Directores: Fabian Mendoza, Edsy Gisbert Jefe de Diseño: Carlo Vera Jefe de fotografía: Kapriely Min Chen Fotógrafos: Micky Vargas, Sergio Vargas Multimedia: Pablo Chao Jefe Comercial: Mateo Alborta | info@revista-cabala.com
Periodistas: Edsy Gisbert, Kapriely Min, Diego Ruiz, Carlos y Borja de Mesa Impresión: Hermenca | www.hermenca.com Fotografía de Portada: Michael Dunn
Publicite con nosotros: (+591) 70121666 Bolivia, Año 10, Nro.100 - 2025 www.revista-cabala.com
Carlos y Borja de Mesa Historiadores y columnistas deportivos.
El número 100. La cábala de CÁBALA Editorial
¿
Fue una cábala? Pocas veces un nombre tan afortunado. La Real Academia define la palabra como una conjetura o cálculo supersticioso. Quizás Fabián Mendoza y Edsy Gisbert pensaron que sólo con una buena cábala podía conseguir un objetivo imposible para todos sus antecesores, que una revista de fútbol boliviano llegue al número 100. Si así fue, coronó la meta con creces. Fabián y Edsy hicieron probablemente también una conjetura, asumieron los indicios y las posibilidades con optimismo y ética del trabajo y acertaron. En el primer número, esbozado en 2016, se ve en tapa la cara desafiante y poderosa en su expresión, del jugador Erwin Saavedra. Fue una firma, una carta de intenciones. En formato más bien pequeño pero de gran versatilidad de uso, la revista le dijo al lector. “Estas páginas son presente y futuro porque somos otra cosa”. De origen el proyecto estaba pensado para funcionar exclusivamente en línea y en redes, pero era un diseño demasiado bueno para no dejar testimonio impreso. A fin de cuentas la magia del papel, el olor de la tinta, la posibilidad de ser tesoro de coleccionistas, sumó ingredientes intransferibles. Y así fue. Distribuida gratuitamente Cábala combino vanguardia y tradición. Para ello ha contado siempre con fieles y renovados auspiciadores que han hecho posible su realización. A lo largo de este particular centenario, hemos disfrutado de lo mejor de nuestro fútbol y sus estrellas, pero también de un sentido de lo universal. Si uno se mira demasiado el ombligo acaba perdiéndose. Las secciones han combinado ambas cosas: lo local y lo global. El fútbol nuestro de cada día y los ecos del fútbol del mundo. La sección más importante: “El balón de oro”. Como ocurrió con la universalmente famosa revista El gráfico, si no apareciste en la tapa es que no existes. Los grandes del fútbol boliviano pasan sí o sí por sus portadas. Están también: “El 11 ideal”, “Retro” (el pasado nunca muere), “el ABC”, “el jugador del mes”, “el menú”… y otras que, en permanente movimiento y con una diagramación que no se ancla ni anquilosa nunca, ofrecen siempre una novedad.
A poco de nacer, el empeño se agrandó en la lógica de los premios. El premio “Cábala” es ya imprescindible. La selección y calificación y reconocimiento de los mejores es una aspiración de deportistas, dirigentes y comunicadores, que se torna en consagratoria. Breve pero sustancioso. Era el mayor riesgo, la decisión fue correcta, mucha imagen, colores adecuados, trazos contundentes y textos cortos, concisos y de fácil lectura. En este siglo dominado por las redes y los mensajes instantáneos, Cábala ha demostrado que está a la altura de los tiempos que corren, sin perder lo esencial. El buen periodismo requiere de un gran titular (en la tapa la foto es el titular), de un buen encabezado y de un texto en pocos caracteres pero contundente.
100 números no es poca cosa, es un hito en el periodismo deportivo, es una referencia imprescindible de las revistas que en el pasado han sido y que marcaron la ruta que Cábala ha alimentado con creces.
Diez años. Cien números. Una vida entera.
Cuando miro este número 100 entre mis manos, inevitablemente vuelvo a ese primer borrador del 2016. Un archivo sencillo, casi tímido, que contenía más sueños que páginas, más pasión que estructura. Nunca imaginé que aquel impulso de un grupo de amigos —movidos únicamente por el amor al fútbol— se convertiría en un camino que hoy cumple diez años y 100 ediciones. Y sin embargo, aquí estamos: mirando hacia atrás con emoción y hacia adelante con ilusión, como quien sale al campo en una noche decisiva.
