EL BAÚL HISTÓRICO
HOGAR DULCE HOGAR
El rey del hogar. La paternidad en la Inglaterra victoriana
Johanan A. Caselin Sánchez
NOTA DE LAS EDITORAS
En esta edición encontrarás algunos aspectos interesantes sobre la historiografía del hogar Descubre las estructuras, roles y estereotipos sobre los integrantesdeunafamilia,asícomosusfuncionesenciertasépocashistóricas
Johanan A Caselin Sánchez
Daniela Caselin Sánchez
Alondra M. Anselmo Hernández
El Baúl Histórico
La paternidad en la Inglaterra victoriana
Por Johanan A Caselin Sánchez
En una época con tantas reglas morales, en la organización familiar el padre era la cabeza visible de la casa, y esto fue un modelo basado en su absoluta autoridad y en la sumisión del resto de los miembros del hogar.
Un siglo antes esta idea se había gestionado desde la representación simbólica de la figura del padre de familia, en primera instancia con el rey, debido al reflejo de la autoridad sobre sus hijos con el rey sobre sus súbditos; y en segundo término con Dios, ya que de igual manera éste debía “regir los destinos de la familia y velar por su buena marcha” (Crespo y Hernández, 2017, p 220)
Tras la Revolución industrial en el siglo XIX, el padre recuperaba su lugar de prestigio como “patriarca de la empresa industrial” Es decir, cada uno de los integrantes de la familia se convirtieron en una comunidad de trabajadores Tanto en la vida laboral como en la vida privada, el padre dirigía con autoridad y respetaba los derechos de los subordinados (Roudinesco, 2002/2004)
Bajo el fundamento social de la autoridad benévola del padre, se encuentra en inferior lugar la figura de la esposa-madre, pues ella también regía su hogar con benevolencia pero en segundo plano ante el dominio masculino, razón por la que su papel recaía en el cuidado del esposo y de los hijos. De hecho, la superior figura del padre servía para construir el modelo de mujer esperado, constituyéndose en la máxima aspiración de toda mujer decimonónica. Si bien la madre se encargaba de la crianza de los hijos, el padre intervenía con el cuidado físico y moral a través de la escolarización, con la finalidad de evitar las “fuentes de males para la familia” como el trabajo y la explotación infantil Por lo tanto, autoridad y educación eran los pilares del modelo de paternidad (Crespo y Hernández, 2017)
En acción de agradecimiento por parte de la esposa y de los hijos, el hogar se convirtió en el espacio idóneo para el descanso del padre después de una agotadora jornada laboral, ellos se encargaban de brindarle el cariño y la ternura para sobrellevar sus duras condiciones laborales y sentirse realizado (Crespo y Hernández, 2017) Mientras la esposa-madre era “el ángel de la casa”, ya que cubría las necesidades de su esposo y sus hijos, el buen funcionamiento del hogar y del servicio doméstico; el esposo era “el rey de la casa” siendo sustento de la familia y proveedor de todas las comodidades a través del mantenimiento económico, y eso ocupaba gran parte de su día a día. Lo cual significaba que el era dueño y administrador de todas las posesiones familiares por legítimo derecho, derecho que cambió con las reformas de las leyes de esponsales de 1870 y 1882, cuando las propiedades de las mujeres pasaron a manos de su prometido una vez contraído matrimonio (La Casa Victoriana, 2023).
El Baúl Histórico
El Baúl Histórico
En cuanto a la relación con sus hijos, el padre era inflexible con ellos e indulgente con sus hijas Su labor principal consistía en preparar al primogénito y heredero para continuar con el legado familiar, es decir, contraer un matrimonio demasiado provechoso para incrementar la riqueza familiar y asegurar el mantenimiento de las posesiones, además de cuidar de sus hermanas en caso de que no contrajesen matrimonio. La exigencia bajaba con los hijos menores: la misión era llevar en alto el apellido, conseguir buenos matrimonios y trabajos bien remunerados, conseguidos por allegados de sus padres o sus suegros (La Casa Victoriana, 2023).
