Irunberri 2010

Page 1

SARRERA CRONICA OFICIAL DE LOS HECHOS DUDAS, FALSEDADES E INTERROGANTES BIOGRAFIA DE JON Y SUSANA ENTREVISTA A GERMAN RECORTES DE PRENSA


SARRERA Errotxapetik txosten hau aurkeztu nahi dugu, ahazmenak ez dezan errealitatea gailendu asmoz. Euskal Herri osoa, eta modu berezian Andoain, O単ati eta Errotxapea astindu zituen gertakaria ekarri nahi dugu gogora. Estatu espainiarraren botere guztiak bertsio ofiziala etengabe defendatu zuten, guardia zibilatik hasita, barne ministeritza, komunikabideak eta epailetzatik pasatuz, klase politikoraino. Bertsio ofiziala sinesgarritasun gabe utzi arren, balio gutxi izan zuten senideen abokatuek aurkeztutako frogak. Gure herriaren historia hurbila osatzen duten atal ilun hauek gogoraraztea garrantzi handikoa da, ahazmenean eror ez daitezen. Are gutxiago estatuak gerra zikina erabiltzen jarraitzen duen honetan. 1990.eko ekainaren 25ean, Irunberriko harrobiaren paraje hunkigarri haietan gertatutakoaz geroztik 20 urtez ibili dira gezurretan eta informazioa desitsuratzen, kasualitatez, edo agian ez, ETAko komando batek eta guardia zibilaren patruila batek topo egin zuten egun hartatik geroztik. Bertsio ofizialaren arabera, gertakariak, ETAko militanteen eta guardia zibilaren arteko tiroketa batera murrizten dira, hauek ustekabean harrapatu zituztenean ohiko patruila batek. Gertaera hauen ondorioz guardia zibilaren sargento bat hilik suertatu zen, eta hurrengo goizean ETAko bi militanteen gorpuak agertu ziren. Hauek bere buruaz beste egin zutela dio bertsio ofizialak, indar polizilengatik inguratuta zeudela ikusi zutenean, larriki zaurituta azaldu zen hirugarren militante batek lagunduta. Gertakari haietaz geroztik, eta Euskal Herrian hainbestetan izan den bezala, bertsio ofizialak alde ilun gehiegi eta erantzun gabeko galdera asko uzten zituen mahaigainean. Arrazoi honengatik euskal gizartearen sektore aunitzek ez zuten sinistu estatuak esandakoa, Susana Arregi eta Jon Lizarralde ejekutatu aurretik basatiki torturatuak izan zirenaren mezua edatzen hasi zelarik.

1990.eko ekaineko egun hartan benetan gertatutakoa oraindik ikusteko dago. Baina txosten honen bidez jendeak gertatutakoaz bere ondorioak atera ditzan gura dugu, inolaz ez ahazteko.


INTRODUCCION Este dossier se presenta desde el barrio para intentar evitar que el olvido venza a la realidad. Se pretende así recordar unos hechos que convulsionaron a toda Euskal Herria y especialmente a Andoain, Oñati y a Errotxapea-Iruña. De cómo la “maquinaria” del Estado se alinea para ocultar unos hechos y tergiversar toda la realidad. Todos los poderes del Estado defendieron la versión oficial. Empezando por la Guardia Civil, el Ministerio del Interior, pasando por los medios de comunicación, la judicatura y acabando por la clase política. De poco sirvieron las diferentes pruebas que presentaron los abogados de los familiares de los fallecidos, que dejaban a la versión oficial sin credibilidad. Vemos que es importante que estos capítulos oscuros de la historia reciente de Euskal Herria no queden en el olvido. Más, cuando las razones que los provocaron siguen vigentes y más aun cuando la guerra sucia practicada por el Estado sigue activa. 20 años de mentiras y desinformación que empezaron aquel 25 de junio de 1990 en el sobrecogedor paisaje de la Foz de Lumbier, en donde la casualidad, o tal vez no, quiso que un comando de ETA y una patrulla de la Guardia Civil se encontraran. Los hechos, según la versión oficial, se limitaron a un enfrentamiento armado entre fuerzas de la Guardia Civil e integrantes de un comando de ETA, que fueron “sorprendidos” por aquéllos durante una patrulla rutinaria. A consecuencia de estos hechos, un sargento de la Guardia Civil resultó muerto en el tiroteo, y dos militantes de ETA aparecieron muertos a la mañana siguiente. Ambos se habrían suicidado al verse atrapados por las fuerzas policiales, ayudados por un tercer miembro de ETA que fue capturado gravemente herido. A partir de aquí, y como ha sido y esta siendo habitual en toda la historia de Euskal Herria, la versión oficial de los hechos dejaba muchos puntos oscuros al igual que dejaba muchas preguntas sin respuesta. Por ello, esta versión oficial no fue creída por amplios sectores de la sociedad vasca, extendiéndose la posibilidad de que Susana Arregi y Jon Lizarralde fueran torturados antes de ser ejecutados por la Guardia Civil. La realidad exacta de lo que paso aquel 25 de junio de 1990 es todavía una incógnita. Pero con este pequeño dossier pretendemos que la gente saque sus propias conclusiones de lo que realmente sucedió, que no olvide y que se alimente de una versión critica.