CÁBALA nació con una idea tan simple como ambiciosa: crear contenido especializado, con diseño único y rico en fotografía que no solo informara, sino que perdura en la memoria. Lo que empezó como un proyecto digital terminó convirtiéndose en una revista física premium, una que la gente colecciona, guarda y atesora. La primera vez que sostuve una edición impresa sentí que habíamos ganado una final. Hoy, sostener esta número 100 se siente como levantar un título internacional.
A lo largo de estos años, la revista atravesó etapas similares a las de cualquier equipo que quiere competir arriba. Tuvimos partidos brillantes, empates trabajados y goleadas que nos obligaron a replantear el esque-
ma. La pandemia nos mandó al banco a todos y nos obligó a pausar la edición impresa. Recordamos bien ese periodo: la incertidumbre, el silencio en las canchas, la pausa forzada. Pero también recordamos el empuje de nuestros lectores preguntando constantemente cuándo volveríamos a imprimir. Esa presión positiva nos devolvió al campo con nuevas fuerzas y nos impulsó a seguir innovando, adaptándonos a los cambios y a las nuevas plataformas.
"Este número 100 tiene un peso simbólico que va más allá del papel. Es la confirmación de que la constancia, el trabajo, la pasión y el amor al fútbol construyen cosas que perduran."
Con cada número crecimos, nos transformamos y sumamos a más personas al equipo:periodistas, fotógrafos, diseñadores, colaboradores, jugadores, técnicos, dirigentes... todos aportaron un granito de arena a este sueño que hoy cumple su primera década. CÁBALA se consolidó como marca, estuvo en partidos históricos, en finales internacionales, en momentos que quedarán para siempre en
el álbum del fútbol boliviano e internacional.
A lo largo de esta década también nació uno de nuestros proyectos más especiales: los Premios CÁBALA, que ya celebramos seis ediciones de manera ininterrumpidas y que surgieron con un propósito claro: reconocer a todos los actores de nuestro fútbol, desde los protagonistas que levantan trofeos hasta aquellos que trabajan silenciosamente detrás de escena. Con el paso del tiempo, estos premios se consolidaron hasta convertirse en una cita obligada del calendario futbolero nacional. Hoy son un espacio aspiracional, esperado y respetado por jugadores, cuerpos técnicos, dirigentes, árbitros, periodistas y por toda la comunidad que late al ritmo del balón. Este número 100 tiene un peso simbólico que va más allá del papel. Es la confirmación de que la constancia, el trabajo, la pasión y el amor al fútbol construyen cosas que perduran. Hemos vivido crisis sociales, cambios de directorios, alegrías inolvidables, noches difíciles y días de celebración. En cada etapa, lo que nos sostuvo fue la convicción de que el fútbol es más que un deporte: es identidad, es cultura, es emoción compartida. CÁBALA nació para contar historias, para retratar a los protagonistas dentro y fuera de la
cancha, para aportar con calidad y respeto a la narrativa de nuestro fútbol. Hoy, diez años después, seguimos creyendo que Bolivia puede soñar más alto, que nuestra selección y nuestros clubes pueden inspirar al país, que el deporte une cuando todo lo demás divide. Este número 100 es una celebración, sí, pero también un compromiso. Representa nuestra primera década, pero sobre todo marca el inicio de una nueva etapa. Viene acompañado del proyecto del libro “CÁBALA 100”, nuevos formatos audiovisuales, la expansión digital, CÁBALA Academy y un sueño que permanece intacto: ser un puente entre el fútbol boliviano y todos quienes lo aman. Quiero agradecer a cada perso-
na que fue parte del TIMAO de CÁBALA en estos diez años. A quienes estuvieron desde el inicio, a los que se sumaron después y a quienes hoy siguen fieles en cada edición. A todas las empresas que confiaron en el proyecto y hoy hacen posible que sigamos creciendo. También a toda nuestra comunidad de lectores, que mes a mes nos dan el mayor premio posible: su tiempo y su confianza.
Cien números después, sigo creyendo con la misma intensidad que el primer día. Sigo apasionado, sigo ilusionado, sigo mirando este proyecto como un equipo que todavía tiene mucho por jugar y mucho por ganar.
#CÁBALAes 100...
