Entre las tantas cosas que nuestras sociedades modernas demandan de sus gobernantes se encuentra muy extendida aquella que se resume en la frase “igualdad de oportunidades”. No obstante, al pensar en ella nos daremos cuenta que, en su sentido literal, es de imposible logro. El conocimiento , así como los talentos, capacidades y recursos se encuentran inevitablemente dispersos. Por Martin Krause