
Guía para mujeres que buscan un empleo en el ministerio


¡Estamos encantados de tenerte aquí! Como mujer en el ministerio, tienes una perspectiva única y una riqueza de dones que ofrecer al mundo. Sabemos que navegar el camino hacia una carrera ministerial satisfactoria a veces puede parecer un desafío. Por eso hemos creado este recurso para ayudarte a brillar.
Como mujer que se inicia o avanza en el ministerio, puedes encontrarte con obstáculos únicos como prejuicios de género, oportunidades limitadas para puestos de liderazgo y nociones preconcebidas sobre las capacidades de las mujeres. Aunque estos retos pueden ser difíciles de superar, la preparación estratégica es la forma de presentarse como una candidata fuerte. Este recurso está diseñado para empoderar a las mujeres en el ministerio proporcionándoles orientación práctica y conocimientos sobre la elaboración del currículum vitae, la redacción de cartas de presentación y la preparación de entrevistas. Siguiendo los consejos y las estrategias aquí descritos podrás crear un perfil profesional convincente que destaque tus cualificaciones únicas y te posicione como una fuerte candidata para puestos en el ministerio. Trabajemos juntas para derribar barreras y abrir puertas a una carrera ministerial satisfactoria.
Recurso escrito por: Nikki Hardeman
Directora de Defensa de las Mujeres en el Ministerio Mujeres Bautistas en el Ministerio
© 2024 Baptist Women in Ministry Todos los derechos reservados.
Traducido por: Alicia Zorzoli Diseñado por: Katie Michelle Design
A menudo tu currículum es la primera impresión que das a los posibles empleadores en el proceso de búsqueda de empleo en el ministerio. Desarrollar un currículum sobresaliente requiere un profundo conocimiento de ti misma, de las personas a quienes se lo presentarás, del ministerio específico al que aspiras, y de las habilidades y experiencias clave que más se valoran en ese campo. Un documento bien elaborado es esencial para mostrar tus habilidades, tu experiencia y tu pasión por servir. En un campo que a menudo depende de conexiones personales y referencias, un currículum convincente puede ser la clave para desbloquear nuevas oportunidades.
● Objetivo ministerial:
Un objetivo ministerial no es obligatorio, pero puede marcar el tono de tu currículum y ayudarte a destacar entre tus compañeros. Un objetivo ministerial suele aparecer en la parte superior de tu currículum, y es una declaración concisa que resume tus metas vocacionales, tu vocación ministerial y cómo estas se alinean con el trabajo y la organización a la que estás aplicando. Tendrás que adaptarlo cada vez que solicites un puesto diferente. Limítalo a una o dos frases. Destaca tus pasiones, tus puntos fuertes y las contribuciones que harías si consiguieras el puesto. He aquí algunos ejemplos:
○ Ministro Bautista altamente motivada buscando una posición en donde utilizar la predicación y las habilidades de cuidado pastoral para nutrir el crecimiento espiritual dentro de una comunidad acogedora.
○ Líder dedicada a la educación cristiana con una pasión por el desarrollo de la juventud, en busca de un papel en la Iglesia Bautista XX para desarrollar programas atractivos y capacitar a los jóvenes en su camino de fe.
○ Experimentada líder de adoración con un don para el ministerio de la música, deseosa de contribuir a un equipo de adoración vibrante en la Iglesia Bautista XYZ e inspirar a otros a través de la música.
● Educación y formación:
Enumera de manera prominente tu educación de seminario o teológica, destacando cualquier otro título de educación (no incluyas diplomas de escuela secundaria), certificaciones o programas de capacitación especializada relevantes para tus objetivos ministeriales. Si no tienes un título de seminario, enumera cualquier educación secundaria en orden cronológico inverso.
● Destaca tu experiencia relevante:
Enumera tu experiencia en el ministerio en orden cronológico inverso. Incluye detalles de tus responsabilidades y logros. Los logros tienen que ver con éxitos destacados en el trabajo; por ejemplo, el crecimiento de un grupo de estudio bíblico, el aumento del número de voluntarios en el transcurso del año, o el ahorro en los costos de tu organización mediante el aumento de la eficiencia. Sé concisa en las descripciones de tu experiencia para aumentar la legibilidad y mantener tu información más relevante en la primera página.
● Cuantifica tus logros:
¿Tu grupo de jóvenes aumentó un 30%? ¿Encabezaste una campaña de recolección de ropa en la que se recogieron 500 prendas? Cuantifica tu impacto siempre que sea posible, especialmente al describir tu experiencia relevante.
● Publicaciones:
Si has publicado obras impresas o digitales puedes incluirlas en su propia sección.
