Revista no. 137/ 2021
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Homilía de la fiesta de la Beata Inés, 21-1-2021
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Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas. Solo una es importante. Esta es la frase evangélica que todos los años el día de la Beata se escucha; parece, sin embargo, que se haya escogido para este año. Celebramos la fiesta de la Beata Inés, su triunfo, el día en el que Dios abrió las puertas del cielo para ella. Lo hacemos como siempre alegres, pero este año nuestra alegría es silenciosa, es íntima. Lo hacemos en mitad de una pandemia mundial. En mitad del sufrimiento, de la incertidumbre, del miedo y del dolor. Las circunstancias son duras, pero ello nos permite centrarnos en esa cosa que es tan importante según Jesús. Hoy lo esencial de la fiesta es, más que nunca, la celebración Eucarística. Celebración que tiene dos grandes núcleos. De una parte hacemos la memoria de Jesús en la consagración del pan y el vino y en la comunión de su Cuerpo y su Sangre. En este sacramento recibimos al mismo Jesús y todos al recibirlo comemos el mismo cuerpo y la misma sangre. Todos comulgamos lo mismo, todos bebemos de la misma fuente, todos somos uno. De otra parte todos proclamamos la misma palabra. Las escrituras del Antiguo y del Nuevo Testamento toman su plenitud en las palabras del Evangelio. Un Evangelio del que la Beata Inés es una de las mejores predicadoras. Lo predica con su vida. Ella es una de las más fieles seguidoras e imitadoras de Jesús. Ella es como muchos de los hombres y mujeres que acompañan a Jesús en los relatos evangélicos. Ella sabe, como Marta, afanarse y preocuparse por todo lo que al servicio del Señor se refiere. Pero también sabe, como María, echarse a los pies del Señor y escuchar su palabra. Hoy es su fiesta pero la vivimos en mitad de la enfermedad. Por ello miremos la situación con la mirada evangélica según lo hizo la Beata Inés. La pandemia es tiempo de prueba. No es para decir ¡Qué malo es Dios que nos hace pasar esto! O ¿Dónde está Dios ante tanto sufrimiento?
Dios no es malo. Esto es un aprendizaje que nos enseña que no somos dueños del mundo, que ni siquiera controlamos nuestra vida. Hay fuerzas mucho más poderosas y superiores. Solo gestionamos lo que nos llega. Dejemos pues de ser egoístas, de maltratar a los débiles, de fomentar la desigualdad, de contaminar la Tierra, de creernos dueños y señores de todo, con poder para todo. Dios ante el sufrimiento está con nosotros. “Mi reino no es de este mundo”. La Beata hoy quiere recordarnos estas palabras de Jesús. Estamos llamados a la eternidad y este mundo no es el lugar de la perfección. Sino miremos la vida humana de Cristo: pobre, refugiado, carpintero y muerto a los 33 años. La felicidad y la plenitud de la vida no son una idílica existencia. Seré feliz cuando tenga esto o consiga lo otro. La felicidad no es el cumplimiento de todos los caprichos. Esto es difícil de aceptar y más de comprender. Pero hoy, en el día de la fiesta de la Beata Inés, cuando no la podemos celebrar como acostumbramos, la Beata nos dice que interpretemos el mundo y nuestras vidas a la luz del Evangelio de Jesús, nos dice que escojamos la mejor parte; porque esa no nos la podrá quitar nadie. Hoy proclamamos con la Beata el magníficat que canta María, la madre de Dios, y lo contemplamos como el proceder de Dios. Un proceder antiguo que Él renueva en cada ser, en cada generación. Estas palabras que proclamó María, se cumplieron también en la Beata Inés, y se cumplirán también en nosotros si como la Beata nos volvemos humildes y proclamamos la grandeza del Señor. Hagámoslo por buena correspondencia con esta mensajera de la Buena Nueva, que legítimamente puede predicarnos porque no lo hace con palabras, sino con el ejemplo de su vida. Apelamos hoy también a la última parte de esta oración, que el Señor se acuerde de su misericordia. En 1671 hubo una larga sequía en el reino de Valencia, todos hacían rogativas por la lluvia. La Beata Inés vio a Jesús cargado con la cruz resistiéndose a atender las peticiones, pero ella insistió alegando que una gota de su sangre valía más que todas
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las infidelidades del mundo. El Señor le contestó al final: bien es menester rogarme os conceda el agua. Señor por los méritos de tu Pasión y por los de la Beata Inés acuérdate de tu misericordia concediéndonos el agua de la salud y de que esta crisis nos permita vivir según tu Evangelio. Terminamos trayendo a la memoria los versos que compuso el siglo pasado un poeta local y que variamos ligeramente pidiendo la ayuda de la Beata Inés en el día de su fiesta. Si desde el cielo nos ves Y desde esa bóveda a través Eres de tu pueblo espía Monjita vecina mía Tómate mucho interés Y en esta hora difícil Venga a nos tu compañía Beata Josefa Inés.
