ÓN BIPOLAR: LA DIFUSIÓN DE LA ARQUITECTURA
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MODERNA LATINOAMERICANA EN ESPAÑA (1949-1968) [+,-./01 3.4munication:
the spread of modern latin-american architecture in spain (1949-1968)]
a 5a 6 7 8 69 a 5 : a ; < 65=a Profesora Titular e Investigadora ¡ Universidad PolitÊcnica de Madrid Escuela TÊcnica Superior de Arquitectura de Madrid Espaùa
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de comunicaciĂłn con el exterior, la arquitectura espaĂąola mirĂł hacia fuera constantemente. La potencia de la arquitectura moderna latinoamericana, junto a las diferencias instrumentales y geogrĂĄficas, la hacĂan difĂcilmente importable a un contexto materialmente escaso y excesivamente tradicional. Sin embargo, dicha producciĂłn interesĂł y se difundiĂł notablemente durante ambas dĂŠcadas. Este artĂculo pretende varias cosas a la vez. Por una parte, proporcionar una panorĂĄmica global sobre la difusiĂłn de la arquitectura latinoamericana fuera de su continente. Para ello nos serviremos bĂĄsicamente del que probablemente fue el medio mĂĄs potente con el que contaron: las revistas especializadas de arquitectura. Pero tambiĂŠn pretende ser una llamada de atenciĂłn a las publicaciones periĂłdicas espaĂąolas, mucho menos conocidas que otras europeas pero, sin embargo, repletas de buena arquitectura. Palabras clave: publicaciones periĂłdicas, arquitectura moderna, difusiĂłn, LatinoamĂŠrica.
Es prĂĄcticamente imposible comenzar a hablar sobre la difusiĂłn de la cultura arquitectĂłnica moderna latinoamericana en el resto del mundo sin referirse a las memorables exposiciones del MoMA de mediados del siglo xx. Brazil Buildsš (1943) y Latin American Architecture since 1945² (1955) fueron probablemente uno de los mĂĄs destacados e inmediatos instrumentos de divulgaciĂłn y conocimiento de la arquitectura moderna autĂłctona hacia el norte y fuera del continente americano. De la misma manera, son bien conocidos los nĂşmeros que las principales revistas de arquitectura del momento â&#x20AC;&#x201C;europeas y norteamericanasâ&#x20AC;&#x201C; fueron dedicando a las arquitecturas de algunos paĂses sudamericanos.Âł AdemĂĄs, de un tiempo a esta parte cada vez son mĂĄs frecuentes los trabajos que, desde el prisma actual, revisan cĂłmo y en quĂŠ ĂĄmbitos se dieron a conocer dichas arquitecturas. Sin embargo, resultan mucho menos habituales las reflexiones en las que se aborda de forma global el reflejo transatlĂĄntico que tuvo la modernidad sudamericana en las arquitecturas o los medios de difusiĂłn de determinados paĂses europeos. Este trabajo se centra en lo que ocurriĂł en ese sentido en la EspaĂąa de las dĂŠcadas de 1950 y 1960, un paĂs relativamente desconectado del
mundo a consecuencia de la reciente Guerra Civil (1936-1939) pero, sin embargo, con muchos mĂĄs vĂnculos histĂłricos con LatinoamĂŠrica que ningĂşn otro del continente. Tampoco se puede aludir a la EspaĂąa de esos aĂąos sin presentarla como un caso un tanto particular dentro de la Europa posterior a la Segunda Guerra Mundial. La contienda vivida y el posterior aislamiento internacional al paĂs dieron lugar a unos aĂąos oscuros en los que EspaĂąa viviĂł de puertas adentro. El rĂŠgimen franquista aspiraba a controlar todos los aspectos de la sociedad, incluida la arquitectura, para la que se intentĂł crear un autĂŠntico estilo nacional basado en los momentos arquitectĂłnicos mĂĄs gloriosos del imperio espaĂąol. AsĂ que mientras que el MoMA de Nueva York ofrecĂa al mundo la imagen de una arquitectura moderna brasileĂąa en pleno auge a travĂŠs de la citada Brazil Builds, en 1943 EspaĂąa se concentraba en cuestiones bien distintas: el fallo del concurso para construir una gran cruz monumental como Monumento a los CaĂdos en la reciente guerra. Por eso, no resulta extraĂąo que Brazil Builds â&#x20AC;&#x201C;la primera gran muestra de arquitectura moderna latinoamericana a eeuu
y al mundoâ&#x20AC;&#x201C; apenas tuviese difusiĂłn en los medios espaĂąoles, preocupados por entonces de recuperar modelos histĂłricos autĂłctonos para la creaciĂłn de un estilo arquitectĂłnico genuinamente espaĂąol. De modo que, salvando algunas noticias sueltas publicadas en las revistas durante los cuarenta, habrĂa que esperar a principios de la siguiente dĂŠcada para empezar a hablar de un cierto interĂŠs en los arquitectos espaĂąoles por lo que se hacĂa fuera de sus fronteras. Por tanto, no tiene sentido comenzar esta prospecciĂłn mucho antes de 1949, un momento que, sin que signifique un antes y un despuĂŠs o un cambio brusco en la evoluciĂłn de la arquitectura espaĂąola, sin embargo resulta especialmente significativo por la concentraciĂłn de una serie de signos que comienzan a apuntar a una incipiente recuperaciĂłn de la modernidad. 1949 serĂa el aĂąo en que Gio Ponti y Alberto Sartoris descubrirĂan la nueva arquitectura de Coderch y Valls en la v Asamblea Nacional de Arquitectos; cuando las propuestas modernizantes de los jĂłvenes equipos Cabrero-Aburto y OĂza-Laorga triunfarĂan en dos importantes concursos, los del edificio de Sindicatos y la BasĂlica de Arantzazu; o el momento en el que un arquitecto tan consolidado como Luis GutiĂŠrrez Soto cambiarĂa la arquitectura que venĂa haciendo para adaptarla a los nuevos tiemposâ&#x20AC;Ś4 En resumen, una situaciĂłn de partida esperanzadora pero discreta; desde luego, nada que ver con la que se darĂa en 1968, el Ăşltimo aĂąo del periodo que abarca este estudio. En solo dos dĂŠcadas la arquitectura espaĂąola habĂa conseguido ponerse al dĂa con la internacional y producĂa ejemplos tan valorados en el extranjero como las Torres Blancas de Francisco Javier SĂĄenz de OĂza, autĂŠntico paradigma del estallido y explosiĂłn de una arquitectura espaĂąola que, a partir de ese momento, competirĂa en igualdad de condiciones con la internacional. Para conseguir una rĂĄpida inmersiĂłn en el panorama de la difusiĂłn de la arquitectura, la investigaciĂłn arrancĂł sirviĂŠndose del que sin duda fue el vehĂculo mĂĄs eficaz de propagaciĂłn de la producciĂłn forĂĄnea en EspaĂąa: las publicaciones periĂłdicas autĂłctonas,
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