alguna para juzgar lo propio por entender que es juez y parte interesada. Se atribuyen, ellos sí, una objetividad que les sitúa en mejor 4

EDITORIAL

Alfonso Avilés Sánchez Presidente del Club Taurino de Murcia

posición para opinar. No voy a ser yo quien les niegue el derecho a ello, es más, sus opiniones me merecen un total respeto. Pero lo que no pueden pretender es que las comparta, máxime cuando cuentan tan sólo lo que les interesa y conviene, ocultando datos absolutamente relevantes y, lo que es más grave, no habiendo mostrado el menor interés por contrastar la información sobre la que se pronuncian.

Eso sí, y continuando con los términos taurinos, han sabido “elegir los terrenos” para hacer este tipo de comentarios, es decir, unos medios propicios para ello. Pero entre el toreo auténtico y el ventajista, entre una estocada arriba y un bajonazo hay una gran diferencia, ¿verdad? A poco que se profundiza en el tema se comprueba que están “fuera de cacho” en todo momento.

Con premeditación, en reuniones minoritarias, a las que suelen asistir personas de buena fe, se atreven incluso a poner en tela de juicio los resultados del festival más solidario que existe y, por descontado, a poner “al pie de los caballos” a todo aquel que se aparte de sus criterios, de su pensamiento único. Así sucedió en un prestigioso restaurante de Javalí Nuevo, donde se citó lo más florido de esa representación, es decir, un informador, un presidente de club taurino de un pueblo de la región (que más debía preocuparse de su casa y no entrar en la de los demás), un matador de toros, un apoderado y empresario, el padre del alumno expulsado, un ganadero y unos cuantos (pocos) aficionados de buena fe para tratar, imagino que entre otras cosas, sobre la decisión de la Junta Directiva de la Escuela.

Y yo me pregunto, dirigiéndome a ellos: ¿Por qué ha despertado tanta atención en ustedes el cese disciplinario de este alumno y no el que se produjo un año antes? ¿Y los ceses anteriores no interesaron? ¿Por qué este sí y los otros no? Son ustedes son los que deben dar explicaciones.

Más preguntas: ¿A qué vino la manipulación hacia el colegio en que cursa sus estudios el alumno expulsado? Buscaban ampararse en un informe conseguido malintencionadamente, del que además se ha tenido que retractar el colegio en cuestión.

En conclusión, en unos momentos en que todo lo que se haga por la tauromaquia debe ser aplaudido y apoyado, aparecen estos señores del pensamiento único a tratar de imponerlo. Y todos afirmando que apoyan a la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia.

Lo malo de las mentiras es que, en sitios tan pequeños, tienen una trayectoria muy corta.

Y no me extiendo más, porque cuando no hay “enemigo”, lo mejor es terminar pronto la faena.

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Sí a la Fiesta de los Toros

Por Ramón Sánchez-Parra Servet Presidente del Cabildo Superior de Cofradías de Murcia

Porque es un espectáculo donde impera una tradición de siglos y forma parte de la historia y de la cultura de muchos pueblos de este planeta. Porque es una fiesta que se vive con pasión y que el aficionado la lleva dentro, la entiende y la disfruta con mucha intensidad. Siendo el toro uno de los animales más bellos del mundo. Porque es un rito donde lo que manda es la verdad, no hay trucos ni montajes ni escenografías, cuando el diestro se enfrenta a un toro por afición y por decisión propia, se juega la vida. Porque existe arte en una corrida de toros. Es un espectáculo donde prima la estética y se conjuga con otras muchas manifestaciones como la música. Porque es inspiración de escritores, poetas, pintores, Mariano Benllure, Sorolla, Ignacio Zuloaga, Picasso, Goya, Miro, escultores, fotógrafos, cantautores y bailadores.

La fiesta es un fenómeno cultura de primer orden, como decía Ortega y Gasset que “había que asomarse a las plazas de toros para conocer la historia de España,” y

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Salvador de Madariaga analiza el toreo “ La fiesta participa en muchas manifestaciones artísticas, es un drama en constante peligro, pintura de belleza impar, con luces y colores, obra de arte escultórico y con elementos propios de ballet.

En la poesía toda la generación del veintisiete, hasta Premios Nobeles como Camilo José Cela. Y sobre todo, porque defiendo mí libertad de escoger lo que me gusta y a que espectáculo quiero asistir.

Respeto a los que concurren a otro tipo de diversiones que no me agradan, pero que simplemente no voy; pero, al mismo tiempo exijo el mismo respeto a mí elección.

La fiesta de los toros genera una fuente de trabajo y de ingresos para miles de personas que directa o indirectamente depende de ello para su existencia al igual que el Estado donde dicha fiesta paga más Impuestos que cualquier otro espectáculo cultural.

XXII Festival del Cáncer de Murcia

Un evento imprescindible desde hace 22 años Hace 22 años arrancó un sueño. Y 22 años después es una realidad consolidada. La sociedad murciana, implicada al máximo con el evento, estrenaba este año, además, escenario: la Plaza de Toros de Murcia, adaptada a las exigencia del Reglamento de Espectáculos Públicos, se mostraba remozada, más cómoda si cabe, más bonita.

La sociedad murciana se vuelca con el Festival porque el toreo se vuelca con la AECC en Murcia desde hace 22 años, con Ángel Bernal a la cabeza. Y ese escaparate en el que luce el carácter solidario del toreo viene muy bien también en tiempos de incomprensión y ataques. Escasos, pero ruidosos. Sin efecto social, pero violentos.

Absurdos, pero continuados.

El Cordobés volvía al Festival tras su ausencia por lesión el año pasado

López Simón hacía su primer paseíllo en el Festival de Murcia

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XXII Festival del Cáncer de Murcia

Antonio Puerta actuaba con los puntos de la cogida de Cieza

Para la edición número 22 del Festival del Cáncer de Murcia se escogió un encierro de Algarra con el que Ponce ejerció de maestro consumado; El Cordobés de torero carismático; El Fandi tiró de espectacularidad en su concepto de lidia total; Lopez Simón cuajó la faena de la tarde con un toreo comprometido y rotundo, ligado y fluido; Antonio Puerta, aún sin recuperar de la cornada que un toro de Victorino le pegó en Cieza, volvió a dar motivos para la ilusión; el novillero calasparreño Filiberto se jugó las

Filiberto hizo un sincero esfuerzo ante el más complejo de los astados de Algarra

volteretas y las cobró en una tarde en la que necesitaba demostrar que está preparado para la alternativa; y el rejoneador de la casa, Sergio Galán, dio la talla de figura sobradamente ante un toro de Fermín Bohórquez.

Pero al final, por encima de lo artístico –que es importante–, brillo de nuevo el ambiente de fiesta con el que Murcia y el toreo viven una jornada imprescindible.

FICHA: Domingo, 17 de abril de 2016. Casi lleno.

Un toro de Fermín Bohórquez para rejones y 6 de Luis Algarra.

Sergio Galán, dos orejas; Enrique Ponce, oreja; El Cordobés, dos orejas y rabo; El Fandi, dos orejas y rabo; López Simón, dos orejas y rabo; Antonio Puerta, dos orejas y Filiberto, oreja.

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XXII Festival del Cáncer de Murcia

En Murcia los Toros son Arte, Cultura y Solidaridad.

Aprovechando la celebración del XXII Festival a beneficio de la AECC de Murcia, el Club Taurino de Murcia encabezó una nueva iniciativa para reivindicar la Fiesta de los Toros. Antes del paseíllo, los alumnos de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, cruzaron el albero de La Condomina portando una pancarta en la que se podía leer: "EN MURCIA LOS TOROS SON ARTE, CULTURA Y SOLIDARIDAD" provocando la reacción del público con una cerrada ovación. Tras el paseíllo, los matadores actuantes en el festival, posaron junto a los jóvenes en muestra inequívoca de apoyo incondicional.

