Las Bienales de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras han sufrido históricamente los efectos de las situaciones y condiciones políticas por las que ha pasado nuestro país en general y la universidad en particular, con impactos claros sobre la producción, formación y difusión artística en Honduras. Las Bienales de Arte de la UNAH iniciaron en el año 1988, convocándose la segunda en 1991, momentos en los que se invitó a las vanguardias artísticas a hacer sus propuestas con los resultados positivos que conocemos. A pesar de ello, inexplicablemente, durante 22 años nuestra universidad abandonó un proyecto trascendente para la comunidad artística y para el fortalecimiento de la cultura, procediendo a ocupar papeles marginales a través de apoyos puntuales a los temas artísticos, como el préstamo de instalaciones. La Universidad consciente de los problemas que esto ha acarreado a la sociedad hondureña en general y a los artistas en particular, realidad a partir