HECHOS SEGÚN LA VERSION OFICIAL

CRONOLOGÍA OFICIAL DE SUCESOS: 25 de junio • • • • • • • • • • • • •

12:00 - La pareja de la Guardia Civil llega a la Foz de Lumbier 12:10 - Localizan junto al río un hombre con unas bolsas y el sargento baja a identificarle 12:15 - Llega la patrulla de Sangüesa y Lizarralde dispara contra el sargento. Tiroteo y huida. 12:20 - Los guardias se van a trasladar a un herido y dan la voz de alarma 12:45 - Llegan los primeros efectivos de la Guardia Civil. Un helicóptero patrulla a la zona 12:55 - Los guardias que se fueron regresan con ayuda médica 13:00 - Las asistencias confirman la muerte del sargento Hervás 13:15 - Llegan los GAR y se acordona la zona. Comienza la batida 14:25 - Llegan los perros para el rastreo 15:10 - Se levanta el cadáver del sargento Hervás y los perros se incorporan a la batida 20:00 - Algunos vecinos de Lumbier afirman haber oído un tiroteo 20:45 - Localizan gravemente herido a Germán Rubenach. Es trasladado a un centro hospitalario 21:00 - Se suspenden los rastreos hasta la mañana siguiente. La Foz sigue acordonada.

26 de junio • • • • •

07:00 - Se reanudan las labores de búsqueda de los miembros de ETA. 08:45 - Aparecen los cadáveres de Jon Lizarralde y Susana Arregi con disparos en la cabeza 09:00 - Se comunica el hallazgo de los cuerpos a la juez titular 10:30 - Se persona en el lugar de los hechos la juez de Aoiz María Jesús Erroba 11:30 - Se produce el levantamiento de los cadáveres


Los Sucesos de la Foz de Lumbier se produjeron a lo largo de todo el día 25 de junio de 1990 en la Foz de Irunberri, un cañón formado por el río Irati en Nafarroa, situado a 40 km de Iruña, al que sólo se puede acceder a través de dos túneles, uno en dirección a Lumbier y otro en dirección Liédena. La garganta está delimitada por escarpadas paredes de roca que lo convierten en una “ratonera” y que a la postre resultó determinante para los sucesos de 1990.

Esa mañana, la patrulla del cuartel de Lumbier formada por el sargento José Luis Hervás Mañas (Yeste, Albacete, 1955 - Lumbier, 1990) y el cabo primero Domingo Ortega Torres se aproximó, dirección Liédena, en el Nissan Patrol al paraje de la Foz. Su cometido era la prevención de pequeños hurtos que se solían producir en la zona a turistas que dejaban su vehículo en las proximidades. A las 12 del mediodía, y al observar una persona (Lizarralde) con unas bolsas sospechosas a la orilla del río, el sargento descendió para su identificación, quedándose junto al vehículo el Cabo primero. En ese momento, llegaron otras dos personas (Rubenach y Arregi), también con bolsas de deporte, que se encontraban próximas. Mientras el cabo observa desde arriba cómo conversan, llega otro Nissan Patrol de la Guardia Civil, ocupado por el sargento José Domínguez Peris y el agente Benito Rivero Petronila, ambos del cuartel de Sangüesa. Cuando Ortega avisa a Hervás de la llegada de la patrulla, se escuchan dos disparos y el sargento, que se encontraba identificando a estas tres personas, se desploma inmediatamente. Los guardias que se encontraban en la parte superior del río comienzan a descender y se entabla un tiroteo con los activistas, que huyen corriendo río arriba. A consecuencia de los disparos, son heridos Rubenach en una pierna y el sargento Domínguez en la cadera. En el


momento de su huida, se cruzan con dos turistas holandeses que se encontraban en la zona. Sin comprobar el estado del sargento Hervás, los demás guardias abandonan la zona con los Nissan para trasladar al sargento Domínguez al hospital de Sangüesa, y en el camino dan la alarma por radio. Llegan al lugar de los hechos más guardias y personal sanitario, que constatan el fallecimiento de José Luis Hervás y la ausencia de su arma reglamentaria. Sobre las 13h. llegaron las fuerzas del Grupo Antiterrorista Rural, que comenzaron una batida por la zona utilizando un helicóptero y auxiliados por perros policía y detectores de explosivos. A las 20:45h. localizan entre la maleza a Germán Rubenach, que se encuentra gravemente herido por varios disparos, y es trasladado a un centro hospitalario. Al caer la noche, las fuerzas especiales cesan el reconocimiento y acordonan las salidas de la Foz. Varios vecinos de Lumbier afirman haber visto atravesar el pueblo a gran velocidad a un Seat 127 rojo ocupado por dos personas. Por la mañana se reanudan las batidas, y a las 8:45h. aparecen en una zona próxima a donde apareció Rubenach los cadáveres de Susana Arregi y Jon Lizarralde, que presentan disparos en la cabeza. Junto al cadáver de Arregi se encontraba la pistola Star del sargento José Luis Hervás. Ambos presentaban signos evidentes de llevar varias horas muertos, y Lizarralde se encontraba con medio cuerpo dentro del agua. El rastreo de la zona deparó la aparición de tres casquillos de bala, dos correspondientes a la pistola del sargento y otro de 9mm a la de Lizarralde. Posteriormente se encontró otro del arma reglamentaria del sargento Hervás. A las 11:30h. se procedió al levantamiento de los cadáveres.