Club Taurino de Murcia

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Juan Belmonte, de lo pintado a lo escrito

Por Jesús Cuesta Arana Escritor, pintor y escultor

Desde que empiezo a gastar memoria, en los días coloreados de la niñez, la figura de Juan Belmonte ejerce para mí un enigmático atractivo. Pego los oídos y la mente a las mil y una aventuras y desventuras del torero de Triana que cuenta la gente de edad. A los once años lo interpreto en una obrilla de teatro. El tiempo pasa y tengo el privilegio de vivir de cerca al señó Diego, hombre de confianza y mayoral de la vacada con hierro de Belmonte (procedencia de Guadalest), que a raíz de la muerte del legendario torero, es trasladado a la finca Dehesa de las Yeguas, en Alcalá de los Gazules (Cádiz). El nuevo propietario de la ganadería es José Quesada Márquez (El Canito). De modo que así se escribe la protohistoria de mi fascinación por el personaje que se me impresiona, por dentro, toda la vida.

En principio, quiero pintar un retrato que titulo El viejo Pasmo. Como trato de reflejar la psicología y la atmósfera del personaje, empiezo a buscar información. Mucho tiempo perdido y encontrado en bibliotecas, hemerotecas, documentos de primera mano y sobre todo un concienzudo trabajo de campo con la gente del toro. Entrevistas a 10

familiares, amigos y toreros de la época: Marcial Lalanda, Luis Fuentes Bejarano, José María Medina Villalonga, Moreno de la Cova, Carpinterito, Calderón hijo, Blanca Belmonte… Y sobre todo la ímproba colaboración de su hermano Rafael Belmonte García, eminente médico y flamencólogo, de imposible olvido, que me confiesa muchos episodios que permanecen en zonas ocultas. De modo, que sin querer, lo que al principio es una simple recopilación de datos para pintar un retrato va tomando cuerpo y da material para escribir un libro. Pronto me doy cuenta que, a pesar de la abundante bibliografía concentrada en el singular personaje, quedan todavía muchas cosas que contar y cabos sueltos. Un cúmulo de sombras por iluminar; sobre todo en el espinoso final en Gómez Cardeña. Por primera vez se relata, en un buen número de páginas, el suicidio del torero donde se vierte una infinidad de conjeturas, inexactitudes, ficciones adobadas por una gruesa veta de sensacionalismo. Amores más o menos oscuros, “el toro marrajo de la vejez”, como en el verso de Benítez Carrasco; una seria enfermedad, depresión, la tristeza incontinente, la candela que se apaga… Tal

Juan Belmonte, de lo pintado a lo escrito Por Jesús Cuesta Arana Escritor, pintor y escultor

vez la suma de todas estas circunstancias desencadena en el trágico final. No olvidemos que Belmonte se pasa toda la vida en el filo de la navaja. Sorteando en equilibrio constante la fina cuerda del drama.

Cuando se le pregunta por su salud responde: “Se vive…se vive de milagro”.

Poco antes del pistoletazo final, con fuerte aura romántica, confiesa a la periodista Josefina Carabias que Gómez Cardeña es un bonito lugar para morir. Juan Belmonte, vive de la misma manera que muere: besado por el misterio.

Lo que en principio es un cuadro, una pintura, se metamorfosea en un libro. Por consiguiente nunca tengo claro si primero es el retrato o el libro. Titulo el libro Juan Belmonte, por las caras del tiempo (*).

Buscando acomodo estilístico, se trata de un amplio ensayo donde cabe la biografía, la historia, el reportaje, la crónica, la poesía…

En fin, un amplio recorrido desbrozando los tópicos, panegíricos, hipérboles, leyendas camperas y urbanas a granel. A través del libro –al hilo de la narración– van pasando una sucesión de retratos del personaje.

Donde se aprecia claramente como el tiempo va pasando. Desde la sonrisa, toda frescura de aquel chiquillo trianero, hasta el océano de arrugas del anciano que pasea su tangible melancolía; negándose a ultranza “a verse postrado luego de haber

vivido algo así como seis vidas y a quinientos por hora”, en certera observación de Fernando Quiñones.

La estructura del libro se plantea en narración lineal donde va progresando el personaje a la par de su obra. Es decir, en una suerte de alternancia de la vida del torero y su papel fundamental en la Tauromaquia a través de una esmerada selección de crónicas. Se dedican espacios importantes a la figura insustituible y primordial de Joselito ¿Qué hubiera sido la historia del toreo sin Juan ni José? Uno, clásico medular, el otro rompedor. Pero al

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Juan Belmonte, de lo pintado a lo escrito Por Jesús Cuesta Arana Escritor, pintor y escultor

la Capillita del Carmen, la garrocha, el traje roto; el reino de las cosas que van pasando por su vida y en la mano deja caer un reloj, sin manecillas, como queriendo detener el tiempo.

final se complementan. Albos se miran, entre sí, enriqueciendo el toreo entre lo puramente racional y cordial. No puede faltar también el retrato, magia pura, de Rafael el Gallo (El Divino Calvo), mil veces rico, mil veces arruinado. Lo mismo que hace Leonardo da Vinci, compra pájaros para echarlos a volar. Con eso se dice todo. Los dos toreros se pasan la vida uno a la vera del otro. Juan Belmonte con su habitual retranca de filósofo tartamudo dice: “Nos pasamos el tiempo callados, apenas hablamos, entre un puro y otro, vemos pasar la vida”.

Una vez dado en acabado el libro me dispongo a pintar el retrato. Donde aparece el mítico torero ya muy trabajado por la edad y ambientado en torno a una escenografía e iconografía personal: Su Triana del alma, el Cachorro de su devoción por el puente, la cucaña en el río,

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Este nuevo libro, Juan Belmonte, por las caras del tiempo, lo abre en forma de preludio, Pepe Luis Vázquez. Un lujazo. El artemago de san Bernardo, vive y siente de cerca al monstruo sagrado en Gómez Cardeña. “Yo le vi siempre por dentro a Belmonte una extraña tristeza”, le oigo decir al torero con más ángel y bondad que pare Sevilla. Pepe Luis tiene la mirada clara como una transparencia del alma.

Oírlo hablar, un deleite. Cada palabra huele a primavera sevillana. Es eterno.

No cumple años sino primaveras (Siempre lo recuerdo en presente) ¡Qué honor y suerte que me abra el libro el inmenso Pepe Luis!

El libro se viene a condensar, en cuatro versos de Martínez Remis a modo de media belmontina: Y después de serlo todo/ te sentirás tan pequeño/ que te quisieras empezar/ por los caminos del tiempo. ( *) Jesús Cuesta Arana, Juan Belmonte, por las caras del tiempo. Madrid, AlgaidaAnaya, 2015.

Personas antes que toreros Por El Monosabio Víctor Barrio eligió ser matador de toros. Sabía que cada tarde se jugaría la vida porque la muerte es parte esencial de la tauromaquia, sea la del hombre o la del animal.

Por eso este espectáculo no tiene aficionados a medias, o gusta o no gusta. Y por eso es primordial que prime el respeto ante la elección que haga cada cual.

Pero hay quienes, en una defensa extrema e irracional del animal, pierden las formas y ese mínimo respeto que merecen las personas. Víctor Barrio fue

vejado e insultado en ese nido de ratas que son a veces las redes sociales con su cadáver aún caliente, y con expresiones horribles que me hicieron sentir vergüenza y asco.

Su crimen, ser torero. Esos que tanto aman a los animales olvidaron que también era persona.

No será la última vez que suceda salvo que la justicia, así, escrita con minúsculas, determine dónde acaba la libertad de expresión y dónde empieza el delito.

