ELLA, fue tu madre Querida Raquel, creo que es el momento de que sepas quién fue tu madre, una de las personas gracias a las cuales, tú y muchas otras mujeres podéis decir orgullosas; “Estoy en el ejército”: Era el primer día de María, tu madre, su primera vez tras abandonar la Academia del Aire de San Javier (Murcia), y con ella, a la mayoría de sus compañeros que la habían acompañado a lo largo de ese proceso de formación humana, técnica y profesional. Ella se sentía realmente esperanzada y entusiasmada a la par que abrumada por la magnífica e increíble situación que la había brindado la vida, como si se tratara de un renacer, fruto en gran medida de una incesable y permanente dedicación, rasgos que la habían identificado durante toda su vida con el único fin de alcanzar el sueño que finalmente estaba cumpliendo, ingresar en el Ejército del Aire de las Fuerzas Armadas Españolas. Corrían tiempos de transición y transformación democrática, tiempos difíciles para las mujeres. El año 1990 no era precisamente una etapa de apogeo de la democracia ni mucho menos de la igualdad entre géneros, a pesar de que ciertamente se estaban consiguiendo importantes cambios, éstos sin embargo, parecían realizarse a marchas forzadas, por obligación e imposición sin que realmente aquellos que los realizaban los sintieran como propios y necesarios, empujados, simple y llanamente por la cordura que implantaba en éste y muchos otros aspectos el pueblo; pero que a pesar de todo, constituyeron importantes y necesarios avances. Tu madre era una de las primeras mujeres que habían podido entrar en el ejército gracias a un Real Decreto de 1988 que materializaba una de las máximas promulgadas en la época, la irrupción de la igualdad en el ejército. Ella, caminando con paso firme por el que era su nuevo y ansiado trabajo desconocía que representaba a una mayoría de mujeres que exigían dicha igualdad y que cuyo camino hacia ella ya había comenzado.En el trozo de hoguera que la había tocado, la libertad era bandera, y con sus principios promulgó dichos valores que estaban aflorando en la sociedad. Un año después se levantó cualquier restricción con respecto de todos los destinos dentro de las Fuerzas Armadas, posteriormente 6 meses después de la aprobación de dicha Ley 17/1999 del 18 de Mayo, fue invitada por su superior a abandonar las Fuerzas Armadas Españolas por “alteración de la disciplina militar interna” o lo que viene siendo igual la proclamación de la igualdad entre hombres y mujeres en la sociedad y en especial en el ejército y que causaba tantos sarpullidos en el genero masculino, revelando que no se había conseguido en esta materia prácticamente nada y que era necesario que este movimiento, se transformara en una realidad social. Tu madre, de esta forma se convirtió en una verdadera heroína del ejército y de la sociedad que “cayó” defendiendo lo que más quería, los valores sociales, la igualdad entre ambos géneros y por consiguiente, su patria, España. Un beso, tu padre que te quiere, Miguel. Miguel Alconero Bravo, 1º Bachillerato