
1 minute read
Realidad Nacional
El Indice de Desarrollo Humano, tiene en cuenta tres variables: vida larga y saludable, conocimientos y nivel de vida digno. El índice de desarrollo humano (IDH) en Guatemala ha empeorado año con año, hasta la fecha.
Guatemala ha experimentado avances en su desarrollo humano, aunque estos han sido desiguales y se fueron desacelerando desde 2015. Con datos se evidencia sobre las brechas que persisten entre los diferentes territorios a lo largo del país.
Advertisement
Este complejo panorama que es consecuencia -y a la vez causa- de procesos sociales que afectan de distintas maneras a todos los territorios de Guatemala, como la urbanización, los cambios en la ruralidad, la intensificación de la movilidad humana y el aumento de la variabilidad climática y vulnerabilidad de los ecosistemas, entre otros.
Al conocer sobre la “celeridad del cambio”, entendiendo que esos fenómenos y sus impactos diferenciados en las poblaciones que viven en los territorios se caracterizan por su rapidez y por la necesidad de encararlos con prontitud y urgencia; dado que afectan principalmente a los grupos sociales más vulnerables que habitan en las zonas más pobres del país (mujeres, pueblos indígenas, jóvenes, adultos mayores y personas con discapacidad); Caritas de Guatemala, busca aliviar y hacer viva su misión, proponiendo alternativas para garantizar cambios en el modelo actual de desarrollo.
Ante un realidad de país, nuestro interés es atender y contribuir a reducir los factores que están acelerando el cambio territorial: la urbanización y la emergencia de “nuevas ruralidades”; los complejos procesos de movilidad interna y externa; la emergencia silenciosa en el “Corredor Seco” y el impacto de la variabilidad climática y la vulnerabilidad socioecológica, por la expansión de megaproyectos.

Este análisis de la realidad se puede abordar desde cinco dimensiones: Eclesial, Económico, Social, Cultural y Ecológico; los cuales son las referencias para responder desde un plan estratégico, el cumplimiento de nuestra Misión.
La acción de Cáritas está, pues, llamada a “generar historia” justamente porque “abraza todas las dimensiones de la existencia, todas las personas, todos los ambientes de la convivencia y todos los pueblos”
Tarea de Cáritas es también la atención que debe prestar a las situaciones cambiantes de los ambientes en los que trabaja, “para que los grandes principios sociales no se queden en meras generalidades que no interpelan a nadie”. Cáritas debe ayudar a sacar las consecuencias prácticas de estos grandes principios sociales, para que «puedan incidir eficazmente también en las complejas situaciones actuales» (Compendio DSI, 9), teniendo en cuenta que la tarea evangelizadora, en la que Cáritas está inserta por su eclesialidad “implica y exige una promoción integral de cada ser humano”. Cáritas está llamada en el conjunto de la acción pastoral a hacer verdad la afirmación del Papa de que “ya no se puede decir que la religión deba recluirse en el ámbito privado, y que esté sólo para preparar las almas para el cielo”.