Caso contrario fue el trato del padre con sus hijas, que era más benevolente y afectuoso. Su deber era conseguirles esposos respetables para asegurar su futuro económico y alejarlas de los “cazafortunas” que buscaban el dinero y el posicionamiento social De la misma forma, los padres velaban por que sus hijas mantuvieran su virginidad intacta hasta el matrimonio (La Casa Victoriana, 2023; Crespo y Hernández, 2017)
Todo esto pasaba en la mayoría de los hogares de alta clase social, pero en las clases más pobres bastaba con preparar a sus hijos para tener trabajos dignos y buenos matrimonios (La Casa Victoriana, 2023)
Aún así, el papel de padre no distinguía clases sociales, igual que sus deberes, él era quien tomaba las decisiones y hacía que su voluntad se cumpliera Irónicamente, el papel de la madre se celebraba con mayor devoción en el Mothering Sunday (Día de la madre) pero no había un día de celebración para los padres. Esto debido a que muchas personas creían que era una pésima idea celebrar al padre: primero, porque este tipo de celebraciones se percibía como una expresión de feminidad y una manera de domesticar su hombría; segundo, porque la celebración enaltecería el papel del padre más de lo que ya era, frente al papel subestimado de la madre (Paura, 2025).
Un hecho trágico cambió de parecer para muchos en 1908 cuando en la ciudad de Fairmont en Virginia, Estados Unidos, ocurrió un accidente minero que provocó la muerte de cientos de trabajadores, que a su vez eran padres de familia. Entonces, la hija de un ministro, Grace Golden Clayton, se solidarizó con las víctimas proponiendo el 5 de julio como un día para homenajear en general a los padres Lamentablemente, no logró consolidarlo en todo el país (Paura, 2025)
Un año después una joven huérfana de madre y criada por su padre, llamada Sonora Smart Dodd, solicitó a las autoridades de Virginia, Estados Unidos, que se dedicara de manera oficial un día para conmemorar a los padres, proponiendo el 5 de junio, fecha del cumpleaños de su padre Pese a ello, fue hasta 1972 que el presidente Nixon decretó, por medio del Acta del Congreso de los Estados Unidos, el tercer domingo de junio como el Día del Padre, y posteriormente, la festividad se extendió hacia Reino Unido (La Casa Victoriana, 2023).
Como vemos, la imagen del padre en la época victoriana era la de un hombre encargado de sus negocios y de su casa, ocupando el primer lugar en la jerarquía. Un hombre preocupado por las necesidades económicas y responsable de la preparación para el futuro de los hijos, según su lugar en el orden familiar. Técnicamente, la Revolución industrial produjo la transición del rey a patrón de su hogar, con la única diferencia de respetar a sus subordinados. Su recompensa por serlo era un hogar lleno de amor y cariño, como muestra de agradecimiento por la madre y sus hijos; y por eso, todos los días eran festivos para el padre
REFERENCIAS
Crespo Sánchez, F. J. y Hernández Franco, J. (2017). La construcción del modelo de paternidad en España (1870-1920). Relaciones Estudios de Historia y Sociedad 150, pp 215-246
La Casa Victoriana. (2013, 17 de junio). El hombre victoriano en el hogar. https://lacasavictoriana com/2023/06/17/el-hombre-victoriano-en-el-hogar/ Paura, C. V. (2025, 19 de marzo). ¿Cuál es el origen del padre y por qué se celebra en fechas distintas?. National Geographic Historia. https://historia nationalgeographic com es/a/dia-padre-2023-por-que-mexico-eeuuargentina-y-colombia-se-celebra-fecha-distinta-a-espana 19726
Roudinesco, E (2004) La familia en desorden (H Pons, Trad , 4 ª reimp ) Fondo de Cultura Económica [FCE]. (2002).
El Baúl Histórico