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La Fotografía Taurina

Por Juanchi López Fotorreportero

A punto de cumplir 30 años de profesión como fotorreportero, mas de 25 de ellos ejerciendo el oficio en prensa escrita, y habiendo dado cobertura a todo tipo de noticias (política, sucesos, deportes, entrevistas, sociedad, cultura, etc…), sin duda donde me encuentro más a gusto, desde mi comienzos, es trabajando en una plaza de toros.

Desde los años 80 he tenido la suerte de retratar a grandes figuras, como Paquirri, Espartaco, Ortega Cano, Manzanares padre, Emilio Muñoz, Curro Romero y un sinfín de históricos maestros, ya retirados. Hasta los actuales, Ponce, José Tomás, El Juli, Manzanares hijo, y una larga lista que sería difícil enumerar. Una tarde de toros es, sin duda, un maravilloso espectáculo de luz y color.

Desde mucho antes del paseíllo, la incertidumbre de lo que puede acontecer en el coso invade el ambiente; desde la puerta de cuadrillas hasta la salida en hombros del matador, todo puede ocurrir en poca más de dos horas. Alegría o frustración, triunfo o decepción, la gloría o la indiferencia. Son muchos los sentimientos que encierra el arte del toreo y que es preciso registrar a través del objetivo, desde un lugar privilegiado de la plaza, como es el callejón. La fotografía taurina es diferente al resto de los trabajos en mi profesión. La velocidad y la incertidumbre hacen que tengas que estar atento a todo lo que pueda pasar en el ruedo. Puedes tener la foto de la tarde en cualquier instante; un gesto, un muletazo o una cogida, te obligan a no quitar la vista del objetivo de la cámara.

Con el paso del tiempo ha cambiado mucho el arte de la fotografía. Hace tres décadas, en mis comienzos, con la fotografía analógica (la del carrete), todo era una incógnita, al no saber si tenias la foto de la tarde. Hasta llegar al laboratorio, y tras el laborioso proceso del revelado, se desvelaba la incógnita. Sabías entonces del material que disponías para seleccionar las fotografías que enviarías al periódico. Ahora, con la fotografía digital, las cámaras automatizadas y los medios tecnológicos actuales, sabes de inmediato el material de que dispones. Hasta se pueden enviar desde la misma plaza las imágenes en pocos minutos, para su publicación inmediata en internet, a las redacciones de los medios. Todo un avance que te facilita una labor que, pese a todo, sigue siendo complicada.

En lo personal, el mundo taurino me ha permitido conocer y trabajar con críticos taurinos de la talla de González Barnés, Clemente García, José María Galiana y Diego Vera, por citar algunos.

Personas con un gran conocimiento del que he aprendido muchas cosas que, sin duda, me han ayudado a realizar mi trabajo. Al igual que muchos compañeros fotógrafos, que también te ayudan a

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La Fotografía Taurina Por Juanchi López Fotorreportero

realizar tu labor. Su compañía en el burladero facilita el trabajo de la tarde, comentando la corrida y procurando que no se escape ningún detalle.

San Isidro en Madrid, Abril en la Maestranza de Sevilla, Fallas en Valencia, San Juan en Alicante.

Siguiendo a los toreros murcianos, grandes maestros del oficio; Ortega Cano, Pepín Jiménez, Manolo Cascales, Pepín Liria, Alfonso Romero, Rafaelillo, y muchos más. Y por supuesto, muchos rincones de nuestra querida Región Murciana, dónde existe una gran afición a la tauromaquia. Abarán, Lorca, Yecla, Cieza, Cartagena,… y cómo no, en nuestra querida plaza de La Condomina, con su gran Feria de Septiembre, de la que sumo casi treinta años asistencia sin interrupción. Al principio acompañando a mi abuelo, el maestro Juan López, y después con mi padre, Ángel Martínez, gran fotorreportero de Murcia. Son tantos años, tantos festejos, tantos recuerdos en el Coso Centanario…

Para realizar fotografía taurina pienso que tienes que tener conocimientos taurinos, saber algo del arte del toreo. Encuadrar la composición deseada con el toro y el torero, y “encajar” el capote o la muleta. Hay toreros mas fáciles de fotografiar que otros. Cuanto más despacito se torea, mucho mejor. En estos casos tienes la ventaja, entre otras cosas, de que lo que ves es real. Los protagonistas no están pendientes de la cámara, sino concentrados en lo suyo, en hacerlo bien, en agradar al publico. Tienes que estar en el sitio adecuado, ya que todo sucede delante de ti, pero del sitio depende que se plasme en una gran fotografía.

A veces, de vez en cuando, se consigue esa fotografía, la que te ronda por la cabeza. Esa que te gusta para dar por buena una tarde de toros.

Juanchi López junto a su padre Ángel

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Convenio de formación UCAM - ETRM

La Universidad Católica de Murcia firma un convenio de formación con la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia.

La Universidad Católica de Murcia y la Escuela de Tauromaquia de la Región firmaban el pasado 16 de marzo un convenio de colaboración por el que la institución académica becará la formación de los alumnos de la Escuela que quieren continuar su formación, y reúnan los requisitos, tanto en grado, postgrado o Formación Profesional, en este último caso, a través del Instituto Superior de FP San Antonio.

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El acuerdo fue rubricado por José Luis Mendoza, presidente de la UCAM, y por Rocío Bernal, presidenta de la Escuela, en presencia de Pepín Liria, el empresario Ángel Bernal y Alfonso Avilés. Este acuerdo refleja un paso importante y un gran logro de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia, ya que es la primera entidad formativa taurina que consigue un acuerdo con una universidad.

El Vito, torería en la calle y en la plaza

Por Alfonso Avilés Sánchez Presidente del Club Taurino de Murcia

Fue un novillero de éxito. Tomó la alternativa en Valencia el 1 de septiembre de 1946 de manos de Carlos Arruza en presencia de El Choni. El toro Sorillero, de Felipe Bartolomé, fue el de su doctorado.

Confirmó en Madrid el 3 de octubre de manos de Curro Caro.

El pasado 29 de junio falleció en Sevilla el matador de toro Julio Pérez Herrera “Vito”, una de las figuras señeras del toreo sevillano. El Vito, como era conocido, era un ejemplo de torería en la calle y en la plaza, algo que llevó a gala hasta sus últimos días.

Hijo de Manuel Pérez “Vito”, novillero y banderillero, había nacido en Camas (Sevilla) el 24 de enero de 1928. La vocación por los toros le llegó por los antecedentes. Se puso su primer traje de luces en Ubrique el día 9 de abril de 1944.

La carrera de matador de El Vito se caracterizó por los percances. Sufrió una cogida muy grave en Jaén ese año de 1946. En la Feria de Abril de Sevilla de 1947, el día 20 de abril, fue cogido por un toro de Guardiola, que le infirió una grave cornada en el muslo derecho. Estos percances influyeron de forma decisiva en las escasas actuaciones de los años siguientes. En 1961 renunció a la alternativa y se hizo banderillero. A pesar de esta renuncia, El Vito estaba considerado como el decano de los matadores de toros.

Como banderillero fue una gran figura, ya con el capote, ya con las banderillas. Actuó a las órdenes de toreros como Manolo Vázquez, Chamaco, Antonio Ordóñez, Litri y Jaime Ostos. Su calidad como

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El Vito, torería en la calle y en la plaza Por Alfonso Avilés Sánchez Presidente del Club Taurino de Murcia

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banderillero fue excepcional. La cuadrilla de Ostos, compuesta Por El Vito, Luis González y Blanquito, marcó un tiempo en el toreo. Julio salía de la cara del toro andando después de colocar los palos en todo lo alto. Su simbiosis profesional con Luis González cobró justa fama en el ambiente taurino de los años 50. En algunos festivales en Sevilla, El Vito puso las banderillas en los seis astados, tal fue su categoría como rehelitero. De hecho, era considerado dentro de la profesión como uno de los banderilleros más importantes de todos los tiempos.