INVESTIGACION Las autopsias practicadas en primera instancia a los dos miembros de ETA fallecidos, indicaron que Lizarralde presentaba una herida con traumatismo craneoencefálico en la cabeza causada por arma de fuego y con trayectoria de derecha a izquierda realizado "en contacto con la piel", avalando la teoría del suicidio. Por su parte, Susana Arregi presentaba un disparo de pistola en la cabeza realizado prácticamente en contacto con la piel, con trayectoria de izquierda a derecha y un segundo efectuado a unos 30 centímetros de distancia. Se señaló como hipótesis más probable que hubiera sido disparada por otra persona, sin descartar la posibilidad del suicidio. Lo único que pudieron precisar es que murieron entre las doce de la mañana y las seis de la tarde. Por su parte, Germán Rubenach, resultó gravemente herido. Presentaba un disparo en la pierna y otro en la cabeza, con una bala que le entró por el maxilar inferior y le salió junto al ojo izquierdo. La investigación oficial concluyó que, al verse rodeados por los GAR y sin salida posible del enclave, los miembros de ETA optaron por el suicidio colectivo. Lizarralde murió en el acto al dispararse un tiro en la cabeza con su propia arma, una Browning de 9mm con la que también se efectuaron los disparos que acabaron con el sargento Hervás. Por su parte, Arregi y Rubenach habrían acordado que fuera éste quien disparase sobre ambos, con la pistola sustraída al sargento, falleciendo Arregi en el acto y quedando malherido Rubenach. En el juicio a Germán Rubenach, celebrado en 1995, como presunto autor de los disparos sobre su compañera Susana Arregi, la Audiencia Nacional absolvió a German al encontrar "serias y fundadas dudas" sobre su autoría. Jamás se supo nada del Seat 127 que, "con dos personas armadas" según varios testigos, abandonó a gran velocidad el lugar de los hechos. Aunque se supuso que se trataba de integrantes del comando, nunca se pudo demostrar.

José Luis Corcuera, Ministro de Interior: "Señorías, no vengo a demostrar la inocencia de la Guardia Civil. Esta la supongo, como corresponde a un Estado de derecho. Serán los que opinen lo contrario quienes deban aportar las pruebas necesarias.


FUNERALES Jon Lizarralde y Susana Arregi fueron enterrados el 28 de junio en sus localidades de origen, Andoain y Oñati, respectivamente, en una jornada de tensión e incidentes. Miles de ciudadanos vascos despidieron a estos dos militantes. En la localidad natal de Susana, Oñati, la Ertzantza cargó contra una manifestación que recorría sus calles, y en la que participaban miles de personas.

Herri Batasuna, intentó que Jon Lizarralde y Susana Arregi fueran declarados hijos predilectos de sus respectivos ayuntamientos -propuesta que fue rechazada por los plenos de ambos- y que sus respectivas capillas ardientes se instalaran en los salones de actos de las casas consistoriales, cosa que al final si se consiguió. Fueron plenos de gran tensión. El alcalde de Andoain fue calificado de traidor por parte de sus vecinos.

La coordinadora KAS convocó una huelga general en Andoain y Oñati para el 27 de junio, que fue ampliamente respaldada.


DUDAS, FALSEDADES E INTERROGANTES Como hemos leído en la crónica oficial de los hechos, lo ocurrido aquel día se limita a un enfrentamiento armado entre miembros de ETA y la Guardia Civil y a un posterior suicidio colectivo de los activistas de ETA. Versión que les valió. Pero si indagamos un poco en esta versión oficial y si vemos las pruebas que la defensa de los tres miembros de ETA presentó ante los medios de comunicación y ante la jueza que llevaba el caso, podemos ver que lo que realmente sucedió aquel día no se ajustaba a esa versión oficial. Son muchas las falsedades y dudas que se nos plantean y que a continuación vamos a desglosar.

La primera falsedad que se nos plantea es si en realidad fue un encuentro casual, ¿qué hacían agentes del servicio de información en la Foz en esos primeros momentos del suceso? Lo del suicidio colectivo de los miembros de ETA también dejo mucho que hablar: Desde el Ministerio del Interior intentaron de alguna manera justificar este suicidio, argumentando que esta práctica era algo poco menos que habitual entre los miembros de ETA cuando se veían acorralados por las fuerzas policiales y evitar así ser detenidos e interrogados. Incluso llegaron a decir de la existencia de un supuesto manual de ETA al respecto. Esta práctica del suicidio colectivo fue incluso cuestionada por el entonces Lehendakari José Antonio Ardanza. Por supuesto, el manual de ETA nunca ha aparecido. En la cronología de los hechos vemos que ese día 25 de junio, la Guardia Civil suspendió la búsqueda poco después de encontrar malherido a Germán a las 20.45h. Argumentaron falta de luz para dejar la búsqueda para la mañana siguiente. Cómo es posible que un 25 de junio, que es cuando anochece mas tarde, tengan que posponer la búsqueda a las 21:00h. por falta de luz. Sobre todo si tenían la certeza que Jon y Susana aun estaban en la Foz. También es sorprendente que un despliegue tal de efectivos y medios, (estamos hablando de cerca de 500 agentes, helicóptero, perros de rastreo...) sean incapaces de encontrar a alguien, cuando se supone que desde las 12:15h de la mañana del 25 de junio allí había dos personas muertas y una herida de gravedad. 20 horas de cerco que no dieron sus frutos. Jon y Susana fueron encontrados a la mañana siguiente a escasos 15 metros de donde German fue detenido. Ahora bien, si en realidad fueron encontrados esa mañana, ¿porqué las fotos realizadas a estos dos cuerpos están hechas con flash? Por otro lado, ¿dónde están las bolsas y los documentos que portaban los tres miembros del comando? ¿qué información había en esos documentos?