El fútbol que escribimos juntos.
Cuando abro esta edición 100, no puedo evitar volver a mi yo del 2016. Aquella joven periodista que enviaba textos de menos de trescientas palabras, con la ilusión temblorosa de quien recién empieza y con el miedo silencioso de no saber si algún día sería parte de algo grande. Mandaba mis notas sin conocer a los directores fundadores, sin imaginar que esas personas se convertirían años
después en mi familia. Nunca pensé que la vida y el fútbol me iban a regalar un sueño tan perfecto y tan inesperado como Cábala. Porque esto fue, desde el primer día, el camino al sueño que siempre tuve. Un espacio donde descubrí mi voz, donde me atreví a crecer y donde aprendí que los sueños no siempre llegan de golpe: a veces llegan edición por edición, página por página, palabra por palabra.
Fabian Mendoza
Director de la Revista CÁBALA
Comencé como periodista. Solo eso. Y para mí ya era muchísimo. Pero Cábala hizo más: me enseñó a confiar en mí cuando aún dudaba, me abrió puertas
"En
el fútbol, uno de los pilares más importantes es el equipo. Y nosotros siempre conseguimos formar al mejor."
que jamás pensé empujar, y me permitió convertirme en parte de un proyecto que hoy sostiene gran parte de mi identidad profesional y personal. Por eso quiero agradecer a los socios fundadores por haber creído en mi trabajo desde aquellos primeros textos que escribí sin saber a dónde podían llevarme. Gracias por ver en mí lo que yo todavía no veía. Gracias por acompañarme en el camino que me llevó de colaboradora externa a socia directora.
Hoy tengo el honor de liderar, junto con Fabián Mendoza, un equipo de jóvenes profesionales que han decidido sumar sus sueños a este proyecto. Verlos entregar su energía, su talento y su pasión me confirma que Cábala no es solo una revista; es un hogar para quienes aman el fútbol y quieren contar historias que importan. A ellos, gracias. Gracias por creer en este proyecto y por hacerlo crecer con cada idea, cada foto, cada palabra y cada edición.
En el fútbol, uno de los pilares más importantes es el equipo. Y nosotros siempre conseguimos formar al mejor. Lo decía Azkargorta y lo entendimos desde el primer día: jugar bien implica compromiso con el equipo, ir al encuentro del balón, ser pro-
tagonistas, no tener miedo a fallar; hacer lo que sabemos hacer… pero hacerlo.
Eso somos en Cábala. Un equipo que se mueve junto, que celebra junto, que empuja junto. Un equipo que entendió que la magia aparece cuando todos hacen su parte con el corazón puesto adelante.
Porque Cábala no es solo un trabajo. Es la forma tangible del amor que sentimos por el fútbol. Es la pasión que nos despierta ver rodar la pelota, la emoción de llegar a las canchas sin importar el clima, el compromiso de narrar nuestro deporte con respeto y esperanza. Cada página es una prueba de que los bolivianos podemos lograr grandes cosas. Que cuando creemos, insistimos y trabajamos, el sueño se vuelve realidad.
Cien ediciones ininterrumpidas no son un número: son una hazaña. Son noches de cierre, madrugadas llenas de nervios, risas que alivian el cansancio y esa sensación única de ver la revista impresa, todavía tibia, recién salida de la máquina. Cien ediciones son la evidencia de que la pasión sostenida se convierte en historia.
Hoy celebramos, pero también miramos hacia adelante. Con más ganas, más ideas, más
fuerza y, sobre todo, más corazón. Tenemos la certeza de que este camino apenas comienza. Que es momento de seguir creciendo, de seguir soñando, de seguir escribiendo el fútbol que se lee.
"Porque
CÁBALA es nuestra cábala. Y queremos que siga siendo la del fútbol boliviano."
Edsy
Gisbert
Directora
de la Revista CÁBALA
Los rostros de La Verde
Capítulo I
Alo largo de diez años, la revista ha tenido el privilegio de llevar en su portada a quienes representan el corazón del fútbol boliviano: los jugadores de la Selección. En estas cien ediciones, más de cuarenta futbolistas de la Verde encontraron su lugar en nuestras páginas, cada uno aportando su historia, su entrega y su identidad al equipo de todos los bolivianos. Desde los líderes que marcaron época hasta las nuevas promesas que sueñan con cambiar el futuro, cada portada fue un testimonio del presente de nuestra selección.