Se nos marchó El Vito. El último que olía a torero. Verle en el hall del Hotel Colón, departiendo con los amigos era todo un lujo. Pensaba en torero, hablaba en torero, andaba en torero y su gestualidad era torera por los cuatro costados.

Dejó los ruedos en 1965, aunque no abandonó su contacto con el toro. Se convirtió en un experto hombre de campo, donde trabajó, entre otras, para la empresa de Murcia. “Si quieres un toro bueno y bonito, que te lo embarque El Vito”, esa era una de las frases ingeniosas de Julio Pérez.

Tenía una singular capacidad para conocer al toro en su hábitat natural de la dehesa.

El periodista Paco Mora ha dicho de él: Ha muerto un grande. Que las campanas de La Giralda “madre de artistas, molde de fundir toreros”, repiquen a gloria y que envuelvan al Giraldillo suyo en crespones negros.

Porque tardará tiempo en nacer, si es que nace, otro sevillano tan torero como él.

El Vito fue un personaje singular. Su vida estuvo marcada por la torería, vivía en torero, de forma que fue el torero sevillano que con más ejemplaridad ejerció de torero en la calle. El Vito ha muerto como torero.

Fue torero las 24 horas del día. Ha muerto la torería en estado puro.

(Foto: elmundo.es)

Relevo generacional

Por Juan Belmonte Crítico taurino de Canal Sur

Se está produciendo, esta llegando con mas fuerza y mas abundancia que en otras épocas del toreo. Los jóvenes novilleros aparecen en el escalafón y se van convirtiendo en matadores de toros empujando con fuerza, llamando a la puerta para entrar en juego. Cuando se anunciaban este año los carteles de la feria taurina de Sevilla, la de la reconciliación entre Empresa Pages y el G5, estos toreros proscritos se anunciaban junto a toreros nuevos que, los aficionados , profesionales del toro y medios de comunicación taurinos conocíamos perfectamente pero... ¿los conoce la gente, el publico, los que llenan las plazas?... rotundamente NO. Los no muy aficionados me comentaban que celebraban la vuelta de las figuras a Sevilla pero añadían....” lo que sí vienen son toreros muy raros, desconocidos ¿ no?”. Se refería a Roca Rey, López Simón, José Garrido... toreros cuyos nombres a nosotros nos suena y a los que hemos visto y además nos interesa ver a menudo... bueno pues al publico en general ni les suena, ni conocen su trayectoria, ni sus triunfos y eso... eso es cuestión de tiempo.

Prueba evidente de lo que digo está en la pasada feria de Osuna, muy cerca de Sevilla. Juan José Padilla, Paquirri y El Fandi llenaban al completo la Plaza , algo que no ocurría hace mucho tiempo. Estos toreros todavía llevan gente y mucha y estamos hartos de verlos. Enrique Ponce sigue toreando, mejor que nunca y llevando también publico y el Juli y Miguel A Perera... esto es así... no solo hay que cortar orejas y salir a hombros, también hay que darse a conocer, que la gente de a pie, el publico no entendido conozca tu cara, tus gustos, tu toreo y sobre todo tu nombre. Aclarado este relevo me permito la licencia de exponer la fé que tengo en Roca Rey... con juventud arrolladora,valor intrínseco, quietud total, frescura en su toreo, regularidad inusitada, emoción extrema... sólo le falta que el pueblo sepa que se llama Andrés Roca Rey y que va para gran figura del toreo, sino solo iremos a verlo los aficionados.

Tenemos que apoyar este relevo y cuidar a los que aparecen con sello, con personalidad, con algo distinto porque si observamos a los novilleros sin caballos,a

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Relevo generacional Por Juan Belmonte Crítico taurino de Canal Sur

los con caballos y a las madres que los parió todos torean igual, como hechos en serie y no digo que torean mal al contrario..torean perfectos pero sin alma, sin sello propio.

Otros dieron mucho que hablar en sus inicios pero no terminan de remontar,caso de José Garrido que tras el gran triunfo que tuvo en sus inicios en Bilbao, con seis novillos en solitario no ha vuelto a tener la relevancia que su toreo puede ofrecer.Por su parte López Simón aunque lo tilden de nuevo, no lo es tanto, ha tenido un triunfo

algo tardío o mejor dicho cuando debió de ser,cuando se ha cuajado como torero. No olvidemos a Paco Ureña..toreo supremo pero ¿ lo conoce el pueblo? Y Diego Urdiales que solo porque Curro Romero dijo que le gustaba mucho, lo catalogan como torero artista...nada mas lejos de la realidad...

En definitiva, el cambio se esta produciendo, el relevo de los mas veteranos también... y eso es bueno, justo y necesario.

Presentación de la Feria de Murcia 2016

Apuesta por la intensidad.

La Feria de Murcia de 2016 tendrá una corrida de toros menos que la de 2015 pero, a cambio, gana en intensidad y recupera la novillada con picadores perdida en la edición anterior. Tres corridas de toros, por tanto, cuajadas de figuras del toreo y nombres emergentes que aspiran a ese estatus, una de rejones, la novillada picada de terna murciana, dos clases practicas de la Escuela de Tauromaquia y el espectáculo ‘Carmen’, la ópera flamenca de Salvador Távora. Del 10 al 18 de septiembre, toros en Murcia.

Triunfadores de San Isidro Ángel Bernal, empresario de la Plaza de Toros de Murcia, presentó los carteles de la Feria de Septiembre en un día tan taurino como el de San Fermín. 7 de julio.

Pero la base de las combinaciones son los triunfadores de Madrid que, consolidados o jóvenes, son los que están en la pomada de la temporada: Manzanares en lo más alto, Roca Rey como impacto, López Simón revalidando lo que apuntó con solidez en 2015, Alejandro Talavante y Paco Ureña sin puerta grande pero rozando la salida a hombros y con orejas muy valiosas en el esportón. Y los clásicos de la Feria de Murcia y casi todas las del orbe taurino: Enrique Ponce y El Fandi. Y un Miguel Ángel Perera que es valor seguro.

El triunfo apoteósico de Andy Cartagena en 2015 obliga a la repetición del cartel de la corrida de rejones, y la recuperación de la novillada picada es una gran noticia para los aficionados porque supone el regreso a

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Presentación de la Feria de Murcia 2016 la apuesta por el futuro, máxime cuando el cartel está compuesto íntegramente por novilleros murcianos: José Manuel, David Fernández y el debut con picadores de Fran Ferrer, salido de la Escuela de Tauromaquia de la Región de Murcia.

La ausencias de Rafaelillo y, sobre todo, de Antonio Puerta –no tanto por murciano como por Triunfador de la Feria de 2015–, obedecen a criterios empresariales o negociaciones que no han llegado a buen puerto. Y son, desde luego, muy dolorosas para el aficionado murciano.

Los Carteles

La renovación de abonos y la compra de nuevos abonos irá del 25 de agosto al 1 de septiembre. Las taquillas estarán abiertas de 10 a 2 y de 5 a 8. Los días de festejo de 10 de la mañana a 7 de la tarde. Teléfonos de información y reserva: Taquilla: 968 23 94 05 y 968 20 21 42. Plaza: 968 23 96 59.

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Fiestas de toros en Jumilla

Por Alfonso Gálvez Pérez Presidente de la Federación de Moros y Cristianos de Murcia

A partir de los estudios realizados por Ricardo Montes y la prensa regional nos podemos acercar a las fiestas en Jumilla hace ocho décadas. En marzo de 1931, se inauguraba la temporada en la plaza jumillana con una novillada en la que actuaban Maravillas, procedentes de Madrid y el Niño del Barrio, originarios del carmelitano barrio de Murcia.El murciano oscureció al madrileño, con los toros de Melgarejo. Era considerado como un torero completo, valiente, manejando la capa con soltura.