● Liderazgo, voluntariado y premios:
Incluye una sección para otras experiencias de liderazgo y reconocimientos fuera de tu experiencia ministerial relevante. Esta es una manera de demostrar tu experiencia y competencia cuando se te han bloqueado las oportunidades congregacionales debido a tu género. Algunos ejemplos son el servicio en juntas o comités de la iglesia, el trabajo voluntario y los premios académicos o de liderazgo ministerial. Combinar el liderazgo, el trabajo voluntario y los premios en una sola sección ahorra un valioso espacio. Sin embargo, si tienes tres o más en cualquiera de las áreas que sean relevantes puedes optar por crear una sección separada para cada una. A la hora de elegir qué incluir, la relevancia y la importancia son valiosas. Por ejemplo, no incluyas una tarde que pasaste como voluntaria en el armario de ropa de tu iglesia; pero sí incluye que organizaste o dirigiste el ministerio del armario de ropa durante un año.
● Habilidades:
Al crear una sección de habilidades enfócate en las habilidades que te ayuden a destacarte como una candidata deseable para el puesto. Algunas habilidades importantes para los trabajos del ministerio hoy en día son el desarrollo de medios sociales, diseño gráfico y edición de vídeo. Otras ideas de habilidades son el manejo de bases de datos, el diseño web y la redacción de solicitudes de subvenciones. Incluye solo las habilidades que realmente poseas.
● Referencias:
Es habitual incluir tres o cuatro referencias en tu currículum. Es importante elegir al menos una o dos personas que hayan trabajado contigo. Además, asegúrate de que al menos la mitad de tus referencias sean mujeres ya que ellas tendrán una capacidad única para abogar por ti. Por último, es una buena idea incluir a alguien conocido de la iglesia u organización contratante si es posible. No utilices a un familiar como referencia. Asegúrate de pedir permiso a tus referencias para utilizar su nombre y, si es posible, hazles saber cuándo pueden recibir una llamada.
Tu proceso de solicitud de empleo puede mejorar elaborando dos versiones de tu currículum: una impresa y otra digital. Un currículum digital, a menudo en formato PDF, puede compartirse electrónicamente y se le puede acceder para obtener más información. Este formato permite incluir hipervínculos a tu sitio web, sermones y publicaciones que proporcionan al entrevistador o los entrevistadores información adicional sobre tus cualificaciones. Por otro lado, un currículum impreso es ideal para las solicitudes tradicionales y las entrevistas en persona ya que ofrece una representación tangible de tus habilidades y tu experiencia. Al preparar ambas versiones, te aseguras de que tu currículum se adapte a los distintos métodos de solicitud, maximizando tus posibilidades de causar una impresión positiva y conseguir el puesto ministerial que deseas.
NAVEGAR POR EL MUNDO
DIGITAL CON VÍDEO
Facilita el trabajo de los revisores creando un vídeo de dos a tres minutos de tus sermones o discursos. Esto mostrará a los revisores de tu solicitud un vistazo de tu visión teológica y del mundo, así como de tus habilidades para hablar en público.
Incluye en orden: tu carta de presentación, el currículum vitae y las referencias en un solo archivo. Al nombrar tu archivo de currículum, incluye tu apellido. Si creas una versión impresa y otra digital indícalas en el nombre del archivo. Imprime ambas versiones para asegurarte de que las dos tienen el mismo formato. Esto ayudará al comité de búsqueda cuando tenga que hacer malabarismos con varias candidaturas.
En la búsqueda de empleo es fácil pasar por alto detalles cruciales. Si prestas atención a los pequeños detalles puedes mejorar significativamente tu búsqueda de empleo. Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a no pasar por alto detalles importantes en tu
● Palabras clave:
Utiliza en todo tu currículum palabras clave de la descripción del trabajo, incluyendo áreas específicas de ministerio (predicación, juventud, adoración, evangelización). Presta atención a los valores de la organización tanto en la descripción del puesto como en su sitio web. Demuestra que eres consciente de esos valores con las palabras que utilices.
● Utiliza un diccionario de sinónimos:
Edita las palabras repetidas y presta mucha atención a los verbos. Busca en Google “Palabras de acción para CV” para encontrar nuevas palabras que describan tu experiencia.
● Escribe en voz activa en vez de pasiva:
Generalmente se prefiere la voz activa porque es una forma más clara y directa de escribir. Eso hace que tus logros suenen más impresionantes y decididos. Algunos ejemplos:
Voz pasiva:
○ Me dieron la oportunidad de hablar en el congreso de la iglesia.
○ Fui responsable de supervisar un equipo de cinco personas.
Voz activa:
○ Hablé en el congreso de la iglesia.
○ Dirigí al equipo en el desarrollo de un nuevo programa de evangelización. currículum.
○ Un nuevo programa de evangelización fue desarrollado por el equipo bajo mi dirección.
○ Supervisé a un equipo de cinco personas.
