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FREE FALLS
La importancia que conlleva la conservación del planeta avala que la naturaleza preserve parajes y espacios naturales de gran belleza. Concebidas como paradigmas de la sostenibilidad, las áreas protegidas tienen como objetivo prioritario la conservación de la biodiversidad. Aun así, son diversos y variados los procesos que amenazan a estos espacios naturales: su aislamiento, el cambio climático, los incendios forestales o el incremento del uso público. Con el tiempo, la consideración ambiental de dichas áreas se ha ido ampliando hasta incorporar nuevas funciones de tipo social -vinculadas a la mejora de la calidad de vida, de la educación y la salud de las poblaciones locales-. La dimensión ambiental se propone evaluar globalmente la sostenibilidad de estos espacios y su diversidad, así como los efectos que ha tenido la declaración de áreas protegidas.
Estamos ante uno de los fenómenos más bellos de la naturaleza, y sin duda de los más espectaculares, las Cascadas emergen en el paisaje como un accidente geográfico producido por la existencia de un desnivel considerable en el cauce de un río y que, por efecto de la gravedad, provoca que el agua caiga verticalmente. Las también llamadas cataratas, cuando arrastran un gran volumen de agua, se generan por la erosión de las rocas por donde discurre la corriente –normalmente en el cauce alto de un río–, aunque también pueden tener su origen en glaciares, terremotos, volcanes o por un fuerte corrimiento de tierras. En esta ocasión, citaremos algunas de las más altas del mundo. Su belleza invita a sumergirse en sus aguas pero solo en los sueños más idílicos.
La cascada más grande del mundo se encuentra en Venezuela, concretamente en Bolivar. Kerepakupai Merú tiene una altitud de 979 metros, de los que 807 son caída continua y el resto pequeños saltos de agua. Está situada en el Parque Nacional Canaima, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994. El nom- bre con el que es conocida internacionalmente es “Salto del Ángel”, que alude a Jimmie Angel, un estadounidense que en el año 1937 corroboró su existencia y ubicación exacta al sobrevolarla en avioneta. Kerepakupai Merú es el nombre oficial, otorgado por los indígenas Pemon. Es una de las mayores atracciones turísticas de Venezuela, pero incluso en la actualidad no tiene una visibilidad sencilla ya que la zona se encuentra aislada por la espesa selva.
Las Cataratas de Tugela, Kwazulu Natal en Sudáfrica tienen la segunda caída de agua más larga del planeta, con 948 metros. Forman parte del reconocido Parque Nacional de Royal Natal, situado al pie del famoso «Anfiteatro», una pared de roca que se eleva a mil metros de altura desde el valle Tugela en cinco kilómetros de lar- go, lo que le convierte en uno de los paisajes más espectaculares de este país. Nace a partir del río Tugela, de medio kilómetro de anchura, en las montañas del Dragón conocidas como «Drakensberg». En invierno, este paisaje luce aún más, ya que las cataratas pueden aparecer congeladas formando columnas de hielo. La altura de mayor caída son 37 metros. Suponen un espectáculo único por la combinación entre la densa vegetación de la zona y los colores del arcoíris que se forman por las pequeñas gotas de humo que van cayendo. Siempre alertan sobre la importancia de no bañarse en el citado río, a no ser que se quiera conocer en primera persona a los cocodrilos que habitan en él, para el baño de manera segura, son perfectas unas pozas naturales que forman parte del ecosistema antes de las cascadas.
Son una de las siete maravillas naturales del mundo y están declaradas Patrimonio Mundial por la UNESCO. Las Cataratas Victoria, las más grandes del mundo en función de la cantidad de agua que cae de su precipicio, situadas en la frontera de Zambia y Zimbabue, constituyen un salto de agua del río Zambeze. Están ubicadas en el distrito de Livingstone, en la Provincia del Sur de Zambia y en el distrito de Hwange, en la región de Mashonalandia Occidental, de Zimbabue. En su momento de máximo caudal, alrededor de junio, este precipicio queda envuelto en neblina como resultado de la estruendosa caída de tres mil toneladas de agua por segundo. De ahí su nombre indígena “Mosi-oa-Tunya”, literalmente, “el humo que truena”. Sobre ellas se encuentra su puente, un antiguo arco de acero terminado en 1905. Tienen una anchura aproximada de 1,7 km y 108 m de alto. Se consideran un espectáculo extraordinario debido al estrecho y raro abismo en que el agua cae.
En el Parque Nacional Otishi, en la provincia de Satipo, en Perú, se halla la tercera catarata del planeta, las Tres Hermanas, con 914 metros. Comprende tres grandes saltos escalonados, que van desde una meseta hasta el río Cutivireni. La última de estas tres caídas en dirección al río no llega a unirse a este debido a que se pierde en zonas subterráneas aún inexploradas. Alrededor se encuentra un bosque con una gran diversidad biológica y un hermoso paisaje.
Tienen 900 metros de caída y están en Estados Unidos, concretamente en la isla hawaiana de Molokai, rodeada de montañas, son las Cataratas de Olo´upena Se trata de los acantilados marinos más altos del mundo y están adornados por cascadas estrechas y altas, manteniéndose constantes por las lluvias. La corriente hace que se formen una serie de saltos de colas de caballo consecutivos desde el borde del acantilado hasta su cara verde hacia el mar. A pesar de su belleza, únicamente se puede contemplar desde el aire o el mar, ya que tiene un acceso compli- cado. Algunas empresas ofrecen visitas turísticas guiadas al lugar, tanto en barco como en helicóptero, siempre que se den las condiciones climáticas oportunas.