Solo quiero corazones te dijo el peregrino enseñando así el camino para lograr grandes dones. Este ejemplo que nos pones habla de tu grande piedad y confianza en tu gran bondad el corazón por este mal, para que llegue su final, ofrecemos por caridad. Benigánim, 21 de enero de 2021
Beata Sor Josefa María de Santa Inés, Agustina Descalza
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SE ACEPTAN INTENCIONES DE MISA. ES11 20386115156400000141
Testimonio de superación del Covid
El día 15 de enero de 2021 acompañé a mi madre a urgencias de un hospital localizado en Brasil/ São Paulo. Ella sufrió una fractura patológica debido a la enfermedad del cáncer. Tuvieron que operarla el día 22 de enero. Durante los cinco primeros días del 15 al 19 de enero me sentí bien dispuesta para acompañarla. A partir del día 20 empecé a sentir un fuerte dolor de cabeza, seguido del dolor de espalda, dolor de garganta y una tos seca que ya seguía una semana anterior. Como no pasaron los síntomas, el día 22 fui a una farmacia hacer la prueba del Covid que salió en 20 minutos y detectó positivo. Volví a casa y me aislé en la habitación. En la madrugada del día 24 a las 4 horas tuve una diarrea muy fuerte, la tensión bajó y empecé a sudar muchísimo. Se repitió un poco más flojo a las 7 de la mañana. Por la tarde mi hermana me acompañó al ambulatorio. Hice la prueba del bastoncillo de algodón pero el resultado salió en 4 días confirmando positivo en Coronavirus. En la primera semana tuve oscilación de fiebre. No sentí sólo el físico afectado. Viví la “agresividad” del virus en mí psicológico. No me conformaba de encontrarme en esta situación, sabiendo que mi madre volvería a casa y necesitaría de ser cuidada.
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El IMPREVISTO llegó a romper los esquemas… ¡Qué difícil fue ACEPTAR la realidad! Para quien ya pasó y todavía lo está pasando, es muy doloroso atravesar el “desierto” de esta enfermedad. No se pueden comparar las situaciones. Cada uno sabe de la intensidad del dolor generado por el Covid. Particularmente yo sentí el dolor de no poder salir para ir a misa. Quedarme sin la Eucaristía es un gran sacrificio para mí, pues reconozco que Jesús es el alimento que me sostiene en cada día. Sentí la impotencia de no poder actuar concretamente para auxiliar a mis familiares en atender a mi madre. Cuando empezó la cuarentena los primeros días parecían muy largos. Poco a poco pude sentir nuevamente la paz en mi corazón. Yo necesitaba ser inmunizada por la fe para superar la “crisis” causada por el virus.“Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes”.(I Pedro 5,7) Solo en los momentos de pruebas podemos encauzar nuestra fidelidad al Señor. La vacuna más eficaz para el creyente es la fe. Hay que renovar las dosis frecuentemente porque muchos son los virus que quieren destruir nuestro “organismo espiritual”. Debemos ser inmunizados por los Sacramentos para conseguir combatir cualquier agente infeccioso. Muchos se preguntan: ¿Cuándo terminará el virus? Y la verdad es que deberíamos preguntar: ¿Cuándo empezaremos a ser más responsables por la vida del prójimo? ¿Cuándo empezaremos a respetarnos mutuamente? No hay que esperar que termine el mal colectivo. Hay que empezar a obrar el bien sin mirar a quien. Así estaremos seguros que venceremos la pandemia de la indiferencia de nuestro siglo.
Hna. Fabiana Souza Duca de Aguiar. Agustina Descalza 6
HISTORIA PARA NIÑOS- TEMAS SOBRE LA FE CATÓLICA
9 MANDAMIENTO: “No consentirás pensamientos ni deseos impuros”
La catequista Miriam invitó el Párroco Rafael para explicar el noveno mandamiento a sus 18 catequizados. Eran 10 niñas y 8 niños que ya estaban casi terminando el curso de preparación para la Primera Comunión. El Sacerdote muy alegre y sonriente supo atraer la atención de todos ellos que le escuchaban con mucho ánimo. -¡Hola chicos y chicas! Ya me conocéis… ¿Verdad? Nos encontramos todos los domingos en la misa de las 9. ¡Qué bueno!¡Así que… yo os conozco a todos! Entonces somos verdaderos amigos… Os escribo en la pizarra dos números 6 y 9…Mirad bien. Parecen iguales en posiciones distintas. El 6 Mandamiento y el 9 Mandamiento son dos piernas que caminan en la misma dirección. Los dos Mandamientos nos ayudan a cuidar de la pureza del corazón. Esta pureza puede ser comparada a un jardín muy bello que precisa de agua, del calor del sol, de fertilizante en la tierra...etc.…