Al investigar la iglesia u organización contratante, es probable que empieces por leer su sitio web. Asegúrate de buscar su declaración de misión y visión, y cualquier otra forma en que describan quiénes son. Puede ser increíblemente útil encontrar a un antiguo empleado de la iglesia u organización para aprender más sobre ella. Elabora algunas preguntas antes de ponerte en contacto con él. Por último, es una buena idea hacer una búsqueda en Internet sobre la iglesia u organización para ver si aparece algún artículo de prensa que ofrezca más información sobre la misma.
Además de las sugerencias que aparecen a continuación, pídele a un amigo que edite tu currículum. Los ojos nuevos a menudo aportan una nueva perspectiva.
Ronda 1: Elimina la voz pasiva.
Ronda 2: Revisa la ortografía y la gramática.
Ronda 3: Comprueba la concisión.
Ronda 4: Asegúrate de que el formato sea coherente.
Ronda 5: Comprueba el uso de las palabras clave de la descripción del puesto.
Si buscas ejemplos de estilos de currículum en Internet encontrarás más de los que puedes procesar. Al fin y al cabo, las características de estilo más importantes son la legibilidad y la coherencia en el formato. A continuación se ofrecen consejos sobre el estilo del currículum.
○ El color no es necesario. Si decides utilizar algo de color hazlo lo menos posible. El color solo debe realzar tu currículum, no ser lo único que se recuerde de él.
○ ¡La coherencia es la clave! Si pones en negrita el título del puesto y no el nombre de la o organización en una sección, debe tener el mismo formato en todas las entradas y en las diferentes secciones de tu currículum. A continuación encontrarás ejemplos de incoherencias comunes.
● Empieza todas las viñetas de la misma manera. No empieces algunas con verbos y otras con el sujeto.
● Asegúrate de que el tiempo verbal sea correcto y coherente. Utiliza el pasado para experiencias anteriores y el presente para tu experiencia actual.
● Termina las frases del currículum con la misma puntuación o sin ella. Si una viñeta termina con un punto, todas deberían hacerlo.
● Mantén la coherencia en el uso de las comas.
○ No hagas márgenes estrechos simplemente para que quepa más texto en la página. Más bien, haz que las descripciones de tus experiencias sean más concisas.
○ No es necesario incluir una fotografía. Aunque algunos te aconsejen incluirla, ya no es una práctica habitual.
○ Es opcional Incluir tu dirección física. El hacerlo puede ayudar a un posible empleador a identificarte cuando busque más información. Por el contrario, el omitirla puede ofrecer una ventaja si tu contratación va a ocasionar gastos de mudanza a la iglesia u organización.
○ Si recurres a una empresa de contratación para buscar trabajo mantén un estilo muy sencillo ya que es posible que envíen los currículos a través de un lector digital. Un formato complicado dificultará que el lector entienda tu currículum.
Defectos de un currículum:
-Diseño excesivo
-Voz pasiva
-Foto innecesaria
-Demasiados colores
Cualidades de un currículum:
-Formato sencillo -Descripciones concisas -Voz activa
Una última recomendación sobre el estilo. Diseña tu currículum de modo que refleje quién eres como persona, ministro y empleada. Es muy probable que tu currículum sea la primera impresión que causes a un posible empleador. A través de tu currículum querrás que se hagan una idea de quién eres. Por ejemplo, si tu currículum incluye diseño gráfico y es atrevido y recargado, el empleador asumirá que eres experta en diseño gráfico, o puede que, consciente o inconscientemente, asuma que eres una persona atrevida y recargada. Si no sabes hacer diseño gráfico no dejes que otro diseñe tu currículum. Muestra las habilidades que tienes. Si eres una persona sencilla y tranquila, el hacer que el estilo refleje tu personalidad vocacional eliminará la posibilidad de que malinterpreten quién eres. La presentación de una buena candidatura para un puesto de trabajo consiste tanto en comunicar quién eres como en demostrar lo que has conseguido. Puedes tratar de conseguir ambos objetivos en cada paso del proceso, incluidos el currículum y la carta de presentación.
Mientras que el currículum es directo en cuanto a compartir información, la carta de presentación es un lugar para mostrar tu personalidad y ayudar al comité de búsqueda a conocerte como ministro, como empleada y como persona.
Inicio:
Dirígete al comité de búsqueda o a la persona que hará la contratación y expresa tu entusiasmo por la iglesia o ministerio específico y su misión. Haz referencia a tu pasión y tu llamado al ministerio.
Destaca tu alineación:
Explica brevemente cómo se alinean tus cualidades y tu experiencia con las necesidades y los valores de la organización tal y como se describen en el puesto. Asegúrate de utilizar el lenguaje que aparece en la descripción del puesto.
Pasión y compromiso:
Es importante investigar la iglesia u organización con la que te entrevistas más allá de la descripción del puesto o de su sitio web. Tómate tiempo para explorar su sitio web y buscar artículos de noticias sobre ellos. Utilizando esta información, expresa tu pasión por el ministerio y tu compromiso de servir al bienestar de la iglesia u organización. Esta es una buena manera de conectar tu voz distintiva y tus experiencias como líder y ministro con su misión y propósito.