Capítulo I
Capítulo I
Pasaron los goleadores históricos como Marcelo Martins, capitanes que sostuvieron al equipo en los momentos más duros como Ronald Raldes y Luis Haquin, y también los talentos jóvenes que hoy cargan con la ilusión de un país, como Miguel Terceros y Enzo Monteiro. Cada uno, desde su posición en la cancha y desde su momento en el tiempo, dejó una huella que esta revista quiso honrar.
Capítulo I
Este capítulo celebra esa historia compartida: la de un fútbol que nos une, nos ilusiona y sigue escribiéndose en cada generación.
Capítulo II
Directores Técnicos
es que aún hagas las en el supermercado
Capítulo II E
Directores Técnicos
Xabier Azkargorta
n una década de camino, la revista tuvo la oportunidad de conversar con quienes marcaron el rumbo de los equipos desde el borde de la cancha. A lo largo de estos 10 años, distintos entrenadores compartieron con nosotros sus visiones, sus desafíos y la esencia de liderar a un país entero desde el banquillo. Entre todas esas voces, hubo un entrenador al que tuvimos el privilegio de tenerlo en la portada, Xabier Azkargorta, protagonista de nuestra edición #20. Su reciente partida nos obliga a mirar hacia atrás con profundo respeto. Azkargorta no solo fue un técnico; fue el arquitecto del sueño más grande del fútbol boliviano, el único entrenador que logró clasificar a la Selección al Mundial por mérito deportivo. Este capítulo es un homenaje a su legado y también a todos los estrategas que, con sus ideas y convicciones, han aportado al crecimiento del fútbol boliviano. Porque detrás de cada equipo hay un estratega, y detrás de cada estratega, una historia que vale la pena contar.
fue protagonista de la portada de #20 de nuestra revista.
Leyendas
III
Las leyendas del fútbol boliviano son mucho más que nombres en un marcador o goles recordados: son las historias que construyeron nuestro presente y que con su legado trascendieron los estadios y las temporadas. En este espacio hemos dedicado a esos ex jugadores páginas para nunca olvidar su entrega y compromiso por las camisetas que lucieron y defendieron con orgullo, dejando una huella imborrable en cada rincón de la historia.
Capítulo
Sus carreras, sus gestas y sus sacrificios merecen ser inmortalizados en Cábala. Cada leyenda representa un capítulo esencial de nuestro fútbol, una inspiración para las nuevas generaciones y un recordatorio de que el amor por los colores siempre va más allá de los resultados.
Capítulo III
Este capítulo celebra a quienes hicieron del fútbol boliviano una pasión que atraviesa el tiempo.
Capítulo IV
Campeones
Conquistar un título es el sueño máximo de cualquier jugador, el momento en el que se reconoce todo el esfuerzo, la entrega y la pasión invertidos a lo largo de una temporada. Retratar a los protagonistas de los clubes campeones con la copa o la medalla en nuestras portadas convierte cada edición en un
recuerdo especial, un testimonio tangible de la gloria alcanzada en el fútbol boliviano.
A lo largo de estos años, nuestra revista tuvo el privilegio de destacar a grandes figuras que hicieron historia: Martín Prost celebrando la primera estrella de Independiente Petrolero, Adrián Jusino rompiendo la racha de años sin títulos de The Strongest,
Felipe Pasadore coronándose goleador y llevando un título inédito a San Antonio de Bulo Bulo, y Carlos “Tonino” Melgar, una de las grandes figuras nacionales, que cerró la temporada con dos títulos y un merecido lugar en nuestra portada. Cada campeón tiene su historia, y cada portada inmortaliza esos momentos que todo jugador sueña vivir.
Figuras Internacionales
Capítulo V
Alo largo de los años, el fútbol boliviano recibió talento de distintos rincones del mundo. Jugadores internacionales aportaron experiencia, técnica y nuevas formas de entender el juego, dejando su huella en los clubes y elevando el nivel competitivo, mientras inspiran a futuras generaciones a soñar más allá de nuestras fronteras.
