ARTÍCULOS DE REVISIÓN
de los corticoides la 1, práctica REV MEDManejo UNIV NAVARRA/VOL 53,enNº 2009,clínica 9-18
Manejo de los corticoides en la práctica clínica J. C. Galofré Departamento de Endocrinología y Nutrición. Clínica Universidad de Navarra. Facultad de Medicina. Universidad de Navarra
Correspondencia: J. C. Galofré Departamento de Endocrinología y Nutrición Clínica Universidad de Navarra Tel.: 948 255 400 (jcgalofre@unav.es)
Resumen
Summary
Los corticoides son ampliamente utilizados por muy diversas especialidades. Sin embargo su uso no está exento de complejidad. El manejo adecuado de estos fármacos requiere tener nociones básicas de fisiopatología y conocer bien las características del corticoide que se pretende emplear: sus equivalencias, vida media en sangre, potencia glucocorticoide y mineralcorticoide relativa o tipo de acción tisular del preparado. Los efectos secundarios son frecuentes y pueden llegar a ser graves, por lo que con frecuencia deben tomarse medidas para minimizarlos. En los casos en los que se administren dosis suprafisiológicas debe evaluarse adecuadamente el estado del eje hipofiso-adrenal al término del tratamiento.
Corticoids are massively utilised by specialists in different areas. However, their use is not free of complexity. The adequate management of these compounds involves having basic notions of pathophysiology and familiarity with the characteristics of the particular corticoid that is going to be used. This knowledge should include the equivalences between the different corticoids, their plasma half life, the relative biological activity or their mineral- or gluco- corticoid action. Corticoid-related side effects are a frequent complication and may be severe; therefore it is usually necessary to associate prophylactic measures in order to minimize them. The pituitary-adrenal axis should be adequately assessed at the end of the treatment when supra-physiologic doses are used.
Palabras clave:
Key words:
Corticoides, tratamiento, efectos secundarios, manejo, suprarrenal, Cushing.
1. Introducción Los corticoides, desde hace décadas, son masivamente empleados por los más diversos especialistas ya que son altamente eficaces y producen beneficios bien conocidos en numerosas situaciones clínicas. Sin embargo muchos de los usos de los corticoides son empíricos, sin que se haya estudiado su mecanismo de acción, la dosis eficaz, o su eficacia clínica. En ocasiones se ha comprobado, mediante ensayos clínicos, que el fármaco carecía de la eficacia que originalmente se le atribuía en el tratamiento de enfermedades en las que se han empleado de forma habitual1. Este hecho tiene notable importancia dados los abundantes y graves efectos secundarios que produce la corticoterapia y que, por otro lado, muchas veces no se tiene en cuenta.
2. Fisiología A. Síntesis de hormonas suprarrenales Los esteroides de origen suprarrenal son sintetizados a partir del colesterol. Existen tres vías independientes que generan mineralcorticoides (aldosterona), glucocorticoides (cortisol) y hormonas sexuales (testosterona)2 (Figura 1). La secreción normal de la hormona corticotropa hipofisaria (ACTH) y por tanto de los glucocorticoides, sigue un patrón circadiano y un ritmo pulsátil ultradiano (Figura 2). El
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Corticoids, treatment, side effects, management, adrenal, Cushing.
regulador mas potente del “reloj” adrenal es el ciclo día/noche. Parece que hay sistemas de regulación independientes para los pulsos y para el ritmo circadiano. Las alteraciones en el ritmo circadiano se han asociado a diversos procesos patológicos como enfermedades cardiovasculares, hipertensión arterial, síndrome metabólico, desórdenes gastrointestinales, trastornos afectivos o cáncer3. La secreción normal de cortisol (o hidrocortisona) oscila entre 8 y 15 mg/d (lo que equivale a unos 27 µmol/d o 5,7 mg/ m2/d) (4). La glándula suprarrenal produce alrededor de 150 µg de aldosterona diarios, mientras que la síntesis de corticosterona (acetato de cortisona) asciende a 2 mg/d. B. Transporte plasmático Sólo el 10% del cortisol circula en forma libre. El resto se une a las proteínas transportadoras, fundamentalmente albúmina y CBG. Por ello, toda situación que aumente la síntesis hepática de CBG, como la diabetes mellitus, el hipertiroidismo o el tratamiento con esteroides sexuales (como los anticonceptivos orales), se traducirá en una mayor concentración en sangre de cortisol total. Por el contrario, valores bajos de CBG se pueden encontrar en situaciones como enfermedad hepática, síndrome nefrótico, mieloma múltiple, hipotiroidismo y obesidad. La corticosterona circula en la sangre a una concentración 10-20 veces menor que el cortisol. La vida media del cortisol circulante varia entre 70 y 120 minutos (Tabla 1).
REV MED UNIV NAVARRA/VOL 53, Nº 1, 2009, 9-18
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