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Germán Piqueras
Ilustrador
Germán Piqueras libros que yo creía que estaban bien sobre “El libro de y se dedique a lo que se dedique, la vida le recompensará la selva” o “Peter Pan”, dibujaba en folios, escribía con de una forma u otra. las correspondientes faltas de ortografía del que quiere y no puede y luego venía la parte que más ilusión me
El placer y el dolor…
hacía: grapar las hojas, qué recuerdos, aquellas grapas El placer de todo esto solamente lo encuentro en la puestas con la misma ilusión que desorden… Ya con soledad más austera, cuando no hay ojos críticos y sí unos 6 años o así comencé mis clases de pintura, en manos ávidas, libres, a veces torpes y otras, benditas. las que estaría un par de años pintando cosas más
Cuando se empieza a pintar se debe estar en soledad
“normales” como paisajes con su río, su casita y su
para que así cuando llegue el fin de la obra sientas la
montaña ideal, pero pintar aquellas cosas no me
compañía de la misma y ésta tenga casi más vida propia
terminaba de llenar y la pintura se quedó descolgada
que tú. Uno debe acabar “muerto”, extenuado y
de mí hasta que cumplí los 18 años, edad en la que
habiéndose dejado desde lo más recóndito hasta lo más dejé mi “gran sueño” de ser administrativo, para intentar superficial de su ser en lo que hace, sólo así pueden este otro de ser… juzguen ustedes mismos. funcionar las cosas, en ninguna profesión valen las medias tintas.
¿Eres un amante correspondido?
El dolor es algo pasajero, digo que es pasajero porque
Pues el momento más especial que he vivido hasta
El primer planeta de tu universo La primera vez que pinté algo fueron pasos de semana santa, sí, pasos de semana santa en cartones para hacerle procesiones a mi abuela desde mi correpasillos: La Flagelación, El Descendimiento, el Ecce Homo… en aquella misma época recuerdo que hacía belenes de Navidad en tacos de madera, dibujaba personajes de las películas de Walt Disney “disfrazados” de Jesús, María, José, Melchor, Gaspar, Baltasar y un largo etcétera. Es uno de los recuerdos más vivos que tengo, a mi abuela le gustaban mucho, lógico, es mi abuela. Dibujé mucho sobre la primera película que me marcó: “El libro de la Selva” y siempre me pregunté por qué en esa película que hablaba de la selva y de tantos animales nunca hubo un león, el auténtico rey de la selva. Llegué a hacer
se frena en seco cuando pintas, todo queda en la cuneta ahora fue cuando en este verano de 2010, una mañana a la hora de la verdad. Pero si hay algo que me enerva de Domingo del mes de Agosto, sobre las 10 (de la es la gente que cree que la pintura es un hobby o un mañana) y justo al salir de trabajar me telefoneó Luis
pasatiempo, la gente que desconoce y desconocerá el Mayo desde Madrid para decirme que el maestro Antonio valor real de un cuadro, la gente que no comprende que López me había seleccionado para la Cátedra que él una obra es única, la gente que te pide que le pintes mismo impartiría, semanas más tarde, en la infravalorada algo sin consideración alguna y haciéndote el favor (qué capital del queso: Albacete. Realmente el momento detalle) de pagarte los lienzos. Y yo he conocido gente más especial no fue ese, el momento más especial fue así, incluso algunos son licenciados en Historia del Arte, cuando Antonio López me dijo que yo era un pintor. No qué horror. hay nada más bello que a uno le digan que es lo que siempre ha querido ser (pese a las titubeantes y mareantes dudas de la adolescencia) y la pintura siempre ha sido lo único que me ha hecho “deshabitar” este mundo por momentos y así está siendo y así será. Cuando uno hace las cosas de verdad, tarde o temprano
Creo que ser licenciado, a parte de un título, es algo muy valioso y explico por qué: Haber estudiado 5 años en un lugar significa un compromiso y un reto de superación personal, un viaje en el que te quedas o continúas. A toda la gente que cree que esta carrera no tiene ni tuvo futuro le diré