Mucho se hablo de las heridas de bala que presentaban Jon y Susana y de las diferentes autopsias. Para lo que algunos era un simple suicidio para otros había algo mas. Jon Lizarralde fue encontrado en la orilla del rio y presentaba un orificio de bala en la cabeza hecho a cañón tocante. En la autopsia realizada a Jon, ponía que había agua del rio en su cuerpo. Médicos forenses afirmaban que Jon pudo morir por ahogamiento en las aguas del río Irati, debido a la cantidad de diatomeas en sus órganos y luego haber recibido el disparo. Lo que explicaría haber sufrido la practica de “la bañera” por parte de agentes de la guardia civil. Un segundo estudio explicaba que la presencia de agua en sus órganos vitales no era incompatible con la muerte por disparo. Supuestamente, Jon después de dispararse caería a aguas del rio Irati y de ahí esa cantidad de agua. El Ministerio del Interior, como no podía ser de otra manera, solo dio veracidad a este segundo estudio. Nadie se explica que una persona que reciba un disparo que atraviesa una zona vital de necesidad, en la que se interrumpe de forma brusca esas funciones, sea capaz de tragar la cantidad de agua que se encontró en el cuerpo de Jon. A la pistola que portaba Jon Lizarralde solo le faltaba una bala del cargador, supuestamente la que acabo con su vida. Pero se ha comprobado que Jon disparo varios disparos con esa arma debido a los casquillos de bala encontrados. ¿quién manipulo entonces el arma?

Por otro lado, Susana presentaba dos orificios de bala en la cabeza. ¿Como es posible que una persona que se ha suicidado tenga dos disparos? Lo que para algunos no tenía ningún tipo de explicación, desde el Ministerio del Interior pronto la encontraron. Justificaron esta “anomalía” en un supuesto defecto de fabricación del modelo de pistola utilizado o en una sobrepresión en el gatillo. Ya veis, todo se puede explicar!!!!!!!! Otra duda que se plantea es: si Susana era diestra, ¿cómo es posible que tenga los disparos de bala en el lado izquierdo de su cabeza? Como la idea del suicidio de Susana no “colaba” pronto buscaron un culpable: German. Así pues, German dispararía contra Susana antes de intentar suicidarse el mismo. Las declaraciones iníciales del propio German en el hospital irían por ese camino. (Luego veremos como se hicieron esas declaraciones).


Luego German negaría que él disparara contra Susana. De echo, German fue absuelto de ello. Entonces, si Susana no se suicido, y German no la disparo, ¿quién entonces acabo con la vida de Susana? German Rubenach fue detenido a las 20.45h. del 25 de junio e ingresado en el Hospital de Navarra a las 22:15h. En un recorrido de media hora, tardaron mucho mas en trasladarle al hospital, ¿Pretendían que no llegara con vida? Presentaba un disparo en la pierna y otro en la cabeza. Su estancia en el hospital no fue nada tranquila. La Guardia Civil custodiaba la habitación y controlaba quien entraba a ella. El afán por saber lo que German podía contar les llevo a perder los estribos. Amigos y vecinos de Errotxapea montaron durante los días que permaneció ingresado un servicio de permanencia en el hospital que sirvió para arropar a German. German hizo varias declaraciones días después de ser ingresado. Debido a su estado sus declaraciones carecían de lógica: las respuestas no tenían relación con lo que se le preguntaba, sus frases carecían de sentido, mezclaba castellano con euskera, etc. Llego a auto-inculparse de la muerte de Susana, cosa que después negó. Los allegados de German temían por su vida, ya que era el único superviviente, y sospechaban que las declaraciones de éste estaban inducidas por la propia Guardia Civil. Argumentaban que el estado de amnesia de German podría ser manipulable, creando nuevos recuerdos favorables a sus intereses. El nerviosismo de la Guardia Civil sobre lo que German podría declarar, quedo patente en dos de sus actuaciones: La primera. Durante un interrogatorio a Germán, estando aun hospitalizado, los abogados de German descubrieron una mochila que contenía un magnetofón y posteriormente a un agente escondido en el baño con un walki-talkie. La segunda. Estando German ingresado, dos personas se le presentaron en su habitación como colaboradores de ETA, proponiéndole un plan de fuga del hospital. German sospechó de ellos y se negó. Luego se supo que estas dos personas eran agentes de la Guardia Civil. Querían que se “escapara” para luego asesinarle, apareciendo luego que la Guardia Civil habría abortado la fuga de Germán. Las denuncias presentadas por los abogados fueron desoídas. Si los sucesos fueron realmente como se contó en la versión oficial, ¿A que se debía este nerviosismo por parte de la Guardia Civil? ¿Qué miedo tenían a lo que Germán podría decir? Guardias civiles declararían que German en el momento de su detención iba armado, ¿Donde esta esa arma? Semanas después de los sucesos de la Foz, fueron detenidas en Nafarroa varias personas que la Guardia Civil relaciono con el comando desarticulado en la Foz. En el Estado Francés la policía entro en el piso que anteriormente habían ocupado Jon y Susana. Aquí se nos plantean varias cuestiones: ¿De dónde sacaron la información para detener a estas personas y para encontrar el zulo donde fue retenido el empresario navarro Adolfo Villoslada? La única respuesta posible es que fue obtenida en la Foz de Lumbier.


