Esta obra está dedicada a un ilustre cantautor venezolano, excelente poeta, nacido en Yaritagua, Otilio Galindez, quien desde pequeño mostrara ese don especial para combinar música y letra de manera magistral, gracias al estímulo de su madre Doña Felícita Gutiérrez, lo que le permitió convertirse en un genio a la hora de componer ese valioso y fructífero trabajo, legado para el mundo, en especial para los venezolanos.