Sé sucinta:
Mantén tu carta de presentación en una página. Ayuda a quienes contratan a conectarse rápidamente contigo, con tu pasión y tu historia desde el principio. No les hagas leer una segunda página para conocer lo mejor de ti.
Llamada a la acción:
Termina expresando tu deseo de ser entrevistada y habla de cómo tus habilidades pueden beneficiar a la iglesia u organización.
¿Has estado fuera del mercado laboral durante un tiempo porque elegiste quedarte en casa para criar a tus hijos? ¿Todo tu trabajo anterior se enfocó en el mercado secular y no en áreas ministeriales tradicionales? ¿Tuviste dificultades para adquirir la experiencia esperada por la organización debido a las barreras a las que se enfrentan las mujeres a la hora de encontrar un puesto? Este es un buen momento para abordar positivamente estos retos. Demuestra cómo has adquirido las competencias necesarias, aunque no haya sido a través de la experiencia laboral tradicional o esperada. No te quejes de los obstáculos a los que te has enfrentado; más bien reconócelos al mismo tiempo que pones de relieve tu pasión, interés y competencia para el trabajo. Habla de la singularidad de tu trayectoria y de cómo ella te ha preparado para ser la candidata ideal para este puesto.
Cada vez son más las personas que se dedican al ministerio como una segunda carrera. Para quienes se encuentran en esta posición es importante saber cómo articular las formas en que su trabajo en el área secular se conecta con el ministerio. Muchas habilidades valiosas que has perfeccionado en otras carreras pueden trasladarse perfectamente al mundo del ministerio. He aquí una guía que te ayudará a salvar la brecha y mostrar tus fortalezas al buscar un empleo ministerial.
Identifica
Liderazgo:
¿Has dirigido equipos, delegado tareas o motivado a compañeros? Estas habilidades se traducen en saber liderar una congregación, supervisar ministerios y guiar voluntarios.
Comunicación:
¿Eres hábil en comunicar, presentar o escribir? Estas habilidades son vitales para predicar, dirigir cultos y relacionarte con tu congregación.
Resolución de problemas y toma de decisiones:
¿Has afrontado desafíos complejos o tomado decisiones bien informadas en tu función en el mercado secular? Estas habilidades son esenciales para hacer frente a las preocupaciones pastorales, la gestión de las finanzas de la iglesia y la búsqueda de soluciones creativas.
Organización y manejo del tiempo:
¿Te destacabas en el manejo de proyectos, la programación o el cumplimiento de plazos? Estas habilidades son cruciales para la organización de eventos de la iglesia, el manejo de los horarios del personal y la supervisión de múltiples ministerios.
Construcción de relaciones:
¿Tuviste éxito en las relaciones con los clientes, el servicio al cliente o la creación de relaciones con los colegas? Estas habilidades son esenciales para el cuidado pastoral, el logro de la confianza con tu congregación y el fomento de un ambiente acogedor en la iglesia.
Marketing:
Muestra tus habilidades de marketing en la elaboración de programas atractivos para conectar con la comunidad.
Recursos humanos:
Comunica tu experiencia en resolución de conflictos y relaciones con los empleados como puntos fuertes en el cuidado pastoral y en la resolución de problemas interpersonales dentro de una congregación u organización.
Contabilidad:
Destaca tus habilidades de manejo financiero como activos valiosos para supervisar los presupuestos de la iglesia y promover la administración responsable.
Ventas y desarrollo empresarial:
Promociona tus habilidades en las áreas de negocios y ventas como fácilmente trasladables al crecimiento de una iglesia u organización a través de programas de alcance, iniciativas de recaudación de fondos y la construcción de relaciones con socios de la comunidad.
Desarrollo de currículo:
Comparte tu experiencia en desarrollar planes de estudio como un activo valioso para la creación de programas educativos atractivos para la Escuela Dominical, grupos de jóvenes o clases de educación de adultos.
Manejo del aula:
Habla de tu experiencia de estar al frente de clases como algo que te ha preparado para dirigir el culto, manejar un grupo de estudiantes o guiar a voluntarios dentro de la iglesia.
Manejo de redes sociales:
Aprovecha tu experiencia en redes sociales para crear contenidos atractivos en línea, conectarte con la comunidad y promover los eventos de la iglesia.
Diseño y desarrollo en la web:
Ilustra cómo tus habilidades en diseño y desarrollo web son valiosas para el mantenimiento del sitio web de la iglesia, la creación de recursos en línea o el desarrollo de una plataforma de donaciones en línea fácil de usar.
Redacción de solicitud de subvenciones:
Comunica tu experiencia en la redacción de solicitud de subvenciones como un activo para asegurar la financiación de programas de la iglesia, proyectos de ayuda o de justicia social.
