La reforma laboral aprobada en el Congreso de la Unión (dictamen aprobado el 8 de Noviembre de 2012), cuyo texto va a publicar la Cámara de Senadores en lo general, es la coronación de tres décadas de impunidad de parte de la clase patronal de nuestro país, y constituye además la legalización de una serie de practicas patronales ilegales y nocivas, permitiéndose con esto la legalización de la sobre explotación de la fuerza de trabajo de millones de obreros y trabajadores de nuestro país.