Gabriel Figueroa. retrato de Lina Boytler, cantante de origen ruso conocida como la Venus del Volga. La artista, esposa del director arcady Boytler, tuvo una breve aparición en La mujer del puerto interpretando el tema musical de la película, compuesto por Manuel Esperón. Ciudad de México, ca. 1933. archivo Gabriel Figueroa.
sobre unos personajes en una carreta; en esa arquitectura oscuramente oblicua del campanario que “aplasta” al enigmático espadachín en Cruz Diablo (Fernando de Fuentes, 1933). Impresiones texturizadas, sobre todo la de Cruz Diablo, evocando lo bucólico de un brumoso paisaje rural, pero ahora transformado por las líneas transversales de los árboles. Corrientes, pues, que se entrelazan para la composición final. ¿Qué está sucediendo entonces? Es evidente que Gabriel Figueroa era consciente de las gramáticas visuales de su tiempo. y con ello creó, junto con sus directores, un complejo entramado de referencias gráficas plenas de modernidades, acaso irrepetibles. Corrientes que se devoran a sí mismas, que se retroalimentan no importando si las referencias provienen de la pintura o de las imágenes técnicas (la propia foto y el cine), o de los libros gráficos o de una inventiva propia surgida de lo cinemático. Una fotografía plenamente moderna, profundamente moderna, como una parte 237