EL CEBÚ • Enero - Febrero 2015
Internacional y otros en actual estado de desarrollo y crecimiento como el caso del sintético africano Bonsmara (50% Afrikander, 25% Shorthorn, 25% Hereford). En Colombia, no hace falta mencionar al Gyr, al Guzerat ni al Brahman, teniendo en cuenta su amplia difusión y al conocimiento que se tiene de estas razas. Índicos en Australia
En el caso del hinduismo y otras religiones de la India, de dar estatus de divinidad a las vacas, prohibir el sacrificio de vacunos y comer su carne, fue determinado en la antigüedad por las altas castas religiosas Priorizaron el consumo de leche y la producción de abonos naturales para sus cultivos, asegurando la provisión constante a lo largo del tiempo. La razón de la divinidad de la vaca está basada en su producción de leche (producto también sagrado) y cualquier daño es penalizado por ley. Para nuestra visión occidental de las cosas, podríamos inferir que para sustentar dicha ley, se le agregaron otras razones místicas como la reencarnación sucesiva de los muertos en forma de vacunos, y la reencarnación misma del dios Brahma en cada vaca para proveer alimento a la población. Solo la casta de los brahamanes tiene el permiso
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divino de sacrificar bovinos con fines ceremoniales. Los índicos por el mundo Existe una gran cantidad de razas indopakistaníes puras; algunos estiman en 50 y otros en más de 80, pero muchas de ellas en cantidades tan pequeñas que están en riesgo de extinción, y en lugares tan remotos y aislados como el Archipiélago Malayo, Indonesia y algunos lugares tribales de África, continente donde el más representativo cebuíno es el Afrikander. Lo cierto es que de ellas, las de mayor impacto mundial han sido las preferidas por los estudiosos generadores de cruzamientos notables
Los reyes del trópico colombiano
Curiosamente la historia ganadera de los índicos en Australia tiene un origen similar a la estadounidense. La severidad del clima de los territorios de Queensland, al norte, diezmaba los hatos europeos; un grupo de ganaderos decidió a principios de 1900 probar con algunos animales índicos existentes en un zoológico de Melbourne. En resumidas cuentas, después de comprobar su adaptabilidad, decidieron apostar a ellos e importaron reproductores Brahman de ranchos texanos, dando comienzo a una de las ganaderías más prósperas de la actualidad. El Brahman arribó en 1930, siendo una proeza su largo traslado desde los ranchos texanos hasta las tórridas regiones del norte australiano; es importante considerar que para esa época era un país escasamente poblado y económicamente muy distante de lo que es en la actualidad. La avanzada ganadera estaba en manos de auténticos pioneros con una gran visión y un amplio territorio disponible, carente de herramientas y de tecnología, la mayor parte poco apto para los bovinos europeos. Allí llegó el Brahman y dio su parte genética para la creación del Doughtmaster (literalmente traducido “Maestro de la Sequía”), compuesto en partes iguales por genes Brahman/ Shorthorn. En 1954 hicieron otra prueba, cruzaron Afrikander con Shorthorn y Hereford (50, 25 y 25 % respectivamente). Obtuvieron la sintética raza Belmont Red, de rápido crecimiento en los hatos. Otra raza australiana es el Greyman, cruce de ganado galés Murray Grey x Brahman en porcentaje menor. Como si fuese corta la lista de cócteles, también han logrado la raza Autralian Friesian Sahiwal producto de la cruza de Holstein x Sahiwal.