TALLER DE TRANSFORMACIÓN PARTICIPATIVA

TALLER DE TRANSFORMACIÓN PARTICIPATIVA

Lugares:

Jardines del Cura y Huerto Comunitario en el Barrio del Cementerio 03006 Alicante

Objetivo:

Asistentes:

Realizar la transformación de dos parcelas identificadas en el Barrio a través de la restauración eco-social participativa. ASOCIACIONES: > ASFE / Quatorze (organizadores) > G.R.A.M.A. (Grup de Participantes: 32 personas: 13 mujeres (41%) y 19 hombres (59%), 15 de ellas del Barrio de Cementerio.

Resumen de las jornadas:

Durante los meses de septiembre y octubre se realizaron un total de 12 jornadas participativas para el desarrollo de dos espacios comunitarios, la transformación progresiva del huerto comunitario ya existente y la creación de un nuevo espacio, los jardines del cura. Estas jornadas contaron con la participación de 32 personas voluntarias, tanto de dentro como de fuera del Barrio. En función de las acciones definidas y de los recursos movilizados en las fases anteriores, se plantearon jornadas de transformación participativa con vecinos/as voluntarios/as de todas las edades. La entidad colaboradora GRAMA se encargó de la ejecución material de estas transformaciones, asumiendo el acompañamiento de los trabajos voluntarios por parte del vecindario. Arquitectura Sin Fronteras y Quatorze se encargararon de la coordinación y de seguir animando el debate durante estas jornadas, aprovechando el poder de la transformación del espacio como medio para proyectarse hacia un futuro en positivo y una visión comunitaria del mismo.

HUERTO COMUNITARIO

Con la llegada del otoño, en el huerto del Barrio del Cementerio arrancamos motores de nuevo tras recoger los frutos del verano. Se iniciaron los trabajos de limpieza de bancales, el abono con estiércol de caballo (donado por un vecino de la zona) y el llenado de bidones de 1 m3 (tres por bancal) con camión cisterna para dejarlos en las mejores condiciones para la nueva temporada y que no falte de nada. Y con todo listo, se llevó a cabo una jornada de trabajo de preparación y siembra de los bancales para la nueva temporada otoño-invierno. Fueron jornadas con mucha asistencia de voluntarios dirigidos por el equipo de GRAMA, y especialmente significativa la asistencia e interés de los más pequeños que resultaron perfectos hortelanas y hortelanos en potencia.

Gracias a la aportación de semillas del Banc de Llavors de l'Alacantí, de la mano de su voluntario Hans, que nos acompañó a lo largo de la jornada, se sembraron habas, guisantes, patatas, ajos y mizuna. Además se plantaron cebollas, puerros, coliflor y brócoli. Todas las verduras de temporada en curso, para en unos meses poder comerlas en crudo, a la plancha o asadas. Contentos por la jornada, el grupo vecinal pasa este ciclo con el compromiso de cuidar bien el huerto y esperar lo que nos de la tierra.

LOS JARDINES DEL CURA

Durante 6 sesiones, el vecindario de la zona conocida como Barrio del Cura, barriada cercana a la entrada del cementerio, trabaja para generar un nuevo espacio común orientado a sus habitantes más pequeños.

Durante estas primeras jornadas, han pasado más de 30 personas, voluntarias de todas las edades, de dentro y fuera del barrio. Se comenzó por una limpieza general y el desmontaje de dos de las tres chabolas que había en la zona, deshabitadas gracias a que las familias residentes han podido acceder a una vivienda. Tras esto, el proyecto comunitario se ha centrado en crear un espacio seguro y ajardinado para el juego de niños y niñas, y la producción de alimentos locales. Por ahora, la misión principal es generar una barrera que limite el paso de vehículos, mediante la colocación de palets de madera enterrados y de neumáticos recuperados, dando una nueva vida a estos productos y mejorando la seguridad de este entorno, frecuentado por medio centenar de menores. Además, una revestimiento con pintura blanca frenará la degradación de estos materiales, que aunque no están pensados como elementos de larga duración, podrán servir durante años a la comunidad que promueve el espacio e inspirar intervenciones municipales de obra pública.

Una actividad participativa, convivial y festiva, que no deja de ser dura; pico, pala, motopico y demás herramientas para perforar un terreno sobre el que se han acumulado desechos durante años, y que el vecindario ha querido limpiar y convertir en un espacio digno. Una obra empezada con ilusión, inspirada por el huerto comunitario que sigue consolidándose en el nº 20 del Vial de los Cipreses. Un frente más abierto a la participación de todas las personas atraídas por la iniciativa.