UN PROYECTO CURADO POR ÁNGEL CALVO ULLOA 7 DE FEBRERO – 24 DE MAYO 2020
El arte español asume históricamente su falta de presencia a nivel internacional, y a ello debe en ocasiones sus ansias por salir a toda costa, aunque eso exija reciclarse en arte global, confundible con lo que pueda estar ocurriendo en cualquier otro punto del planeta. Sin embargo, hay casos en que es la diferencia lo que nos seduce, o, lo que según las palabras de Luis Seoane, nos lleva a enriquecer el mundo. La diferencia se manifiesta en las individualidades, pero también en la colectividad cuando esta asume ciertas características comunes que la distinguen frente a otras. No se trata de medirnos ante nadie, de lo que se trata es de saber si quiénes somos y de dónde venimos nos afecta de algún modo. Pensar en una exposición como esta, en la que de pronto se dan cita veintisiete artistas elegidas en base a su procedencia geográfica, puede despertar cierta controversia. ¿Qué sentido tiene en el año 2020 plantarse en algún lugar como representación del arte español? ¿Son, o podrían ser, estos veintisiete nombres representativos de algo de lo que les pueda estar ocurriendo a las artistas pertenecientes a una generación concreta de lo que podría entenderse como arte español? ¿Puede o es necesario reivindicar lo español como característica inherente a todos y cada uno de los nombres que aquí se reúnen? ¿Qué es el arte español?
¿Puede catalogarse el arte en base a su procedencia geográfica, máxime cuando algunas de las aquí incluidas, ni viven ni se han formado dentro de su frontera territorial? A todas estas preguntas podrían sumarse también otras tantas acerca de los conflictos identitarios que atravesamos históricamente. Se propone una exposición como medida para tomar el pulso a una escena a la que quizás sea la falta de puntos en común lo que podría mantenerla unida, o, si no unida, con una separación tan latente que termine por unificarla. Tal vez esa distancia sea un buen punto de partida para analizar lo que entendemos por un panorama artístico. Si ir tirando alude inicialmente al hecho de aceptar la situación y a resignarse a sobrevivir en unas condiciones que no son las idóneas, llama también sin embargo a no rendirse, casi como ejercicio de resistencia, a pesar de que las posibilidades de salir adelante en un panorama como este sean remotas y a pesar también de que nadie asegure ni el éxito ni la subsistencia, que curiosamente raras veces van de la mano. A todos los niveles vivimos tiempos extraños. La cuestión es ir tirando no pretende por lo tanto ser la imagen ideal de nada, sino una de tantas imágenes posibles. Y que quede claro, la cuestión no es ir tirando.
Alain Urrutia, Alex Reynolds, Ana H. del Amo, Antonio Ballester Moreno, Belén Rodríguez, Carlos Maciá, Damián Ucieda, Diego Delas, Elena Alonso, Fermín Jiménez Landa, Fernando García, Irene Grau, Irma Álvarez-Laviada, José Díaz, Juan López, Julia Spínola, Laia Estruch, Leonor Serrano Rivas, Marc Vives, Miguel Ángel Tornero, Miren Doiz, Misha Bies Golas, Nacho Martín Silva, Nuria Fuster, Patricia Gómez & Mª Jesús González, Taxio Ardanaz y Víctor Jaenada.