ARQUITECTURA
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El · Concurso para. el Banco de la República Haremos una ligera narración de esos ·hechos: l Directorio del Banco de la República resolvió Inspirada la Sociedad de Arquitectos en laudables propóhace algún tiempo celebrar entre los arquitectos residentes en el pais un concurso de proyectos para sitos de asesorar al Directório del Banco de la· República, a fin de llegar a formular un programa que garantiera la consede de la referida institución bancaria. El certamen anunciado encerraba un tema a~ra currencia del mayor número de arquitectos nacionales y reyente, lleno de· interés artístico que, aumentado con sidentes - interesados como están unos y otros en el éxito la perspectiva de vincular el nombre a un impor- de un concurso de bastantes trascendencia , artística, y tamtante edificio público, despertó entre todos los arqui- bién para evitar los errores que c-on la mejor buena voluntad tectos el propósito de concurrir al mismo. Por otra cometen los que no tienen preparación especial en la delicada parte, las bases del concurso deberian ofrecer las tarea de formular bases de cot.curios, esta Sociedad · bfréció más amplias garantias ya que eran confeccionadas a dicho Directorio sus servicios para colaborar en la redaccon la colaboración de la Sociedad de Arquitectos. ción de ellas, colaboración que le fué aceptada. Asf se disDesgraciadamente, todos lo~ buenos augurios que pensó a esta Sociedad una deferencia que aparte de implicar se formulaban sobre la realización del concurso un reconocimiento de capacidad especial . . para resolver cuesquedaron desvanecidos al ser publicadas sus bases tiones de ar:¡uitectura bacía presumir un fácil acuerdo entre a mediados del mes de Marzo, y el interés optimista ambas corporaciones. Fué así como se llegó a acordar con que reinaba entre los profesionales dejó lugar a la la Comisión Pro-edificio del Directorio un programa y bases; que firmaron el Presidente y ·secretario ad- hoc de nuestra mayor incertidumbre. La explicación de tan lamentables consecuencias Sociedad en representación de la miSma y la Comisión nom7. a que tran$no era otra que la- forma en que fué transformada brada, y en cuyas bases figuraba la cláusula , la clausula séptima que determinaba la formación cribimos : ~el jurado, en la cual se establecia que los profee El Jurado que ha de dictaminar sobre los proyectos ·se .8ionales que formarían parte del tribunal serian nombrará oportunamente y será constituido . en la siguiente «arquitectos o ingenieros», forma: Ante la informalidad de las autoridade~ del Banco e Dos delegados del Directorio del Banco». qúe hablan cambiado de e motu prppio » una cláue Un arquitecto designado por los concursantes en la forma sula tan importante y que de manera tan directa, indicada en el artículo 6. ». « Un arquitecto nombrado por la Sociedad de Arquitectos». af~ctaba las garantias ofrecidas a los concurrentes, '1 las propias conveniencias de la Institución, que «Un arquitecto nombrado por el Directorio del Banco». era la mis interesada en asegurar la realización Como se ve, esta cláusula menciónaba claramente al arquide un concurso que respondiera por su seriedad y tecto como el único profesional que podía formar parte del por sus resultados a los propósitos abrigados por Jurado al que le incumbe la delicadísima misión de juzga.r aquella, la Sociedad de Arq11itectos inició una ges- de la bondad de los trabajos- que se presenten al certamen. . tión Pmistosa cerca del Directorio a fin de obtener Claro está que figuraban· en dicho jurado dos directores del que esa clausula volviera a redactarse en la unica Banco, por ser ellos representantes de la Institución y tamforma posible, ·que era la propuesta primeramente bién a los efectos de un asesoramiento, que al ser hecho por. por la Comisión y aceptada por las autoridades del personas versadas en ·el movimiento bancario, es la Sociedad . . Banco. Estas gestione& no arribaron a ningún resul- de Arquitectos la primera -en considerar indispensable desde tado satisfactorio, lo que· obligó a la Sociedad- a este punto de vista. definir posiciones publicando el' 18 de Abril la siAhora bien ; publicadas las bases por el Directorio, éste guiente nota en que relata lo eucedido con 'toda sin tener en cuenta que lesionaba los intereses de la .Socieclaridad y exactitud. dad de la cual había aceptado el asesoramien~o, modifica lo
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f xhortaclón de la Socie.tad de Arquftectos
La Sociedad de Arquitectos, bajo cuyo nombre se agrupan todos ros arquitectos del país, se ve en él ineludible deber de adoptar una terminante y radical medida que encierra una protesta, ante la importancia de ciertas resoluciones adoptadas por el Directorio del Banco de la República al publicar las bases del concurso de anteproyectos para el nuevo edifi• cio de esa institución, resoluciones que entrai\an un desconocimiento de la función del arquitecto y que lesionan sus intereses profesionales. Y al asumir esta Sociedad una actitud que por ser de suma gravedad le impone el deber de explicarla al público, nos dirigimos al sei\or Director rogándole hospitalidad en su prestigioso diario. 1
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convenido transformando la clausula ¡.• - 'la más 'importante • y garantía del ~ mto del concurso,- para dar entrada en la constitución def Jurado a profesionales. incapacitados para . juzgar trabajos arquitectónicos. Y lo que pareció más grave aún fué el hacer aparecer a la Sociedad de Arquitectos como aceptando tal despropósito al poner al pie de las bases publicadas las firmas del Presidente y Secretario ad - hoc como representantes de esta Sociedad. . Ante tal absurdo que coloca a nuestra asociación en pugna abierta con su misión y los ideales que sustenta, y que, por otra parte, significa menosprecio rebajando el concepto profesional del arquitecto, lo pñmero que se pensó -fué en un involuntario error de copia. Para hacer notar este error y otros de car-ácter técnico, se dirigió nuevamente la Sociedad al Directorio. y después de
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