Es un salto de agua de 895 metros de altura situado en el distrito de Cuispes, en la provincia de Bongará en Perú se encuentra la Catarata Yumbilla. Encima de la misma está la cueva de San Francisco donde se piensa que nace aunque nadie ha llegado al final de la cueva. Es relativamente pequeña en cuanto al flujo en comparación con las otras cuatro cascadas de la zona, pero es la más alta de la región. Consta de una serie de colas de caballo y hundimientos consecutivos que fueron inspeccionados por el láser del Instituto Geográfico Nacional (IGN) de Perú para atribuirle la altura. Hasta hace poco era un lugar desconocido, pero actualmente tiene numerosas visitas.
Vinnufallet en Noruega es la catarata más alta de Europa con una caída total de 865 metros. También se la conoce con los nombres de Vinnufossen o Vinnufjellfossen. Los nombres aluden a como las denominan los locales, así llaman, a la cascada Vinnu y a la parte superior (la primera gota) Vinnufallet. El arroyo sale de una grieta estrecha en la parte superior de la pared del valle hundiéndose unos 179 metros antes de impactar en una plataforma estrecha. Finalmente, cuando la corriente se acerca al fondo del valle hace una pausa adecuada y su pendiente se alivia brevemente mientras cae por la ladera boscosa, después reanuda rápidamente su antiguo ritmo vertiginoso velando por otros 91 metros más o menos verticales. Es la quinta caída individual más alta de la tierra.
El arroyo Skorga en Noruega drena de una cuenca que alberga dos pequeños lagos que se alimentan parcialmente con agua derretida del glaciar Kald. Al igual que el vecino Vinnufallet, cuando el arroyo cruza la inmensa pared del valle, cae en cascada por una larga catarata de estilo cola de caballo, pero a diferencia de Vinnu, la caída completa no se puede ver tan fácilmente desde el fondo del valle. Skorga está a la par con Vinnufallet en términos de altura, pero donde las dos caídas se diferencian es en su forma y consistencia: Skorga, con una altura de 864 metros, es una cascada sustancialmente más estrecha gracias al volumen mucho más pequeño de hielo glacial que alimenta su cuenca.
En Hawai, Pu´uka´oku Falls, con 840 metros, ocupan el octavo lugar, y se encuentran ubicadas en la costa norte de Moloka’i. Caen sobre los acantilados marinos. Como el área se encuentra aislada a lo largo de esta costa escarpada, el acceso más fácil consiste en tomar un helicóptero en un vuelo de 45 minutos desde Maui.

De la misma manera que otras cascadas a lo largo de esta costa, han tallado una profunda fisura en el poroso basalto volcánico del acantilado. Esto añade dificultad a la hora de ver las cascadas más jóvenes.
Mattenbachfälle situada en Berna, Suiza, tiene una altura aproximada de 840 metros. El río Mattenbach cae en cascada en múltiples etapas. El flujo puede variar mucho dependiendo de la estación, pero, en época veraniega tiene un volumen constante aunque no muy denso. El valle de Lauterbrunnen, lugar donde se encuentra esta cascada, es el principal valle de las cascadas en Suiza. Significa «únicas fuentes», refiriéndose a las corrientes de agua que descienden de las montañas, hay un total de setenta y dos.
En Canadá, James Bruce Falls, es la catarata más alta de cuantas fluyen en el Parque Provincial Marino Princesa Louisa. Está alimentada por un pequeño remanente glacial situado a más de 1.524 metros del nivel del mar, que probablemente sostenga un volumen constante de agua durante el año. Sin embargo, debido a la pequeña área de drenaje, la densidad de agua presente en las cataratas es insignificante. Tiene 840 metros de altura y no se puede alcanzar por carretera, solo mediante una combinación de bote y avión.
Las de Iguazu, no son las más altas, pero si dignas de ser nombradas y mucho más consideradas por su notoriedad. Son un conjunto de cataratas que se localizan en el río Iguazú, entre la ciudad de Puerto Iguazú, Misiones, Argentina, y Foz do Iguaçu, estado de Paraná en Brasil. Están formadas por 275 saltos, el ochenta por ciento de ellos se ubican del lado argentino. Un espectáculo aparte es su salto de mayor caudal y, con ochenta metros, también el más alto, la Garganta del Diablo, el cual se puede disfrutar en toda su majestuosidad desde solo cincuenta metros, recorriendo las pasarelas que parten desde Puerto Canoas, al que se llega utilizando el servicio de trenes ecológicos. Por este salto pasa la frontera entre ambos países.
Browne Falls Southland en Nueva Zelanda es su cascada más alta. Mide 836 metros de altura y el agua cae por un curso empinado y sinuoso que desemboca en Doubtful Sound. Se encuentra dentro del Parque Nacional de Fiordland. Las caídas tienen una pendiente bastante constante. Las cataratas caen del lago Browne que está a 836 metros del nivel del mar.