Jon Lizarralde militaba en Nafarroa desde hacia años. Era conocedor de la infraestructura de ETA en Nafarroa y por lo tanto toda esta información era muy valiosa para la Guardia Civil. La Guardia Civil no dudaría en interrogar y torturar a Jon en la propia Foz. Esto explicaría la presencia de agua en su cuerpo.

La huida de dos personas en un seat 127 rojo es hoy en día una incógnita sin aclarar. ¿existió en realidad este coche? ¿cómo es posible que no fuera localizado con la cantidad de agentes que había en la zona? ¿quiénes eran los ocupantes de ese coche? ¿serian testigos directos de lo que paso en la Foz? ¿O realmente fueron Jon y Susana, que sí consiguieron escapar de la Foz? ¿Y si así fue, en que momento fueron detenidos y llevados nuevamente a la Foz? Todas estas preguntas sin respuesta dan un punto de misterio a esta historia. Si los ocupantes del coche rojo fueron testigos o no de lo que paso es una incógnita, si que hubo dos personas que al parecer si vieron como se desarrollaron los momentos iniciales de todo el suceso: los turistas holandeses. Dos naturistas holandeses que cámara en mano se disponían aquella mañana a disfrutar del paisaje de la Foz y que se vieron mezclados en esta historia. Turistas que declararían ver a tres personas, que se les acercaron preguntando a ver si tenían coche, y que desaparecerían poco después. Turistas que desde el Ministerio del Interior fueron utilizados como testigos, pero que no contaron nada claro. De hecho en sus declaraciones se han encontrado varias falsedades. En todo momento estos dos testigos holandeses fueron “llevados de la mano” por la Guardia Civil. A saber si contaron todo lo que llegaron a ver ese día. Pronto se les perdería de vista.


BIOGRAFIA JON LIZARRALDE URRETA (tripax-heavy) Nació en Andoain en 1956 y era el mayor de cuatro hermanos. Siendo muy joven murió su padre, por lo que se vio obligado a ponerse a trabajar con catorce años. Hasta la mayoría de edad trabajo en diferentes empresas de la zona. En todas ellas se recuerda su participación en las asambleas. En ellas decía lo que pensaba por muy duro que pareciese. Su implicación en la lucha sindical origino su marcha, huyendo de la policía. Una vez calmadas las cosas volvió a Andoain. Allí siguió con su actividad sindical y laboral en diferentes empresas. La tranquilidad le duro poco. Un día bajando de casa se encontró con un grupo de guardias civiles en el portal. Le preguntaron por el piso en el que vivía Jon Lizarralde. Él les contesto que en el segundo. Fue su segunda huida, en esta ocasión a Iparralde. Tras dos años refugiado volvió al pueblo y empezó a trabajar en una panadería. En 1976 mientras su hermana le llevaba en coche, Jon le pidió que parase en Pasaia para hacer un recado. Fue su tercera huida. La siguiente vez que su hermana le vio fue disfrazado en el barrio de Amara de Donostia. De Donosti se traslado a Tutera donde sufrió un accidente. Una vez recuperado llego a Iparralde. El exilio fue corto y en 1977, tras acogerse a la amnistía, volvió a Andoain. Tuvo que hacer el servicio militar en la Armada y en los dieciocho meses que permaneció, al estar fichado, no le dejaron tocar ni un arma. De vuelta del servicio militar formo un comando de ETA junto a varios amigos de la cuadrilla. Su familia sabía lo del comando, pues aparte de la cantidad de gente que pasaba por su casa, a la que llegaron a llamar “pensión Dominika”, encontraron armas, munición y dinero. Él por su parte llevaba una vida normal. A pesar de no tener carnet de conducir, iba de un lado a otro con una moto, con la que tuvo varios accidentes. Como trabajaba de panadero se quedaba dormido en cualquier parte. Una vez se despertó estando solo en un vagón de tren en Zumarraga, cuando lo que quería era hacer el trayecto Donostia- Andoain. El 28 de junio de 1984 la policía apareció en su portal para detener a alguien en el tercer piso. Jon estaba en el segundo y creyó que iban a por él. Le detuvieron y le soltaron pronto. Tras ello se refugio en Iparralde, protagonizando así su cuarta huida. Tras un año por el Estado francés, retorno a vivir en la clandestinidad en el barrio de la Txantrea en Iruña. Una parte del comando Nafarroa fue detenido, consiguiendo él realizar su quinta escapada. Siguió en Nafarroa, unas veces en Iruña y otras en Madotz. Siempre de buen humor, gastaba bromas al resto de compañeros, especialmente a Susana Arregi.