Una nueva novillada era organizada en julio de 1933, con toros de Luis Frías. En el cartel encontramos a un miedoso Antonio Plazas, un buen José Vera y un triunfante niño del Barrio, que salió a hombros. Al mes siguiente, con la misma ganadería y aprovechando las fiestas locales actuaban Joselito de Cal, que toreó herido y el ya mencionado Niño del Barrio, siempre presente en la plaza jumillana. Las fiestas locales terminaban el 22 de agosto, habiendo estado muy animados y “sin incidentes”. A lo largo de los días se había

realizado la subida de la Patrona, desde San Agustín a la iglesia de Santiago.

La feria, en el jardín del rey don Pedro estuvo animada y al tiempo los dos teatros ofrecieron diversos espectáculos. Días después de la feria, en el Vico, durante la proyección de una película, alguien gritó “fuego” na alarma que acabó en desbandada, lo que provocó diversos heridos y contusionados. La plaza de toros acabó cerrando y los espectáculos taurinos pasaros a realizarse en una diminuta plaza de madera, con cabida para 4000 personas.

En ella vemos, en 1934, la actuación de los novilleros Madrileños, Antonio Pazos y el Niño del Barrio, con toros de Samuel Santos, era del empresario de la plaza un tal Pepera.

El espectáculo fue un éxito rotundo. Cuatro de los toros muertos dieron la vuelta al ruedo y se cortaron ocho orejas y cinco rabos. La feria se superó a si misma y los feriantes partieron contentos.

Además de los toros, representaron tres obras de teatro, el grupo local de

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Fiestas de toros en Jumilla Por Alfonso Gálvez Pérez Presidente de la Federación de Moros y Cristianos de Murcia

aficionados, en tanto que una compañía lírica ofrecía cuatro funciones.

Las fiestas de año siguiente contaron además de las típicas casetas, con diversiones para niños, columpios, ruedas voladoras, caballitos y tobogán.

El Moderno proyectó diversas películas. El Vico ofrecía teatro revistas. Por su parte, los toros se centraron en un mano a mano entre Rafaelillo y el Niño de Barrio, ambos salieron a hombros, con novillos de Julio Garrido.

Para septiembre de 1936 los jumillanos organizaban una corrida a beneficio de las Milicias Populares, al son de la

Internacional y el Himno a su Riego. Otra corrida benéfica tenía lugar este año organizada por los vecinos de Fuente del Pino en Jumilla. Se trataba de una becerrada para recaudar fondos con el fin de comprar mantas y ropa de abrigo.

Organizó el acto la Agrupación Socialista, con Juan García Moya al frente.

Quiero hacer extensivo mi agradecimiento a Alfonso Avilés y a su Junta Directiva por brindarme la oportunidad de participar en esta prestigiosa revista. Además reconocer que gracias a vuestro trabajo y esfuerzo se ha conseguido que los toros en Murcia sean Bien de Interés Cultural.

Plaza de Toros de Jumilla. 1939.

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Víctor Barrio y su huella en Murcia

La muerte de Víctor Barrio en la Plaza de Teruel ha supuesto un duro varapalo para el toreo. Mejor dicho, para la gentes que, siendo o no profesionales, aman el toreo y son conscientes de lo que los toreros se juegan cada vez que se enfundan el chispeante. Nadie –o casi– habla de ello a las claras. Por superstición o por aprensión.

Pero las caras de los toreros en los patios de cuadrillas cantan la procesión dramática que va por dentro antes del paseíllo.

Víctor Barrio, es de suponer, afrontaba la tarde de Teruel con la responsabilidad, el miedo y la ilusión a partes iguales. Sabía a lo que se exponía. Pero nadie, ni si quiera el mismo, pensaba que algo tan dramático pudiera suceder en una época en la que los equipos médicos son más profesionales y

completos que nunca, y que las enfermerías están dotadas de todo el material necesario para evitar tragedias… evitables.

El toro ‘Lorenzo’, de Los Maños, nos devolvió a la realidad del toreo quitándole la vida a Víctor Barrio. Ahora que mucho corto de mente, ignorante, hipersensible para con los animales y cruel para con el hombre califica de asesinos a los toreros y de sádicos a los aficionados, viene un toro a recordarnos el compromiso ético de los hombres que son capaces de salir de un burladero para enfrentarse a un toro. Y, de paso, a dejar retratados a muchos personajes que pululan a sus anchas por las redes sociales y contra los que el toreo, por fin, ha empezado a movilizarse.

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Víctor Barrio y su huella en Murcia

Elisa Lucero y Herederas de Bohórquez que le correspondieron en un festejo concurso de ganaderías; en septiembre de 2010 fue ganador de la prestigiosa Espiga de Oro de la Feria del Arroz de Calasparra. Víctor salió a hombros tras cortar una oreja a cada uno de sus novillos, de José Escolar, en una tarde de tanta dureza impuesta por los cárdenos como de compromiso por parte de un novillero que saludó a porta gayola a su primer enemigo y que dio, durante toda la tarde, la medida de su capacidad y de su ambición.

Recogiendo el premio de un vestido de luces como ganador del VI Certamen Manuel Cascales

Víctor Barrio en Murcia Víctor Barrio –Grajera (Segovia), 1987–, fue ganador de certámenes en la Región de Murcia en su brillante etapa como novillero.

Sin caballos ganó la VI edición del Trofeo ‘Manuel Cascales Hilla’. Fue en 2009, cuando cortó cuatro orejas a los novillos de

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En Calasparra el 7 de septiembre de 2010 con novillos de José Escolar, alzándose con la “Espiga de Oro”.

Martes Taurinos 26 de Enero

4 de Febrero

El escritor costumbrista Alberto Sevilla fue el protagonista del primer Martes Taurino del año ofreciendo la lectura de diversos textos de variada temática y contexto histórico exaltando del lenguaje de la huerta murciana.

El matador de toros del barrio de San Antón de Murcia, Antonio Mondéjar hizo un recorrido a lo largo de toda su trayectoria profesional como torero de la mano del crítico taurino Manolo Guillén.

18 de Febrero

25 de Febrero

El cantaor Antuán Muñoz acompañado a la guitarra por Luis Santiago, protagonizó un recital flamenco bajo el título “Las raíces flamencas” poniéndo en escena un variado repertorio con temas de distintas épocas, autores y palos.

El arquitecto y aficionado cordobés Antonio Portillo Peinado, protagonizó una conferencia apoyada en una proyección audiovisual, titulada “El Toreo, riesgo hecho arte”.

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Martes Taurinos

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1 de Marzo

9 de Marzo

El cirujano plástico D. Pedro Rafael Orenes Lorenzo, protagonizaba una conferencia titulada “La cirugía reparadora tras las cornadas”, en la que expuso la importancia de este tipo de cirugías, posteriores al percance en cierto tipo de cornadas.

Concierto flamenco de los alumnos de Cante Flamenco del Conservatorio Superior de Música de Murcia que dirige Curro Piñana.

19 de Abril

28 de Abril

Concierto flamenco de los alumnos de Guitarra Flamenca del Conservatorio Superior de Música de Murcia dirigidos por los profesores Carlos Piñana, Francisco Tornero y Juan Francisco Carrillo

Presentación de la biografía de Juan Belmonte, “Por las caras del tiempo”, obra del escultor, pintor y escritor, Jesús Cuesta Arana. La presentación corrió a cargo del periodista de Canal Sur, Juan Belmonte.

