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El principio de carácter

El principio bíblico del carácter nos enseña que la verdadera belleza y fortaleza se encuentran en un corazón correcto y una vida justa, y no en las posesiones o apariencia exterior. Además, nos enseña que Dios busca personas con un corazón sincero y humilde, y que el carácter se desarrolla a través de la fe, la obediencia y la perseverancia. Finalmente, nos enseña que el fruto del Espíritu es el resultado del desarrollo del carácter cristiano, lo que significa que el carácter es esencial para una vida cristiana saludable y fructífera. Dios busca personas con un corazón sincero y humilde. El carácter se desarrolla a través de la fe, la obediencia y la perseverancia.

Ejemplo

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Un ejemplo del principio bíblico del carácter se puede encontrar en la vida del rey David, "según el corazón de Dios" (1 Samuel 13:14), lo que significa que tenía un corazón recto y obediente a Dios.

Aplicación

El carácter es aquello que nos permite tomar nuestras decisiones, y realizar todos los actos de nuestra vida de forma correcta o incorrecta. Con forme pasa el tiempo el carácter cambia y se moldea de acuerdo a las experiencias vividas. El carácter es esa fuerza interna que nos ayuda a salir adelante ante las distintos problemas que podamos tener. Sin duda alguna estas características nos definen ante las personas, pues conforme nos expresamos, o le hablamos a las demás personas, así nos perciben. Muchas personas no saben controlar el carácter en su vida cotidiana, y se la pasan mal, no importa donde estén. Es algo tan interesante ver que nos relacionamos con personas que son afines a nuestro carácter, por ende es de vital importancia manejar nuestro comportamiento con los demás de la mejor manera, siendo cortes, amable, colaborador y otras cualidades que nos ayuden a reflejar la calidad de personas que somos a través del ejemplo que nuestro carácter refleje.

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