Recaudación de fondos y desarrollo:
Muestra tu experiencia en recaudación de fondos y desarrollo como útil para asegurar donaciones, organizar eventos de recaudación de fondos, gestionar programas de mayordomía dentro de la iglesia y establecer relaciones después de los programas.
Al solicitar puestos en el ministerio es crucial presentar tus experiencias en el mercado secular de manera que destaquen su importancia para el trabajo ministerial. Reescribe en tu currículum tus títulos y responsabilidades profesionales utilizando terminología específica del ministerio. En tu carta de presentación conecta activamente tus experiencias pasadas con las necesidades específicas de la iglesia u organización proporcionando ejemplos concretos de cómo tus habilidades han conducido a resultados positivos. No confíes en que los miembros del comité de búsqueda o la persona que te contrate traduzcan tu experiencia al contexto de ellos. Haz ese trabajo por ellos. Durante las entrevistas prepárate para hablar de tus aptitudes transferibles y de cómo las aplicarías a los retos y oportunidades específicos que presenta la iglesia u organización. Al traducir eficazmente tus habilidades transferibles demuestras a los comités de búsqueda que posees el conjunto de habilidades necesarias para prosperar en un rol ministerial. Recuerda: tus valiosas experiencias en el mercado secular pueden ser una base sólida para una carrera ministerial satisfactoria e impactante.
Las entrevistas ministeriales pueden ser una mezcla de emoción y ansiedad para cualquier entrevistado. Sin embargo, las mujeres pueden enfrentarse a desafíos adicionales. Los prejuicios inconscientes de los entrevistadores y los prejuicios de género interiorizados por las entrevistadas hacen que las mujeres se enfrenten a retos relativamente invisibles en el espacio de la entrevista. Estos retos, como ser percibida como menos asertiva o competente, pueden afectar a la capacidad de una mujer para presentarse eficazmente. Además, las mujeres pueden ser objeto de un mayor escrutinio en lo que respecta a su conciliación de la vida laboral y familiar o a las interrupciones de su carrera profesional, lo que puede ser injustamente discriminatorio.
Con una planificación y una preparación cuidadosas, puedes mostrar con confianza tu competencia y superar estos obstáculos. Si comprendes estos posibles desafíos y aplicas estrategias para afrontarlos, podrás aumentar tus posibilidades de éxito en las entrevistas ministeriales.
Ejemplos de prejuicios:
● Puede darse por sentado que las mujeres darán más prioridad (y de forma diferente) a la familia que los hombres, lo que les impedirá estar plenamente presentes en su trabajo. Es importante ser franca sobre las formas en que priorizarás el trabajo y cómo establecerás los límites para tu familia de una manera que modele un equilibrio saludable entre familia y trabajo.
● A menudo se identifica a las mujeres como siendo sustentadoras y colaboradoras. A veces esto se yuxtapone en la mente de las personas con una falta de asertividad y decisión, cosas que son cruciales para el liderazgo. Para las mujeres dotadas para el ministerio esta diferencia puede parecer aún más marcada en la mente de un posible empleador. Puedes demostrar que ser colaboradora y asertiva no son características mutuamente excluyentes. Por ejemplo, puedes hablar de una ocasión en la que proporcionaste una dirección firme o estableciste límites claros al tiempo que mantenías la empatía y la comprensión. Puedes describir una situación en la que hayas dirigido un equipo con un enfoque de apoyo y aliento al mismo tiempo que tomabas decisiones difíciles y hacías que la gente te rindiera cuentas. Demostrando que puedes ser a la vez enriquecedora y asertiva puedes desafiar los estereotipos y posicionarte como una líder fuerte y compasiva.
● Es natural que la persona o el grupo contratante dé prioridad a las personas con más experiencia. Si careces de experiencia simplemente porque las oportunidades no han estado a tu alcance como mujer, dedica tiempo a prepararte para hablar de la experiencia que has recibido y que ellos pueden no reconocer de forma natural.
● Un aspecto de los prejuicios inconscientes contra las mujeres es que se presta más atención al cuerpo de las mujeres que al de los hombres. Aunque es injusto que tu aspecto sea juzgado con más dureza, sé consciente de esta realidad mientras te preparas y eliges tu atuendo para la entrevista. Sigue expresando tu estilo personal y vístete de forma que te sientas segura para la entrevista, pero sé consciente de cómo los prejuicios pueden afectar a la percepción que tienen de ti.
● Presta atención a los prejuicios internos que puedas haber adquirido a lo largo de los años. Las voces en nuestra cabeza que nos dicen que no somos lo suficientemente buenas pueden hacer descarrilar nuestra confianza e impedirnos demostrar nuestras cualidades mejores y más singulares. Haz el trabajo de silenciar esas voces para que puedas dar un paso al frente y mostrarte firme en la fe de que Dios te ha llamado.