SUSANA ARREGI MAIZTEGI Nacida en Oñati en 1964 era la mayor de los cinco hermanos, a los que cuidaba haciendo valer su condición. Ese cuidado incluía el seguimiento de la marcha de sus estudios. Desde los catorce años comenzó a integrarse en el movimiento político de su pueblo. Con dieciocho años recibió los primeros golpes de la policía. Su madre sospechaba que iba a las manifestaciones y le recomendaba, en vano, que no lo hiciese. Susana tenía el carácter formado y sabía muy bien por donde iba su camino. Terminado sus estudios en el pueblo se dirigió a Donosti a estudiar magisterio. Vivía en la parte vieja y no le costo mucho hacer amigos. Seguía acudiendo a las manifestaciones y fue en esa época cuando s integro en la organización juvenil Jarrai. Pese a vivir en Donosti, Susana no perdió el contacto con su pueblo. Ella y el resto de su cuadrilla tenían como preocupaciones principales los asuntos locales y el euskera. Fue precisamente Susana quien rompió con la costumbre instaurada en la cuadrilla de hablar en castellano. Era un lectora infatigable y cuando no estaba en la calle, seguro que se encontraba en casa leyendo. Una vez terminados los estudios realizo prácticas durante tres meses en Bergara. Poco tiempo después salieron tres plazas en la Ikastola de Oñati. Susana obtuvo una de ellas. El primer año se encargo del preescolar. Los siguientes años trabajo con niños problemáticos. Sus prácticas en Bergara habían ido en ese sentido. Tanto ella, como los niños y sus padres, se encontraban muy a gusto con los resultados obtenidos. Durante esos años de trabajo se la veía menos en manifestaciones y también dejo Jarrai. Su madre llego a pensar que ya no estaba interesada por esos temas. Pero Susana era una mujer con carácter a la que la vida le había enseñado muy pronto a adquirir responsabilidades. El 25 de mayo de 1987, tras dos días de idas y venidas fuera de lo común, Susana desapareció junto a Alberto Plazaola. La policía los relacionaría mas tarde con el comando araba de ETA. Diez días después de su huida hizo llegar a su familia una nota en la que explicaba las razones de su marcha y se reafirmaba en sus convicciones. La familia no volvería a verla con vida y su único contacto seria a través de cartas.

Suana Arregi: “etsaia gogorra da baina gu gogorragoak”


ENTREVISTA A GERMAN Reproducimos la entrevista realizada a German por la editorial Txalaparta poco después de su ingreso en prisión. Txalaparta: Aupa German, ¿Cómo va eso? German: Bien, muy bien. A pesar de estar en prisión estoy perfectamente. En estos momentos todavía estoy sin poder ver por el ojo izquierdo, aunque lo muevo perfectamente y siguen haciéndome pruebas. Pero ya sabes como es la cárcel para estas cosas; aquí no hay facilidades para los presos políticos vascos. Tx: se puede decir que estuviste a punto de perder la vida, ¿no? German: Si. Tuve unas heridas muy graves y puedo estar contento de haber salido de esta. Creo que he tenido mucha suerte una vez más. Recuerdo que hace mas de tres años, en abril de 1987, al comando legal al que pertenecía le exploto antes de tiempo y en el interior del vehículo, un artefacto que iba a colocar en la entidad francesa Peugeot-Talbo de Tafalla. Allí murieron los compañeros Alfonso Yoldi y Emiliano Iturri, mientras que Martin Perez Yalar resulto gravemente herido y tras su recuperación hoy se encuentra preso en Herrera de la Mancha. Yo ese día no pude ir con ellos porque mi madre estaba enferma, así que me libre. Y ahora, ¡Ya veis!, no les salió como pretendían y sigo de nuevo aquí dando guerra. Debo ser de una pasta un tanto especial. Tx: ¿Por qué dices que no les salió como pretendían? German: ¡Hombre!, porque a mi, con un tiro en la cabeza y desangrado, me dejaron por muerto, y pensaron que ni iba a quedar vivo ninguno de los tres para desmontar su versión oficial de suicidio en grupo. De ahí su histeria inicial en el hospital por lo que lo pudiera decir. Con Susana y Jon, desgraciadamente, pudieron hacer lo que quisieron, pero no calcularon bien que yo sobreviviera para contarlo. Tx: ¿No es cierto entonces lo que dicen el Ministro del Interior José Luis Corcuera y la propia Guardia civil? German: De ninguna manera. Eso es absolutamente falso. Están tratando de justificar y dar forma a una chapuza de la Guardia Civil que actuó por su cuenta, como la hace otras veces. Luego ha habido un cierre de filas, un intento de buscar salida a la situación a de ahí surge la versión oficial del suicidio. Tx: Entonces, ¿qué es lo que ocurrió? German: Mira, nosotros estábamos en la Foz de Lumbier preparando una acción contra la Guardia Civil pues teníamos una serie de datos de sus movimientos que debíamos confirmar para seguidamente ejecutarlos. El lunes 25 de junio estábamos junto a la orilla del rio Irati en nuestras cosas cuando apareció la Guardia Civil. Primero un vehículo, y al paso del tiempo llego otro. Para entonces se había acercado hacia nosotros un guardia, al parecer sargento, que nos pidió la documentación. La comprobó y cuando se iba, volvió a pedirnos que le enseñáramos las bolsas que teníamos, con la disculpa de que había habido unos robos, etc. Ya entonces comenzamos a dudar de sus intenciones y de cuantos guardias habría arriba. Le enseñamos la


primera pero quiso ver todas. En la otra se hallaban las armas por lo que la cosa iba a estallar. En ese momento Lizarralde empujo al sargento tirándolo al suelo. Yo me abalance sobre el y le quite la pistola star disparando contra el un par de tiros. Mientras, los otros cogieron sus armas y lo que pudieron porque los guarias de arriba del camino comenzaron a disparar. Creo que Lizarralde disparo también algún tiro contra el sargento ya que este dicen que tenía tres impactos y yo solo le dispare un par de veces. Tras esto nos resguardamos un momento detrás de unas rocas y decidimos salir huyendo por la orilla del rio en dirección al túnel de Lumbier, a la vez que intercambiábamos disparos con los guardias civiles el camino. En ese momento es cuando me hirieron en la pierna derecha, concretamente en la parte de atrás d la rodilla, lo que me impedía correr y me tuve que esconder detrás de unos matorrales. A partir de aquí perdí de vista a mis compañeros y en esa situación me quede solo, herido y sin ningún arma ya que uno de mis compañeros cogió la del sargento y la mía se quedo en una bolsa en el lugar del primer enfrentamiento. No volví a saber nada de ellos; ni de Susana ni de Jon ni del otro que estuvo con nosotros.