Martes Taurinos 3 de Mayo El periodista del diario “El País”, Antonio Lorca, protagonizaba la conferencia titulada “Una temporada de infarto”, en la que daba su particular visión de la situación actual por la que atraviesa la Fiesta de los Toros.

Retransmisiones Taurinas Como en los últimos años, desde el Club Taurino de Murcia se han seguido las retransmisiones en directo de las ferias de Fallas de Valencia, Abril de Sevilla, San Isidro, Hogueras de Alicante, San Fermín y S a n t a n d e r, c o n g r a n aceptación y una afluencia de aficionados que se ha ido incrementando año tras año.

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Viaje a Ganaderías. #13M El tradicional viaje a ganaderías del Club Taurino de Murcia se reconvertía este año en un viaje más taurino que nunca por la variedad de las actividades programadas y por la importancia de una fecha tan señalada en el calendario de todos los taurinos como lo fue el 13M. El Club Taurino de Murcia llegaba a Valencia el viernes 11 de marzo donde instalaba su cuartel general. El sábado 12 visitaba la ganadería castellonense de D. Pedro Jovaní, donde se disfrutaba de la hospitalidad y de la calidad humana de un extraordinario ganadero, aficionado y anfitrión, en su finca

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situada en la localidad de San Mateu. Los socios del Club asistieron a un tentadero protagonizado por el matador de toros Antonio Puerta y disfrutaban de un almuerzo de hermandad.

Al día siguiente, 13M, el Club Taurino de Murcia gritó “SÍ A LOS TOROS” en las calles de Valencia, poniendo su granito de arena en la gran manifestación que recorrió las calles de la capital del Turia. Finalmente, y como colofón a un gran fin de semana, se disfrutaba del triunfo de nuestros paisanos Rafaelillo y Paco Ureña en primera corrida de toros de la Feria de Fallas.

La Suerte de Varas Por José Ríos Moreno Para algunos aficionados, la suerte de varas es una de las mas hermosas y emocionantes de la lidia. Es un espectáculo inigualable la acometida de un toro bravo y encastado al caballo del picador, especialmente si se le colocó a la distancia adecuada a sus condiciones, y el encuentro con el peto cuando el picador coloca la puya en su sitio y aguanta la embestida con brazo firme, sin barrenar, tapar la salida a la res, ni hacer “la carioca”.

Si se hace el quite en el momento oportuno y se le coloca de nuevo en sitio idóneo, el toro podrá poner de manifiesto su casta y bravura, si de nuevo acude al caballo porque no se ha resentido del castigo ni el puyazo recibido ha quebrantado su fiereza.

Lo dicho viene a cuento porque en algunas corridas de la última Feria de Abril de Sevilla hemos visto el lamentable espectáculo de algunos toros que apenas han recibido un leve picotazo y porque han ido dos veces al caballo el Presidente, motu propio o a instancia del matador, ha cambiado el tercio, o han tomado una vara y al segundo encuentro el picador, en un gesto simbólico, ha colocado la puya en su sitio sin herir lo mas mínimo a la res. A raíz de estos acontecimientos, he analizado el Reglamento Taurino nacional ( R. D. 145/1996, de 2 de febrero) y el Reglamento Taurino de Andalucía (Decreto 68/2006, de 21 de Marzo), promulgado este último al

amparo de los dispuesto en el art. 13 de Estatuto de Autonomía de esta Comunidad.

Comparando lo dispuesto en ambos Reglamentos respecto al tema que nos ocupa, observamos que el art. 72.6 del Reglamento Nacional y el art. 54.6 del Reglamento de Andalucía coinciden en lo esencial, si bien hay algunos matices diferenciales que conviene analizar para comprender lo que hemos visto en algunas corridas de la Maestranza.

En efecto, en la normativa nacional se dice, en el precepto citado, que en las plazas de 1ª categoría, y la Maestranza lo es, el toro recibirá, al menos, dos puyazos, lo que no impide que a partir del primero el Presidente, por propia iniciativa o a petición del diestro, pueda

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La Suerte de Varas Por José Ríos Moreno cambiar el tercio si estima que el castigo ha sido suficiente de acuerdo con las condiciones del astado. Obsérvese que el artículo citado habla de puyazo, vocablo que, según el Diccionario de la RAE, significa “herida que se hace con puya”; es decir, que en las dos acometidas el toro debe resultar herido, lo que no es obstáculo para que el picador, por decisión propia o a iniciativa del matador, propine el castigo de manera mas o menos cruenta de acuerdo con el poder y la acometividad de la res. Sin embargo, el mencionado precepto del Reglamento de Andalucía dispone que en las plazas de 1ª categoría “la res tendrá que entrar, al menos, dos veces al caballo de picar tras ser colocada en suerte”; es decir, se sustituye el vocablo PUYAZO por ENTRAR, sustitución de palabras que puede tener, y de hecho ha tenido, sus consecuencias, pues una de las acepciones del verbo “entrar” que aparece en el Diccionario de la RAE se traduce en “acometer, arremeter”.

Tal sustitución de vocablos supone que en Andalucía es suficiente con que el toro arremeta contra el caballo, aunque no resulte herido porque su normativa no contiene tal exigencia, lo que implica que los Presidentes puedan

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interpretar a su arbitrio el precepto y tolerar los simulacros de suerte de varas que hemos visto en alguna de las corridas a las que me refiero. Si a eso se une que los toros que ahora se lidian, en general, carecen de fuerza y de casta, llegaremos a la conclusión de que se ha desnaturalizado la Fiesta Nacional.

Los que ya somos veteranos perdón por el eufemismo- no dejamos de añorar otros tiempos en los que el púbico era mas exigente y no se acomodaba a los amaños actuales. Recordaré, verbigracia, una corrida concurso de ganaderías que se celebró en Jerez de la Frontera el año 1965, lidiada por Antonio Bienvenida y Antonio Ordoñez mano a mano (“casi na”); en esa corrida hubo toros que, colocados a la distancia conveniente, entraron cuatro o cinco veces al caballo y recibieron varios puyazos, desde luego mas de dos, aunque se les administraran con cautela para no quebrantar demasiado al animal. Ese concurso de ganaderías contrasta con el celebrado en Zaragoza el día 24 de Abril del año en curso en el que ningún toro de los lidiados mereció el premio y fueron claro exponente, en general, de la endeblez del ganado bravo en esta época. Claro que hablamos de otros tiempos, de otros toros y de otros toreros.

Conchi Ríos hace Historia

El 9 de Junio de 2016, Conchi Ríos se convertía en la primera mujer murciana en tomar la alternativa y, por tanto, se convertía en la primera matadora de toros de Murcia de la historia.

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Conchi Ríos hace Historia El lema de la publicidad que Conchi Ríos se hizo tras abrir la Puerta Grande de la Plaza de Las Ventas la noche del 12 de julio de 2011 era “haciendo historia”. En ese momento era la segunda mujer, tras Cristina Sánchez, que conseguía salir a hombros en Madrid, y la primera que le cortaba las dos orejas a un mismo novillo –un toro por volumen y seriedad–.

‘Escondido’, de José Cruz, ponía a Conchi en el senda del éxito después de que la murciana llegara al coso más importante del mundo con los puntos aún frescos por un cornadón de cinco trayectorias que había sufrido en la localidad francesa de Rieumes.

Pero algo se torció por el camino, y lo que parecía que iba a ser un camino de rosas – el toreo nunca lo es–, se convirtió en una verdea umbría y espinosa.

Conchi sufrió en su cuerpo los rigores del toreo en forma de cornadas y de olvido. De ser base de la novillada de las ferias de postín, al olvido. De estar mandando los vestidos de torear al sastre para repararlos, a mirarlos colgados en el armario sin fecha para desenfundarlos y darles vida.