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Un niño interviene… -La “pureza” de mi casa está bien cuidada…Mi madre no se olvida ningún día de arreglar las flores y las plantas… Otra niña interrumpe... -Yo quería plantar también un naranjo al revés cómo lo hizo la Beata Inés… ¿Crecería? Todos empezaron a reírse…La catequista interviene diciéndoles: -La Beata Inés como ya os expliqué fue una niña muy pura. Ella tenía buenos pensamientos y por eso sus actitudes eran buenas. La pureza de corazón de la Beata le ayudaba a ser muy obediente. El naranjo aunque fue plantado al revés, hasta hoy sigue dando frutos. Ella es un ejemplo a seguir. El Sacerdote continúa… -Quiero que comprendáis bien…La pureza del corazón tiene que ser cuidada todos los días…con la oración, con la obediencia, con el amor. Todo lo que nos lleva al camino del bien…nos ayuda a cultivar este bello jardín. ¡Hay que tener mucho cuidado con los programas de la televisión, las revistas, el Internet, los malos compañeros…etc.… Somos hijos de Dios. Nuestro camino es de luz…Es del bien…es de la verdadera alegría. ¡No os olvidéis de estas palabras! Ahora…os daré unos chocolates que mi madre preparó ayer con mucho cariño… ¡Viva Cristo Resucitado!…
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Dibujo: Pablo Sempere Morant Texto: Hna. Fabiana Souza Duca de Aguiar. Agustina Descalza
NOTICIAS Este año parece que las Nuevas Tecnologías nos lo han hecho más llevadero. La verdad es que nos permiten estar juntos a pesar de la distancia. Nosotras, las Agustinas Descalzas también hacemos uso de internet y de las Redes Sociales para compartir nuestra oración y nuestra liturgia. Nos siguen desde todo el mundo y tú, si quieres, también puedes hacerlo. Todos los días a través de nuestro perfil de Facebook y de nuestro canal de YouTube emitimos por las mañanas la Santa Misa a las 09:00h los días laborales y a las 08:00h los festivos. Por la tarde también nos conectamos con la exposición del Santísimo, el rezo de vísperas y otras devociones. ¡Acompáñanos!
PETICIONES Y FAVORES Que el 2021 vaya mejor la cosa a todos y volvamos a nuestra vida normal y tener un grupo de amigos ya que por mi discapacidad no los encuentro. Raúl Escandell (Alzira-Valencia) La semana que viene va mi marido al neumólogo porque no se encuentra bien. Rezad para que no sea nada de importancia. Sergio Molina (Albaida-Valencia) 9
Rezad por mi amiga M Carmen para que mantenga las noticias esperanzadoras y optimistas del tratamiento de su enfermedad, para que recupere su salud y mantenga la fe. Muchas gracias. M del Mar Mestre (Valencia) Pido oraciones y la intercesión de la Beata Inés por la curación de mi amiga Laura de 35 años, madre de cuatro hijos pequeños a la que le han detectado dos tumores en ambos pechos con metástasis ósea en esternón, vértebras y fémur. Marta (Talavera de la Reina-Toledo) Pedir a la Beata Inés que me ayude en esta situación de cambio en mi vida y trabajo. No llego a objetivos, deseo desbloqueo en mi revolución personal y deseo la venta de mi casa para regularizar mi situación. Salvadora Gutiérrez (Alberic- Valencia) Pido la intercesión de la Beata Inés para que la operación de la espalda que van a realizar a mi sobrina de 13 años salga bien. Carmen (Cárcer- Valencia) Pido la intercesión de la Beata Inés para que mi hijo apruebe la oposición a Policía Nacional. M Consuelo (Gandía- Valencia)
AGRADECEN FAVORES Gracias Beata Inés por concedernos el favor de recibir noticias favorables del estado de salud de M Carmen, así como sanar la familia Mestre-Cervera y Viñals-Cervera del Covid-19. Muchas gracias. M del Mar Mestre (Valencia) He superado con éxito mi grado en Educación primaria y continuado mis estudios gracias a la Beata Inés. Inés Venteo (Alcoy-Alicante)
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La Beata Inés me ha concedido la gracia que mis hijas tienen salud y pedí por los estudios que le fueran bien y así ha sido. Gracias. Rosa M Pérez Sempere (Alcoy- Alicante)
Agradezco la intercesión de la Beata Inés por haber salido bien de la operación que le realizaron. Josefa (Denia- Alicante) Agradezco la intercesión de la Beata Inés por salir bien de la UCI y he mejorado del Ictus que tuve. Luís (Novelda- Alicante)
ORACIÓN Oh Dios mío!, que adornaste a la Beata Josefa María de Santa Inés de Benigànim con abundantes gracias, elevándola a la más encumbrada santidad, otorgando por su intercesión señalados favores del cielo, concededme ahora por mediación de vuestra enamorada sierva la gracia que deseo alcanzar (aquí se expresa la gracia que se desea obtener) a fin de que sea pronto glorificada y coronada con la diadema de los santos, para gloria de Dios y esplendor de nuestra fe. Amén. Las gracias y favores se ruega lo comuniquen a las Agustinas Descalzas del Monasterio de la Beata Inés.
LOS FESTEROS 2021 Y HERMANDAD INESINA HAN COLABORADO CON UN DONATIVO DE 300€. ¡GRACIAS!
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FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN
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M.M. Agustinas Descalzas- Monasterio la Purísima, San José y Beata Inés- c/Leonor Ortiz, 4 46830 Benigánim (Valencia) Teléfono: 962 92 02 94 info@beatainesbeniganim.com www.BEATAINESBENIGANIM.COM