UN CAMINO HACIA EL SENTIDO Jorge Julio Mejía S.J. CINEP / Programa por la Paz Mónica Pinilla Oscar Arango Roberto Solarte Universidad Javeriana
L
a situación de pobreza y de explotación de los obreros de la revolución industrial llevó a Carlos Marx a preguntarse acerca del por qué de la actitud de resignación. Y encontró que una de las explicaciones era una enseñanza religiosa que atribuía la organización del mundo y la distribución de la riqueza a Dios. Esto lo llevó a calificar a la religión como “el opio del pueblo”. La enseñanza de Jesús no dio pie para que aconsejara tal pasividad. Ese ya fue un problema de otra índole a lo largo de la historia. Jesús dejó una parábola muy fuerte acerca de la justicia significada por un escenario de juicio al final del tiempo. Allí se califica a los indiferentes como maldición para los hermanos y constructores de infierno, y a los solidarios como constructores de infierno y maldición para los hermanos. El Papa León XIII fue sensible a una situación de pobreza y explotación que se ligó a lo vivido a finales del siglo XIX y escribió una carta a toda la cristiandad cuyo título en latín es Rerum Novarum (De las cosas nuevas), una invitación a la sensibilidad sobre la injusticia y al compromiso con la situación para los más necesitados. La Iglesia siempre había planteado la necesidad de auxiliar a los pobres. La acción se llamaba “Caridad Cristiana”. Muchas obras de beneficencia funcionaron para dar pan a los hambrientos. Pero pronto el pensamiento de la comunidad cristiana comienza a elaborar otra manera de ver la situación, comenzando por preguntarse por las causas de la pobreza, del hambre y de la exclusión. A los movimientos sociales se van sumando cada vez más creyentes cristianos que desean hacer algo por la solución de los problemas trabajando por el cambio de las estructuras sociales. La organización de la sociedad estaba demasiado anclada en formas de gobernar desde los intereses de los más ricos y la economía no tenía en cuenta a los pobres, sino en su calidad de mano de obra: obreros.
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