● Prepara varias historias:
Tómate tiempo para pensar en historias de tus experiencias que te ayuden a responder bien a las preguntas. Las historias son fáciles de recordar y contextualizan tus respuestas ayudándote a responder a las preguntas de forma más completa y eficaz. Si tienes menos experiencia en un entorno laboral, considera historias de cualquiera de tus experiencias en la vida. Para preparar tus historias de forma eficaz considera la posibilidad de utilizar el método STAR (por sus siglas en inglés) para estructurar tus respuestas. Este método consiste en describir una situación concreta, la tarea de la que fuiste responsable, las medidas que tomaste y el resultado de tus esfuerzos. Al seguir este patrón puedes proporcionar ejemplos concretos de tus habilidades y experiencias demostrando tu capacidad para manejar desafíos, resolver problemas y lograr resultados positivos.
● Algunas historias que es bueno preparar:
○ Una ocasión en la que implementaste un nuevo programa o un cambio.
○ Un ejemplo de cuando manejaste un conflicto.
○ Una vez en el que hiciste un trabajo del que te sentiste realmente orgullosa.
○ Una vez que cometiste un error importante en tu trabajo y lo que aprendiste de ello.
○ Una ocasión en la que demostraste capacidad para trabajar por tu cuenta.
○ Una ocasión en la que colaboraste bien con tus compañeros.
○ Una anécdota que muestre tu capacidad de liderazgo.
● Comparte acerca de tu llamado y tu camino de fe:
Ser capaz de articular un sentido personal de llamado y cómo se ha desarrollado tu perspectiva sobre la fe es crucial para que los entrevistadores crean que serás capaz de comunicarte claramente sobre la fe con los demás. Prepárate para responder a la pregunta de forma breve (3-5 minutos) y para dar una respuesta más larga (más de 10 minutos). Si no te dicen cuánto durará la entrevista y cuántas preguntas hay, puedes preguntar algo como: “Muchas gracias por hacer esta pregunta. Mi camino de fe es muy importante para mí, así que podría hablar de ello durante más de una hora pero quiero respetar nuestro tiempo. ¿De cuánto tiempo disponemos en nuestra entrevista para que responda a esta pregunta?”.
● Vístete de forma profesional:
Las primeras impresiones importan, así que vístete de acuerdo a lacultura de la iglesia u organización. Es mejor ir demasiado vestida que mal vestida.
● Sé entusiasta y positiva:
Muestra tu pasión por el ministerio y un interés genuino en la oportunidad. Si necesitas explicar que hubo una pausa en el empleo, tu entusiasmo puede mostrar que eres resiliente.
● Comparte tu visión:
Comparte brevemente tu visión del puesto y cómo puedes contribuir al crecimiento de la iglesia u organización.
Ejemplo:
Estimado Comité de Búsqueda:
Quiero extender mi más sincero agradecimiento por la oportunidad de entrevistarme para la posición del ministerio en la Iglesia Bautista de Fe, el 10 de octubre. Fue un placer reunirme con ustedes y aprender más sobre el maravilloso trabajo que vuestra iglesia realiza en su comunidad. Gracias una vez más por su tiempo y consideración. Espero con interés la posibilidad de contribuir a la labor significativa en la Iglesia Bautista de Fe. Por favor, háganme saber si necesitan más información de mi parte.
Cordialmente, Sarah Smith
● Haz un seguimiento con una nota de agradecimiento:
Expresa tu gratitud por la entrevista y reitera tu interés en el puesto.
● La práctica hace al maestro:
Realiza simulacros de entrevistas con un amigo, un colega o un orientador profesional. Esto te ayudará a afinar tus respuestas y a ganar confianza.
Entrevistas en zoom:
En los procesos de contratación de hoy en día es habitual realizar una primera entrevista mediante zoom. Es importante pensar bien la configuración y probarla antes de la entrevista. Mientras te preparas asegúrate de que el entorno sea tranquilo, con buena iluminación y un fondo neutro y limpio. Evita realizar la entrevista desde tu vehículo. Vístete de forma profesional como si fueras a reunirte en persona con el entrevistador o los entrevistadores. Si prestas atención a estos detalles demostrarás a los entrevistadores que te has preparado y planificado la entrevista.
● Describa su experiencia en el ministerio. Como mujeres se nos enseña a ser humildes y no presumir de las cosas que hacemos bien. Este puede ser un buen consejo para llevarse bien con los colegas y hacer amigos, pero no te servirá cuando te están entrevistando. Haz una lista de todas las cosas de las que te sientas orgullosa en tu trabajo. Prepara historias en torno a ellas para que las recuerdes. Encuentra la manera de incluir estos logros cuando respondas a las preguntas de la entrevista. Debido a la forma en que nuestra sociedad está condicionada a ver a las mujeres, la confianza puede verse como un desafío al concepto tradicional de la mujer. Es importante ser consciente de esta dinámica, incluso cuando afirmas tu valía y confianza en el proceso de búsqueda de empleo. Cuando presentas tus logros con convicción, desafías estos estereotipos y pones en tela de juicio el statu quo de lo que significa ser mujer.