Tx: ¿Había pues una cuarta persona con vosotros? German: A nosotros nos habían llevado un vehículo hasta la Foz, ya que, como puedes suponer, no habíamos ido allí andando, ni en tren, ni en autobús. Teníamos contacto continuo con personas de nuestra confianza. Aquella mañana contábamos con una persona y un vehiculo que se hallaba a la entrada de la Foz. La huida por lo tanto era posible mediante el vehiculo aparcado en la entrada, junto al primer túnel. Tx: ¿Tus compañeros te dejaron solo? German: yo creo que no; que se dieron cuenta que me habían dado y trataron de conseguir un vehiculo inmediatamente para llevarme. De ahí que hablaran con los dos holandeses pidiéndoles un coche, ya que el nuestro estaba a unos 500 metros de distancia. No lo consiguieron e intentaron salir. Pienso que al estar yo escondido e inmóvil no me verían, en esos momentos tan rápidos, y debieron creer que yo estaba armado con mi pistola, o incluso que me hubieran matado, ya que no se oía nada.


Tx: ¿Crees que llegaron a coger el coche y salir de la Foz? German: Sin duda. Quizás les cogieron por un exceso de confianza y e compañerismo. Pienso que lograron alcanzar el coche al otro lado del túnel y que salieron a la carretera donde posiblemente se separaron quedándose ellos a la espera de confirmar si yo estaba vivo y podía ser detenido, o bien haber muerto. Quizás creyeron que podían ayudarme o también que debían confirmar si yo estaba detenido para decidir que hacer, donde ir, etc, , pues la guardia civil con sus torturas y métodos, tarde o temprano podría conocer nuestra infraestructura. Creo que a partir de entonces pudieron ser detenidos e introducidos de nuevo en la Foz, al ser identificados y constituir un autentico filón de información y de presión tratándose de militantes ilegales cogidos en acción. Pero no me preguntéis como ni que ocurrió después. Eso solo la guardia civil lo sabe, aunque hay pruebas que apuntan hacia interrogatorios previos a una muerte en aguas del rio Irati. Ya sabemos que son expertos en eso de la bañera, manipulación de pruebas, etc, Hay que tener en cuenta que Lizarralde era un militante con larga experiencia en Navarra y con informaciones que los policías creían valiosas. No es casualidad que fuera el quien apareciera con síntomas de haber muerto por ahogamiento. Era la pieza clave; y se les fue de las manos. Hay una prueba clara: ¿De donde, o de quienes, si no de Jon y Susana, pudo obtener la guardia civil la informaciones conseguidas? Eso nadie lo ha aclarado, y es algo clave. Tx: ¿y tu que recuerdas después de quedarte solo? German: Pocas cosas. Recuerdo haber permanecido un rato largo escondido, nervioso, pues estaba herido y no veía a mis compañeros. No puedo calcular el tiempo transcurrido, pero fue bastante. Si recuerdo que comencé a ver llegar mas vehículos de la guardia civil, Nissan Patrol; y me queda la sensación de estar rodeado, si bien, no recuerdo ni quien, ni cuando, ni como me detuvieron. Tx: ¿Y la herida que te atravesó la cabeza? German: No recuerdo como me la hicieron. Pero lo que estoy absolutamente seguro es que yo no me la hice y que cuando nos separamos, de mis compañeros no había ninguno herido, y yo únicamente lo estaba en la pierna derecha, lo que me impidió seguirles. Yo no recuerdo ni si quiera si alguien me interrogo, etc., pues aparecí en el hospital sin saber como había llegado allí. Lo que si tengo claro es que quien me disparo pensó que me había matado, porque debí perder mucha sangre y faltaron milímetros para que me volara toda la cabeza. Tx: ¿Que recuerdas de tu paso por el hospital? German: Bueno, creo que he estado en tres hospitales diferentes; en primer lugar en el Hospital de Navarra, en segundo lugar en el Gregorio Marañón de Madrid y por ultimo en el Hospital penitenciario de Carabanchel. Pero si recuerdo que en el Hospital de Navarra hubo situaciones muy tensas por la actitud de la guardia civil con mi familia, con mis abogados y también cuando me tomaron declaración en una habitación. Además estuvieron tratando de interrogarme y me daban nombres de personas, algunos de ellos amigos míos de Iruña, lugares que, según ellos, yo debía conocer. A mi me daba la impresión de que sabían cosas y que querían que yo les hablara de ellas.


Tx: ¿Y no recuerdas nada de tu estancia en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Navarra? German: Pues si te digo la verdad, apenas me acuerdo de nada. Me dicen que allí estuve casi doce días y que por allí pasaron médicos, jueces, abogados, guardias civiles, familiares, y yo realmente casi no lo recuerdo. Tengo una vaga idea de que entraba gente con unas batas verdes, pero no se lo que me hacían, ni que me decían. También recuerdo que desde un teléfono que hay junto a la ventana de la U.C.I., donde yo estaba, había veces en las que alguien me hablaba y me hacia gestos. Pero no recuerdo quienes eran ni que decían.