Alternativa Conchi se fue a vivir a Madrid. Superó depresiones. Siguió entrenando –nunca

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dejó de hacerlo–. Se matriculó en Psicología. Y tres años después de haber desaparecido del mapa, la oportunidad volvió de la mano de un empresario joven como Alberto García –Tauroemoción–. La oportunidad de volver a ilusionarse con el toreo y de alcanzar una meta que, según ella misma, debía haber llegado hace… pues eso, tres años.

Conchi Ríos se vio, de pronto, con una nueva meta en el horizonte: el 9 de junio de 2016, Día de la Región de Murcia, se anunciaba su alternativa en Cehegín. Con El Cordobés de padrino, Antonio Puerta de testigo y toros de Guadalmena.

La tarde, extremadamente calurosa, aumentaba la presión que ya supone el vestido de torear por sí solo. La cámaras de Castilla La Mancha Tv echaban más leña al fuego de los nervios. Pero salió el toro –‘Gandul’ se llamó el de la ceremonia– y Conchi se soltó a torear y sentir como si

Conchi Ríos hace Historia

fuera su primera y su última tarde. La cesión de trastos de Manuel Díaz ‘El Cordobés’ y su discurso fueron largos y emotivos. El brindis de Conchi a su abuelo Juan, mucho más breve y mucho más emotivo. Casi no pudo articular palabra. Y la oreja final supo a peso quitado de encima.

Más que la propia oreja, la capacidad demostrada por Conchi Ríos para estar delante del toro.

Y esa sensación se incrementó en el sexto.

El toro de Guadalmena, de preciosas hechuras, hondo, apagadito, noble, sirvió para que Conchi Ríos dibujara un puñado de naturales al ralentí, de trazo exquisito, de sentida composición: excelentes. Ese toreo tan enjundioso, dibujado con tanta sensibilidad, convenció a quienes se acercaron a Cehegín a presenciar un hecho histórico y dio alas a Conchi Ríos para seguir soñando con un futuro en el que el toreo lo ocupe casi todo.

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Conciertos para burros y perros

Por Antonio Lorca Crítico taurino del Diario “El País”

La ciudad zamorana de Toro -también es casualidad- acogió el pasado 18 de junio un concierto para burros, al objeto de homenajear a un animal ‘cariñoso y noble’ que ha hecho compañía al hombre. La interpretación corrió a cargo de un cuarteto, compuesto por un violinista checo, un chelista francés, un intérprete de viola catalán y un oboísta valenciano, profesores todos ellos de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León; los mismos músicos que el año pasado participaron en un concierto para perros, al que asistieron más de cincuenta canes junto a sus dueños y cuidadores, y entre los que había perros del Ejército, la Policía Nacional y de la ONCE. Esta noticia puede parecer una burrada, pero es cierta. Y no es la única que constata la relevancia que la sociedad actual presta a los animales.

El pasado 5 de julio, unas cincuenta personas, todas ellas semidesnudas, se embadurnaron de pintura roja, y se manifestaron ante el Ayuntamiento de Pamplona contra el maltrato animal y, lógicamente, contra las corridas de toros. La noticia no solo concitó la atención de muchos espectadores, sino que fue recogida por los informativos de la televisión y apareció en las páginas de los periódicos locales y nacionales.

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Extraordinaria es, por otra parte, la atención que los medios de comunicación prestan a los animales de compañía. Abundan los programas sobre el cuidado, atención y beneficios de perros, gatos y demás fauna.

Incluso, se han descubierto recientemente las cualidades terapéuticas de algunas especies animales en su relación con personas enfermas.

En fin, que los animales están de moda; que todos somos, cada vez más, animalistas en mayor o menor grado, y los seres vivos llamados de compañía y otros que no lo son tanto, forman parte de nuestras familias.

Ha calado hondo el mensaje. Los animales han conquistado nuestros corazones en la misma medida que a los aficionados a los toros nos asaltan remordimientos por ser amantes de una tradición cruenta en la que brota la sangre.

Ufff!!! Sangre… ¡Qué bárbaros los que disfrutan de un espectáculo en el que se hiere hasta la muerte a un animal indefenso como es el toro! ‘Las corridas de toros son solo una matanza ritualizada’, decía hace unos días en el diario El País el premio Nobel de Literatura J.M. Coetzee.

En fin, que ser aficionado no está bien visto; no es políticamente correcto. Prueba de ello es que el propio Rey Felipe VI ha decidido

Conciertos para burros y perros Por Antonio Lorca Crítico taurino del Diario “El País”

dar la espalda a la tauromaquia y no aparecido por la plaza de Las Ventas durante la pasada Feria de San Isidro, como ha marcado la tradición de la Casa Real. Pero no es el único; tampoco ningún político de postín se ha dejado ver por las barreras madrileñas. ¿Será, entonces, que el mundo vive una suerte de pacífica convivencia en la que reinan valores como la paz, la armonía, la educación, el respeto, la solidaridad…? ¿O será, por el contrario, que esta sociedad está bajo la dictadura de algunas corrientes que utilizan los animales para fines políticos en las que el toro bravo lleva la peor parte?

Sorprende sobremanera que mientras la televisión pública decide no retransmitir festejos taurinos para no dañar las inocentes cabecitas de los niños, se emitan dibujos animados, películas y series en los que, con frecuencia, abundan el odio, la maledicencia, los enfrentamientos, la violencia… Por cierto, en la reciente Eurocopa de Fútbol se han podido ver hasta la saciedad imágenes de durísimas peleas callejeras que nunca, jamás, en toda la larga historia de la tauromaquia, se han producido en una plaza de toros.

Ah! Pero muchos maestros y padres que alejan a los niños de la contaminación taurina no consideran que esa extrema violencia les sea perjudicial; ni la que emite televisión, ni la que irradian los videojuegos, ni esta rechazable sociedad competitiva y egoísta, ni la frecuente mala educación en la que todos nos movemos. Por lo visto, los únicos malos son los festejos taurinos.

Es verdad que la tauromaquia ha perdido la batalla de su permanencia en el mundo.

Mientras los animalistas han conquistado una posición social de privilegio, los taurinos -especialmente, toreros, ganaderos, empresarios y autoridadesandan desunidos, asustados y ausentes de estas polémicas que aventuran un oscuro porvenir a la fiesta de los toros.

La reciente feria de San Isidro, por ejemplo, ha puesto de manifiesto el rotundo fracaso del toro bravo. Ninguna ganadería brilló con luz propia en el largo serial, que se caracterizó por un río desbordante de mansedumbre, falta de casta y fortaleza, y ausencia de bravura y acometividad, lo que ha determinó un ciclo fundamentalmente aburrido y decepcionante.

Bajó el trapío de los toros respecto a temporadas anteriores; se devaluó, aún más, el tercio de varas, y las faenas de muleta resultaron, por lo general, largas y soporíferas por la escasa movilidad de las reses y la impericia de muchos toreros. ¿Cuál ha sido la reacción de los taurinos?

Ninguna; como si nada hubiera ocurrido.

Continúan las ferias y aquí no ha pasado nada. Siguen huyendo aficionados de las plazas, expulsados por la desolación que producen la invalidez y la falta de casta, y no pasa nada. ¿A quién puede sorprender, entonces, que se celebre un concierto para burros?

Cuando queramos darnos cuenta, los animales habrán acabado con los toros.

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Más actualidad del Club Nuevas panderetas para la colección del Club

Los artistas Manolo Peñalver y José Claros hacían entrega al Club Taurino de Murcia a principios del presente año, de sendas panderetas pintadas que pasarán a formar parte y a enriquecer la extensa colección que se exhibe en el salón principal del Museo, y que le confiere el carácter de única en el mundo.

Alfonso Avilés galardonado con la Medalla de Oro del Club Taurino de Cartagena

El Presidente de nuestro Club, Alfonso Avilés, fue galardonado con la Medalla de Oro del Club Taurino de Cartagena.