Capítulo V
Capítulo V
Arqueros de selecciones sudamericanas como Alain Baroja o porteros que hoy destacan en ligas como Matías Dituro, futbolistas argentinos de renombre como el Pochi Chávez y Patricio Rodríguez, brasileños como Serginho y Francisco Da Costa, y colombianos que marcaron época en varios clubes, como Michael Ortega. Efmamjjasond Gonzáles y Tommy Tobar, han pasado por nuestra liga dejando momentos imborrables para los hinchas.
Capítulo V
Y no solo eso: jugadores de países más distantes también llegaron para escribir su historia en Bolivia, como el africano Wilfried Bonny, que pasó por la Premier League, y los dominicanos Dorny Romero y Edarlyn Reyes, figuras de la selección de República Dominicana.
Todos ellos aportaron su talento y profesionalismo, pero solo algunos, como Ferreira y Escobar, lograron convertirse en símbolos del fútbol boliviano, demostrando que la grandeza no depende del origen, sino del compromiso, la pasión y la entrega dentro del campo.
Capítulo VI
Dirigentes
Capítulo VI
Detrás de cada partido, cada viaje y cada logro del fútbol boliviano hay personas que, desde los escritorios y lejos de la cancha, dedican su vida a que todo funcione. No hacen goles, pero garantizan que haya luz para jugar, que los pasajes estén listos para los torneos internacionales y que los clubes puedan seguir creciendo. Su amor por los colores y la pasión por el fútbol se demuestra en cada decisión, en cada gestión y en cada esfuerzo silencioso que permite que el deporte siga vivo.
En este capítulo celebramos a quienes han liderado con compromiso y visión. Recientemente tuvimos el placer de tener en portada al presidente de la Federación Boliviana de Fútbol, Fernando Costa, y en ediciones pasadas destacamos al dirigente más exitoso del fútbol boliviano, Guido Loayza, quien presidió la FBF durante la histórica clasificación al Mundial 1994 y estuvo al frente de Bolívar cuando el club alcanzó las semifinales de la Copa Libertadores 2014.
Capítulo VII
Ilustraciones
En varias ocasiones, decidimos dejar la cámara de lado y abrir espacio a diseñadores e ilustradores para nuestras portadas. Para Cábala, el fútbol no es solo un deporte de masas; es un estilo de vida que combina distintas pasiones y expresiones artísticas. Desde el diseño de una camiseta hasta la interpretación de un momento histórico mediante colores, acuarelas y técnicas de dibujo, cada portada se convierte en un homenaje al juego desde nuevas perspectivas.
Este capítulo celebra esas creaciones, que muestran que Cábala es mucho más que fútbol: es fútbol que se
puede leer, vivir y sentir a través de distintas aristas. Cada ilustración y diseño plasma emociones, historias y crea-
tividad, recordándonos que la pasión por el fútbol también se expresa con arte, estilo y mucha originalidad.
Capítulo VIII
Pandemia
Durante la pandemia, cuando el mundo entero se detuvo y la incertidumbre lo cubrió todo, Cábala también enfrentó uno de sus mayores desafíos: sin imprentas y con los planes habituales suspendidos, tuvimos que reinventarnos
para seguir contando historias.
Fueron al menos diez ediciones adaptadas a una nueva realidad, con portadas de jugadores usando barbijo, estadios vacíos y partidos sin público, reflejando un fútbol que luchaba por mantenerse vivo. Este capítulo es un
homenaje a la resiliencia, a la capacidad de adaptarse y a la pasión que nunca se apagó, porque aun en los momentos más inciertos, Cábala continuó fiel a su misión de contar el fútbol para todos, sus lectores, demostrando que nuestra esencia jamás se detuvo.
Capítulo IX
Premios Cábala
Los Premios Cábala nacieron con un objetivo claro: valorar el esfuerzo y el talento de los jugadores temporada a temporada. Reconocer a todos los actores del fútbol boliviano es, para nosotros, la mejor manera de apoyar y fortalecer al fútbol boliviano.
A lo largo de seis ediciones, hemos celebrado a las máximas figuras de nuestro país, destacando su entrega, sus logros y su pasión por los colores que representan. Cada premio es un homenaje a quienes inspiran a compañeros, rivales y a las nuevas generaciones que sueñan con pisar la cancha
algún día. Y la historia continúa. Nos preparamos para seguir reconociendo a los mejores de nuestro fútbol, porque la única manera de construir un futuro sólido para nuestra liga y nuestra selección es dándole el valor que merece a quienes trabajan día a día por ella.