Tx: ¿Recuerdas cuando fue la primera vez que declaraste sobre lo ocurrido en la Foz de Lumbier ante un juez? German: Si, perfectamente. Y me acuerdo porque hubo varios incidentes con la guardia civil y el juez y los abogados. Fueron unos momentos tensos y a la vez cómicos pues descubrieron que un guardia civil de paisano, de los que me custodiaban, estaba escondido en el baño, agachado y pegado a la puerta tratando de escuchar la declaración que me tomaba el juez. Anteriormente a esto ya había discutido el juez con los guardias, que no querían abandonar la habitación, y después de convencerles, pues allí mandaba el juez, se descubrió que habían dejado una grabadora escondida en una bolsa dentro de la habitación. Trataban de controlar mis declaraciones y mi versión de los hechos, pues hasta entonces no habían logrado interrogarme. Tx: ¿Pero no recuerdas haber declarado anteriormente en el Hospital en tres ocasiones delante de un juez, fiscal, abogados, etc...? German: No, no...Ya te digo que para mi aquella fue la primera vez. Y así le dije al juez cuando me lo pregunto; que no recordaba haber declarado anteriormente. Luego me dijeron que en la U.C.I. me habían tomado varias declaraciones, pero ya te digo que no las recuerdo. Piensa que estuve a punto de morir, con un tiro en la cabeza y que los médicos dijeron que padecía amnesia e incluso periodos de fabulación debido a la importancia de las heridas.


Tx: Te habrán contado qué declarabas en la U.C.I. cuando te encontrabas en aquel estado ¿no? ¿qué hay de cierto en ello? German: Si, claro; me han contado y me quedado sorprendido de la cantidad de tonterías e incoherencias que se recogieron. Muy poco de aquello es cierto. Veo que mezclaba cosas del pasado, como mi relación con Emiliano Iturri, Martin Perez Yalar, o amigos como Tintxu Ventura, las fiestas de Villava, etc., con algunos hechos reales del presente de mi militancia junto con Susana y Jon en el comando Nafarroa, los planes de llevar a cabo una acción en la Foz de Lumbier, etc...Pero aparecían otros absolutamente falsos e imposibles. No es cierto que estuviéramos Jon, Susana y yo todo el tiempo juntos tras el primer tiroteo, puesto que nos separamos. Por tanto, tampoco lo es que nos considerábamos rodeados y decidiéramos dispararnos entre nosotros. Y de forma mucho mas categórica tengo que negar que y disparara contra Susana. Como ya le dije al juez, yo únicamente dispare contra el sargento que murió. Yo disparar contra Susana... ¡están locos! Tx: ¿En alguna ocasión la organización ETA os ha dado la orden de suicidaros en caso de estar cercados y antes de ser detenidos? German: Nunca. Mira, yo llevo ya unos años militando y trabajando dentro de la organización con el objetivo de transformar esta sociedad y conseguir la soberanía nacional de mi pueblo. En todo este tiempo jamás he recibido una orden ni sugerencia en ese sentido, ni creo que nadie lo haya dado nunca. A pesar de ello si te diré que si alguien opta por una decisión de esa naturaleza debemos de respetar y tratar de entender sus razones como militante que trata de evitar la caída de otros compañeros, de información, o de colaboradores, etc,, y seguir contribuyendo así a la pelea y a que avance el proceso. No hay que olvidar que hay personas que tras caer en manos de la guardia civil y de sus terroríficos métodos de tortura e interrogatorios no lo han contado o han quedado marcados física y psíquicamente para toda su vida. Tx: Bueno, German, ¿qué mas puedes añadir? German: Creo que del relato de lo que paso realmente en la Foz de Lumbier y de quienes fueron los autores de las muertes de Jon y Susana, así como de mis heridas, esta todo dicho, y creo además que la opinión publica vasca apunta la responsabilidad, claramente y sin ninguna duda, hacia la guardia civil. A mi me gustaría aprovechar la ocasión para recordar a Susana y Jon, amigos estupendos y militantes inigualables, que estaban todos los días y desde hace años trabajando sin descanso, con una entrega ejemplar por la libertad nacional y social de Euskal Herria. Y decir que poco valen los homenajes si no imitamos esa entrega y cubrimos el hueco de la forma que ellos lo hicieron. Trabajar cada uno en su puesto, por humilde que este sea, aportando cada cual su granito de arena hasta conseguir de una puñetera vez esa Euskal Herria independiente, socialista, reunificada y euskaldun que queremos. Y darles recuerdos a sus familias en estos malos momentos, como a los de los otros chavales que han caído después. Venga, Aurrera, Jo eta Ke! Madrid, 1 de octubre de 1990.


































A Susana Arregi: Tu vida fue un viaje para encontrar lo que perdimos. Te robaron caminos y aire te atacaron con fuego y agua. Tu solo querías encontrar colores a tus sueños rocas grabadas de fusiones de tierra y borrasca. Pasaste entre largos días y noches de espera de esperanza que emana fuerza de atravesar furtivamente mugas y puentes y luchaste y venciste al olvido. Asi ibas venciendo, jamás perdiste los besos ni el saber cómo se te ama. Sólo me queda decirle a tu viaje no volvernos hasta arrancar lo que amamos. El follaje de la dulzura que se desprende gota a gota hasta que te sientes pleno, verdaderamente limpio, desnudo. Y mientras tanto siempre estarán las manos de la identidad que llorando amor limpiaran los restos de polvora que quedaran en nuestros dedos.

Irabaziko dugu!!

errotxapeako amnistiaren aldeko mugimendua


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.