Máxima distinción con que la entidad de la ciudad portuaria también distinguía al Consejero de Fomento e Infraestructuras, Francisco Bernabé, el matador de toros Javier Conde, y el Presidente de la UCAM, José Luis Mendoza.

Avilés recogía la distinción de manos del Presidente del club cartagenero, Manuel Juárez en un acto celebrado el pasado 12 de marzo en El Batel, en el que también se reconocieron las trayectorias profesionales de los matadores de toros Rafaelillo y Antonio Puerta, junto a las del novillero Filiberto y el rejoneador Pencho Solano.

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Más actualidad del Club Reuniones con el Presidente de la Comunidad

El Club Taurino de Murcia y la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia mantienen a lo largo del año una estrecha comunicación que se materializa con las habituales reuniones que mantienen sus Presidentes, Pedro Antonio Sánchez y Alfonso Avilés. A lo largo del presente año, dos han sido los encuentros mantenidos por ambos mandatarios, concretamente 23 de febrero y 22 de julio, en los que se han abordado temas como la próxima constitución de la Mesa del Toro de la Región de Murcia, la organización de un Congreso Internacional de Tauromaquia y la próxima Feria Taurina de Murcia y los actos paralelos que se organizarán con motivo de la misma, entre otros.

Presentación del libro “El Toreo, conócelo y entiéndelo” El Real Casino de Murcia fue el escenario del primer acto del año organizado por el Club Taurino de Murcia. El 22 de enero se presentaba el libro "El Toreo, conócelo y entiéndelo", obra del Catedrático de Ginecología Rafael Comino. El acto fue presentado por el aficionado José María Marín, y el matador de toros Antonio Puerta fue el encargado de presentar al autor del libro.

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Rosita “La Moulinex”

Por José Luis Valdés

De los ocho hijos del notario don Blas Arencibia, de los Arencibia de toda la vida, la benjamina Rosita no era la menos fea.

Desde bien pequeña llamaba la atención su desdén hacia las muñecas, las cocinitas y hacia otros juegos que los rancios anunciantes sexistas consideraban propios de las niñas. Pero Rosita despreciaba hasta saltar a la comba y se pirraba por las peleas a pedradas contra los chicos del barrio, de tal forma que no había batalla urbana donde la moza no participase en primera línea de infantería, con muy atinada puntería por cierto.

Y es que Rosita sólo tenía de las rosas el nombre y las espinas, muchas espinas, pero ningún delicado pétalo y, de todos los colores, era precisamente el rosa el único que odiaba. Y eso que, para desconcierto de sus padres, sobre la cabecera de su cama lucía una enorme bandera con toda la gama del arco iris; pero, aunque parezca mentira, en el arco iris tampoco figura el color rosa.

Aunque su deporte favorito hubiera sido el rugby, se tuvo que conformar con el

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balompié y, en su cruzada contra el machismo, consiguió que la dejaran participar en el torneo escolar de fútbol con el resto de muchachos, pues el fútbol femenino le parecía una ñoñería demasiado insulsa.

A partir de entonces se fue horadando un hueco en el fútbol juvenil y pronto destacó como infranqueable lateral derecho, pero su fama alcanzó verdaderamente la leyenda a partir de aquella célebre tarde de primavera en la que se abrió de piernas -por vez primera y única en su vida- ante el joven y apuesto Oscar Rubén Tarantella, famoso delantero criollo pretendido por el Real “Madriz", que no tuvo mejor ocurrencia que intentar aprovechar la ocasión haciéndole un túnel entre sus hirsutas rodillas. La respuesta fulminante de Rosita ante tal obscenidad fue despacharle una sola patada con la que le partió la tibia y el peroné, todo en el mismo lote. Desde entonces era tan temida que nadie se atrevía a entrar por esa banda y todos los equipos volcaban sus ataques por el otro lado, de tal forma que Rosita se aburría en cada partido como un champiñón solitario.

Rosita “La Moulinex” Por José Luis Valdés Por eso decidió abandonar prematuramente el llamado deporte rey y así, durante una comida navideña, le dijo a su madre:

Cuando decía “picadora de toros”, se refería literalmente a eso. La chica tenía aptitudes, pero su carrera fue muy corta.

-¡Mamá, para Reyes quiero una mona!

Aunque ella lo achacó al odioso machismo que domina el mundo taurino, en realidad la verdadera causa de que no encajara en ninguna cuadrilla por mucho tiempo era que se resistía a cumplir las instrucciones de los matadores cuando éstos le pedían que les dejara los toros crudos.

-Hija mía, querrás decir un roscón. Ya sabes, de ésos con sorpresitas…

Pero la auténtica sorpresa fue para su progenitora cuando le contestó: -La mona es la protección de hierro para la pierna…

-¿Pues no te habías dejado el fútbol, cariño? -terció su padre-. Me parece bien que te protejas, no te vaya a pasar como al pobre delantero aquel que dejaste cojo… ¿Mozzarella se llamaba? ¿Pero no te valdría con unas simples espinilleras? ¿Tan bruta eres, hija mía, que tienen que ser de hierro?

-Papá, no se trata de fútbol, sino de toros.

-¡Ay, Jesusito de mi vida! -exclamó la señora de Arencibia juntando ambas manos sobre el pecho- ¡Que me lo veo venir!

-Mamá -dijo resuelta-, necesito una mona para la pierna porque voy a ser picadora de toros.

Y fue entonces cuando al señor notario se le cayó la cuchara dentro de la sopa.

Pero ella no quería renunciar a los méritos con los que había ganado merecidamente su apodo, a pesar de que los melindrosos toritos de ahora no sean como los de antes.

Por ahí no estaba dispuesta a pasar. No en vano, inspirada en una conocida marca de electrodomésticos, se anunciaba como Rosita, “La picadora Moulinex”. Y cuando Rosita se ponía en marcha, picaba a conciencia y no se detenía ni aunque el presidente ordenase el cambio de tercio. Y pobre de aquel banderillero que osara meter un capote para tratar de llevarse al toro, como bien podría corroborar el peón Epifanio Rodríguez “El imprudente”, también conocido con el sobrenombre de “Jorobadito de Osuna” desde aquel funesto día en que lo intentó.

Y, claro, con un temperamento así era imposible.

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Los Tesoros del Museo Sebastián Palomo Linares siempre vistió de plata en su primera época. A lo largo de su carrera sólo se hizo dos vestidos con el bordado en oro, y eso sucedió en su reaparición: uno grana y otro azul. El grana fue el primero que lució, y precisamente el último que se puso en la que fue su última actuación en la Plaza de Toros de Las Ventas, el 25 de mayo de 1994, en una tarde en la que le dio la alternativa a Jesús Pérez, ‘El Madrileño’.

Vestido de Palomo Linares

El presidente y vicepresidente del Club Taurino de Murcia, Alfonso Avilés y Emilio Iglesias, acudieron el pasado mes de enero a “El Palomar”, citados por el maestro, y recibieron dos piezas históricas de sus manos: el primer vestido de torear bordado en oro que se hizo el maestro en toda su carrera y que sirvió para la que, a la postre, resultaría su última actuación en Madrid, y una fotografía dedicada al Club de la primera de las dos salidas a hombros que cosechó el 18 de junio de 1971 en la madrileña Plaza de Vistalegre donde, en jornada vespertina y nocturna, mató 13 toros a los que cortó 12 orejas y 4 rabos.

Ambas piezas posan juntas en una de las vitrinas del Club situadas en el salón principal del Museo, para deleite y disfrute de todos los Palomo Linares haciendo entrega del vestido al Club Taurino aficionados. de Murcia en su finca “El Palomar”

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El Apunte Por Emilio Iglesias

Club Taurino de Murcia

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