Es probable que la pregunta no se formule de forma tan clara. Lo que un comité o una persona busca son pruebas de que eres consciente de ti misma y de que sabes compensar tus puntos débiles. Una forma de verlo es que los puntos fuertes y débiles suelen ser dos caras de la misma moneda. Por ejemplo, una mujer que es buena para comunicar puede tener dificultades para escuchar. En la entrevista ella puede decir que, para compensarlo, ha desarrollado la siguiente estrategia: programar las reuniones importantes a primera hora del día, cuando está más alerta, y luego enviar un resumen por correo electrónico para asegurarse de que ha captado con precisión los puntos clave. Asegúrate siempre de hacer hincapié en tus puntos fuertes, sin olvidar que ser consciente de tus puntos débiles es un punto fuerte en sí mismo.
● ¿Por qué le interesa específicamente este puesto en esta iglesia u organización?
Demuestra que has investigado sobre el puesto y la iglesia u organización. Puedes hablar de los objetivos a largo plazo de tu vida profesional y de cómo este puesto te ayudará a alcanzarlos.
● ¿Dónde se ve dentro de 10 años?
La mayoría de los empleadores saben que las personas que contratan no van a estar con ellos para siempre. Cuando te hagan esta pregunta sé sincera sobre tus esperanzas y objetivos para tu vida evitando, al mismo tiempo, dar a entender que este trabajo es un trampolín para ti. Es bueno demostrar tu entusiasmo. Al compartir tus esperanzas para el futuro tu empleador reconocerá tu entusiasmo como una ventaja.
● ¿Cómo maneja los conflictos?
Cuando los entrevistadores preguntan por los conflictos no buscan simplemente una historia de superación de la adversidad. Están evaluando tu autoconocimiento, tus habilidades para resolver conflictos y tu capacidad para aprender de los retos. Esta pregunta te invita a profundizar más allá de simplemente culpar a factores externos. Se trata de demostrar tu capacidad de introspección y crecimiento. En lugar de centrarte únicamente en el problema y su solución, menciona tu papel en el conflicto. Al reconocer tu parte en él demuestras madurez, empatía y voluntad de asumir responsabilidades.
● Anticipa las preguntas específicas del ministerio:
Adapta tus respuestas en función del enfoque ministerial del puesto al que aspiras (juventud, culto, evangelización, desarrollo, planificación de eventos, etc.). Si te preparas para estas preguntas comunes y adaptas tus respuestas al ministerio específico estarás preparada para una entrevista exitosa. Recuerda: tu pasión por servir a los demás y tus habilidades distintivas brillarán cuando estés bien preparada.
● Elabora tus propias
preguntas:
Prepara preguntas perspicaces sobre la iglesia u organización, la dinámica del personal y su visión de futuro.
○ Al informarme sobre [nombre de la iglesia u organización] leí [algo que te intrigó o suscitó una pregunta en tu investigación]. ¿Puede contarme algo más al respecto?
○ ¿Podría explicarme con más detalle la estructura del equipo y con quién trabajaría estrechamente?
○ Ha mencionado [tema de la entrevista]. ¿Podría explicar con más detalle cómo encaja en la misión general de la iglesia u organización?
○ ¿Cómo describiría la cultura de la iglesia, la congregación o la organización?
○ ¿Cuáles son los próximos pasos? ¿Cuándo puedo esperar noticias suyas?
A continuación encontrarás preguntas que están fuera de los límites de los empleadores seculares pero las iglesias tienen un amplio margen de maniobra. Si una iglesia hace estas preguntas, el candidato puede buscar aclarar las razones por las que las hace. Si las preguntas son invasivas o pretenden imponer a un ministro una norma que no se comparte en la iglesia, es una señal de alarma de una cultura eclesiástica malsana. Los candidatos deben evaluar cuidadosamente su disposición a responder a las preguntas y/o si va a permanecer en el proceso de querer un empleo en esa la iglesia.
¿Está embarazada?
¿Cuál es su afiliación política?
¿Cuál es su raza, color u origen étnico?
¿Qué edad tiene?
¿Tiene alguna discapacidad?
¿Está casada?
¿Tiene hijos o piensa tenerlos?
¿Tiene deudas?
¿Bebe o fuma?
Confía en tus capacidades distintivas y sigue buscando la orientación de mentores y líderes espirituales. Toda mujer en búsqueda de empleo necesita confidentes en quienes pueda confiar y que la animen a lo largo del proceso. Dios te ha dado habilidades únicas para servir en los lugares y a las personas a las que has sido llamada.
