ESPECIAL RENACIMIENTO ESPECIAL RENACIMIENTO

EscuelaSuperiordeArteDramáticodeSevilla

INDUMENTARIA

Autoras:
PatriciaMorenoCruzado
CarmenCorregidorGonzález
Profesora:
AnaArcasEspejo




Enrique III de Valois fue el tercer hijo de Enrique II de Francia y Catalina de Médicis Estuvo protegido por su madre y fue nombrado jefe del ejército en la lucha contra los hugonotes durante el reinado de su hermano Carlos IX En 1573 fue coronado rey de Polonia, pero, muerto su hermano Carlos IX, al año siguiente regresó a Francia para ser coronado rey.
El pueblo francés, al ver cómo viste y vive su monarca, no está nada contento, pues el despilfarro se nota a leguas Y, bueno, ya le pusieron un apodo a Enrique; por muchas partes reparten panfletos en los que lo llaman «el rey de la isla de los hermafroditas»
Lo que molesta a los franceses: que su rey ande de fiesta en fiesta, pensando todo el día en qué se va a poner y con quién va a pasar la noche, y se olvide de su responsabilidad, que es gobernar Francia
Se dijo que era estéril y sexualmente ambiguo Tuvo numerosos amantes, a los cuales paseaba por las calles de París con los labios pintados y vestidos de mujer Organizó torneos con estos amantes, los cuales adoptaban poses femeninas durante las justas Sus amantes se peleaban por conseguir ser el favorito de Enrique, llegando al asesinato
Le gusta hacerse llamar monsieur con el fin de provocar confusión entre sus favoritos, a los que, sin embargo, seducía con las palabras, los gestos y los adornos corporales: un comportamiento que un analista definiría de sublimación También siente deleite por los placeres de la corte, por las poesías de Jean Dorat o de Pierre Ronsard, y por los juegos de alcoba con jóvenes homosexuales (los famosos mignons) que le granjearon fama de licencioso y libertino.
Enrique III de Francia era un hombre refinado y sus adversarios hicieron de él un hombre afeminado. Es víctima de una homofobia que confunde feminidad y homosexualidad
Fue él quien introdujo en Francia el uso del tenedor para comer, impuso a su entorno el uso del jabón y el frecuente cambio de ropa interior (camisas, medias, calzones, etc..), y lleva al colmo del refinamiento el vestuario para los hombres e imponiendo un ceremonial cortesano complejo
En cuanto a su indumentaria en las ocasiones más especiales, Enrique III se vestía como una fina muñeca de porcelana, con maquillaje, vestido de seda y diamantes Además, se hacía confeccionar los corsets más delicados para afinar su silueta y cargamentos con los mejores perfumes de Europa llegaban con frecuencia al palacio real
Siempre disfrutó de la moda, tanto masculina como femenina, siendo el estilista de su propia mujer, la Reina. De hecho, a Enrique le gustaba disfrazarse de mujer, es decir, travestirse, y no lo hacía a escondidas de los atónitos ojos de sus cortesanos Muy al contrario, gustaba de organizar fiestas de disfraces en las que él tenía que llamar la atención sobre el resto vistiendo de mujer, Como el baile que organizó en el castillo de Blois, el 24 de Febrero de 1575, en el que dejó sin aliento a todo el mundo al aparecer con el cabello rizado y empolvado y con un bello atuendo confeccionado con brocado y encaje y un pronunciado escote que se remataba con diez hilos de enormes perlas alrededor de su cuello Existen, incluso retratos del Monarca de esta guisa, que evidencian esta costumbre de vestirse de mujer

Catalina de Médici apodada por sus enemigos "La reina negra" era hija de Lorenzo II de Médici y Magdalena de la Tour d’Auvergne nacida en 1519 en Florencia quedó huérfana a las tres semanas de nacer, desde entonces quedó tutelada por su tío, el Papa Clemente VII, quien le enseño lo necesario para moverse por la sociedad con astucia En 1533 tuvo lugar su enlace con Enrique de Valois el segundo hijo del rey Francisco I de Francia
Tras la muerte del delfín Francisco II, Enrique II, el marido de Catalina, se convierte en el heredro al trono Catalina recurría numerosas veces a hechiceros y curanderos para doblegar su infertilidad y poder dar un hijo al rey
Su gran rival Diana de Poitiers, amante del rey y a quien no le convenía que Catalina fuera reemplazada ya que permitía su relación con Enrique de Valois, incitaba al heredero en numerosas ocasiones a acudir al lecho de Catalina para que esta quedara embarazada y a si asegurarse de que el matrimonio entre Catalina y Enrique II no fuera anulado.
Fue en 1543 cuando Catalina da a luz al primer hijo de Enrique II, al que le seguirán nueve hijos más Este hecho se le atribuyó a Nostradamus, médico y astrólogo de Catalina, al que incluyó en su círculo más íntimo

El 10 de julio de 1559 en un torneo con motivo de la celebración del enlace entre Felipe II e Isabel de Valois, Enrique II sufre un accidente que acabará con su vida Tras su muerte, Catalina exige a Diana de Poitiers la devolución de las joyas de la corona y el abandono inmediato del palacio
Con la subida al trono de su hijo Francisco II, Catalina tomó el poder, algo que no perdería hasta su propia muerte, con el reinado de su hijo Enrique III de Valois, el último de la dinastía de Valois
En 1549, tras la muerte del rey, Enrique II subió al trono y Catalina se convierte en reina de Francia, es entonces cuando empieza a formar parte indispensable de la política interior y exterior de Enrique II, consiguiendo la paz entre Francia y España, además pactó el matrimonio entre Isabel de Valois y Felipe II, viudo de María Tudor.
Catalina era una gran aficionada a los festejos, algo que utilizaba a su favor, ya que conseguía demostrar la fuerza de Francia a la vez que entretenía a los nobles para que no conspirasen en contra de la monarquía
Además, para poder mantenerse informada sobre todo lo que ocurría a su alrededor, desplegaba a su "escuadrón volante" Este estaba formado por mujeres espías y creado por Catalina Este grupo de 80 mujeres fueron entrenadas para sonsacar los secretos a los hombres, quienes eran diplomáticos, políticos, ministros, nobles, etc Estas mujeres, fingiendo estar enamoradas, conseguían enamorar a los hombres para que estos les contasen sus secretos y se dejasen aconsejar por ellas consiguiendo así todos los propósitos de la reina