Introducción a la Antropología. Las diversas culturas indígenas de México que florecieron en tiempos prehispánicos, así como las actuales, ofrecen a la Antropología un vasto campo de estudio, y a los museos un rico y valioso material de exhibición; a la vez que constituyen una buena parte de la historia y de la herencia cultural del país, cuyo conocimiento, divulgación y conservación cobran cada vez mayor importancia. Teniendo en cuenta esto, y con motivo de la planeación del museo Nacional de Antropología, se pensó en la instalación de una sala introductora que justificara el nombre del museo, y que sirviera de marco universal a las culturas mexicanas para su correcta ubicación espacial y temporal. Así surgió la Sala de introducción a la Antropología, la cual tiende a mostrar lo que es esa ciencia, cómo está dividida, cómo trabaja, cuáles son sus propósitos, qué es lo ha logrado en el campo del estudio del hombre. Hay cuatro secciones de exhibición, que corresponden a su vez a sus cuatro ramas fundamentales,: Antropología Física, Arqueología, Lingüística y Etnografía. La sección dedicada a la Antropología Física se inicia con el tema del origen y la evolución biológica del hombre. A través de dibujos, esquemas, cartas cronológicas y reproducciones de algunos fósiles se enfatiza el proceso dinámico de la evolución de los organismos vivos, por medio de cambios genéticos y morfológicos a ritmos diferentes. La relación entre el hombre y su cultura se plantea en la sección destinada a la Arqueología, la cual estudia las culturas indígenas desaparecidas. Aquí se inicia el tema con el concepto objetivo de la estratigrafía, básica para el arqueólogo, pues las capas de tierra acumuladas guardan los restos de las obras realizadas por el hombre a través del tiempo. En la parte central de la sala, está la sección destinada a la Lingüística, la rama de la Antropología que investiga el origen y desarrollo del lenguaje humano, cómo cambian y se extinguen los idiomas.
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