A medida que avanzas en este proceso resiste la tentación de aparentar ser alguien que no eres solo porque crees que es lo que una iglesia u organización quiere. Si te contratan esperarán que seas otra persona, lo que te agotará y les decepcionará. Al final de una buena entrevista deberías decirte a ti misma: “Me siento segura de haberles mostrado quién soy”.
Tus experiencias y perspectivas únicas son contribuciones valiosas al mundo del ministerio y al mundo de Dios. No dejes que los obstáculos que enfrentan las mujeres te desanimen de perseguir tu llamado o de creer que tu llamado no es real.
● Construye una red sólida:
Conéctate con otras mujeres en el ministerio, asiste a conferencias, únete a un grupo de pares y a organizaciones profesionales para ampliar tu red y buscar apoyo. Esto podría significar conectarte con tu denominación, unirte a un grupo de afinidad de ministros que estén haciendo el tipo de ministerio al que te sientes llamada, o conectarte con alguna institución de enseñanza de Clínica Pastoral si te diriges hacia la capellanía.
● Aprovecha tu presencia digital:
Utiliza plataformas como LinkedIn para mostrar tus habilidades, conectarte con posibles empleadores y mantenerte actualizada sobre las tendencias ministeriales. Del mismo modo, este es un buen momento para buscarte en Google. Las personas que te entrevisten lo harán con toda seguridad. Adelántate a ellos y ve lo que tu huella digital dice de ti. Esto te permitirá abordar cualquier inquietud o limpiar tu huella.
● Considera el voluntariado o las prácticas:
Una gran manera de demostrar tu compromiso con este trabajo y con tu llamado es adquiriendo experiencia y exposición a diferentes entornos ministeriales a través de trabajo voluntario o pasantías. También mostrará a futuros empleadores que, incluso cuando no tenías un trabajo en el mundo ministerial, encontraste maneras de mantener tus habilidades frescas y afiladas.
● Sé paciente y perseverante:
El proceso de búsqueda de empleo puede llevar tiempo, a menudo más del que prevemos al empezar. Sé paciente,, persistente y mantén una actitud positiva. Si te encuentras desanimada, acude a una amiga que pueda animarte.
● Busca un mentor:
Encuentra un mentor que pueda ofrecerte orientación, apoyo y consejo a lo largo de tu trayectoria profesional.
● Confronta el rechazo:
Cuando llegue el rechazo recuerda que no es una acusación sobre quién eres, tu carácter o tu competencia. El rechazo forma parte del proceso de búsqueda de empleo. Puede haber en juego una serie de factores que desconoces. Lo único que puedes controlar es presentarte honestamente. No permitas que el rechazo te desanime. Aprende de cada experiencia y sigue avanzando.
● Prioriza tu cuidado personal:
Cuida tu salud física y mental durante el proceso de búsqueda de empleo. Realiza actividades que te ayuden a relajarte, recargarte y mantener una actitud positiva. Esto es increíblemente importante para cuando llegue el trabajo adecuado. No dejes que la búsqueda de empleo te agote tanto que no puedas darte de lleno al proceso.
● Sé flexible y mantén tu mente abierta:
Considera una gama más amplia de oportunidades en el ministerio, incluyendo puestos a tiempo parcial, trabajo independiente o iniciar tu propio ministerio. Las carreras ministeriales suelen tomar caminos tortuosos. Mantente abierta a las oportunidades que se te presenten, incluso mientras trabajas para alcanzar tus metas.
● Céntrate en tus puntos fuertes:
Resalta tus habilidades y experiencias distintivas en tu currículum, cartas de presentación y en el proceso de entrevistas. Enfatiza y vuelve a enfatizar tus puntos fuertes y cómo estos pueden contribuir al ministerio al que te estás postulando.
Mientras navegas por el desafiante panorama de la búsqueda de empleo en el ministerio, recuerda que tu perseverancia y fe son activos invaluables. Si bien el camino puede ser arduo, tu dedicación a tu llamado te fortalecerá en la búsqueda de oportunidades satisfactorias. Las barreras son reales, pero también lo es tu llamado. Acepta los retos como oportunidades de crecimiento y desarrollo personal. A medida que superes cada reto, tendrás más claro y definido quién eres y cuál es tu propósito.
Queremos servir a nuestra comunidad de habla hispana. Estamos desarrollando más recursos en español, evaluando las necesidades de la población hispana y nuestra capacidad de suplirlas correctamente.
Mientras tanto, te sugerimos algunas organizaciones que pueden ayudarte:
Christian Latina Leadership Institute https://www.christianlatinaleadershipinstitute.org/
La Familia – The Latino Network of the Cooperative Baptist Fellowship. Contacto: Rubén Ortiz https://cbf.net/congregational-ministries/latino-network/
Asociación de Educación Teológica Hispana https://aeth.info/en/