Oye Mamá

Oye mamรก

Un día como cualquier otro Mateo estaba jugando con sus dinosaurios, cuando su mamá le dijo: “Mateo, acompáñame al mercado”.

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Mientras su mamá compraba fruta, Mateo se distrajo con alguien y le dijo a su mamá: “Oye mamá, ¿qué le pasó a esa niña?”

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Al día siguiente en la escuela, había un rumor sobre una niña nueva, Mateo se preguntaba quién sería...

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“Hola niños, les presento a su nueva compañera” 4

Todos los niños, incluyendo a Mateo, quedaron sorprendidos, no podían dejar de mirarla. Pero Mateo ya la conocía, era la niña del mercado.

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Hola, me llamo Frida ¿y tú?

Mateo no le contesta, pero Frida vuelve a insistir: tú eres el niño del mercado, ¿no?

Mateo sigue sin contestarle.

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Frida dejó de insistir y decidió ponerse a trabajar. ¿Ayudas a Frida a encontrar las siguientes palabras en su sopa de letras? ● ● ● ● ●

AMOR AYUDAR EQUIDAD INCLUSIÓN RESPETO

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A la hora del recreo, todos salen a jugar con Frida menos Mateo porque recordó lo que le había dicho su mamá.

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Mateo:”Oye mamá, ¿te acuerdas de la niña del mercado?”

Mamá: ¿Qué hay con ella?

Mateo: Es la niña nueva de mi salón Mamá: ¿Y le hablaste?

Mateo: No… Mamá: Qué bueno, no hay que acercarse a esas personas.

Mateo: ¿Por qué?

Mamá: Porque no y no más preguntas.

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Mateo empezó a alejarse y no entendía porqué los demás se juntaban con Frida.

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Mateo se acerca a sus amigos y les pregunta: “¿Puedo jugar?”

Julia contesta: sí, Frida nos va a enseñar un juego.

Mateo: ¿Por qué juegan con ella?

Julia: ¿Por qué no?

Mateo: Pues… mi mamá me dijo que no estaba bien.

Julia: Pues tu mamá está mal, Frida es como todos nosotros.

Mateo está confundido Julia: Ya mejor vete de aquí Mateo.

Mateo se aleja llorando.

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Mateo se sienta solo y de pronto llega Frida.

Frida: ¿Por qué lloras?

Mateo: Es tu culpa Frida: ¿Mi culpa?

Mateo: Sí, ahora ya nadie quiere jugar conmigo.

Frida: Tú puedes jugar conmigo si quieres.

Mateo: se aleja y sigue llorando.

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Mateo se queda llorando cuando mĂĄs niĂąos llegan.

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Frida se da cuenta y corre a defender a Mateo Frida: dĂŠjenlo en paz, todos podemos llorar.

Los demĂĄs niĂąos se callan y Frida le extiende un brazo para levantarlo.

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Mateo: ¿Por qué eres tan buena conmigo?

Frida: Todos tenemos días difíciles.

Mateo: Gracias Frida.

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A la salida Frida y Mateo estaban platicando cuando de pronto se escucha: “¿Mateo qué estás haciendo?! aléjate de ella” Mateo: No mamá, ella es mi amiga, se llama Frida.

Mamá: ¿Por qué tienes los ojos hinchados?

Mateo: Me hicieron llorar pero Frida me defendió.

Mamá: ¿ELLA? Mateo: Sí, es muy buena onda.

Mamá: Bueno, ya vámonos.

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Ya estando en el auto la mamá de Mateo le pregunta: ¿Por qué te hicieron llorar?

Mateo: Nadie quería jugar conmigo.

Mamá: ¿Por qué?

Mateo: Porque tú me dijiste que no debía jugar con Frida.

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La mamá de Mateo se dio cuenta lo equivocada que estaba y cómo eso afectó a Mateo.

Mamá: Perdón hijo, todo esto fue mi culpa, nunca debí decirte que no te juntaras con Frida. Todos merecemos respeto y un trato digno.

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FIN